Mamá insistía mucho en el tema..."Debes salir y conocer gente, darte una nueva oportunidad"Era tan difícil... Y me daba tanta rabia que no lo entendieran, tener una pareja, definitivamente no estaba en mis planes.Sin embargo, desde niña había soñado con tener una familia, casarme, tener hijos... Por un tiempo, ese sueño había quedado en el olvido, pero al conocer a Joel, todo ese sentimiento regresó con mucha mas fuerza que antes, sentía que con él, cumpliría ese hermoso sueño.Pero todo cambió, aquí estaba casi 4 años después, sin nada de eso, sin una familia, sin su compañía, sin su amor, lo perdí todo y solo queda en mi corazón el dolor de haberlo perdido, culpándome cada día de mi vida, llorando su ausencia cada noche, extrañando sus abrazos, sus susurros, olvidando su voz... Buscando en cada desconocido en la calle sus ojos, su sonrisa...No lo había superado ni lo superaría jamás, el fue, es y será el amor de mi vida.Estaba aburrida de los sermones, de las interminables char
Debo decir que la pasaba muy bien con Carlos pero definitivamente no lo amaba, por más que hubiera pasado el tiempo Joel seguía siendo el dueño de mi corazón.Aún así me había resignado a que no lo volvería a ver y por eso mismo decidí darle una oportunidad, sin embargo, no sabía hasta cuándo seguiría con esta farsa.Lo quería sí, pero no lo amaba y me sentía culpable por seguirle dando alas y más aún por llevar ya tanto tiempo con él, todos creían que teníamos una relación muy sólida y sí, de cierta manera quise hacerselos creer para que dejaran de preocuparse tanto por mí.El me trataba bien, era muy detallista, pero nunca lo pude ver con otros ojos, era un gran amigo, nada más.Muy esporádicamente teníamos intimidad, no me provocaba deseo, lo hacía por "cumplir" y ya.Se acercaba mi cumpleaños y no quería nada, como en los últimos, pero estaba lejos de imaginar todo lo que sucedería ese día y cómo cambiaría mi vida.Pude percibir por semanas una actitud sospechosa de mis padres, C
No sé en qué momento, se pasaron 3 meses...Mamá, Marian y Ana se encargaron de organizar todo, hasta mi vestido lo eligieron ellas, yo no quería nada que ver con ese asunto.Era obvio que no tenía la certeza de querer casarme.Estaba llena de dudas.Meses atrás, nuestro compromiso fue anunciado en la prensa y recibimos llamadas hasta de la familia de mamá, a la cual obviamente no invitaríamos.La última prueba de vestido y maquillaje fue una montaña rusa de emociones para mí, aunque me veía hermosa, no estaba feliz, no podía dejar de pensar en que esto pudo ser con Joel.Pero debía aterrizar, Carlos era un buen hombre y no podía defraudarlo.Todo estaba listo, no podía dar marcha atrás, mamá me botó intranquila y quiso hablar conmigo al respecto.—Nena, ¿Qué pasa? ¿No estás feliz?—No lo sé mamá, siento muchas cosas que no puedo definir.—¿Estás segura que quieres casarte?—La verdad... —hice una pausa y un suspiro se me escapó —No, —proseguí.—No te preocupes mi amor, es normal, me
Llegamos a nuestro lugar especial, lo miré, toqué su rostro, lo acaricié, quería ver que fuera real, tenía su cabello peinado hacia atrás, sus ojos marrones se iluminaban al mirarme, y recordé todo mi dolor, me lancé sobre él y empecé a golpearlo.—¡Me debes una maldita explicación! —Le grité entre lágrimas.—Lo sé, déjame hablar por favor.Me tomó de las muñecas para evitar mis golpes, bajó lentamente mis brazos y me tomó entre los suyos.—Todo fue obra de mi padre.Lo sabía, ese maldito viejo tenía la culpa de todo.—Desperté un día en una habitación, era enorme y estaba llena de equipos médicos. Todas las paredes eran blancas y el suelo brillante, aterrorizado descubrí que no podía moverme, estaba inválido, mi papá estaba con muchos especialistas a mi alrededor, me sometieron a varias cirugías, tuve dos años de terapia para poder volver a caminar como antes.—Nunca te comunicaste, tu papá dijo que habías muerto.—Lo sé, me tenía vigilado, después que pude volver a caminar intenté e
