Sofia y su hermana Julie, se quedan de un día para otro solas, ya que sus padres mueren, teniendo Sofia que trabajar y luchar por su hermana ya que Julie padece de Leucemia. Aunque la protagonista trabaja en un lujoso hotel como limpiadora, no le llega para pagar todos los gastos que tiene la casa y además las facturas del medico y del hospital de su hermana enferma. Siendo el jefe el que se aprovecha de su situación, reclamandola en su despacho dos veces por semana, aprovechandose de Sofia aun sabiendo que no lo hace por que le guste, lo hace por las necesidades que ella tiene, pero al jefe eso no le importa, lo que el desea es el cuerpo de su empleada, pagando un extra por el servicio y así Sofia puede ir sacando los gastos que conlleva con su hermana enferma, pero un nuevo director llega a ese hotel para reemplazar al que hay sin que ni Sofia ni sus compañeras sepan quien es ¿Qué hara entonces Sofia?¿Seguira siendo la amante del nuevo jefe como lo estaba haciendo hasta a hora? ¿O será el nuevo jefe quien de verdad la ayude sin tener que acostarse con el para complacerlo? ¿De quien realmente será el nuevo ser que viene a complicarle a Sofia mas su situación?
Leer másNada más escuchar lo que Claudia me dijo, termine la llamada volviendo a entrar en el club, me acerque hasta donde estaba mi amiga Sandra, diciéndole al oído lo que pasaba en mi casa y con mi hija, enseguida se levantó del sillón marchandonos las dos del club. — Llama a Mario, él es el único que puede saber algo por la puta de su esposa — me dijo Sandra — Si le ha pedido el divorcio no creo que le digan mucho donde esta mi pequeña — le respondí — Pues es su padre, que haga algo por su hija — me dijo Sandra — Calmate tu y no me pongas más nerviosa a mi por favor Sandra — le dije — ¿No sabes donde te llevo Robert? porque estoy a punto de dar un volantazo e ir yo a buscar a esa bruja — me dijo — Robert me tapo los ojos con una venda, no tengo ni idea donde me llevo, pero Maro si tiene que saberlo — le dije mientras marcaba el numero de telefono de Mario, contestando él enseguida — Dime Sofia, ¿te pasa algo cariño? — me pregunto — Mario han secuestrado a mi hija, Sandra y yo vamos
Por la noche vinieron a mi casa mis amigas Alicia y Viki, siendo mi hija la muñeca que iba de manos en manos, pedimos para cenar pizza, mientras hablábamos y nos reíamos, de tonterías, cuando tocaron al timbre de la casa, me levanté yo para abrir, encontrándome al otro lado de la puerta a Mario— Hola, puedo hablar contigo por favor — me dijo— ¿De que? de cómo vas a educar a mi hija, de como Vanesa la convencerá de que es su madre cuando mi pequeña sea un poco más mayor, ¿de que quieres que hablemos Mario? — pregunte— Por favor Sofía, vamos a dar un paseo y hablemos como dos personas razonables que tienen que solucionar un problema amistosamente — me dijo— Esta bien, espera un segundo, ahora salgo – le dije Entre en el salon donde estaban mis amigas, para coger mi móvil y las llaves de la casa— ¿A dónde vas? yo no iría con él después de lo que te esta haciendo — me dijo Sandra— Solo quiere hablar, ahora vengo, no os vayáis sin mí ¿vale? — les dijeMe marché del salón, salí al po
Una semana, solo una semana después de que Mario y yo hiciéramos el amor en mi cama, vino a casa un hombre muy serio y vestido con un traje muy caro, dándome en la mano una citación del juzgado donde ponía EL SEÑOR MARIO ANGELETTI COMO PADRE BIOLÓGICO DE LA NIÑA GRAZIELA JONES, SOLICITA ::::: LA CUSTODIA TOTAL DE DICHA NIÑA, SIENDO LA AUDIENCIA DE DICHA DEMANDA, DENTRO DE UN MESCuando lei aquello, casi me cai al suelo, mientras entraba en el salon donde estaban Sandra y Claudia, cogiendo mi amiga, dicha hoja de mis manos.— Sera cabron Mario — dijo mi amiga Sandra— Ya me lo avisó y ha cumplido — le dije— La boda con Aaron será dentro de dos semanas, veremos si este imbécil puede con los abogados de Aaron, te juro que lo van a arruinar — me dijo Sandra— No puedo casarme asi Sandra, si me caso será por amor, no por enfrentarme al padre de mi hija – le dije— No lo haces por nada Sofia, solo
