Me despertΓ© con una energΓa renovada, lista para enfrentar un nuevo dΓa de ensayo en la academia. La emociΓ³n me invadΓa mientras me preparaba, imaginando cΓ³mo mejorarΓamos nuestra interpretaciΓ³n. Al llegar, mi entusiasmo se desvaneciΓ³ al ver a Leonardo tocando el piano junto a una mujer pelirroja. Mi sonrisa se desvaneciΓ³ y me acerquΓ© lentamente.Cuando notaron mi presencia, Leonardo me sonriΓ³ y dijo:βHola, SofΓa. Ella es Vanessa.DirigΓ mi mirada hacia Vanessa y le sonreΓ cortΓ©smente.βHola, mucho gusto.βIgualmente βrespondiΓ³ Vanessa, devolviΓ©ndome la sonrisa. Sin embargo, no pude evitar sentir una incomodidad extraΓ±a. ΒΏQuΓ© hacΓa esa mujer aquΓ?βΒΏLista para ensayar? βpreguntΓ³ Leonardo, mirΓ‘ndome.βClaro βrespondΓ, sacando mi violΓn y comenzando a afinarlo. Mientras lo hacΓa, notΓ© cΓ³mo ellos seguΓan conversando. Vanessa se despidiΓ³ de Leonardo con un beso en la mejilla y me dijo:βAdiΓ³s, SofΓa. Suerte.Con eso, saliΓ³ del auditorio, dejΓ‘ndome con una mezcla de sentimientos que no l
Mientras esperaba, no pude evitar sentirme tan excluida. ObservΓ© cΓ³mo Leonardo y Vanessa se alejaban, sus voces se volvΓan un murmullo distante. Me apoyΓ© contra la pared, tratando de calmar mis pensamientos.DespuΓ©s de unos minutos que parecieron eternos, Leonardo regresΓ³. Su expresiΓ³n era seria, pero tratΓ³ de sonreΓr al verme.βGracias por esperar, SofΓa βdijo, con un tono que intentaba ser casualβ. Vanessa solo necesitaba aclarar algunos detalles personales.AsentΓ, aunque no estaba convencida. La sensaciΓ³n de ser una intrusa en su mundo seguΓa presente.βΒΏTodo bien? βpreguntΓ©, intentando sonar despreocupada.Leonardo me mirΓ³ por un momento antes de responder.βSΓ, todo bien. Vamos, tenemos que seguir practicando.Regresamos al auditorio en silencio, cada uno perdido en sus propios pensamientos. DespuΓ©s de terminar el ensayo, me volvΓ hacia Leonardo con una sonrisa.βHey, ΒΏquieres ir por un cafΓ© conmigo? Me gustarΓa celebrar que estamos progresando bien con la pieza.Leonardo me mi
Mientras Leonardo y yo estΓ‘bamos ensayando, la puerta del auditorio se abriΓ³ y Vanessa entrΓ³. SentΓ un golpe en el estΓ³mago, recordando la sensaciΓ³n de exclusiΓ³n que habΓa experimentado la ΓΊltima vez que la vi con Leonardo.Vanessa se acercΓ³ a nosotros, sonriendo.βHey, Leonardo. ΒΏCΓ³mo va todo?Leonardo se levantΓ³ para saludarla.βVanessa, hey. EstΓ‘bamos ensayando para el concurso.Vanessa me mirΓ³, y por un momento, nuestras miradas se encontraron.βSofΓa, hola βdijo finalmente, con una sonrisa forzada.RespondΓ con un breve saludo, sintiendo una sensaciΓ³n de incomodidad.βΒΏQuΓ© te trae por aquΓ? βpreguntΓ³ Leonardo, invitΓ‘ndola a unirse a nosotros.Vanessa se sentΓ³ en una silla cercana, mirΓ‘ndome con una expresiΓ³n que parecΓa decir "no te preocupes por mΓ".βSolo querΓa ver cΓ³mo iban las cosas βdijo, con una sonrisa inocente.Me sentΓ incΓ³moda, preguntΓ‘ndome quΓ© estaba pasando entre Vanessa y Leonardo.Vanessa se levantΓ³ de su silla y se acercΓ³ al piano.βΒΏPuedo unirme a ustedes? βpreg
LleguΓ© a casa sintiΓ©ndome un poco desanimada despuΓ©s del ensayo. Mi mamΓ‘ me vio entrar y notΓ³ que algo estaba mal.βHola, cariΓ±o, ΒΏquΓ© pasΓ³? βpreguntΓ³, siguiΓ©ndome hasta mi habitaciΓ³n.Me sentΓ© en mi cama y suspirΓ©.βFue un ensayo horrible, mamΓ‘. Una chica del ensayo me hizo sentir como si no fuera lo suficientemente buena. Me dijo que no podΓa seguir su ritmo y que me faltaba pasiΓ³n en mi mΓΊsica.Mi mamΓ‘ se sentΓ³ a mi lado y me abrazΓ³.βAy, cariΓ±o, no te preocupes por lo que esa chica diga. Algunas personas solo tratan de hacer que los demΓ‘s se sientan mal para sentirse mejor ellas mismas.La mirΓ©, buscando consuelo.βPero mamΓ‘, es que ella es muy buena y yo me siento como si no pudiera llegar a su nivel.Mi mamΓ‘ sonriΓ³.βSofΓa, tΓΊ eres una excelente violinista y tienes un talento especial. No te compares con los demΓ‘s, porque cada persona tiene su propio ritmo y estilo. Lo importante es que disfrutes de la mΓΊsica y sigas practicando.Me sentΓ un poco mejor al escuchar las palabras d
