Valerie Crowel no ha tenido una vida fácil, por cosas del pasado su padre la odia y solo se dedica hacerle la vida imposible, y justo cuando ella cree poder ser feliz circunstancias difíciles llegan a su vida haciéndola vivir cosas horribles y llevándola a lugares inesperados. Entre todas las pruebas que la vida pone en su camino Valerie se da cuenta de que aún en las situaciones más difíciles hay personas que aún en medio del sufrimiento logran hacerte sonreír y que el amor suele venir en empaques diferentes y a veces hasta con regalos inesperados.
Leer másLas cosas entre Magnus y yo estaban cargadas de tensión desde aquella conversación, mi mente no había tenido un solo momento de descanso, sabía que había arruinado la poca confianza que me tenía con mi mentira y eso me carcomía por dentro.Había intentado seguir como si nada hubiera pasado, pero la verdad era que me sentía sofocada por la incertidumbre, sentía que Magnus me tenía en la mira y eso hacía que actuara de manera nerviosa alrededor de él. Alex me había advertido que Magnus no era alguien que se quedara de brazos cruzados cuando algo le molestaba y ahora, después de días sin hablar, cada segundo de silencio me hacía temer lo peor.Esa tarde, mientras caminaba por la zona de entrenamiento, lo vi a lo lejos. Estaba con un grupo de guerreros, su expresión era la de siempre: severa y concentrada. Pero cuando sus ojos se encontraron con los míos, sentí un escalofrío. No había ira en su mirada, pero sí una frialdad que me dolió más de lo que quería admitir.Intenté reunir valor y
Siempre experimente el miedo como un veneno lento que se iba extendiendo por todo mi cuerpo, carcomiéndome desde adentro y creí que esa era la única sensación que sentiría de manera tan horrible pero justo ahora las consecuencias de mis propias acciones demostraban que no era así pues la culpa mezclada con el miedo se iba esparciendo por mi cuerpo multiplicando esa sensación cien veces más.Desde que llegue de aquella heladería no importaba cuántas veces intentara justificarme a mí misma, la verdad era algo que no podía ocultar: le había mentido a Magnus, y lo peor era que lo había hecho sabiendo las consecuencias que eso traería, me deje llevar por el miedo y la inseguridad poniéndome en bandeja de plata para que Magnus investigue mi pasado y toda la versión mal contada de las cosas salgan a la luz.Había visto su expresión endurecerse cuando me confrontó. Sus ojos que ya de por si me miraban con frialdad habían mostrado algo más: decepción. Y esa decepción era la causante de la culp
Ahí estaba él parado viéndose tan intimidante que por un momento me tense, no lo había visto desde hace dos días cuando me visitó en mi habitación.-¿Que haces aquí Valerie? ¿Viniste sola?- Preguntó al no ver a nadie conmigo, no espero ni siquiera a qué le contestara y tomo asiento frente a mi.-No, de hecho vine con Alexander y me trajo a comprar cosas que necesitaba- conteste tratando de que mi voz no sonara afectada por lo que sentía al tenerlo tan cerca de mi.-Estupendo, ¿Y dónde está el ahora?- preguntó de nuevo.«Vaya que es un alfa muy preguntón» Pensé divertida.-Fui a pedir nuestros helados- respondió el susodicho llegándole por detrás. Rodeó a Magnus y me entrego mi helado tomando asiento a un lado de mi.-Gracias- dije emocionada, hace mucho que no comía helado.-De nada, aunque no entiendo cómo te puede gustar ese helado-dijo mirando con una mueca su helado.-¿Que hay de malo con su helado?- preguntó Magnus.-¿No lo hueles?- respondió divertido, Magnus olfateo hacia mi hel
Dos días después de llegar a la casa el dolor físico por fin se va y siento mis fuerzas renovadas, en este corto tiempo no he hecho mucho a decir verdad, solo he estado en mi cuarto recuperándome, Alexander ha estado al pendiente de mi junto a Rose que está última es algo así como la ama de llaves de la casa del alfa, es una señora ya grande pero muy amable y por lo que la he tratado en estos días puedo decir que también es divertida y cariñosa, ella al verme me dijo que estaba muy delgada y que ella personalmente se encargaría de que aumentara un par de kilos, no me ofendió por qué tiene razón estando en las mazmorras y luego en el hospital perdí mucho peso, así que ella ya sido la encargada de darme de comer y yo gustosa me como todo lo que me da.Por otro lado Alex ayer me informó que hoy iríamos al centro de la manada así que me levanté temprano y me puse lo único que tenía que era ropa que él me había prestado.—¿Estás lista?— me pregunta en cuanto entró al salón.—Si, solo quiero
