—Entonces… ¿sí me crees? —Pregunto con timidez.
—Siempre.
—¿Por qué? Te he dañado mucho, Archer. Incluso la persona más enamorada, luego de tanta decepción, se da por vencida —reconozco.
—Siempre supe que había un motivo. Sabía que me amabas. Había una razón la suficientemente fuerte para que no me quisieras a tu lado aun cuando me amabas con la misma intensidad con la que yo te amo. Por eso no me daba por vencido contigo, hasta que casi logras convencerme…, desde hace una semana estaba convencido de que tú no me querías y que esas miradas de anhelo que me dabas eran imaginaciones mías.
—¿Me amas o me odias? No logro entenderlo —susurro contra sus labios.
—¿Creerás la respuesta que voy a darte? —responde como yo le respondí al comienzo de nuestra conversación. No espera a que yo responda —. Puedo entender tus motivos, Farah, pero pienso que debiste confiar un poco más en mí y darme más crédito. Independientemente de si era muy joven o no, debiste decirme y que juntos buscáramos una solución. Eso es lo que odio. Siempre piensas que tienes que hacerlo todo sola, cuando claramente no lo estás…, ni siquiera pensaste en mi cuando nuestra hija enfermó, sé que tiene pelucas, y sus propias palabras lo confirmaron. Ella dice que está bien ya. Necesito oírlo de tus labios.
Asiento con mi cabeza.
—Está bien, pero…, la leucemia puede volver a aparecer. Nuestra podría tener una recaída. Es eso por lo que vivimos en Los Ángeles. No se trata solo de esconderla de ti y de esa mujer, se trata de que allá está la clínica donde fue atendida desde que nació, cuando se enfermó y recuperó. Allá está su expediente y se siguen las citas mensuales.
—Yo debí haber pasado por todo eso con ustedes —su voz se le quiebra y solloza. Sin pedirle permiso, tomo su cuello y lo atraigo hacia mí. Lo consuelo lo mejor que puedo, mientras mi corazón se hunde cada vez más.
—Lo siento. Lo siento mucho, de verdad, estuve por venir a buscarte muchas veces, en una incluso viajé y me presenté en tu casa. ¿Te acuerdas? Hace tres años.
—Mi abuela te sacó de allí y no nos dejó siquiera saludarnos… ¡Dios! ¡Debí haber sospechado de ella!
—Tengo miedo, Archer…, ahora que todo se sabe, estoy aterrada.
—No tienes que estarlo. Ella no le pondrá un dedo encima a mi hija.
—Es que no entiendes… Ella no solo me amenazó con Estrella. Se trata de ti. No le importa que seas su nieto, si tú llegas a aceptar a Estrella, no va a perdonártelo. Te hará daño. Me lo dijo. Por eso tampoco te dije nada, tenía miedo de que te hiciera algo.
—No va a hacerme nada…
—¿Cómo lo sabes?
—Simplemente lo sé.
—Te amo. Eres el único hombre de mi vida, Archer. Perdóname…
Lo miro con fijeza y aunque sus ojos siguen tristes y él se ve un poco desanimado, se acerca y vuelve a abrazarme.
—Aún queda mucho que hablar, Farah, pero estoy demasiado cansado. El agotamiento mental pesa mucho más, incluso que el físico.
—Lo sé. Tómate todo el tiempo que necesites, Archer. Yo lo entiendo. —Soy la única culpable de todo. Debo aceptar la decisión que sea que Archer tome y ahorrarme mis opiniones —. Voy donde Aarón a ver a Estrella. Me iré a mi departamento con ella, puedes venir y estar junto a ella, puedes ir en la mañana, o pueden hacer planes, lo que quieras, solo… protégela.
—Prométeme que no te la llevarás… —su voz suena a súplica.
—No tiene sentido si ya lo sabes todo.
Él tan solo asiente y yo doy media vuelta.
La verdad es que todo salió mejor de lo pensado. Pero sabía que sería así. Archer es una de las mejores personas que conozco y no me haría el daño que yo le hice a él. Es por eso que sé que no lo merezco.
Incluso ahora que todo se sabe, sé y entiendo que, a estas alturas, él debería estar con alguien que sí lo merezca, lo valore y no le mienta como lo he hecho yo todos estos años.
Sin embargo, pueden pasar muchas cosas que te lleven a alejarte de la persona a la que amas, pero cuando son el uno para el otro, ni por todos los problemas del mundo, acaban separados.
—Te odio —esa frase me paraliza en mi intento de huida.
—Lo sé… —digo con resignación.
—Pero te amo más de lo que te odio.
—Eso también lo sé.
Volteo y mi respiración queda atrapada en mis pulmones cuando lo veo estar solo un paso de distancia de mí.
—Tenemos una hija, Farah…
Toma mis manos entre las suyas.
—La tenemos.
—Es mía. Yo soy su padre.
Sus ojos brillan de manera deslumbrante. Su verde se intensifica y lamo mis labios cuando sus ojos miran los míos.
—No quisiera otro padre para ella —admito.
