Xavier Devereaux, un Ceo y magnate multimillonario y dueño de una de las farmacéuticas más importantes del mundo, es conocido por su rectitud, elegancia y carácter amable. Sin embargo, una traición de las personas más cercanas a él hará que su vida cambie de la peor manera. En una noche que debía ser de celebración, Xavier es drogado y engañado por su prometida y su propio hermano, quienes lo manipulan para que crea que ha estado con su prometida en la intimidad. Pero algo no cuadra. La mujer que estuvo en su cama esa noche no era quien decía ser. Fingiendo ignorancia, Xavier decide investigar. Sus indagaciones lo llevan a descubrir a Aitiana, una joven de origen humilde, contratada para ser parte del engaño. Lo que comienza como una búsqueda de respuestas se complica cuando descubre que Aitiana está embarazada de él. Furioso y decidido a controlar la situación, Xavier la lleva a su mansión, convirtiéndola en su prisionera, pero también en el centro de su obsesión. En medio de la desconfianza y los secretos, Aitiana deberá enfrentarse no solo al poder de Xavier, sino también a sus propios sentimientos. Lo que comenzó como un engaño terminará poniendo en juego sus corazones y desenterrando verdades que cambiarán sus vidas para siempre.
Leer másBuscaré pruebas ☺️AitianaNo puedo explicar con claridad esta sensación. ¿Son celos? ¿Nervios? Margarita me comentó que la señorita Josean intentó quitarse la vida. Al parecer, estaba desesperada por llamar la atención de Xavier. Incluso gritó que había una mujer está mansion. Me pregunto si se refería a mí. Hace poco estuve en mi balcón leyendo un libro; tal vez me vio sin darme cuenta. Espero no meter en problemas al señor Xavier, pero no puedo evitar sentir celos. Después de todo, ella fue su prometida, aunque lo engañó. ¿Se merece siquiera su atención?Me contradigo a cada instante. Esa mujer no se merece ni una pizca de mi lástima, no después de lo que viví. Sin embargo, el temor persiste. ¿Y si Xavier decide hacerme pasar por las mismas mentiras de las que fui parte involuntaria por culpa de su ex prometida? Suspiro, negándome a dejar que ese sentimiento fluya más allá de un pensamiento fugaz. Tengo que mantenerme fuerte. Mi hijo nacerá pronto, y sé que tendré que entregárselo
Josean trata de manipularme 🦧XavierEstaba a punto de explotar de ira. ¿Cómo se atrevía a entrar a mi habitación sin mi permiso? Josean siempre había sido impulsiva, pero esto ya cruzaba los límites. La miré con frialdad mientras ella avanzaba hacia mí con una expresión de reproche.—Te vine a ver, ya que ni siquiera me has llamado. ¿Qué está pasando contigo, Xavier? —su tono mezclaba preocupación y reclamo.Suspiré con fastidio, queriendo terminar con la conversación lo más rápido posible.—Pasa que no quiero nada contigo, Josean. Espero que entiendas. Mi salud es primordial en este momento, y como te dije antes, no quiero tener nada contigo. Vete ya. —Mi voz fue cortante, sin dejar espacio para réplicas.Ella abrió los ojos desmesuradamente, ofendida.—¿No puedo creer que me estés tratando así? ¿Acaso me estás engañando con otra mujer?—¿Y si así fuera? ¿Qué tendría de malo? —respondí con una sonrisa arrogante, disfrutando, en parte, de su reacción.Josean gritó, jalándose el cabe
Tenia que meterme en su cama.Josean🌸No podía creer lo que estaba pasando. Mi mente no dejaba de dar vueltas desde la maldita fiesta. Él ni siquiera me miró, se fue sin despedirse, como si yo no existiera. Y para colmo, presentó a esa mosca muerta con una sonrisa encantadora, como si fuera la reina del lugar. —¡Cálmate! —me dijo Eros, intentando apaciguarme. —¿¡Cómo quieres que me calme!? —exclamé con la voz crispada—. ¡No puedo! Encima, esa mujer estaba encantada con él... la Ceo con la cuál el conversaba, pero lo que más me preocupa es el embarazo de esa Aitiana. ¿Le has sacado alguna palabra? ¿Sabes si ese hijo es de Xavier? Eros negó con un gesto de fastidio. —No he podido sacarle ni una maldita palabra, pero algo me dice que sí es de él. —Yo también lo creo —dije, sintiendo el nudo de la desesperación apretándome el pecho—. Tenemos que actuar lo antes posible. —Tranquila, cariño —respondió Eros, intentando sonar seguro—. Vamos a taparle la boca y sacarla del camino. Mi r
Un delicioso momento 😋 XavierLos ojos de Aitiana están fijos en mí, y puedo sentir su respiración acelerada. Mi propio cuerpo responde de la misma manera. Su piel se eriza bajo mi tacto, y sus labios entreabiertos me llaman como una tentación inevitable. Aunque parece adormilada, ahora mismo su cuerpo tiembla, vulnerable y encendido por el deseo. —Quiero hacerte el amor, Aitiana —le digo con voz ronca, casi suplicante. Mi cuerpo clama por ella, y la idea de volver a sentirla como la primera vez me abruma. La deseo como un loco y no pienso dejar pasar esta oportunidad. —Puedes hacerme lo que quieras —susurra antes de besarme con una intensidad que me hace perder el control. Sin esperar, le quito el vestido con movimientos desesperados. Bajo hasta sus pies para quitarle las plataformas, dejando su piel expuesta ante mí. Mis labios recorren su tobillo, ascendiendo lentamente por sus muslos, rozando cada centímetro hasta que deslizo su ropa interior. La humedad de su cuerpo me vuelv
