Emilia perdió su vialidad de escuchar en un incendio de la niñez tampoco podía cambiar, así que su familia le rechazaba y ella no era más que una esclava.El prometido de su hermana la acusó de intentar seducirlo y ella fue enviaron a una subasta donde fue comprada por un alfa aterrador que decía que ella era su luna. Falcon Greemes creció en las calles, consiguió poder y prestigio haciendo todo lo que necesitó para ser un poderoso alfa. Falcón descubrió a su luna en el momento menos indicado, la llevó a casa aclarándole que él tenía a alguien más a quien había estado buscando por años, pero cuando su luna comenzó a meterse en su corazón, él comenzó a replantearse muchas cosas. Sin embargo, serían capaces de unirse cuando las circunstancias de la vida los llevaran a ambos a enfrentarse no solo a enemigos en común sino entre ellos mismos. ¿Podría Falcón olvidar a la mujer que había buscado durante años? ¿Sería Emilia capaz de perdonar después de todas las cosas que vivió?
Leer más— ¡Porque no contesta el teléfono, ¡Por qué! — Cintia golpeó la mesa en la terraza donde ella y su madre se encontraban — ¡Probablemente se enfadó por lo que esa perra trató de hacerle, ¡Por qué no nos deshicimos de ella antes, madre!, siempre fue un estorbo.— No te hagas la inocente Cintia, sabes muy bien que la tonta de Emilia no le hizo nada ese… sujeto que trajiste aquí.— ¿Acaso eso es lo que importa, madre? — gruñó la loba bebiendo de su refresco —. Te aprovechaste de esto para sacarla de aquí como queríamos, pero si ese no es el motivo porque demonios, Ermes no contesta. ¡Sabes lo que he hecho para conseguir esta relación!— Lo sé, mi niña, y estoy orgullosa de ti, con esta relación vamos a subir sin duda a la cúspide de la jerarquía de los lobos — la madre de Cintia sonrió —. Un ayudante del alfa de los Darknight es … Lo que todos los alfas alrededor desean, ese hombre debe ser impresionante y probablemente está ocupado como tu prometido.— Eso espero, madre, porque si Ermes
No tienes escapatoria…Las palabras sonaron una y otra vez en la mente de Emilia durante toda la noche. Aunque agradeció no tener que dormir con aquel extraño que había dicho que ella era su luna, seguía estando aterrada.Estaba en un lugar extraño, con un sujeto que la había comprado como si fuera un simple saco de patatas. La mujer sintió que su corazón dolía al pensar en que nadie se había preocupado realmente por ella, su familia parecía no arrepentirse de haberla enviado al peor lugar en aquel territorio. La chica que pasó prácticamente toda la noche hecha un ovillo sobre aquella cama se cuestionó si podría salir sana y salva de aquel lugar.Ella había soñado con que quizás su familia cambiara o que de algún modo aquel chico que había conocido cuando era pequeña cumplía la promesa de ir por ella y la sacaría de casa de su familia, sin embargo, parecía que nada de aquello iba a pasar.La puerta de la habitación se abrió haciendo a Emilia salir de sus pensamientos cuando la luz del
Emilia tembló de miedo cuando vio a las personas que habían entrado a la habitación donde estaba retenida. No solo había un hombre mayor con un maletín, sino que el mismo sujeto por el que había terminado siendo llevada a la subasta estaba de pie mirándola con el ceño fruncido, mostrando evidentemente que no esperaba verla ahí.Emilia miró entonces al hombre que le había comprado, el alfa ni siquiera la miró a la cara mientras se daba media vuelta para mirar al señor del maletín. La mujer dio dos pasos hacia atrás cuando aquel sujeto trató de acercarse.— ¡Aléjense de mí! — gritó — todos aléjense de mí, bandidos, malditos.— ¿Malditos? — Falcón se molestó ante aquella palabra — ¿Tienes idea de dónde estarías si no te hubiera encontrado? — El hombre la tomó de la mano, haciéndole a Emilia imposible huir de él. — sierra la boca y deja que el médico te cure.La chica quiso decir algo, pero estaba débil, su mirada seguía fija en el hombre completamente en silencio a unos pasos de ella e i
