Savannah Davenport lo tiene todo: belleza, riqueza y una vida llena de lujos. Pero cuando su padre pierde la paciencia con su actitud mimada y decide desheredarla, su mundo se derrumba. Obligada a casarse con un desconocido para recuperar su fortuna, Savannah se ve atrapada en un matrimonio de conveniencia con Logan Carter, un rudo granjero que acaba de convertirse en millonario tras descubrir un pozo de petróleo en su propiedad. Logan, decidido a cobrárselas a la niñita rica, acepta el trato pensando que domará a la caprichosa heredera. Pero mientras la vida en el campo les ofrece nuevos desafíos, una inesperada atracción comienza a florecer entre ellos. Pero el malentendido hace que ambos se separen cada vez más. Hasta que Savannah está a punto de casarse con otro hombre mientras se encuentra embarazada del hijo de Logan. ¿Podrá Logan descubrir la verdad y reconquistar el amor de su vida? ¿O su orgullo y terquedad serán más fuertes?
Leer másCAPÍTULO 11: LA FIESTA DEL VECINOSavannah—¡Arrgh! ¡Idiota! —protesto cerrando la puerta de un azote.Me dejo caer en el borde de la cama y aunque intento apartar de mi cabeza su imagen, no lo consigo. Esa manera de hablarme… esa arrogancia… su estúpido rostro tan atractivo…—¡Estúpido y mil veces estúpido! ¡Te odio! —grito.Resoplo con frustración, le pongo seguro a la puerta aunque eso seguramente no evitará que entre. Me quito la ropa en el baño para poder ducharme con más tranquilidad.Mientras el agua cae sobre mí, reniego en voz alta, como si eso pudiera cambiar la situación, pero por alguna ridícula razón, no puedo dejar de pensar en sus brazos fuertes, en esa sonrisa arrogante que me revienta los esquemas.Al salir me envuelvo en una bata y cuando vuelvo a la habitación, me doy cuenta de que Logan no ha intentado entrar. A pesar de ser grande y cómoda, la cama se siente extrañamente vacía. Se me hace un nudo en el estómago al darme cuenta de que, a pesar de todo, me siento so
CAPÍTULO 10: ME VAS A SUPLICARSavannahAl llegar a la casa, mis manos están sudando, el volante se me resbala un poco y mi corazón late desbocado. Trato de no mirar el parachoques torcido y abollado de la camioneta, pero es imposible. Cada vez que lo hago, siento una oleada de ansiedad trepar por mi garganta. No sé qué reacción tendrá Logan al ver su preciada camioneta con semejante golpe. Y aunque me encantaría decir que no me importa, la verdad es que sí lo hace.Aparco la camioneta frente a la casa y, justo cuando me preparo para enfrentar la tormenta que seguramente se avecina, noto que Helen está a mi lado, tranquila y sonriente como si nada hubiera pasado. Logan sale de la casa, caminando hacia nosotras con esa expresión seria que siempre parece llevar, su mirada recae de inmediato en el vehículo. Antes de que pueda abrir la boca, Helen se mueve de manera calculada.—¡Ay, por Dios! —exclama Helen, tropezando con torpeza justo cuando se aproxima al parachoques dañado. Se agarra
CAPÍTULO 9: EL MERCADOSavannahMe estremezco al sentir el agua helada correr por mi piel. Cada segundo que pasa en la ducha me siento más miserable. El frío es casi insoportable, y cada gota parece como agujas en mi piel. Maldigo entre dientes a Logan por haberme metido en esta situación. Finalmente, cuando termino de ducharme, me enredo en la bata, rezongando por lo bajo, mientras regreso al baño a lidiar con el desastre de espuma que he causado.—Esto es ridículo —murmuro observando la cantidad absurda de espuma que cubre el suelo. Nunca en mi vida pensé que tendría que limpiar algo como esto. Me agacho a recoger un trapo, lista para empezar, cuando escucho pasos. Me giro y veo a Davina entrar al baño con un balde y trapos. Su cara está rígida y sus labios apretados en una expresión de evidente molestia.—¿Qué haces aquí? —pregunto, confusa, observando cómo se arrodilla y empieza a limpiar sin decir una palabra.Davina sigue limpiando, negándose a mirarme.—¿Por qué estás enojada?
