En un mundo donde es casi imposible encontrar a la pareja destinada por la Diosa, y aún más difícil rechazarla, Tamia Albert se da cuenta que está en un aprieto cuando su esposo, Leonardo, de repente encuentra a la suya. Después de ser una esposa amada y deseada, presencia cómo, ese amor se desvanece hasta convertirse en una sombra en su corazón. El desamor, dolor y decepción son intensos, en especial porque no puede dejarlo ir debido a los fuertes lazos que los unen, sin embargo, sabe que sólo la verdadera libertad puede darle paz. Así que cuando llega la oportunidad de escapar de la manada, a través de un acto de sacrificio, la aprovecha sin mirar atrás. Puede que el destino haya decidido robarle su alegría, hogar y final feliz, pero Tamia decide tomar las riendas de su destino y crear su propio camino con el Alfa Oscuro.
Leer másLlegamos a Mountain sin mayor altercado en el camino. Aunque me mantuve alerta todo el tiempo, a pesar de que el lugar se sentía tranquilo, sabía que eso significaba que Yuri o ya se había ido del Este o ya no tenía poder en la región. Tal vez estaba ocupado planeando otras cosas.Al ver solo a unas cuantas personas afuera, me di cuenta de lo importante que sería acabar con este problema. Mi región parecía un pueblo fantasma." ¿Dónde están pues todos?" Escuché que decía Gezel, y Amelia suspiró. "Están en los búnkeres del pueblo. No queríamos arriesgarnos a que pase lo que pasó en el Sur, así que decidimos que se quedaran abajo, principalmente las mujeres, los niños y los jóvenes." Amelia le explicó a Gezel, y ella asintió, mirando por la ventana. "¿Entonces eres la Luna del Este?" le preguntó Gezel con una sonrisa, y Amelia asintió. "Lady del Este." la corrigió, y todos nos reímos. La mirada de Gezel estaba llena de nostalgia y ternura. Tenía tanto que decirle a su hija, pero n
A la mañana siguiente, me preparé temprano para el día y de repente ya era hora de que nos fuéramos al Este. Tenía que reunir a toda mi gente y guiarlos hasta el Oeste. Luego recordé que Gezel iba a estar en la pelea con nosotros, y deseaba poder convencerla de que no lo hiciera. Aun así, no había tenido la oportunidad de contarle a Amelia sobre la decisión de su madre.Mientras los omegas nos ayudaban a sacar las maletas de la habitación, Amelia y yo decidimos ir a ver a Erik y a Jake. Quería ver cómo se estaba recuperando Jake antes de irme. Llegamos al laboratorio, y noté que el color de la piel de Jake había mejorado. Claudia estaba allí, y parecía que necesitaba descansar. Aunque no creo que lo vaya a hacer, porque ha estado trabajando sin parar con Erik. Esperaba que Sylvester les agradeciera por su esfuerzo porque realmente han ayudado mucho a nuestro equipo. Stephanie estaba dormida en el sofá, y no quería despertarla, pero me di cuenta de que estaba más delgada, el est
Les dije eso, y Marcel se puso de mal humor. "¿Y qué más quieres que hagamos, Leo? Hemos sido cautelosos. Incluso te dejamos dirigir un rato en el Este. Y ahora que tenemos algo de acción, ¿estás acaso dudando de nosotros?" Me preguntó. "No dudo de nada. Y para que quede claro, no me dejaron dirigir las cosas en el Este, fue que no tuve opción porque era mi territorio. No he hecho más que mantener mi lugar en el Norte. No me gusta cómo me estás hablando, Marcel." le respondí, porque decir que me dejaron, como si no fuera mi derecho y deber era como si no me reconociera como un Alfa principal. Eso me puso un poco bravo. "Tranquilo, Leo." dijo Sylvester, dándose cuenta de que me estaba empezando a poner de mal humor. "Pídele disculpas, Marcel, te pasaste de la raya. Es su región, así que tenía que estar a cargo, y lo hizo muy bien, no esperaba menos de Leo. Por eso lo que dijiste fue injusto." lo regañó Sylvester, poniéndose de mi lado. Marcel se pasó los dedos por el cabello y s
~Leo~La reunión con los Stepanov después de todo salió bastante bien. Que Gezel los conociera y confiara en ellos era ya de por sí una muy buena señal, pero no podíamos relajarnos ni dejar que supieran nuestros planes. Debíamos tener mucho cuidado porque solo tendríamos una oportunidad para atraparlo. Yuri es como un jabón resbaloso, y no podemos permitirnos dejarlo escapar de nuestras manos. No engañamos a los Stepanov. Simplemente no les dijimos por qué estaríamos en el Oeste. El hecho de que ellos creyeran que solo Alexei y Clay estarían ahí para pelear confundirá a Yuri.Necesitaba hablar con Sylvester antes de irme al Este al otro día. Sabíamos que solo teníamos una oportunidad en esto, así que teníamos que planear muy bien todo para que saliera bien.A los Stepanov los llevaron a las zonas Delta, y los hombres solteros fueron a conocer a las mujeres del harem. Aún no entendía por qué Sylvester le llamaba a eso un harem si él nunca las había tocado. Sabía que algunas de ellas
