Ella tiene una vida casi perfecta, y cuando me refiero a casi, es porque la perfección no existe, pero, si existirá su vida fuera el significado adecuado. Trabaja en una editorial, algo que le encanta. Ama los libros, tanto leer como escribir. Es una chica inteligente y muy agradable. Está a punto de comprometerse con su novio de dos años y medio, sin embargo, alguien de su pasado, alguien muy importante aparecerá en su camino justo en su compromiso. ¿Qué pasará? ¿Su vida seguirá siendo tan tranquila? ¿Podrá mantener su relación por sobre todas las cosas? Dylan Jones... El encantador Dylan, perdición de cada mujer que se cruza en su camino. Ahí donde la locura, la intensidad, la belleza y el placer, sobre todo el placer, alcanzan su más alto nivel. Él no va por la vida con rodeos, no tiene que pintarte un mundo de colores para llevarte a su cama, basta solo con que te mire y sonría. ¿Mujeriego? ¡Mucho!. ¿Enamorarse? ¡Eso nunca!. Su pasado le golpeó tan fuerte, que ahora, nadie es capaz de llegar a su corazón. Pero, hay una frase que dice: “el que no quiere caldo, le dan tres tazas” y vuelve a reencontrarse con esa persona.
Leer másCaminamos los tres hasta que salimos del hotel. Ahí me esperaban las chicas. Michel me da un beso en la mejilla y se marcha. Imagino que la boda será en la playa, porque las chicas tampoco llevan zapatos. Agarro del brazo a Leon y las chicas se colocan delante de nosotros. Caminamos un tramo hasta que llegamos a un punto dónde ya podía observar a mi hombre con mi pequeña en brazos. Comienza la música Fantasy de Black Atlass indicando que es hora de ir hacia el amor de mi vida. Las chicas emprenden el camino. Nosotros le siguimos. Reparo en todos, que llevan una sonrisa en su rostro. Un brisa fuerte hace que los cabellos de mis niñas se muevan y junto con ellos la apertura del vestido se haga más pronunciada. Eso no pasa desapercibido por los ojos de los chicos, quienes estaban ahi al lado de Dylan. Liam tenía en brazos a su hijo Logan, en frente de Aiden estaban sus dos hijos y Enzo simplemente con las manos en los bolsillos. Michel también acompaña a Dylan. Las chicas llegan hasta
Él se lanza a mis brazos y vuelve a besarme. Se separa de mí, coge el teléfono en la mesita y marca un número.—Su respuesta fue Sí—comentó por teléfono y colgó.Automáticamente se levanta de la cama y empieza a vestirse.—Vístete —expresa—. Las chicas están por tocar la puerta. Nos casaremos ahora.¡¿Qué?! — ¿Qué? ¿Ahora? —Él se acerca a mí afirmando con su cabeza.—No puedo esperar más para hacerte mi mujer —dice y me da otro beso.Tocan la puerta, así que me levanto rápido de la cama para vestirme. ¿Qué es una locura? Sí, lo sé, pero nuestra historia jamás ha sido cuerda. Así que a vivir al máximo que el tiempo vuela.—Estaré en la habitación contigua — me dice mi futuro marido—, y te espero en el altar.Tomo su mano y lo atraigo hasta mí, vuelvo a besarlo antes de que abra la puerta.—Creo que necesitaré otra sesión de sexo —le digo haciendo que sonría muy sexy—. Ahora la nerviosa soy yo.—Espera que el juez nos declare marido y mujer —expresa cerca de mi boca—, que no te podrás
Llevo minutos en un auto, no sé quiénes son o hacia donde me llevan. Nadie pronuncia palabra alguna. Tengo miedo, pero no puedo demostrárselos. Lucharé con todas mis fuerzas para encontrar a Emily y salir de aquí. El carro se detiene.—Hemos llegado —dice alguien—. Llévala con el jefe.¿Jefe?Unas manos agarran mi brazo izquierdo y me dirige hacia algún lado. No hay rastros de brusquedad. Escucho una puerta abrirse, me dirigen cuatro pasos más y me sientan en una silla. Lo próximo que escucho es la puerta cerrarse.Me pone nerviosa no poder ver absolutamente nada. Doy un brinco cuando pasa algo ligero por mi piel. Recorre mis muslos, mis manos y mi cuello. Trago saliva nerviosa. Siento un hielo sobre mi cuello, suspiro brusco, el hielo se resbala hasta el medio de mis senos, ahí se detiene por el sujetador, próximo a derretirse. Y entonces la boca de alguien besa mi cuello. ¡Y no sé por qué carajos no me desagrada! Dylan me habrá convertido en una ninfómana o qué ¡Me han secuest
Me levanto en la mañana, Dylan ya no estaba en la cama. Protesto mentalmente, me había acostumbrado a verlo al despertar con Ashley parcialmente sobre él. Y sí, mi pequeño retoño es niña de papi. -Cómo hizo este imbécil para tenerme tan enamorada -digo en voz alta después de un suspiro.Siento una respiración en mi cuello que me eriza hasta donde la espalda pierde el nombre. -Necesitas que te demuestre como este imbécil te tiene tan enamorada -susurra a mi oído.¡Joder! Mi mente recuerda lo que sucedió ayer y automáticamente trago saliva.FlashbackDylan toma mi mano y tira de mi hasta su coche. -Aprovechemos que los abuelos están demasiado locos con su primera nieta -expresa mientras subimos al auto y conduce no se a donde.Ashley empieza a acercarse a sus tres abuelos. Han pedido pasar rato con ella. Menos mi madre, que aún no ha llegado de su viaje.-Sea lo que sea que estés pensando espero que termine en un orgasmo -expreso y me muerdo el labio inferior.-Quién diría que aquel
