Savannah Davenport lo tiene todo: belleza, riqueza y una vida llena de lujos. Pero cuando su padre pierde la paciencia con su actitud mimada y decide desheredarla, su mundo se derrumba. Obligada a casarse con un desconocido para recuperar su fortuna, Savannah se ve atrapada en un matrimonio de conveniencia con Logan Carter, un rudo granjero que acaba de convertirse en millonario tras descubrir un pozo de petróleo en su propiedad. Logan, decidido a cobrárselas a la niñita rica, acepta el trato pensando que domará a la caprichosa heredera. Pero mientras la vida en el campo les ofrece nuevos desafíos, una inesperada atracción comienza a florecer entre ellos. Pero el malentendido hace que ambos se separen cada vez más. Hasta que Savannah está a punto de casarse con otro hombre mientras se encuentra embarazada del hijo de Logan. ¿Podrá Logan descubrir la verdad y reconquistar el amor de su vida? ¿O su orgullo y terquedad serán más fuertes?
Leer másCAPÍTULO 90: NO HA TERMINADOSavannahEl frío metal de la perilla de la puerta resbala bajo mis dedos temblorosos. Mi pulso es un tambor en mis oídos mientras lucho por girarla, pero la adrenalina me traiciona. No puedo controlar mis movimientos, mis manos no me obedecen. Cada segundo que pasa siento a William más cerca, su presencia es oscura y amenazante detrás de mí. Finalmente, la puerta cede. Un destello de alivio cruza mi mente, pero no dura. Antes de que pueda dar un paso, un tirón violento en mi cabello me arrastra hacia atrás, obligándome a gritar de dolor.—¿A dónde crees que vas, querida? —William susurra cerca de mi oído, su voz es helada mientras me presiona el cañón de una pistola contra la sien.Mi cuerpo tiembla como una hoja al viento, pero no me dejo quebrar. No del todo.—¿Por qué no disparas de una vez? —le digo con la voz quebrada, pero llena de desafío—. Acaba con esto. Eso es lo que querías desde el principio, ¿no?William ríe, una carcajada amarga que me revue
CAPÍTULO 89: SEMBRANDO DUDASLoganEstoy cansado de esperar. Puedo escuchar las voces al otro lado de las estructuras metálicas. Charlotte está hablando con un par de hombres que no reconozco. No sé cuánto más voy a poder contenerme.Mi instinto me grita que actúe, que me mueva, que la enfrente, pero sé que tengo que ser inteligente. No puedo arriesgarme a perder más de lo que ya he perdido.Tony me da una palmada en el hombro.—Tranquilo, hermano. Esperemos el momento adecuado.Le asiento con la cabeza, aunque la paciencia no es algo que tenga en este momento. La sangre me hierve. Solo quiero respuestas, y Charlotte va a dármelas, aunque tenga que arrancárselas palabra por palabra.Finalmente, veo cómo los dos hombres con los que habla comienzan a retirarse. Este es el momento. Sin decir nada más, salgo de las sombras con Tony a mi lado. Mis pasos son firmes y resonantes sobre el terreno. Charlotte gira la cabeza al escucharme, y su expresión cambia. No es sorpresa. Es irritación.—¿
CAPÍTULO 88: AYUDA INESPERADASavannahEl aire en la habitación es frío, o tal vez soy yo quien no puede dejar de temblar. No sé cuánto tiempo llevo aquí, encogida en el rincón como un animal herido. La ventana con barrotes deja entrar una luz tenue de luna que apenas ilumina el suelo desnudo. Mis ojos arden de tanto llorar, pero las lágrimas ya no caen. Me siento vacía, como si el miedo y la desesperación hubieran absorbido todo lo que quedaba en mí.De repente, el sonido de la cerradura girando me sobresalta. Mi corazón se acelera y me hago aún más pequeña contra la pared. Por instinto, llevo mis manos a mi pecho, intentando protegerme de lo que sea que venga.Cuando la puerta se abre, me preparo para ver la figura imponente de William. Pero no es él.—Abuela… —susurro.Julia Davenport, siempre tan impecable, tan altiva, entra al cuarto con pasos vacilantes. Su rostro, normalmente impasible, está pálido y sus ojos vidriosos. Me observa con horror y una lástima que no puedo soportar.
