Alexa, es una chica curvy que desde niña ha sufrido bullying y rechazo por su aspecto físico, de pocos amigos y centrada en sus estudios; proviene de una familia llena de secretos y escándalos que terminan por alcanzarla y provocan un revolcón en su vida. No cree en el amor, pero el destino pone no uno sino dos hombres totalmente diferentes en su camino. Uno, el badboy de su clase, un chico alegre un poco impulsivo, alguien de quien jamás pensó enamorarse, quien le ayuda en su proceso de aceptación y lucha contra los trastornos alimenticios. El otro, un hombre pacífico y un poco tímido, quien le aporta serenidad a su vida. Alexa experimentará el amor y la pasión desde dos perspectivas diferentes, mientras lucha contra si misma y los prejuicios de la sociedad.
Leer másLlegamos a nuestro lugar especial, lo miré, toqué su rostro, lo acaricié, quería ver que fuera real, tenía su cabello peinado hacia atrás, sus ojos marrones se iluminaban al mirarme, y recordé todo mi dolor, me lancé sobre él y empecé a golpearlo.—¡Me debes una maldita explicación! —Le grité entre lágrimas.—Lo sé, déjame hablar por favor.Me tomó de las muñecas para evitar mis golpes, bajó lentamente mis brazos y me tomó entre los suyos.—Todo fue obra de mi padre.Lo sabía, ese maldito viejo tenía la culpa de todo.—Desperté un día en una habitación, era enorme y estaba llena de equipos médicos. Todas las paredes eran blancas y el suelo brillante, aterrorizado descubrí que no podía moverme, estaba inválido, mi papá estaba con muchos especialistas a mi alrededor, me sometieron a varias cirugías, tuve dos años de terapia para poder volver a caminar como antes.—Nunca te comunicaste, tu papá dijo que habías muerto.—Lo sé, me tenía vigilado, después que pude volver a caminar intenté e
No sé en qué momento, se pasaron 3 meses...Mamá, Marian y Ana se encargaron de organizar todo, hasta mi vestido lo eligieron ellas, yo no quería nada que ver con ese asunto.Era obvio que no tenía la certeza de querer casarme.Estaba llena de dudas.Meses atrás, nuestro compromiso fue anunciado en la prensa y recibimos llamadas hasta de la familia de mamá, a la cual obviamente no invitaríamos.La última prueba de vestido y maquillaje fue una montaña rusa de emociones para mí, aunque me veía hermosa, no estaba feliz, no podía dejar de pensar en que esto pudo ser con Joel.Pero debía aterrizar, Carlos era un buen hombre y no podía defraudarlo.Todo estaba listo, no podía dar marcha atrás, mamá me botó intranquila y quiso hablar conmigo al respecto.—Nena, ¿Qué pasa? ¿No estás feliz?—No lo sé mamá, siento muchas cosas que no puedo definir.—¿Estás segura que quieres casarte?—La verdad... —hice una pausa y un suspiro se me escapó —No, —proseguí.—No te preocupes mi amor, es normal, me
Debo decir que la pasaba muy bien con Carlos pero definitivamente no lo amaba, por más que hubiera pasado el tiempo Joel seguía siendo el dueño de mi corazón.Aún así me había resignado a que no lo volvería a ver y por eso mismo decidí darle una oportunidad, sin embargo, no sabía hasta cuándo seguiría con esta farsa.Lo quería sí, pero no lo amaba y me sentía culpable por seguirle dando alas y más aún por llevar ya tanto tiempo con él, todos creían que teníamos una relación muy sólida y sí, de cierta manera quise hacerselos creer para que dejaran de preocuparse tanto por mí.El me trataba bien, era muy detallista, pero nunca lo pude ver con otros ojos, era un gran amigo, nada más.Muy esporádicamente teníamos intimidad, no me provocaba deseo, lo hacía por "cumplir" y ya.Se acercaba mi cumpleaños y no quería nada, como en los últimos, pero estaba lejos de imaginar todo lo que sucedería ese día y cómo cambiaría mi vida.Pude percibir por semanas una actitud sospechosa de mis padres, C
Mamá insistía mucho en el tema..."Debes salir y conocer gente, darte una nueva oportunidad"Era tan difícil... Y me daba tanta rabia que no lo entendieran, tener una pareja, definitivamente no estaba en mis planes.Sin embargo, desde niña había soñado con tener una familia, casarme, tener hijos... Por un tiempo, ese sueño había quedado en el olvido, pero al conocer a Joel, todo ese sentimiento regresó con mucha mas fuerza que antes, sentía que con él, cumpliría ese hermoso sueño.Pero todo cambió, aquí estaba casi 4 años después, sin nada de eso, sin una familia, sin su compañía, sin su amor, lo perdí todo y solo queda en mi corazón el dolor de haberlo perdido, culpándome cada día de mi vida, llorando su ausencia cada noche, extrañando sus abrazos, sus susurros, olvidando su voz... Buscando en cada desconocido en la calle sus ojos, su sonrisa...No lo había superado ni lo superaría jamás, el fue, es y será el amor de mi vida.Estaba aburrida de los sermones, de las interminables char