—Bien. Porque no permitiré que tenga algún otro.
¿Qué?
—Arc…
Su nombre muere en mi boca cuando me ataca con la suya. De manera rápida, me hace subir a ahorcadas a su pecho y rodear su cintura con mis piernas. Su cuello es sujetado con mis brazos y mis labios corresponden al escrutinio de los suyos.
¡Jodido Dios! ¡Cuánto necesitaba esto!
—Creí que nunca más probaría tus labios… —jadeo en medio del beso.
Con una mano aprieta mi mandíbula haciéndome abrir más mi boca y así profundizar nuestra comida de boca. Su lengua se descontrola tocando la mía y cuando siento la mano que le quedaba libre posarse en mi trasero, aprieto más su cuerpo hacia mí.
—Mía…, tú y Estrella, ambas son mías.
—Siempre ha sido y siempre será así —no me importa si eso hace que crezca su ego y se vuelva un imbécil como Ángel. Así lo seguiré amando. Siempre.
—Ya no estás sola, Farah. A partir de ahora me dejarás tomar el papel que me corresponde y te relajarás un poco. Me toca a mí proteger a esta familia.
Y, aunque todo mi cuerpo se estremece en miedo, asiento y confío.
Conozco a Archer. Si él dice que estaremos bien, sé que así será.
Puede que pasemos por algunas cosas más, que ya sean fuertes o no tan fuertes, sé que, sabremos apoyarnos y protegernos. Juntos.
Ya vamos por la mitad de la historia!!!!!
Jezabel convence a Estrella y a Rebeka de no permitir a Archer casarse.La chica manejaba mientras sus labios se curvaban en una enorme sonrisa y su mano derecha se movía de lado a lado al ritmo de la canción.Rebeka iba relajada, tranquila, sabiendo que ya estaba por acabar el peligro de ser descubiertas. Ya iban de camino al aeropuerto. Estaba todo planeado: llegarían hoy y esperarían a que Farah se les juntara el día de mañana. Serían la misma familia de tres que se apoyaba y hacían locuras que hicieran sonreír a la pequeña Estrella. Esa niña era todo lo que a su mamá y su abuela les importaba.Así que todo iba bien…Muy bien.De hecho, iba demasiado bien para ser verdad.La paz acabó en cuanto notó como, a pesar de que Jezabel iba cantando y bailando a todo pulmón mientras manejaba, y de cómo la pequeña estrella sonreía y seguía el coro sin dejar de peinarse la peluca color violeta que tenía sobre su cabeza; la chica detrás del volante se desviaba de camino, tomando la ruta de la
Stefan ve a Archer y a Farah durmiendo en su cama.—Todavía tengo miedo de que esto sea un sueño y que cuando despierte tu hayas reaccionado de peor manera y me odies para siempre —admite Farah mirando a Archer con nada más que adoración.La expresión del chico se suaviza y sonríe, dejando un casto beso en sus labios y tomándola de la mano para guiarla hacia el mueble donde primero se sienta él y la hace acomodarse entre sus piernas.—Nunca te había dicho que te odiaba porque pensaba que era algo que jamás sentiría por ti, y no voy a mentirte, Farah, en cuanto supe de la existencia de Estrella, te odié. Te lo dije de manera directa, porque puedo ser tímido para algunas cosas, pero no me gustan las mentiras, y lo sabes…, sin embargo, puede que te haya odiado en ese instante, y puede que todavía sienta que me quitaste mucho, pero también sé que vas a recompensarlo, conmigo y con Estrella. El odio que pude sentir por ti no duró ni dos horas, y es demasiado obvio que eso pasa cuando es im
27 de febrero de 2022.Archer Alarcón.—No creo que sea prudente que lleguemos juntos… —dice Farah al terminar de tragar un bocado de uno de los dos sándwiches que le preparé —. Es decir, sé que todo está bien…, o eso creo —se corrige —, pero ¿no te parece muy apresurado un ‘’nosotros’’?Frunzo el ceño y vuelvo a terminar de preparar mi sándwich, sobre todo cuando la estaba mirando como un idiota que ahora no quiere ver nada más que no sea ella. Ella y esos profundos ojos negros que me recuerdan a un bosque oscuro en el que me he perdido y no hago el más mínimo esfuerzo por ser encontrado. Es un placer vivir en ese bosque para siempre.—¿Crees que nuestros amigos no saben sumar uno más uno? Ninguno de los dos apareció anoche, ni siquiera para saber cómo se encontraba su hija luego de todo el desorden que se armó, cosa que no me enorgullece porque significa que no estoy comenzando mi labor como padre con buen pie… —pongo mis sándwiches listos sobre un plato y me volteo, antes de ir hac