Ayer al salir de casa de Bruno, todos nos esperaban fuera. No sé si escucharon mis gemidos, pero me importa poco. Rita dijo que ella se encargaría de él, que le haría sufrir bastante. Michel la interrumpió y le dijo que esa era su decisión pero que él no quería saber los detalles. El señor, Leon no dejó de mirarme con un brillo en los ojos. Sé que debía hablar con él, pero fue un día demasiado duro para mí y prefería descansar.Por otra parte, les faltó contarnos cómo fue que lograron estar a salvo del incendio. Tomé a Ashley en brazos.— ¿Podemos hablar... —dijo mi padre pero lo interrumpí.—Sé que debemos conversar —expliqué—. Los cuatro —Miré a Dylan—, pero el día de hoy me ha superado. Necesito descansar, por favor, mañana vayan a casa de Dylan para el desayuno y hablaremos.—Está bien hija —Me besó en la frente Michel—. Nos vemos mañana.Asentí con una leve sonrisa y me marché con Dylan y mi pequeño tormento. ***Me levanto de prisa de la cama para darme una ducha y preparar
Siento un fuerte dolor en el pecho, el día de hoy me ha superado. He perdido a mi padre, el que he visto desde pequeña, el que me cuidó. Quisiera arrancarme este dolor, pero no puedo. Por otra parte, he perdido al hombre que me engendró. Si soy sincera siento algo raro, pues de veras no compartí con él absolutamente nada, ahora entiendo a Dylan, es difícil amar a un padre que nunca estuvo.Voy camino a la casa de Bruno a recoger mis cosas. No puedo seguir a su lado. He vivido tantas cosas que solo necesito ser feliz, estar en paz y bien. Dentro de tanto sufrimiento algo en mí se activa producto a la confesión de Dylan. Lo amo de una manera que jamás podría explicar con palabras. Está vez lucharé contra quien sea necesario con tal de vivir con él este sentimiento. —Espérame aquí Dylan —le digo mientras abro la puerta del coche. Estamos delante de la casa de Bruno.—Ni de coña te dejaré entrar sola —expresa mientras se baja del carro y se para a mi lado. —No quiero una pelea entre us
Me muevo un poco en la cama. La mano me duele. Miro a mi lado, Ashley seguía aún dormida. FlashbackVamos a la clínica a hacernos la prueba, nos dicen que eso tarda de siete a diez días, pero me las apaño para que salga antes. Digamos que mi don con las mujeres ha influido. Me dedico a observar a la pequeña, si que tienes rasgos igualitos a los míos, sonrío.— ¿Cómo le has puesto? —le pregunto a Alessandra.—Ashley —responde. La niña me abre los brazos como las otras veces que me ha tenido de frente. La recibo en los míos. Sin dudas Alessandra es una tormenta en mi mundo, la única que lo ha revolucionado todo más de una vez.En mis planes no estaba tener tanta responsabilidad, mucho menos ser padre, pero tengo a esta pequeña y vuelvo a sentir amor. —Pa...pa —esta es la tercera vez que la escucho decirlo. Provoca que me sienta raro y a la vez feliz.—Como sabe ella... —no termino de hablar, pues Alessandra me interrumpe.—Es raro, pues cuando fuimos al hospital a verte estaba dist
Desde que conocí a la hija de Alessandra algo en mi interior hace que quiera tenerla cerca. Ya se que es una niña, pero, debería odiarla por ser hija de la mujer de mi vida con otro hombre. Sin embargo, me he encariñado con ella. Mi teléfono suena, camino a paso lento hacia él, no tengo el número registrado. —Dime —contesto.—Dylan. —Es Leon—. Necesito que vengas a la estación de policía, nos han detenido.— ¿Por qué motivo? —pregunto—. ¿A quién mas han detenido?—El negocio de los energizantes —responde—. A Michel y a mí. —Estaré ahí cuanto antes —le digo y cuelgo. ***Al llegar, me encuentro con Alessandra. La reja nos separa de ellos, Michel y Leon. Michel me observa, pero no le dirijo la palabra. — ¿Cómo ha pasado esto? —cuestiono serio.—Contenía una droga... —responde furioso Leon—. Michel me ha engañado...—¡Que no tenía idea de eso joder! —expone aún mas furioso Michel—. ¿Con qué motivo haría eso? Lo miro directamente a los ojos, puede haber un motivo...—Además —expone
Me quedo en shock. Dylan no puede ser mi hermano. Me he enamorado de mi hermano.— ¡No puede ser joder! —grito. Estoy hecha furia— ¡Cómo se te ocurre contarme esto ahora! Sabes que me he acostado con mi hermano ¿No? —No lo sabía princesa —Mi papá se acerca, yo me alejo alterada—. ¿Ustedes se han acostado posteriormente de regresar? —Sí —grito—. Estuvimos después. ¡Cómo puede ser que el amor de mi vida lleve mi sangre! Rompo en llanto.—Es el padre de mi hija Michel Swan...— ¡¿Qué?! —dice con asombro.—Como lo oyes —respondo—. No le he hecho prueba de ADN pero cuando me hice el ultrasonido el tiempo de embarazo coincidía con la última vez que estuve con Dylan. Acaso no ves como se parecen.— ¡Lo siento hija! —Él se acerca a mí y yo retrocedo.&Márchate padre —le digo—. Necesito estar sola.***Han pasado más de dos semanas. No he hablado con nadie, solo me ocupo de mi pequeña traviesa. Bruno no me comenta nada del tema, ni siquiera se asombró cuando le dije la noticia. He tenido