¿Qué pasó?Me sentía avergonzada, sucia, culpable, sentí que había traicionado mis principios... Y a Joel.No sabía qué hacer, no entendía como terminé en la cama con Carlos y solo podía pensar que él se aprovechó de la situación, algo que Joel jamás hubiera hecho.Me levanté, tomé mi ropa y me metí al baño, tomé una ducha rápida, me vestí y me fui a mi casa, ni Ana ni Carlos se dieron cuenta.Todo el camino a casa estuve intentando recordar lo que había sucedido, pero no lo lograba, creo que el llevar tanto sin beber me hizo daño.Llegue y no había nadie, imagino que mis padres estaban trabajando, le envié mensaje a ambos haciéndoles saber que ya estaba en casa y que iba a descansar, no quería preguntas ni conversaciones en ese momento.Sentí no solo traicionar a Joel sino a Ana, ¿cómo pude hacer algo así?Mi teléfono empezó a sonar, era Carlos, no le respondí la llamada, al ver mi evasiva me escribió."Debemos hablar de esto"No respondí.Esto era algo que definitivamente no necesit
Alguien debía acompañar el resto de la noche a Ana, decidí quedarme, no quería regresar a casa, Carlos se marchó pero primero me dió su número por si alguna situación se presentaba.Había un sillón bastante amplio donde me podía acostar y me proporcionaron una cobija.Ana se quedó dormida de inmediato, imagino que por efecto de tantos medicamentos.Yo intentaba dormir, pero me daba vueltas la idea de que ese señor era el padre de Joel, ahora me sentía tonta por no seguirlo para que me diera una explicación.Estaba intranquila, los recuerdos me atormentaban más y más y necesitaba enfrentar a ese señor.Salí del cuarto a dar una vuelta por ahí con la esperanza de encontrarlo pero a esa hora estaba desierto, fui a la cafetería por un café y salí a la terraza a fumar un cigarro.A lo lejos vi movimiento de autos lujosos, y bajaban una silla de ruedas, detrás, estaba el, bajé rápido pero ya no estaban, di al menos 5 vueltas por el hospital pero no lo encontré, indagué pero tampoco me diero
Esperé que terminara de comer y le invite a salir a la pequeña terraza, aceptó sin problema.—Yo quiero mucho a Ana, no soportaría que le pasara algo, —le dije.—Sé perfectamente el vínculo que hay entre ustedes, aunque no he estado presente, siempre estoy pendiente de ella.—Entiendo, debe ser lindo tener un hermano que te apoye.—¿No tienes hermanos?—No, soy hija única.—No es tan bueno, mas si tienes una hermana como Ana, de verdad puede llegar a ser un dolor de cabeza.—Puede ser, pero tendría un apoyo.—Te la regalo, —dijo jocosamente, pude sentir que estaba nervioso aunque intentaba disimular, en lo poco que había visto de el aparentaba ser un hombre duro.—¿Ya le avisaste a tus padres?—Si, pretenden viajar pero les dije que yo me haría cargo, confío en que la cirugía salga bien.—Yo también... —solté un profundo suspiro y no pude evitar mirar al cielo y se me escapó su nombre —Joel.—¿Joel es tu ex?—¿Qué? —Pregunté confundida.—Dijiste su nombre, ¿Es tu ex verdad?—No es mi
Llegué a las 2:45, varios de los voluntarios habían llegado, pero Ana no estaba por ninguna parte, ella solía ser impuntual y yo detestaba eso.Me quedé mirando hacia el frente, a ningún punto en específico, mis manos sudaban, me estaba desesperando, entraría en una crisis de ansiedad, tomé una botella con agua y bebí lentamente, me aferraba a ella con todo mi ser intentando ahogar ese sentimiento.No soporté y regresé al auto, rompí en llanto, me sentía desamparada, Ana no llegaba y no me sentía capaz de cumplir mi labor.Puse mi rostro sobre el timón y me abracé a él, era presa de mis pensamientos y sentimientos, estaba otra vez el pasado comenzando a torturarme.Había estado intentando evadir los recuerdos, pero era algo imposible, después de estos años, la terapia no había funcionado en lo más mínimo; y por mi parte, debo aceptar que no ponía de mi parte para cambiar la situación, siempre trataba de recodar todos los momentos vividos, miraba una y otra vez nuestras fotografías..
Joel siempre había sido tan especial y atento, su corazón destilaba nobleza y amor por quienes lo rodeaban, a pesar de su aspecto de chico malo, logré conocer al verdadero, me confió sus sueños, sus miedos, sus vicios... Se mostró tal cual era ante mí, tuvo muchas facetas que no le enseñó a sus amigos y mucho menos a su padre, solamente lo hacía con la gente correcta, un poco con mis padres, pero solo transparente y sincero conmigo. Ese ser que perdió a su madre cuando a penas era un niño, creció prácticamente solo, con el amor de la nana, que aunque fue muy buena y amorosa, nunca pudo reemplazar a su mamá.Él siempre deseó el apoyo de su padre, solo necesitaba aliento para seguir hacia adelante y no derrumbarse más de lo que ya se encontraba, pero no fue así, encontró rechazo de su parte, imposiciones y un trato déspota. Me queda el consuelo, que de nuestra parte, lo acogimos con amor y lo hicimos parte de nuestro hogar.—Hola —murmuré con la voz quebrada, en el lugar de siempre. —