La sociedad suele afirmar que un hombre de buen porte, soltero y con una posición económica destacada tiene el poder de conquistar a cualquier mujer que desee. No obstante, pese a la abundancia de admiradoras, Vicenzo Della Rovere Mariani carece de lo más valioso en su vida. Hace algunos años, Vicenzo perdió todo aquello que consideraba esencial para un futuro prometedor: su corazón fue destrozado y los sueños que una vez atesoró se desvanecieron. Tras meses de un doloroso duelo, logró reconstruirse, enfocando su energía en nuevas metas, decisiones más acertadas y una búsqueda implacable del éxito, aunque sus relaciones con mujeres se redujeran a encuentros casuales. Ahora, Vicenzo está a punto de cerrar un acuerdo trascendental que le acercará a sus nuevos objetivos. Sin embargo, no está preparado para lo que el destino le tiene reservado. Un giro inesperado le revelará las verdades más crudas: confiar ciegamente en un futuro asegurado es un engaño, la vida no se compra, y el respeto no se obtiene a base de imposiciones. Un solo instante bastará para cambiar su existencia para siempre.
Leer másMila permanece parada de la mano de su mamá junto al altar adornado de luces, flores tintas, azules, follaje y cientos de diminutas luces. Ambas con vestidos similares y peinados parecidos. Sara había decidido llevar un vestido de top de encaje con manga larga y espalda descubierta, su amplia falta de sifón plisado caía en voladas por la parte trasera, pero esta era cubierta con el velo que tanto ella como él habían elegido para el momento. Un velo del mismo color blanco, como el color de seda antes de ser tintado, y con estrellas bordadas de cristal en él y la orilla adornada del mismo delicado encaje del vestido.Había decidido usar el dije que él le había regalado casi un año atrás. Vicenzo, por su parte, decidió usar el reloj que su prometida le había dado.Sara no podía dejar de ver a Vicenzo de pies a cabeza, si antes le parecía guapo, ahora ante ella se ve exquisitamente apetecible con su traje azul de Prusia, chaleco gris a cuadros y corbata del mismo color azul. En el saco de
El vestido caía en cascada, con cada paso los holanes de organza se deslizaban con una armoniosa parsimonia sobre la falda de tafeta. La melodía lenta de la canción “Antes que al mío” de Los Claxons en el piano da la bienvenida a la entrada nupcial de Gaby tomada del brazo de don Leonardo López, quien desde que la conoció se ha convertido en el padre que nunca tuvo.El pequeño jardín iluminado con velas y flores rosas solo vuelve la imagen aún más tierna posible. Al fondo, un gran círculo de madera decorado con las mismas flores del lugar enmarca la silueta del hombre que tanto la ama. Lalo con su traje gris y corbata rosa pálido, la espera en el altar acompañado de sus padrinos que es nada más y nada menos que los hermanos Della Rovere.Gaby aparece a la vista de Eduardo en el corto pasillo, él siente que el corazón le late más rápido de lo normal. Sus ojos se llenan de lágrimas al verla, su cabello caía en ondas sobre el strapless de encaje del vestido. El velo iba tras el rastro de
En la segunda fila está Kim, quien ha venido a acompañar a Luca, saluda a Sara brevemente y le entrega la invitación de su despedida de soltera, que será en un mes para luego volver a su asiento. El maestro de ceremonias comienza con la conferencia haciendo un resumen sobre lo que acontecerá y cerrando con una frase de Bobby Unser.«El éxito es dónde la preparación y la oportunidad se encuentran» dijo el hombre antes de bajar del podio, invitando a Vicenzo a subir.—Hace exactamente cinco meses tuve un accidente, que muchos de ustedes supieron y que cambió mi vida —comienza diciendo, para sorpresa de muchos y para confirmación de otros, los periodistas estaban asombrados, el frenesí comenzó en sus notas periodísticas—. Fue en medio de la nada dónde una familia me encontró, los López —este señala al sitio donde están sentados los susodichos—. Ellos cuidaron de mí y me ayudaron a sanar. Pero no solo eso, fue en medio de toda la tragedia que probé por primera vez este elixir de las manos
El día acordado para la conferencia de prensa había llegado. Sara había acompañado toda la mañana a Gaby para la prueba de vestido y de damas. Mila irá de pajecita así también estaba con ellas para probarse un vestido. Luego de terminar se dirigieron al hotel donde sería la conferencia y presentación del proyecto que estaba programado justo a las once de la mañana.Por orden de la familia Della Rovere, cada familia mantenía de uno a dos guardaespaldas. Sospechaban que Carlota no está actuando sola, ya que la última semana ha hecho más desastre que antes.Cuando las chicas llegan al lugar ya todos están ahí. Lita había preparado una mezcla especial de su café para la degustación de los asistentes. Lo ocultaba bien, pero en realidad estaba muy nerviosa por la presentación; Leo y Patricia no se quedaban atrás, estaban ansiosos, ya que se encontraban rodeados de personas que no conocían y con un estatus social distinto, simplemente sentían que no encajaban.Por su parte, Anna, como toda u
