Arantxa Olivares tenía todo lo que quería: una exitosa carrera como neurocirujana, un esposo que la adoraba y un futuro prometedor. Pero todo se derrumbó el día de su boda, cuando un disparo acabó con la vida del hombre que la rescató. Desde entonces, Arantxa vive atormentada por el miedo, sin saber quién está detrás de los constantes ataques que sufre. Su única esperanza es Leonardo Santamaría, el hombre que apareció como su salvador una noche, él resulta ser su antiguo amor de juventud. El mismo que la abandonó sin darle explicaciones. Leonardo Santamaría es un ex marine convertido en el dueño de una prestigiosa agencia de seguridad privada. Su trabajo es su pasión y su orgullo, y nunca ha fallado en ninguna misión. Pero hay algo que no puede olvidar: el amor que sintió por Arantxa Olivares, la mujer que le robó el corazón y que luego lo destrozó. No esperaba que ella le pidiera que se casara con él como condición para ofrecerle el trabajo de su guarda espaldas. ¿Podrán Arantxa y Leonardo superar el pasado y confiar de nuevo el uno en el otro? ¿Lograrán descubrir quién quiere matar a Arantxa y por qué? ¿Será este el comienzo de una nueva oportunidad para el amor?
Leer másLa sala estaba repleta de personas que no querían perderse nada sobre el juicio de los hijos de Wyndham, al igual que los reporteros que abarcaban la parte de atrás con sus cámaras y grabadoras para tampoco perder detalle y llevar el juicio a todas partes del país, nunca se había visto a los hijos de un exsenador en tales problemas legales.Durante un año los abogados de Ivana, su hijo y Paul habían buscado la manera de librarlos de la cárcel, fueron hablar con algunos conocidos, pedir favores, sin embargo, nadie había querido estar relacionados con ellos, los habían dejado solos.El fiscal que llevaba el caso sacó a la luz más delitos en los que estaban involucrados a parte de la denuncia de amenazas, intentó de homicidio y privación de la libertad, también se sumó el homicidio de Vicent y de su madre biológica, pues Ivana había atropellado a su hermano y había ordenado que uno de sus hombres averiara el auto donde supuestamente Arantxa debió haber muerto años atrás.También se sumó
No tardaron más que dos días para tener el acta de divorcio en sus manos, con eso cerraban los amargos días que vivió a causa de las amenazas que recibió por parte de sus tíos y primos, todo por el dinero de James Wyndham. Ahora lo único que querían era buscar comenzar una nueva vida, siendo felices teniendo a David con ellos, cada día lo iban conociendo un poco más, era un niño muy inteligente y vivaz para su edad, que no pudieron ocultar que estaban impidiendo que su abuelo se acercara a verlo. Devon había intentado acercarse a ellos, con la justificación de querer ver a David, pero ella no lo quería cerca, le había causado un fuerte dolor cuando supo que él tenía a su hijo y no le había dicho nada, no entendía para que decirle lo que Steven hizo con su hijo hace años, sino pensaba decirle que él lo tenía, que estaba sano y salvo, no podía perdonar los meses de angustia que vivió al no tener ninguna idea de que había hecho Steven. —Creo que debes perdonarlo— le sugirió Leo una no
En cuanto llegó a casa fue recibida por primera vez por un abrazo de su hijo, aquel pequeño que le fue arrebatado de sus brazos cuando acababa de nacer, que no pudo disfrutar como ella hubiera querido, por culpa de Steven y Devon, pero eso ahora no tenía importancia, lo único que quería era ver hacía adelante. Disfrutar del amor de su hijo, de Leonardo y cumplir con ellos, los sueños que quedaron rotos años atrás.Podía sentir que la vida le estaba devolviendo una parte importante, con la que podría ser feliz. —No te imaginas cuanto soñé con este abrazo desde que supe que vivías— aunque estaba llorando, sus lágrimas eran de alegría, por él primer abrazo de su hijo, el primero de muchos— quiero que sepas que nunca te hubiera dejado, tú eres el amor de mi vida…—Lo sé, ya mi tía Allison me lo explicó— levantó la vista para ver a la mujer, para muchas personas debía tal vez odiarla, pero no podía, ella había cuidado de su hijo, lo había rescatado de aquel lugar con la farsa en la que D
En cuanto dejó salir las palabras, abrazó a Arantxa protegiéndola de los vidrios de las ventanas que fueron rotas por los proyectiles que las atravesaron. —Es hora de correr— le ordenó cuando reinaba la confusión en el lugar, la deja ir por delante, cuidando que Valentina, ni nadie más viniera detrás de ellos.Doblaron la esquina, no muy lejos de ellos estaba la puerta que les daría la libertad, al fin Arantxa volvería con él y estaría con su hijo que merecía disfrutar, de pronto de la nada delante de ellos aparecía Valentina, Arantxa da media vuelta intentando alejarse de ella, pero Valentina lo aprovecha para pasar su brazo sobre su cuello y poner en éste un cuchillo.—Si te mueves voy a rebanar su cuello— sus ojos no mentían, estaba disfrutando tener a Arantxa así, a su merced, tener su vida en sus manos— te creíste muy listo, pero lamento decirte que ella este día no saldrá con vida de esta casa…—¿Qué más quieres, ya firmó los papeles ahora ustedes son los dueños de todo? — quiso