Me levantΓ© de mi silla y le dije a Leonardo que iba a buscar una botella de agua.βΒΏQuieres una botella de agua? βle preguntΓ©, tratando de sonar casual.Leonardo levantΓ³ la vista de su partitura y me sonriΓ³.βSΓ, por favor. Gracias, SofΓa.AsentΓ y me dirigΓ hacia la mΓ‘quina de agua. Mientras caminaba, vi a Vanessa y Gabriela sentadas en una banca, hablando y riendo juntas.Me detuve en seco, sorprendida. No podΓa creer que Vanessa y Gabriela estuvieran hablando amigablemente. Siempre habΓa pensado que Vanessa no se acercarΓa a Gabriela debido a su cercanΓa con Leonardo, y tambiΓ©n porque Leonardo y yo Γ©ramos rivales de Gabriela y Alejandro.Pero ahora, aquΓ estaban, hablando y riendo como si fueran amigas. Me sentΓ confundida y un poco molesta. ΒΏPor quΓ© Vanessa estaba siendo amigable con Gabriela? ΒΏNo sabΓa que Gabriela era rival de Leonardo en el mundo de la mΓΊsica?Me acerquΓ© a la mΓ‘quina de agua y me quedΓ© allΓ un momento, tratando de procesar lo que habΓa visto. No sabΓa quΓ© hacer
LeonardoSalΓ del auditorio con el corazΓ³n pesado y la mente llena de pensamientos confusos. La conversaciΓ³n con SofΓa habΓa sido un desastre. No podΓa creer que la hubiera acusado de ser caprichosa e irresponsable. Mientras caminaba por el pasillo vacΓo, me di cuenta de que habΓa sido demasiado duro con ella. Pero, ΒΏquΓ© mΓ‘s podΓa hacer? Me detuve un momento y respirΓ© profundamente. No podΓa dejar de pensar en SofΓa, en cΓ³mo sus ojos se llenaron de lΓ‘grimas y en cΓ³mo se derrumbΓ³ en el suelo. HabΓa algo en ella que me hacΓa sentir cosas que no querΓa admitir. Sentimientos que surgΓan cada vez que la veΓa tocar el violΓn con tanta pasiΓ³n y dedicaciΓ³n. Pero esos sentimientos eran peligrosos. No podΓa permitirme ser dΓ©bil.Mientras seguΓa caminando, recordΓ© las palabras de mi papΓ‘. "Leonardo, no te conformes con menos de lo mejor. Nadie es lo suficientemente bueno para ti." Esas palabras resonaban en mi cabeza una y otra vez. Tal vez SofΓa no era lo suficientemente buena. Tal vez nadie
Por la maΓ±ana, mientras desayunaba, recibΓ un mensaje de mi profesor MartΓnez. Me necesitaba ver en la academia con urgencia. DejΓ© mi desayuno a medias y subΓ a darme un baΓ±o. Me coloquΓ© algo casual: unos jeans claros, una blusa oversize negra y unos tenis negros. TomΓ© una bolsa cruzada, me maquillΓ© un poco y me puse unos lentes de sol oscuros para que no notaran lo sucedido de la noche anterior.Al llegar a la academia, me encontrΓ© con Leonardo en el auditorio, pero esta vez no era para ensayar juntos. βNo quiero hacer esto βdije, cruzΓ‘ndome de brazos.βYo tampoco βcoincidiΓ³ Leonardoβ. No puedo trabajar contigo despuΓ©s de las mentiras que dijiste.Justo entonces, los profesores MartΓnez y Thomson entraron en el auditorio.βΒΏQuΓ© pasa aquΓ? βpreguntΓ³ el profesor MartΓnez.Leonardo y yo explicamos nuestra situaciΓ³n, pero los profesores no estaban dispuestos a escuchar.βLo siento, chicos βdijo el profesor Thomsonβ. Pero no podemos hacer cambios ahora. El concurso estΓ‘ a una semana y lo
Me encontraba sola en el auditorio, sentada con las rodillas en mi pecho, perdida en mis pensamientos. La luz del sol se filtraba a travΓ©s de las ventanas, creando un ambiente cΓ‘lido y acogedor. Pero mi mente estaba lejos de allΓ, sumida en un mar de dudas y sentimientos encontrados.De repente, escuchΓ© pasos detrΓ‘s de mΓ. Me di la vuelta y vi a Leonardo acercΓ‘ndose, su rostro reflejando una mezcla de emociones. Se detuvo frente a mΓ y se sentΓ³ en la silla de al lado, sus ojos buscando los mΓos.βSofΓa, lo siento mucho βdijo, su voz llena de sinceridadβ. Me equivoquΓ© al creer a Vanessa y al no confiar en ti. Me doy cuenta ahora de que fui un tonto al dejar que mis sentimientos de inseguridad me nublaran el juicio.Me mirΓ³ con ojos suplicantes, esperando mi perdΓ³n. Me sentΓ conmovida por su sinceridad y su arrepentimiento.βLo siento tambiΓ©n βrespondΓ, mi voz suaveβ. Me duele que no confiaras en mΓ, pero entiendo que Vanessa te manipulΓ³. UsΓ³ su amistad como escudo. Leonardo asintiΓ³, s