Sinopsis Secretos de Traición Emanuel Ferreira, un hombre viudo de 45 años, busca un escape al vacío que dejó la muerte de su esposa. En una relación casual con Georgina López, su seductora y joven secretaria, cree encontrar un respiro. Pero esa ilusión se convierte en pesadilla cuando descubre que Georgina no solo está jugando con él, sino también con su hijo Ismael. Atrapado entre la rabia y el miedo de perder a su hijo, Emanuel decide actuar con inteligencia. En su camino se cruza Verónica Ortiz, una camarera de 40 años, madre soltera y luchadora, quien lo escucha y le ofrece ayuda en el momento más oscuro. Juntos traman un plan para exponer a Georgina, pero mientras las verdades salen a la luz, nuevas emociones florecen entre Emanuel y Verónica. El drama se intensifica cuando Georgina, movida por su sed de venganza, se alía con el exmarido de Verónica. Sin embargo, esta alianza tóxica la lleva a perderlo todo, mientras Emanuel lucha por recuperar a la mujer que le devolvió la esperanza. Secretos de Traición es una historia llena de giros impactantes, traiciones y emociones profundas, donde el amor, la honestidad y la valentía se enfrentan a las sombras del engaño. ¿Puede Emanuel salvar lo más importante de su vida y encontrar una segunda oportunidad en el amor?
Leer másEl mismo sábado, Verónica estaba trabajando en el bar unas horas más , Aunque tenía que quedarse hasta la medianoche, lo que no esperaba era que Emanuel la acompañara. Cuando él llegó, se sentó cerca de ella ,que hoy le tocaba trabajar en la caja de cobranzas y la miró como si todo estuviera bien, como si no existiera nada que los separara. Emanuel la apoyó en su turno, y aunque se notaba que no era su lugar favorito, él estaba ahí por ella. —Me alegra que hayas venido —le dijo Verónica, sonriendo al verlo. —No te preocupes, estaré aquí hasta que salgas —respondió Emanuel, tratando de quitarle la importancia al hecho de que había decidido acompañarla esa noche. Cuando terminó su turno, Emanuel y Verónica salieron del bar. Caminaban por la ciudad, conversando como si todo estuviera en su lugar. Verónica le contó sobre su matrimonio, su fracaso y lo beno que vino después del divorcio,lo joven que había sido cuando se casó, y cómo la vida le dio una lección muy difícil cuando las cos
Era viernes por la tarde cuando Emanuel y Verónica salieron juntos del edificio. Georgina, que estaba esperando en el vestíbulo, los vio en el ascensor. A medida que las puertas se cerraban, notó cómo Emanuel se acercaba a Verónica, la miraba de una manera diferente, una mirada que Georgina no había visto antes. ¿Qué está pasando aquí? pensó, su corazón comenzó a latir más rápido. Había algo raro entre ellos, algo que no encajaba. La forma en que se sonreían, cómo se mantenían tan cerca. Georgina se quedó allí, observando cómo se iban. Su mente comenzó a crear historias, a construir sospechas. Verónica… ¿le está robando algo más que el trabajo? pensó furiosa. En los días anteriores, Emanuel había estado más distante con ella, apenas le dirigía la palabra, y su actitud había cambiado sin explicación. Ya no era el Emanuel que conocía, y eso la enloquecía. Seguro, ahora estaba claro, Verónica lo había conquistado, pensó con rabia. En ese instante, Georgina decidió que no podía quedars
¿Que le pasa ?Llegó el viernes, y Emanuel había logrado esquivar, con una paciencia infinita, todos los intentos de seducción de Georgina López. Ella no lo disimulaba, pero él siempre encontraba la manera de evitar sus avances. Sin embargo, la furia de Georgina crecía a cada momento, aunque intentaba disimularla, su irritación era evidente.Cada vez que veía a Verónica entrar a la oficina de Emanuel, una rabia indescriptible se apoderaba de ella. No solo porque él le dedicara una sonrisa cálida, sino porque parecía tratarla con un respeto que nunca había recibido. Georgina pensaba con frustración: "¿Este viejo qué se cree? ¿Qué tiene ella que no tenga yo? No puede ser que se haya fijado en esa mujer. Tendrá buen cuerpo, sí, lindo pelo, será bonita, pero es una vieja. No se va a comparar conmigo." El desprecio hacia Verónica crecía cada vez más, pero había algo que la atormentaba: el hecho de que Emanuel la tratara de forma diferente.Lo que Georgina no podía entender era qué había ca
En la pequeña cocina de su casa, Verónica y su madre, Gloria, preparaban el café de la tarde. Verónica había llegado temprano de la oficina, con el rostro iluminado por una mezcla de emociones que aún no podía explicar del todo. Con la cafetera chisporroteando suavemente, Verónica se sentó frente a su madre, una mujer de mirada cálida y sabiduría silenciosa, y comenzó a contarle algo que había estado guardando.—Mamá, hay algo que quiero compartir contigo. Se trata de Emanuel, un compañero del trabajo. Es un hombre bueno, sincero, alguien que ha sufrido mucho. Desde que lo conocí, sentí que debía ayudarlo —comenzó Verónica, jugando con la taza entre sus manos.Gloria la observó con interés, notando el brillo en los ojos de su hija mientras hablaba de Emanuel.—¿Qué tipo de ayuda necesita? —preguntó, inclinándose hacia adelante.—Él está pasando por una situación muy complicada —explicó Verónica—. Hay una mujer que le ha hecho mucho daño. Es una historia difícil de creer, mamá. Esta mu