Enamorada de Xavier.Aitiana.🌸La fiesta se desarrollaba de manera tranquila en este hermoso lugar. Los empleados se saludaban entre risas mientras los organizadores ultimaban los preparativos para la entrega de premios y cheques. El señor Xavier había subido al estrado, acompañado por algunas secretarias, para presentar los detalles del evento. La atención de todos estaba centrada en el escenario, pero yo no podía relajarme. Sentía múltiples miradas clavadas en mí, especialmente una en particular que me incomodaba.Recién me observaba con una intensidad que casi lograba desnudarme con la mirada. Esa mujer, Josean, no dejaba de mirarme de esa forma, y sabía que en cualquier momento se acercaría a provocarme. Solo esperaba que no lo hiciera frente a su prometido, porque si él llegaba a descubrir la verdadera calaña que era ella, el espectáculo sería inevitable. Quizás eso era justo lo que quería: que la desenmascarara.Intenté mantener la compostura, observé al Señor Xavier estaba jun
Primer golpe 🙂↔️XavierSolté un bufido de irritación al llegar a la elegante residencia donde vivía Josean con su familia. El chofer me miró de reojo, quizás sorprendido por mi gesto. Me encogí de hombros como si quisiera restarle importancia a mi evidente mal humor, y él, con profesionalismo, asintió antes de quedarse en su puesto.Todavía podía sentir en mi piel el recuerdo reciente de Aitiana: su aroma embriagador, su piel suave, y el exquisito sabor que me tentaba a querer hacerla mía por completo. Pero ahora debía concentrarme; esta visita no era para la gran boda que ellos se imaginan, sino para poner posponerla. Obviamente sin dar explicaciones del porqué. Alguna mentirita falsa así mismo como lo es Josean.Una empleada uniformada me recibió en la puerta con una sonrisa cortés y me guió al amplio salón decorado con un estilo clásico. El aroma de flores frescas invadía el ambiente. Josean estaba allí, sentada junto a su tía, su tío y varios primos que reían y charlaban animad
La madre de mi hijo. 🧡Xavier.Ayer fue un día peculiar. Aitiana había hecho bien su trabajo, pero no dejaba de molestarme el hecho de que la cámara espía que le coloqué en la cadena con la piedra de zafiro no tuviera audio. Podía ver todo lo que pasaba, pero no escuchar. Eso me frustraba. Sin embargo, por el momento, bastaba con lo que podía observar. Aitiana sabía demasiadas cosas, pero se mantenía en silencio.Miré el reloj. Por un momento, había olvidado la reunión importante que tenía con los tíos de Josean. Era inevitable: iba a romper el compromiso. Mi plan era sencillo. Solo diría que necesitaba tiempo, que hasta no obtener mi maestría y mis títulos en medicina, no pensaba casarme. Ya podía imaginarme el berrinche que Josean armaría, pero sinceramente, no me importaba. No podía permitir que ella salga con la suya.Esta noche prometía ser larga. Tenía pendientes en la empresa y muchas otras cosas por resolver. Pero este dia debia terminar con mi primer objetivo. Entré a mi hab
Ser su amante. 🤭AitianaTodo parecía un mal sueño, una de esas pesadillas absurdas de las que despiertas sudando frío, pero, para mi desgracia, era real. Sí, estaba embarazada, y sí, estaba frente a un hombre que parecía más perturbado por mi estado que yo misma. El señor Eros, con su semblante altivo, me observaba como si acabara de cometer el mayor de los crímenes. Su mandíbula se tensó y sus puños se cerraron con fuerza mientras caminaba de un lado a otro en su oficina.—¿De quién es ese hijo? —soltó de repente, con un tono entre incrédulo y acusador.Me mordí la lengua para no responder algo que lo empeorara todo. Traté de mantener la compostura, pero no pude evitar replicar:—¿Por qué se preocupa tanto por mi embarazo? ¿Cuál es el problema, señor? —mi voz era firme, aunque por dentro estaba hecha un manojo de nervios.Él murmuró una maldición entre dientes y se detuvo frente a mí, sujetándome del hombro con más fuerza de la necesaria.—Siéntate. —Su voz era un gruñido, cargado
Sentimientos por él. 😭Aitiana Al despertar por la mañana, me sentí ligeramente más tranquila. Entré a la ducha, dejando que el agua tibia recorriera mi piel, era agradable sentir la calidez del agua. Al salir, envolví mi cabello con una toalla y me dirigí al pequeño armario donde había dejado lista mi ropa. Escogí un pantalón floreado y una camisa de maternidad; ambos eran cómodos y ligeros, perfectos para el clima cálido. Antes de vestirme, elegí un conjunto de ropa interior blanca y me quedé unos segundos frente al espejo. Mi reflejo me devolvía una imagen distinta a la que estaba acostumbrada. Acaricié suavemente mi vientre, notando el ligero abultamiento que marcaba mi cuarto mes de embarazo. Una mezcla de emociones cruzaba por mi mente: esperanza, miedo y una necesidad urgente de fortalecerme. —Debo ser fuerte— me dije en silencio, apretando un poco los labios. La debilidad no era una opción; no en mi situación. Había aprendido, a golpes de la vida, que ser débil solo abría