CAPÍTULO 8: EL BAÑO DE ESPUMASavannahMe trago mis palabras y termino el desayuno lo más rápido posible. No puedo ceder. No voy a dejar que Logan o esta familia piensen que me han ganado.—Gracias por el desayuno —murmuro.—De nada, querida —responde la abuela con una calidez que me incomoda—. No te preocupes por ayudar con los platos hoy. Ve a asearte. Pero mañana, tendrás que unirte a la rutina.No puedo seguir así mucho tiempo. Logan quiere que obedezca, que me doblegue a su voluntad, pero no lo haré. Me casé con él por una razón, y no voy a dejar que me controle.Esto es solo temporal, me repito una y otra vez. Solo tengo que esperar el momento adecuado.Respiro hondo y me doy cuenta de que Davina me está mirando. Sus ojos curiosos y brillantes me observan con atención, y sé que no puedo dejar que vea el odio en mi rostro. Así que, finjo con toda la habilidad que he aprendido en años de fiestas y eventos sociales para forzarme una sonrisa.—Ahí está la olla con el agua caliente,
CAPÍTULO 7: LA NUEVA RUTINASavannahMe despierto con los primeros rayos de luz que se filtran por las cortinas entreabiertas. Parpadeo, aturdida, mientras mis ojos se acostumbran a la claridad que lentamente inunda la habitación. Por un segundo, espero que todo esto sea una horrible pesadilla, que Logan Carter, la granja, esta boda absurda… todo sea un mal sueño del que despertaré en mi mansión en la ciudad. Pero cuando me giro para mirar a mi lado, la cama está vacía.Respiro sintiéndome aliviada. Quizás, con algo de suerte, Logan ya se ha marchado y puedo disfrutar de un momento de paz.Pero la ilusión no dura. La puerta se abre de golpe y una voz jovial interrumpe mis pensamientos.—¡Buenos días, querida! —dice la abuela de Logan con un entusiasmo que me hace querer enterrar la cabeza bajo las sábanas.Se acerca a la ventana y abre las cortinas de par en par. La luz entra de golpe, obligándome a cubrirme los ojos.—Oh, lo siento, no quería deslumbrarte —dice la anciana con una ris
CAPÍTULO 6: NOCHE DE BODASSavannahEstoy temblando de rabia mientras Logan me suelta sobre el suelo con brusquedad. Tambaleo por el impacto y casi pierdo el equilibrio, pero antes de que me caiga, él me sujeta del brazo y me atrae hacia su pecho. Nuestras respiraciones están agitadas, y por un breve instante, nuestros ojos se encuentran. Siento el calor de su cuerpo y el latido rápido de su corazón contra mi pecho, pero rápidamente me sacudo el momento y lo empujo lejos de mí.—Eres un asqueroso aprovechado —le digo con furia, tomando distancia—. Desde el momento en que me viste en esa gasolinera, sabías quién era. Orquestaste todo para acercarte a la fortuna de mi familia, ¿verdad? ¡Un campesino como tú nunca podría haber llegado a esto por mérito propio!Logan se ríe, una carcajada grave y profunda que me irrita aún más. No parece afectado en lo absoluto por mis palabras.—Lo que pienses de mí me tiene sin cuidado, niñita caprichosa —dice, cruzando los brazos y mirándome con esa son
CAPÍTULO 5: FAMILIA ORDINARIASavannahEl sol está en lo más alto cuando llego al lugar de la ceremonia. Las tierras de Logan parecen interminables, vastos campos que no tienen fin. A pesar de que intento mantener la calma, cada fibra de mi ser está a punto de explotar. Me repito que todo esto es temporal, que pronto lo tendré todo de nuevo, pero eso no hace que esta pesadilla sea más fácil de soportar.La familia de Logan ya está allí reunida cerca del pequeño arco que han preparado para la ceremonia. En cuanto los veo, un nudo se forma en mi estómago. Son demasiados, y todos parecen tan... normales. No, peor que eso: chabacanos y ordinarios.Lo primero que noto es que Logan tiene cuatro hermanos. Los dos mayores deben tener alrededor de veintiocho y veintiséis años. Se parecen a él: altos, robustos, con una actitud tosca y despreocupada que me recuerda que no estoy en mi mundo. Luego veo a sus dos hermanas: una adolescente de diecisiete años que no para de hablar con la más pequeña,
CAPÍTULO 4: MATRIMONIO CON EL BRUTOSavannahEstoy parada frente a la puerta de la casa de mi padre con dos gatitos en los brazos, sintiendo que la decisión que acabo de tomar me aplasta. He llegado a esto, a tener que mendigar mi lugar en la familia a cambio de casarme con un hombre que no conozco. Un hombre al que ni siquiera soporto. Pero ya no hay vuelta atrás, no después de haber sido expulsada del hotel, de que todas mis amigas me dieran la espalda.Los dos pequeños gatitos, que encontré abandonados en la calle, se revuelven en mis brazos, como si sintieran mi nerviosismo. Respiro hondo y toco el timbre. Papá me abre la puerta, con una sonrisa triunfante en el rostro.—Has vuelto —dice sin sorpresa alguna.—Voy a hacerlo —respondo, casi sin aliento. Alzo la barbilla, intentando mantener lo poco que me queda de orgullo—. Me casaré con Logan Carter si eso significa que recuperaré mi dinero y mi estatus.La sonrisa de papá se ensancha, satisfecho. Me hace un gesto para que entre a
CAPÍTULO 3: ENTRE LA ESPADA Y LA PAREDSavannahCamino de un lado a otro en el pasillo fuera de la oficina de mi padre con el corazón acelerado. Pero eso no es lo que más me molesta en este momento. No, lo que me tiene al borde de un ataque de nervios es ese hombre. ¡El maldito hombre con el que choqué esta mañana!, no tengo duda de que vino a acusarme por lo del choque. ¿Cómo se atreve? Nadie me había confrontado nunca por algo tan insignificante, y menos alguien que no puede permitirse arreglar su destartalada camioneta.¿Qué le habrá dicho a papá? ¿Habrá intentado hacerme quedar mal? Estoy segura de que lo hizo. Y lo peor es que mi padre seguramente le dará la razón, como siempre hace con todos, excepto conmigo. Maldigo entre dientes y sigo caminando de un lado a otro, sin atreverme a entrar.Veo la puerta de la oficina abrirse, y él sale. Me paralizo por un momento, intentando no hacer ruido, y me escondo tras una columna antes de que me vea. Su paso firme y relajado me irrita. ¿Q