CapítuloLa Encrucijada de IsmaelEl lunes siguiente, Emanuel acompañó a Ismael a hablar con el director de la universidad. Sabía que era crucial manejar la situación con tacto, especialmente después del caos que Georgina había desatado en sus vidas. Al entrar en la oficina del director, Emanuel mantuvo una postura firme pero serena.—Director, mi hijo Ismael tuvo un percance personal que le impidió presentarse al examen la semana pasada. Entendemos la importancia de la responsabilidad académica, pero en este caso, confío en que, si le damos una segunda oportunidad, podrá demostrar su compromiso con sus estudios y con el futuro que hemos planificado para él.El director, un hombre de mirada severa pero justa, escuchó atentamente. Después de unos momentos de reflexión, asintió.—Confío en su criterio, señor Ferreira . Ismael podrá tomar el examen en otra clase esta semana. Espero que aproveche esta oportunidad.Emanuel agradeció al director con una inclinación de cabeza y salió de la o
Georgina estaba furiosa. Su rostro reflejaba una mezcla de rabia e impaciencia, dejando atrás cualquier rastro de la dulce y amable secretaria que solía ser. Necesitaba respuestas, y estaba decidida a conseguirlas de cualquier manera. Observó con atención mientras Verónica se dirigía al baño cercano a su escritorio, esperando el momento oportuno. Aprovechando la ausencia de Verónica, Georgina tomó una llave maestra que siempre guardaba en su cajón, destinada para emergencias, y corrió hacia el baño. Con un movimiento rápido, giró la llave en la cerradura, asegurándose de que Verónica quedara atrapada, incapaz de abrir la puerta desde dentro.Con la seguridad de que Verónica no interrumpiría, Georgina se dirigió directamente a la oficina de Emanuel. Entró con una actitud amorosa, su voz dulce y seductora mientras decía:—Emanuel, mi amor, hace días que no nos vemos. ¿Qué te está pasando? ¿Estás mejor? No quise molestarte porque sabía que estabas lidiando con tus problemas, y no quería
Capítulo: El Camino de Verónica Emanuel observaba a Verónica desenvolverse con naturalidad en la empresa, como si siempre hubiera estado ahí. Su actitud segura y su manera de interactuar con los demás empleados lo impresionaban. A pesar de las dificultades que había enfrentado, Verónica no dejaba que nada la detuviera. Con cada paso que daba en los pasillos de la oficina, irradiaba una determinación que inspiraba respeto y admiración. Ella había estudiado contabilidad y, aunque no pudo terminar la universidad debido a las circunstancias que la vida le impuso, su conocimiento y habilidades eran evidentes. El recuerdo de Diego, a quien su madre apodaba despectivamente "la lacra", se desvanecía cada vez que Verónica hablaba de su pasión por los números y la contabilidad. Emanuel podía ver en sus ojos el deseo de retomar sus estudios algún día, un sueño que había quedado en pausa cuando quedó embarazada de Caro durante el tercer año de la universidad. Mientras caminaban por la empres
Capítulo "Un paso adelante"Emanuel estacionó su auto con cuidado frente al edificio donde vivía Verónica. Había salido unos minutos antes de su casa, pero no sin antes mandarle un mensaje breve:“Estoy yendo, espérame afuera.”Cuando llegó, Verónica ya estaba en la puerta del edificio. Vestía de manera sencilla, pero su porte transmitía confianza. Emanuel observó la zona, una calle humilde pero prolija. Las fachadas eran modestas, pero todo estaba en orden; las personas que pasaban por allí saludaban a Verónica con una mezcla de respeto y afecto.—Buenas días , Verónica. ¿Todo bien? —dijo un hombre mayor al cruzarla con una bolsa de compras.—Todo bien, don Ramón, gracias. Cuídese —respondió ella con una sonrisa.Emanuel lo notó todo: las miradas amables, los gestos de cortesía, la forma en que todos parecían admirarla. Le gustaba ese ambiente y, más aún, cómo Verónica encajaba en él. Era diferente a todo lo que había conocido.—¿Lista para salir? —preguntó Emanuel mientras bajaba d
"El café se enfría como el plan de Georgina"La luz del sol filtrándose por las cortinas despertó a Georgina, pero el frío vacío a su lado fue el verdadero golpe. Ismael no estaba. ¿Había tenido el descaro de irse sin despedirse? Se levantó furiosa, maldiciendo en voz baja mientras recogía sus cosas. Apenas pudo contener el coraje al entrar al baño para ducharse. Se sentía humillada y, para colmo, tenía que pagar la cuenta del hotel.Bajó a recepción con el ceño fruncido, su perfume caro flotando en el aire mientras se acercaba al mostrador. Germán, el recepcionista, le sonrió con una mezcla de burla y resignación.—¿Todo bien, señorita López? —preguntó, pasándole la factura.Georgina apenas le lanzó una mirada.—Sí, claro. Dame esto.Germán no pudo evitar soltar una carcajada mientras procesaba el pago.—Este no es como el padre —comentó con malicia—. Te tocó pagar a ti la cuenta.Georgina apretó los dientes, sacando una tarjeta de crédito, pero al ver que no alcanzaba, tuvo que usar