Eran pasadas las ocho cuando Sara llegó junto a Gaby al Almacén del Bife en la Plaza Andares. Les había comentado a sus compañeras sobre el asunto de la boda y de que su cuñada es nueva en la ciudad. Al saber estas sobre su profesión y dado que andaban buscando una enfermera para el negocio, ofrecieron a la joven que la invitara, así la conocían.Sara ignoraba sobre que estaban buscando una enfermera para el centro e invito a Gaby sin saber que en el caso de ella era más bien una entrevista de trabajo.—¡Chicas, acá! —saluda Martha haciendo señas con la mano para llamar la atención de las jóvenes.En la mesa yacían, Martha, Chayito y una mujer de ojos grises y pelo rizado a quien Sara no conocía.—Buenas noches —saluda Sara al llegar—. Ella es Gaby, mi cuñada.—Mucho gusto, Gaby —se presenta esta y comienza a saludar a las presentes mientras ellas se van presentando.—Ella es mi esposa, Lorena —señala Martha a la mujer junto a ella—. Ella es Sara, la chica de la que te hablé.La joven
Luego de tres días de acampada, la escapada familiar había terminado. Tanto los López como los Della Rovere volvieron a la ciudad para descansar los días que les quedaban de vacaciones.Vicenzo, nada más llegar a casa de su madre, se preparaba para el interrogatorio que esta tenía para él. Sin embargo, se preparó invitando a su primo Luca para que le explicara el plan a proceder en contra de Carlota. Alessio, Stefano y Giovanni estaban con ellos. Este último aún avergonzado por haberla defendido en su momento.—Lo que se necesita es que atraigamos a Carlota —explica Luca con cautela, pues va a explicar el plan a todos—. Es claro que ella está vigilando cada paso de Vicenzo, aún me sorprende que no haya llegado de sorpresa a su pequeño escape.—Sara me dijo en varias ocasiones que sintió que le observaban —confiesa Vicenzo, pues también ha sentido lo mismo—. Estuvimos atentos y aunque no vimos nada, yo también me sentí igual.—Carlota nos lleva mucha delantera, no ha dejado ningún rast
—¿Te gustó? —inquiere Sara dudando en lo que habían hecho la noche anterior—. Lo de anoche —específica.—Por supuesto que me gustó, ¿por qué no habría de hacerlo? —pregunta cuando ve el temor en sus ojos. Lentamente, le acaricia el mentón, deslizando su pulgar por la mandíbula y hasta su mejilla. El amor que de su mirada se escapa no puede pasar desapercibido—. Eres lo mejor que me ha pasado en la vida, eres la mujer que amo y lo de anoche fue mágico a su manera. Permitirte tocarte de la manera en que lo hice, verte disfrutarlo y el que me permitieras ser parte de ello no se compara a nada que haya vivido. Eres y serás siempre lo que más me guste, lo que más desee y lo que más adore.Sara al oírlo contiene la respiración, si bien no habían hecho el amor como ella se ha imaginado y quizás él también. La manera en que él se ha dedicado a acariciarla y hacerle sentir única es para ella, algo que no podría comparar con nada, fue especial.—Sería en todo caso yo quien te pregunte si te ha
Era aún de madrugada cuando Sara sintió escalofríos. La sensación de sentirse observada le llega de repente. Siente temor por Vicenzo y por toda la familia. Había intentado apartar de su mente lo ocurrido hoy, pero una vez que el hombre que ama se quedó dormido boca abajo abrazando la cintura de ella, no pudo dejar de pensar en que la situación fuera muy diferente si Carlota hubiera decidido terminar con su vida.Tiene que hablar con Luca, es necesario que le pongan una escolta a Vicenzo, ya no es seguro que viaje o que ande por ahí solo. Quizás ella no pueda aportar mucho para el sueldo de la escolta, pero siente que debe hacer algo. Metida en si comentarlo con Alessio o su suegra Anna, a quien vio a pesar de la situación de manera muy serena.Las voces de Lita e Mila le llegan a través de la tienda que los cubre. Se desliza de entre los brazos de su amado y se viste para salir con ellas. Cuando revisa el teléfono se percata que se ha quedado sin batería, así que lo mete de nuevo a l
La idea principal era dar una caminata nocturna, Gaby no tenía idea de lo que se avecinaba. La familia López y los Della Rovere emprendieron su “visita guiada” en medio de la noche, entre la espesura del bosque. Los miembros más pequeños iban en carritos de figuras como ardillas, marmotas y caballos.Sara y Vicenzo iban en la parte trasera del séquito, era este quien guiaba el carrito en donde iba Mila ya vestida con una pijama de conejitos y un gorro a juego. A pesar de ser abril, las temperaturas en la noche aún descendían un poco, los mosquitos aparecían al atardecer, pero llegada la noche desaparecían.La persona que los guiaba en su recorrido era un hombre no mayor a cuarenta años, por su apariencia era claro que se ejercitaba. Este lo acompañaba una chica que, al igual que él, se notaba, hacía ejercicio, subían y bajaban las pequeñas lomas sin fatiga alguna, mientras que la gran mayoría de los adultos estaban ya fatigados.La distancia que iban a recorrer no era mucha, si acaso