CAPÍTULO 87: FURIA CIEGALoganMi corazón late con una furia contenida, mi mente se llena de imágenes de Savannah subiendo a ese maldit0 auto, alejándose de mí. No, no alejándose, siendo arrancada de mi lado. Ya el sol se ha ocultado y la noche helada apenas acaba de comenzar.Camino de un lado a otro en la sala de la granja, las botas golpean el suelo de madera con fuerza. Mis manos se cierran en puños, y cada músculo de mi cuerpo está tenso, listo para explotar.—¡Maldit4 sea! —gruño, lanzando un puñetazo a la pared. El dolor en los nudillos me trae un poco de alivio, pero no lo suficiente.—Logan, tranquilízate —dice Tony cruzando los brazos mientras me observa con preocupación y cautela. Él sabe que estoy al borde.—¿Tranquilizarme? —me vuelvo hacia él, mi voz es un gruñido bajo y amenazante—. ¿Cómo diablos voy a tranquilizarme, Tony? La dejé ir con ese… ese desgraciado. Estoy harto de perderla, harto de que cada vez que la tengo entre mis brazos, algo sucede.—No podías hacer nad
CAPÍTULO 86: EL VERDADERO MOTIVO DE LA VENGANZASavannahLas palabras de William se repiten en mi cabeza como un bucle, dejándome paralizada. No puedo creer lo que acaba de decirme. ¿Quiere destruir a mi familia? ¿A los Davenport? Mi primera reacción es pensar que está loco, que esto es alguna venganza personal porque lo dejé plantado en el altar.—¿Todo esto es por eso? —le pregunto, con una incredulidad teñida de asco—, ¿por qué te dejé plantado en la boda?William estalla en carcajadas. No la risa amigable o divertida que recuerdo de él en el pasado, sino algo cruel, frío y completamente ajeno.—¿De verdad, Savannah? —me dice entre risas—. ¿De verdad crees que el mundo gira a tu alrededor? No, esto no tiene nada que ver contigo. Tú solo eres un peón en este juego, una herramienta para lo que realmente quiero.—¿Entonces por qué? —exijo, incapaz de contenerme. Mi corazón late con fuerza, y mi mente se llena de preguntas.William se inclina hacia adelante, sus ojos arden con un odio
CAPÍTULO 85: LAS RAZONESSavannahMe alejo de la granja con el corazón hecho pedazos. Cada kilómetro que avanzamos me siento más asfixiada, atrapada en una red de mentiras y manipulaciones que parece no tener fin. Miro por la ventana del auto, viendo cómo el paisaje se vuelve cada vez más irreconocible. Logan se queda atrás e inmóvil frente a la granja, su figura firme se recorta contra el horizonte hasta que desaparece.Mis manos tiemblan mientras las escondo en mi regazo. No puedo dejar de recordar el rostro de Logan cuando le pedí que me dejara ir. La mezcla de furia, impotencia y algo más... algo que no quiero nombrar, porque si lo hago, temo romperme.William conduce en silencio, pero su sonrisa arrogante dice más que cualquier palabra. Finalmente, llegamos a la mansión, esa misma casa que alguna vez fue mi hogar, aunque ahora no parece nada parecido. La familia Davenport… mi familia… es como si hubieran pasado muchos años en lugar de uno solo, pero ya casi no queda nada de lo que
CAPÍTULO 84: RECLAMOSavannahLogan y yo estamos uno frente al otro, agitados, expectantes a lo que sucederá. Su mirada intensa está fija en la mía, y mi corazón late con fuerza desbocada.Antes de que pueda decir algo, sus labios capturan los míos en un beso que me deja sin aliento. Es apasionado, lleno de necesidad. Me pierdo en él, sin resistencia.Sus manos recorren mi cintura con firmeza. Mi cuerpo reacciona al suyo como si siempre hubiera estado destinado a él. Sus dedos encuentran el borde de mi camiseta, y con un movimiento seguro, la desliza por mi cabeza, dejándome expuesta ante su mirada.—Eres perfecta —murmura.Sus palabras hacen que mi piel se erice mientras sus labios descienden por mi cuello, dejando un rastro ardiente que me hace estremecer. Jadeo suavemente cuando su boca encuentra mi clavícula, succionando suavemente antes de continuar bajando.Mis manos se deslizan por su torso desnudo, sintiendo la firmeza de sus músculos tensos bajo mis dedos. Lo he visto muchas
CAPÍTULO 83: LA CONFIRMACIÓN DE NUESTRO AMORSavannahEl camino de regreso a la granja parece más corto esta vez. Logan conduce con una mano en el volante, la otra descansando sobre la mía. Olivia duerme tranquila en su asiento trasero, ajena a todo el caos y el drama que han sido estos días. Mi memoria está completa, y aunque debería sentirme más tranquila, cada recuerdo trae consigo un torrente de sentimientos que lucho por organizar.Cuando llegamos, la casa se alza ante nosotros, sólida y reconfortante, como un faro que me guía a un lugar seguro. Mi pecho se llena de algo cálido y pesado, una mezcla de alegría y tristeza que no puedo explicar del todo.La puerta principal se abre antes de que tengamos tiempo de bajarnos, y veo a Davina y Melanie salir corriendo hacia nosotros. Tony está detrás, con el rostro más serio, pero sus ojos también reflejan alivio.—¡Savannah! —grita Davina, y su abrazo es tan fuerte que casi pierdo el equilibrio.Melanie se une, llorando y riendo al mism
CAPÍTULO 82: EL REENCUENTROSavannahLa ansiedad cuelga en el aire como una nube negra mientras Logan y yo seguimos buscando. Son tres días de recorrer caminos interminables, de visitar moteles de mala muerte y preguntar a extraños si han visto algo, cualquier cosa que pueda llevarnos a Olivia. Tres días en los que intento descifrar las emociones que me invaden cuando lo miro.No he recordado nada. Mi mente sigue siendo un lienzo en blanco cuando pienso en nuestra historia, pero algo dentro de mí está cambiando. Hay una conexión que no puedo ignorar, algo que despierta cuando estoy cerca de él. Es como si mi cuerpo supiera algo que mi mente no puede recordar.Logan detiene la camioneta frente a una vieja gasolinera. Es el último lugar en el que alguien supuestamente vio a Peter. Sus hombros están tensos mientras se baja y camina hacia el edificio vacío. Yo me quedo en el auto, mirando cómo explora cada rincón.Cuando regresa, su expresión lo dice todo. No hay nada aquí.Golpea la puer