En el mundo normal de Elisa tener que luchar en el día a día es algo normal, pero ella tiene dos cosas que hicieron su vida complicada desde siempre, tener pesadillas de lobos enormes casi todas las noches y una hemorragia que llega cada mes sin motivo aparente. De manera sorpresiva se presenta ante ella un hombre magnifico, atractivo y con un aura poderosa, Alfa Braham, quien a pesar de odiar a los humanos, ella es la única pista que tiene para encontrar a su mate destinada y así poder luchar por su lugar legitimo en la manada…. Ser el Alfa Líder. Su padre fue asesinado por humanos y eso los hace indeseables para él… Ella solo desea alejarse de todo… Información a medias…. Secretos por descubrir… Una historia llena de sorpresas, encantos, engaños y planes, seguro puede colar algo de romance…. Ninguno de los dos sabe que quince años atrás fueron anclados, como última suplica del Alfa Breiman a la Diosa Luna, padre de Alfa Braham. Llevándolos a la búsqueda de por qué deben estar juntos. ¿Qué sucederá cuando ambos tengan las respuestas a todas sus preguntas? ¿Qué harán con esas respuestas? Aceptar o intentar cambiarlas.
Leer másLita se encuentra caminando por las pasillos del castillo, con toda la ceremonia de bienvenida de las manadas visitantes la cocina había sido todo un caso.— Lita— la voz fuerte y profunda de Alfa Caleb llegó a ella provocando una extraña sensación.De manera inmediata, ella se detuvo a la espera de lo que él quisiera decirle, manteniéndose siempre cerca de una lámpara de aceite caliente.Su confianza aún no era restaurada, ni en él ni en ninguno de los hombres que la rodeaban.— Finalmente te encuentro, necesito hablar contigo —Alfa Caleb nota la rigidez del cuerpo de Lita y se detiene justo a tres pasos de distancia de ella.Él aprieta las manos, siendo consciente que su lobo y él desean con incontenible pasión estar con ella, pero deben ser pacientes a pesar que su instinto les grite lo contrario.—He venido a decirte que te cuides, esta noche no podré estar contigo, no podré cuidar de ti ni de Lore, por favor, manténganse juntas y no salgan.Lita lo nota extraño, como si contuvie
Braham se encuentra desesperado, corriendo por los pasillos del castillo, con solo una cosa en mente, encontrar a Andro.Al llegar a las catacumbas, donde le habían dicho que seguramente se encontraba, el brujo iba saliendo con la cara desfigurada, llena de impresión, aunque el Alfa Líder no pudo notarlo.— ¡Andro! Necesito que la ayudes— Dijo con la voz rota al mismo tiempo que con sumo cuidado movía sus brazos en los que tenía a su mate.— ¿Qué sucedió? —Pregunta Andro comenzando a correr a su guarida donde tenía todas sus pócimas. De nuevo Elisa se encontraba en esa plancha de frio concreto.— Andro dime que ya sabes que hacer.El brujo tenía la cabeza fraccionada, no podía conectar sus ideas, todo le parecía extrañamente similar a ese día, a ese horrible día.Años atrás cuando el aun pertenecía a su aquelarre, y tenía confianza de poder proteger a su familia, llegó a una cueva en la que estaba escondida su amada esposa, una mujer loba que desde el primer momento en el que cruzó l
Algo en el ambiente tenía la mente de Braham perturbada, sabía que no estar al lado de Elisa era solo un punto entre todo este cielo lleno de estrellas convertidas en conflictos. En ese momento el enlace mental hizo acto de presencia. "¡Alfa Líder!"" ¡Elisa!" El grito era de Alfa Caleb, en ese momento Braham salió de esa habitación que no le servía de nada y al estar en completa soledad corrió por los pasillos para patear la puerta al llegar a su habitación en medio de ella se encontraba Arsen siendo atacado, tanto por Caleb como por Miel y al ser alfa líder llevaba las de ganar, pero ¿a qué dirigía toda su rabia? En ese momento todo hizo sentido. ¿Elisa? Pensó desesperado, sin detenerse a razonar, se arrojó sobre Arsen y de una sola embestida lo estampó en la pared, y ese sentimiento de por fin haber logrado hacer lo correcto lo arrastró a ese día en el que había perdido la luz de su vida. Él tenía aproximadamente diez años y en ese momento su madre estaba encantada con llevarlo a
El momento de la fiesta para la recepción de los Alfas Líderes había llegado, todos los integrantes de las diferentes manadas se encontraban en ese amplio lugar.Los que pertenecían a la manada de Pablo estaban asombrados ante lo que los rodeaba, mucha comida y sobre todo unos cuantos jugos y licores que hasta su lugar de estancia cerca del mar era imposible hacerlos llegar.Los integrantes de la manada de Arsen se encontraban atentos a cada movimiento de los otros luchadores en especial a los integrantes de la manada de Saúl, sabían que todos ellos eran imprevisibles, que en cualquier momento podrían provocar un incidente.Mientras tanto entre esa multitud se encontraba el Alfa Líder Arsen, observando la ausencia de Elisa, necesitaba hablar con ella, ya no podía tolerar tanta incertidumbre.Comenzó a buscarla entre los pasillos, hasta que encontró un ligero aroma característico de ella y lo siguió, dando con la habitación en la que se encontraba, no había guardias, no había guerrero