Emilia estuvo caminando alrededor de dos horas antes de caer completamente extenuada a un lado del camino. Aquello era una desventaja de no tener lobo, no era capaz de recorrer las distancias que para el resto de los lobos eran una simple caminata. El hombre que seguía andando frente a ella ni siquiera se dio cuenta de que ella se había quedado atrás.La chica gimió cuando sus manos fueron lastimadas por las piedras y ramas en el camino adyacente por el que se habían alejado del burdel mientras la chica trataba de amortiguar la caída de su débil cuerpo.¿Dónde iban?¿Por qué aquel hombre no le había dicho una sola palabra desde que se alejaron del burdel?Falcón se detuvo cuando no notó los pasos de la mujer que había comprado a sus espaldas, su nuevo estado le molestó tanto que ni siquiera quiso mirar realmente a su espalda. Aquella mujer no podía ser su luna, él ya tenía a alguien más en su corazón así que una luna era lo último que deseaba.Falcón maldijo volviendo sobre sus pasos u
Falcón estaba enfermo de aquella situación en la que se encontraba, había muchísimas actividades mucho más entretenidas que ver a todos aquellos bandidos vender mujeres. Las voces y murmullos alrededor hacían que la música fuera casi inaudible.— Escuché que tenían una adquisición especial hoy, Falcón — el lobo sentado a la derecha en la misma mesa que el alfa sonrió —. Voy a regalártela si aceptas ser mi socio en mi nuevo proyecto.— No necesito una esclava, soy perfectamente capaz de conseguirme las mujeres por mi cuenta.Falcón había trabajado duro para llegar a donde estaba, había hecho absolutamente todo lo necesario para conseguir un nombre entre todos aquellos lobos y era justamente por eso por lo que estaba ahí soportando a aquellos cinco sujetos que le habían abordado llevándolo a aquel burdel de mala muerte a los límites entre tres manadas.Falcón no entendía del todo cómo alguien podría disfrutar de aprovecharse de todas esas pobres mujeres que solo dios sabía de qué forma
Emilia tembló de miedo mientras aquella beta sobre ella no hacía otra cosa que subir peligrosamente su vestido; el aliento masculino le resultó desagradable. El hombre tomó su cabello con una mano, la chica trató de luchar, pero al tenerlo a horcajadas sobre usando su fuerza sobrenatural, Emilia no pudo hacer mucho. Las lágrimas comenzaron a inundar su mirada cuando aquel hombre colocó su mano sobre la ropa interior de la chica.Los ojos brillantes y maliciosos solo hicieron que la respiración de Emilia fuera más sofocada que antes y la chica trató de pensar en cómo salir de aquella situación, ese hombre quería abusar de ella. Sabía que nadie vendría por ella o la tomaría en cuenta, así que solo ella podría salvarse de aquella situación, pero…¡Cómo iba a hacerlo!No tenía lobo, no podía defenderse de aquel hombre y ni siquiera podía gritar porque en aquel lugar nadie la escucharía. La chica cerró los ojos cuando la boca desagradable del novio de su hermana besó la suya, trató de apar
Emilia sirvió una copa de zumo para la mujer de aspecto petulante sentada en la cabecera de la mesa. La chica de cabello negro perfectamente peinado a su derecha dijo algo que hizo a la mujer reír, pero Emilia no fue capaz de escuchar, cosa que agradeció porque nada de lo que dijeran aquellas mujeres podría ser bueno, en especial cuando era evidente que hablaban de ella.La chica dejó caer la servilleta al suelo cuando Emilia sirvió la bebida para ella, Cintia, volteó los ojos indicando con un dedo para que Emilia tomara la servilleta del suelo. La chica dejó la jarra a un lado de la mesa dispuesta a obedecer, pero antes de que pudiera ponerse en pie, todo el contenido de la jarra fue vertido sobre ella.«Es tan estúpida»La chica pudo leer los labios de su hermana, tragó el dolor en su pecho cuando tanto ella como su madre se burlaron. Emilia odiaba aquella familia que había conseguido su padre después de la muerte de su madre. En especial porque aquel hombre la había rechazado por e