Como Devin dijo eso, los haría pensar que aún no había superado el perderlo todo y quería vengarse a toda costa de Yuri.Después de escuchar lo que dijo Devin, Peter me miró. "La verdad no creo que la ley del Talión de ojo por ojo, y diente por diente, sea una buena solución." comenzó, y sus compañeros asintieron. "Nos quedamos callados y no nos metimos en el asunto de Yuri porque no queríamos más muertes. Demasiada gente ha muerto en vano. Así que preferiríamos una forma más segura de terminar con esto. Aunque estamos dispuestos a pelear contra los Stepanovs tercos y despiadados que se niegan a aceptar el perdón y la paz. No voy a enviar a los guerreros de mi familia a matar gente inocente de una manada." dijo, y miró a Devin. "Sé que te han hecho daño, Alfa Corrigan, pero deberías tratar de ser el maduro en este asunto. Si te vengas de lo que pasó en Pridewood, ¿cuándo se detendrá todo esto? Las cosas no se arreglan así." dijo, y Devin gruñó."Mujeres y niños…" dijo, y Peter se l
~Sylvester~Llegué a la pequeña sala de conferencias de la mansión y, tal como dijo Marcel, los visitantes no se veían como Stepanovs. Tenían la piel bastante clara, pero su cabello oscuro y ojos cafés los hacían parecer personas común y corrientes.Alexei y Clay estaban ahí. Se levantaron cuando entré y me saludaron. Todos inclinaron la cabeza, y la sala quedó en completo silencio."Gracias por venir, tomen asiento." les agradecí y me senté en la cabecera de la mesa.Marcel y Theodore estaban a un lado de la mesa. Le dije por el enlace a Leo y a Devin que vinieran. Recordé que era importante que Gezel estuviera, así que también la invité. Como ya sabía que Erik los había visto, no me molesté en enlazarme con él para que viniera."¿A qué debo esta visita?", Pregunté, y uno de ellos, el que estaba sentado más cerca de mí a la izquierda, aclaró su garganta para hablar."Yo soy Peter Zelenski." dijo, y me presento a las nueve personas con las que estaba. Me sorprendió que ninguno de ellos
Me enlacé con Erik para avisarle nuestra decisión, y que les dijera a los Stephanov que vinieran hoy a la hacienda. Luego le dije a Leo que hablara con Gezel de esto para que nos acompañara en la reunión. También me enlacé con Bryce y Levi para decirles que revisaran muy bien a los visitantes cuando llegaran.Todos fueron a hacer lo suyo, y yo fui a mi cuarto a dormir un rato. Necesitaba descansar antes de que llegaran los invitados, así luego podría estar alerta en caso de que ellos intentaran hacer algo raro. Llegué al cuarto, me quité todo menos los boxers, y me quedé dormido.Me despertó un ruido. No sonó duro, pero no tenía que adivinar quién era, porque me envolvió en su aroma."Ojitos verdes..." gruñí, y logré abrir un ojo. Poco a poco me senté en la cama y ella se hizo a mi lado, solo estaba en ropita interior."No quería despertarte." dijo suavecito, acariciándome la cara.Abrí los ojos y la miré. Se veía cansada.Los dos necesitábamos descansar, pero me alegraba que estuvier
"Y ¿te dijeron entonces que es lo que quieren?" Le pregunté por el enlace a Erik."Según lo que me dijeron, ellos les han ordenado a sus familias que se muden al Oeste. Y dicen que vinieron para demostrarte respeto y jurarte lealtad." me respondió, y no supe qué pensar de esta visita tan repentina. Me sentía incómodo, pero había aceptado que se unieran a nosotros durante la batalla. A lo que más le tenía miedo, era de que no sabía si trabajaban para Yuri."Erik ¿Podemos confiar en ellos?" le pregunté, y hubo un silencio. "Pues a estas alturas, no puedo garantizarte nada, pero sé que no les gusta las ideologías de Yuri. Si eso te convence, te diría que sí, pero si no, pues no." me respondió siendo lo más honesto posible y suspiré."Cuéntales a Alexei y a Clay. Mientras tanto, yo hablaré con los míos y más tarde te cuento qué opino." le dije y cerré el enlace.La idea de Leo de que todos debían estar conectados a mí resultó ser muy eficiente, porque hizo que pudiéramos comunicarnos más
Entré a la habitación. Aunque ya era tarde, el sol brillaba fuerte, y las cortinas estaban amarradas para que la luz entrase al cuarto. Mi madre estaba sentada en la cama mientras que Katya le daba avena, pero parecía que no tenía ganas de comer. "Buenas tardes, Su Majestad." me saludó Katya, y yo asentí. "Katya, podrías dejarnos a solas un momento." le ordené a mi cuñada, y ella dejó el plato de avena sobre la mesa y salió de la habitación. Mi madre me miró con sus ojos tristes y apagados. Me di cuenta de que estaba más delgada, sabía que estaba durmiendo mucho y comía poco, era obvio que iba a perder peso. "¿Cómo te sientes?" le pregunté y me senté a su lado. Tomé su mano entre las mías y le di un suave masaje en el dorso de la mano. Sentí que hizo un pequeño gruñido. "Me quitaste a Jake." me dijo, mirándome con los ojos llenos de lágrimas. "No me dejaste despedirme." dijo, mientras las lágrimas caían por sus mejillas, y yo inmediatamente respondí. "Jamás te haría algo