El cielo se percibía particularmente hermoso hoy, absolutamente despejado, sin una sola nube en el cielo y un fulminante sol, me provocaba desnudarme y correr hasta el río y sumergirme.A pesar de ello, un cálido viento nos golpeaba el rostro durante esta temporada, el aire de se sentía muy fresco; para mí, era el clima perfecto.Mis compañeros se quejaban del clima y un par de niñas peleaban con el maestro Mora, que se le ocurrió sacarnos a hacer ecuaciones bajo el inclemente sol.Joel de forma jocosa arrendaba a las chicas que saltaban como si el asfalto les quemara los pies. Se puede decir, que era el BADBOY de nuestro salón, lo habían transferido poco antes de iniciar el verano y jamás había cruzado palabra con él.A decir verdad, tenía el tipo de chico malo, con ínfulas de rockero, a mí me parecía guapo, su oscuro cabello que caía coquetamente sobre su rostro, sus perfectas y pobladas cejas enmarcaban perfectamente esos ojos casi negros, todo en conjunto le daba un aire de mister
Nunca he sido una chica que piense y analice las situaciones con cabeza fría, la mayoría de las veces, me dejó llevar por las emociones del momento y por lo general, me equivoco. Mis padres siempre me sermoneaban al respecto, que debía aprender a actuar con calma, que por acelerada era que me salían las cosas mal, que consultara siempre con alguien idóneo y de confianza antes de tomar una decisión final, que dejará de ser tan terca y voluntariosa y me dejara ayudar.Crecí y viví en un pequeño pueblo aledaño a la ciudad, en un país latinoamericano que podría ser cualquiera... en ese país donde tenemos el más exquisito café, el de paisajes maravillosos, el de culturas indígenas, el de acentos y dialectos diferentes, el de variedad de comidas según la región.Con fauna y flora envidiable, el país de las más hermosas flores que cada San Valentín inundan el mundo entero, soy orgullosamente Colombiana, de mi país se habla mucho en el exterior, lamentablemente de las cosas malas, de narco
Siempre tuve la mala fortuna de verme envuelta en líos por estar en el lugar equivocado en el momento equivocado, era algo gracioso, porque yo era tan despistada que podrían estar cometiendo un delito junto a mí y yo ni por enterada me daba. No lo sé, quizás el vivir con mil cosas en la cabeza a la vez me desconectaban a tal punto del mundo que no notaba con facilidad lo que pasaba a mi alrededor, fue así como un día resulté castigada en clase educación física, por haber estado en el mismo lugar que unos chicos que rompieron un par de cristales. El maestro Botero, nos puso a darle 1.000 vueltas a la cancha de básquet, no importó cuántas veces dijera que no tuve nada que ver. Mis piernas me dolían mucho, el esfuerzo que estaba haciendo era demasiado para mí regordete cuerpo, debo decir, que jamás fui amiga del ejercicio, además, desde muy niña, sufría de fuertes crisis asmáticas. Como cosa rara, los malandros del asunto eran Joel, Ariel y Marcos... Los de siempre. Llevé mi cuerpo
Desperté en la enfermería del colegio con un fuerte dolor de cabeza, a mi alrededor estaban la madre superiora, la enfermera y Joel.—¿Qué pasó? —pregunté muy confundida.La madre superiora tomó mi mano.—Recibiste un fuerte golpe en la cabeza, pero no te preocupes, no es grave, todo estará bien.—No siento mi cara.—Es temporal, ahora debes descansar, necesito evaluar un par de cosas antes de llevarte al hospital —me dijo la enfermera.—¿Hospital? ¿No se supone que no es grave?—Por protocolos de la escuela y por ser un golpe en la cabeza, es imprescindible llevarte a hacer un chequeo para descartar cualquier eventualidad que se pueda presentar más adelante, como un hematoma interno o alguna secuela.La enfermera y la madre superiora se salieron de la enfermería y me quedé con Joel, quién no podía ocultar la preocupación de su rostro, lo último que recuerdo fue verlo a él con un balón en las manos con la intención de tirarlo hacia mí, así que decidí preguntarle sí era el quien me hab