Braham abrió la puerta y ante él se encontraba el consejero Roel.—Alfa Líder — dijo de manera cauta e inmediatamente se inclinó mostrando respeto— vengo a informarle que los preparativos para la ceremonia del día de hoy han dado inicio.—Perfecto continúen con los planes y yo no podría acompañarlos hasta más tarde.El consejero Roel ignorando todo lo que había sucedido en la noche anterior levantó una ceja de manera automática cuestionando la falta de atención de parte de su Alfa Líder pero Braham simplemente enderezó su espalda marcando la diferencia entre ambos.El consejero al ver esto, asintió con la cabeza aunque no estaba de acuerdo, se dio media vuelta y se alejó del lugar.— Creo que tenemos que ir a revisar esos asuntos —dijo Elisa un momento después de ver que Braham había cerrado la puerta y de nuevo estaban solos.— Yo también tengo que revisar unos pendientes de la…— No — La interrumpió Abraham— hay algo que no sabes.Él estaba cansada de tantos secretos, de tantos prob
Elisa se encontraba confundida, había despertado en medio de una habitación en la que no había estado jamás.Ver a Braham a su lado, tomando su mano en todo momento, la tranquilizó, no podía ser tan malo si él la estaba acompañándola.En este momento ya se encontraba en su habitación, arropada con cobijas suaves pero sobre todo por los brazos de su fuerte, sexy y cariñoso esposo.Le fascinaba ese olor tan de él, a madera, pino, y algo más… no sabía decir el nombre exacto, pero estaba encantada con tenerlo cerca.Él era como una especie de adicción de la que no quería recuperarse jamás.Últimamente había resultado prácticamente imposible que ambos estuvieran en una habitación a solas sin que intentaran tocarse, llevarse al punto más alto del placer, pero en este momento y Elisa notaba que Braham se encontraba a su lado solamente en cuerpo, porque su mente se encontraba muy lejos de aquí.—¿Qué sucede? ¿en qué piensas?— preguntó Elisa girándose para verlo directamente a los ojos.Braha
En la habitación de Lore, Alfa Caleb estaba desesperado y prácticamente volviéndose loco.Su hermana, siempre alegre, siempre fuerte, siempre vivas, en este momento permanecía de manera continua en absoluto silencio con la mirada perdida y la cabeza gacha.— Hermana por favor — suplicaba Alfa Caleb con su corazón apretado, estrujado al saber que no podía hacer nada para quitar el dolor de su amada compañera.El silencio era su respuesta.—Ya ha muerto, no va a volver a tocarte, jamás, por favor, por favor —le pedía el Alfa—dime que estarás bien… dime ¿qué debo hacer para que vuelvas a ser tú? y te garantizo que así será ¿que necesitas…?En ese momento la puerta de la habitación se abrió para que de manera sorpresiva llegara la respuesta de quien menos tenía pensado.—No funciona así —Lita quién se acababa de enterar del suceso, había corrido de manera desgarradora a apoyar a su tan querida amiga, quien había estado para ella cuando había pasado por lo mismo.Alfa Caleb sentía que est
Andro llega a donde están los licántropos capturados en medio de las celdas.Los hechizos estaban en diferente grado de concentración, ya con tanta práctica tenía dosis de más y con diferentes tiempos de haber sido combinados.El brujo para este punto sentía que se estaba volviendo loco, todos absolutamente todos sus intentos por restablecer la forma principal de los desertores estaba fracasando, deseaba poder regresarles su raciocinio, la capacidad de tomar decisiones por ellos mismos…Devolverles su identidad.En ese momento beta Olam llega a su lado., en ese punto ya era común buscarlo entre estas celdas horripilantes.— Por lo visto has decidido no salir de aquí en ningún momento.— No es eso Olam— respondió Andro— pero no puedo comer, ni dormir sabiendo que tantas almas buenas e inocentes están siendo corrompidas para ser utilizadas solo como un medio para conseguir un fin, y todo en contra de su voluntad, los vuelven títeres y nadie merece eso.Mientras decía esto Andro apretaba
En medio de la incertidumbre que provocaba no saber qué debían hacer, tanto Andro como Miel estaban haciendo guardia cuidando los sueños de Elisa.Después de haber hecho unos cánticos, la humana fue relajándose hasta que quedó completa y profundamente dormida por el agotamiento que fue soportar un dolor tan intenso.Braham entró decidido a saber qué era lo que estaba sucediendo y debía ser de manera inmediata.El cuerpo imponente, fuerte y fibroso del Alfa Líder en ese momento estaba hecho un manojo de nervios.— ¿Qué hace Elisa aquí?— cuestionó al encontrarse con su mate profundamente dormida, mirando directamente a Andro— y ¿por qué está acostada en esa barra?Andro con un tono de voz sereno que ni él mismo creía comenzó a explicar lo que él podía entender.— Braham necesito que me escuches y te mantengas tranquilo, Elisa por lo visto ha tenido una especie de sangrados durante toda su vida— Miel le había puesto al corriente de todo lo que Elisa le había contado en su momento— unas he