La noticia que Ivana tuviera hijos lo sorprendió, según sus informes ella era una mujer soltera, sin un pasado escandaloso, ¿Quiénes eran esos hijos y quién era su padre?Sumergido en sus pensamientos escuchó como se alejaban de la sala y subían a la planta alta, seguramente a sus habitaciones, ya debía salir de ahí, esperar a Ivana Wyndham para seguirla y lo llevaran con Arantxa.Con ellos de regreso, había más movimiento en la casa, se movió como un gato para no poner en alerta a su personal y así al día siguiente sorprenderlos, respiró con tranquilidad, pues seguía con vida, ya al día siguiente la tendría de nuevo en sus brazos. Subió la misma barda y salió de la propiedad, al llegar a su auto miró a Diego que lo había acompañado.—Me tenías preocupado— él simplemente sonrió— por dios de que sirve que lleves auriculares si no vas a responder…—Lo siento, pero tenía que escuchar algo que dijo Ivana— Diego comenzó a tranquilizarse, y le preguntó en silencio que había escuchado— ello
La desesperación no lo dejaba, su cordura estaba al limité sin saber nada de ella, por lo que tenía pensado ingresar esa misma noche en la casa de Wydham para buscarla, ya no podía estar ni un segundo sin ella, sin saber cómo estaba. —Estás seguro de lo que vas hacer— le preguntó Diego que intentaba ingresar en el sistema de seguridad de la casa Wydham.—Si, ya te dije que no puedo quedarme aquí sin hacer nada— por los binoculares observa a los guardias de seguridad que se encuentran postrados en la puerta, analiza sus pocos movimientos, parecen dos halcones mirando por la calle a cada persona que se acerca a la casa— además no me gusta esta excesiva protección.—Te olvidas que James fue senador, además que es uno de los hombres más ricos del país…— no lo había olvidado, por culpa de su dinero tal vez Arantxa estaba en peligro— Leonardo tienes que ver esto. Leonardo fijó su mirada en la pantalla de la computadora, “HA MUERTO EL RECONOCIDO EMPRESARIO JAMES WYDHAM, EX SENADOR DEL PA
Al abrir los ojos la oscuridad del espacio la inunda por completo, la pesadilla aún no ha terminado, sigue en él mismo lugar, sin que Leo hubiera ido por ella. Los días han pasado, tal vez una semana, y eso lo sabe por las veces que ha contado que han traído de comer, la mayor parte de día y de noche la vive ahí recostada.Cuando despertó no sabía si era de día o de noche, pues lo único que había era soledad y oscuridad, su cabeza y partes de su cuerpo dolían, con sus manos exploró la superficie donde se encontraba, parecía una cama, aunque está muy dura, al intentar ponerse de pie para caminar y salir de ahí, se da cuenta que está encadenada a la cama.El pánico y miedo se apoderan de ella, con una nueva punzada de dolor en la cabeza recuerda lo sucedido, descubrir que Devon, él hombre que fue su padre por años, le escondió a su hijo, y además que descubrió en otra mentira, siempre conoció perfectamente a la mujer que fue amante de Steven y por último él estallido, él último recuerdo
Se encontraba al borde de la desesperación, sin tener una sola pista de Arantxa, ni de quien se la había llevado, por primera vez quería destruir al mundo si no le era de vuelta ella, la mujer que tenía su corazón, sin ella no podía dormir, ¿cómo? si no sabía que le estaba pasando, temía cada vez que sonaba su teléfono, pensando que él agente Ramson llamará para darle la peor noticia de su vida. Aquel día cuando bajo con David, vio la entrada de la casa destrozada, se había vuelto inseguro para su hijo y cualquier otra persona, vio la maleta que ya estaba lista con algunas de sus cosas y no dudó en tomarla.David corrió junto a la mujer que lo había cuidado desde que lo rescató del orfanato, no la quería cerca de su hijo, pero no tuvo el corazón para alejarla de ella, él la necesitaba ahora que no sabía a dónde habían llevado a Arantxa.Miró antes de salir a Devon, se acercó poniendo dos dedos sobre su cuello y encontró el pulso, tenía unas heridas mínimas, pero nada de gravedad, así
Arantxa lamentó lo que esa mujer Allison había sufrido a causa de Ann, tal vez ese hubiera sido su destino, si ella estuviera embarazada, pero por desgracia había perdido a su hijo, algo que aún no podía superar.En cuanto escucharon su petición no tardaron sus protestas por parte de los dos, Allison comenzó a llorar con más pesar, a lo contrario de Devon que parecía molesto, ninguna palabra que dijeran la haría cambiar de opinión, ahora que tenía la posibilidad de tenerlo con ella no la dejaría pasar por nadie, era su hijo y él debía estar con ellos, con sus padres. —Hija es mejor que dejes aquí a David— escuchó que decía Devon con angustia— por un tiempo, puede ser traumático para un niño de su edad ser separado de las personas con la que ha vivido.—Tal vez tengas razón, pero quiero a mi hijo conmigo, no puedes entender que por culpa de ustedes no le tenido todos estos años— los miraba con reproche— y por favor Devon deja de llamarme hija.—Por favor no me quiten a mi niño— Alliso