—¿Qué cosa, papi?—Tú, eres perfecta —su sonrisa se amplía mucho más y lleva sus manos también hacia su cabello.—Es cortito, pero me gusta. A veces uso las pelucas porque me gusta usarlas, no porque sean necesarias o porque me de vergüenza mi poco cabello. Me enorgullece porque, como dice mami, significa que soy una guerrera que ha superado algo muuuuuy grande.—En eso estoy totalmente de acuerdo.—Igual, para mí es más dificil superar la escuela que superar la escuela, que superar mi enfermedad. Mami dice que es al revés, pero yo no lo creo.—¿Se te hace muy dificil la escuela?—Sí. La mayor parte del tiempo lo paso en clases virtuales o mi maestra, la tutora designada para mí, viene a casa a darme clases, desde hace dos años, poquitas veces he ido a la escuela.—¿Ella no puede ir al colegio todavía? ¿No puede ir de manera constante? —Le pregunto a Farah.—Se supone que ahora a finales de marzo, que estaría comenzando el primero de los dos cuatrimestres de primaria podría comenzar s
—¿Por qué se supone que mi madre te está dando las gracias? —Pregunta Farah, quien es la única que no se encuentra desayunando. Según ella, el desayuno que le hice esta mañana estuvo más que suficiente; sin embargo, Estrella y yo también desayunamos antes y ahora estamos desayunando de vuelta. Estoy muy orgulloso de mi hija, ¿ya lo había dicho? —Por nada —Responde su madre. —Jezabel tuvo la idea de interrumpir la boda de papá, mami —le comenta Estrella. Yo casi me atraganto con el pedazo de tostada y Rebeka abre los ojos ampliamente al escucharla. —¡Estrella! —Déjala —dice Jezabel, colocándose recta en su asiento y mirando a todos con la barbilla en alto y actitud de ser el ser más imponente del mundo, y en cierta forma, lo era —. Me enorgullece que todos sepan que fue mi idea. —Pedazo de loca… —murmura Ángel, mirando hacia otro lado. Él no ha probado bocado de comida. Dice no tener hambre, lo cual es raro. Suele comer incluso más que yo. —Imbécil —responde ella, cruzándose de br
28 de febrero de 2022Farah Brownbear.—¡Quiero a todo mundo en la sala de juntas! ¡Ahora! —Entro al edificio gritando.Tengo que apretar mis labios con fuerza para no reírme como quisiera. Tengo que aparentar rectitud y seriedad, algo que últimamente me cuesta mucho hacer. Quiero sonreír a cada rato. De solo pensar en el día de ayer mientras miraba a mi hija y su padre jugar, cantar y contarse mil cosas, es imposible no querer estar con los labios ensanchados a cada rato.Sin embargo, también recuerdo las palabras de Archer a la perfección: no debo demostrarle miedo a las personas. Mucho menos si se trata de su abuela, a quien sí le temo, he de decir, pero ella no tiene por qué saberlo. No tiene por qué seguirlo creyendo. Llegó Farah Brownbear, aquella que antes era insolente, aquella a la que algunos denominaban como: ‘’Corazón de hielo’’, o directamente aseguraban que ni corazón tenía.Antes, mi seria, indestructible y firmeza forma de ser se debía a una careta que debía imponer de
Me levanto y me encamino hacia la sala de junta donde todos me esperan. Vuelvo a contenerme para no reírme en sus caras por lo mal y angustiados que se ven. Ellos creen que de verdad regresó la Farah que era una arpía con ellos, que no los dejaba descansar y que no quería más que perfección para su empresa. —Comentaré unas cosas y ordenaré otras —comienzo a decir. Miro la hora en el reloj postrado en la pared sobre mí y volteo a verlos a todos, quienes ahora me miran atentos. —Traigo buenas noticias: más de la mitad del personal que habían despedido han decidido regresar, el resto no lo hizo y se les indemnizó por el mal trato recibido a causa del imbé…, de Edward —me corrijo rápidamente, antes de continuar hablando —. Más manos de obra, menos trabajo —los oigo celebrar y yo sonrío con malicia —, pero eso será a partir del día dos porque hoy nadie se va de acá sin que una segunda revista esté lista para salir mañana mismo. La sala se queda completamente muda. —Es imposible que añ
28 de febrero de 2022Archer AlarcónSiento su cuerpo ponerse rígido en cuánto hago el pedido. Levanta su mirada a la mía y analiza mi rostro, yo frunzo el ceño, esperando a que hable, y pienso que no va a hacerlo.Me gustaría que fuese abierta conmigo en este aspecto, porque a pesar de que soy parte de ese pasado tan hermoso como doloroso, no parezco ser tan fiable o seguro como para ella hablar de eso conmigo.Su rostro perdido me pide disculpas y mis hombros se hunden cuando confirman lo que ya sé: no dirá nada, y no me gusta obligar a las personas a hablar si no lo quieren hacer.Justo cuando estoy por asentir, sintiéndome derrotado, su voz me sorprende:—Necesito estar un poco distanciada para poder hablarte de todo, porque si sigo sentada en tus piernas, y teniendo tu cuerpo a solo un centímetro de mí, voy a llorar a cada segundo, queriendo que me tengas abrazada y nunca terminaré de contarte todo. Va a ser muy dificil.Aun procesando en mi mente todo lo que ha dicho, muevo mi c