Magnus HoffmanMis sentidos se nublan cuando siento su olor invadiendo cada parte de mi ser, inhalando profundamente intentando gravar su olor en mi mente, hay una extraña sensación que se se extiende por cada centímetro de mi pecho provocando una calidez que nunca había sentido. Las ganas de seguir con mi nariz enterrada inhalando su olor son cada vez más fuertes y me llena de satisfacción sentir el ligero temblor de su cuerpo contra el mío.Decido que ya ha sido suficiente cuando mis encías comienzan a picar justo en la zona de los colmillos y mi lobo empieza a pedir marcarla; al despegar mi cara de su cuello puedo observar mejor cada detalle de su rostro, su piel parece de porcelana y hace un perfecto contraste con sus ojos azules y brillantes, su cabello es un raro contraste de blanco desde la raíz a los hombros y castaño en el resto de su cabello pero extrañamente lo encuentro encantador.Sus manos suben a mis mejillas y las acaricia suavemente, Troyan ronronea dentro de mi al
Valerie.Valerie..Valerie..Valerie..Miró por todos lados buscando de dónde proviene esa voz que se me hace tan conocida.Valerie...La silueta de una mujer apareció en mi campo de visión y con cautela comencé a caminar hacia ella, entre más me acercaba la imagen de aquella mujer se iba haciendo más clara hasta que por fin pude ver su rostro y una felicidad inexplicable se instaló en mi pecho al reconocer a aquella mujer y sin darme cuanta ya había empezado a correr acortando el espacio entre ambas y cuando por fin estuve cerca de ella no dude ni un segundo en arrojarme a sus brazos.—Mami eres tú... ¿Cómo?— hablé balbuceando al soltarla.—Mi niña estás tan grande y hermosa, te pareces tanto a mí— dijo observándome con amor y de verdad como extrañaba que me mirara así.—Lo se mami, amo parecerme a ti — respondí con la voz entrecortada por el mar de sentimientos que me invade.Ella se giro y empezó a caminar haciendo una seña para que la siguiera cosa que hice sin dudar.La felicidad
Heiner.Culpa, dolor y tristeza son los sentimientos que invaden mi ser en estos momentos.La culpa de saber que le di la espalda a mi hermana cuando más me necesitaba está acabando conmigo; han pasado tres días desde que Valerie escapó, todos en la manada saben de lo ocurrido ese día aunque yo sé que la historia que nos dio el alfa Andrew es solo una fachada ,supe que no era verdad al ver el pequeño brazalete que colgaba de su muñeca era el mismo brazalete que Valerie siempre traía consigo por qué era el último regalo que le dio mi madre pero nadie a parte de mi pareció darse cuenta de ese detalle.El cuerpo de Valerie no ha sido encontrado, aquel día que salto del acantilado yo estuve ahí y cuando vi sus intenciones de saltar trate de llegar a ella pero fue muy tarde, ella ya había saltado para cuando llegue a dónde estaba todos vimos como poco a poco se fue hundiendo no lucho contra la corriente solo cerro los ojos y se dejó hundir.Se que ya lo dije pero la culpa me está matando le
Alexander Gallagher. Me encontraba en mi oficina revisando el papeleo que me correspondía este mes aunque por más que intentaba concentrarme no podía, algo me impedía fijar mi atención en lo que hacia y había una pesadez en mi pecho que me agobiaba. Mi teléfono sonó llamando mi atención y atendí de inmediato al ver qué la llamada proveniente era de Christian. —Hey ¿Todo bien?— por alguna razón tenía una intensa necesidad de saber si todo estaba bien con mi hermana. —En realidad no — su voz sonaba rara, no había tratado mucho con él para conocerlo cuando estaba mal pero por su tono era fácil deducirlo —No se cómo decirte esto— un mal presentimiento me invadió junto a un gran temor. —¿Le pasó algo a Amy? ¿Es eso?— pregunté preocupado. Un sollozo se escuchó del otro lado de la línea y eso me alarmó aún más. ~¿Por qué le da tantos rodeos? que lo diga ya de una~ habló Dracco mi lobo con la misma preocupación. Siempre vivía pensando que tenía que estar preparado para cualquie
—Valerie ¿Que hiciste?— exclamó una voz horrorizada detrás de mi. Por más que lo intente no pude contestarle,los sollozos y el dolor no me dejaban hablar. —No...—cuando por fin sentí las fuerzas suficientes para hablar alguien me aparto bruscamente del cuerpo de Amy provocando que cayera hacia atrás, me puse de pie y cuando mire a dónde estaba hace un momento me encontré con la imagen de Christian completamente destrozado,su mirada se paseo por todo el lugar hasta que sus ojos se posaron en mi y un escalofrío recorrió mi cuerpo al ver el sentimiento latente en sus ojos. Odio. Su mirada destellaba odio puro y cuando vi su intención de acercarse a mi instintivamente retrocedí asustada pero no contaba con que uno de los guerreros de la manada se situara detrás de mi impidiendome alejarme más de Christian. —Eres una m*****a asesina— escupió con ira e hizo lo que nunca me espere de él. Me golpeó. La cachetada que me propinó fue tan fuerte que en segundos volví a estar tirada en el pi