Sandra y yo nos despedimos de Claudia marchandonos de casa hacia la calle donde estaba aparcado el coche de David, cuando llegamos vi al lado del marido de mi amiga, a un hombre alto, de pelo castaño claro, con unos preciosos ojos de color azules, espalda ancha y abdomen perfecto ya que vestia con unos pantalones vaqueros y un polo ajustado.— Hola Sofia, te presento a mi primo, Aaron ella es Sofía la amiga de mi mujer — dijo David— Encantado de conocerte, no me habíais dicho David que Sofía era tan preciosa — dijo Aaron besando mi mano— Yo también estoy encantada, David no me habías dicho que tu primo era tan guapo — respondí— Anda los dos, subir ya al coche, me vais a hacer vomitar aquí en medio — nos dijo SandraSubimos los cuatro al coche de David abriendo mi puerta Aaron para que me sentara, sentandose él luego a mi lado. Cuando llegamos al restaurante y entramos, seguimos al camarero que nos recibió en la entrada, abriendo Aaron la silla donde yo me iba a sentar. La cena fue
Un dia estabamos paseando Claudia y yo con mi pequeña en su cochecito, cuando una gran limusina se paro enfrente nuestra mirándonos las dos con cierta extrañeza, ya que vimos bajar de aquel vehículo a Mario, acercándose a donde estábamos las dos con mi hija— Hola Mario, me alegro de ver que ya estas bien ¿como estas? — le pregunté— Estoy bien gracias, Sofia tenemos que hablar muy seriamente tu y yo – me dijo Mario— Está bien como quieras ¿donde quieres que hablemos?— ¿Claudia te puedes encargar de mi hija, mientras hablamos Sofía y yo? — preguntó Mario a Claudia— Si claro, no os preocupéis por ella, no vemos en casa Sofía — me dijo— Por favor Sofía, sube al coche, hablaremos mejor en mi casa, allí no nos molestara nadie — me dijo— Lo siento Mario pero prefiero que hablemos en mi casa si no te importa y que la limusina aparque un poco lejos — le dije, viendo extrañeza en la cara de Mario— De acuerdo, como tu quieras — me dijo Nos marchamos a mi casa los tres con mi pequeña en
Nos íbamos a marchar de la casa Robert y yo, poniéndome la venda en los ojos, cuando ya nos marchamos de la casa, fuera Robert me puso la venda en los ojos, ayudándome a entrar en su coche después. Paró el vehículo en la misma puerta de mi casa, bajando el primero ayudandome a mi despues, me quito la venda de mis ojos, puso su mano en mi mejilla y acercó sus labios a los míos, aunque me retire antes de que sus labios tocaran los míos.— Aun te sigo amando, si quieres deshacerte de esa bruja, acepta mi proposición de matrimonio — me dijo— Antes prefiero morir, que casarme contigo y no me toques mas por favor, adiós — le dije marchándome hacia la entrada de la casaCuando entre en la casa, estaba todo oscuro, me fui a mi dormitorio tumbandome en la cama sin quitarme la ropa, pensando en lo que me había dicho aquella mujer, me levante de la cama, y entre en el dormitorio donde dormía mi pequeña, acaricie su mejilla y le di un beso, quedandome un rato sentada en la mecedora que había al
Cuando mi amiga Sandra y su marido se marcharon, me levanté de la silla y acerque mi cara a la de Mario, bese sus labios y acaricie su mejilla, mientras las lágrimas rodaban por mis mejillas— Te amo, por favor si me estás escuchando te necesito Mario, y tu hija tambien, por favor despierta mi amor, te prometo que nos iremos contigo a vivir, te amo mi amor, por favor cariño, no me dejes, no podría soportar estar sin ti — le dije, volviendo a besarle sus carnosos y bonitos labios,Durante dos días estuve sin irme del hospital bajando solo un momento a la cafetería para llevarme un vaso de café a la planta, ya que dentro de la UVI, no dejaban meter nada de comida. Cada vez que hablaba con el médico que trataba a Mario, me daba buenas noticias, ya que parecía que poco a poco sus constantes vitales se iban recuperando, solo faltaba que despertara y a mi me tendría a su lado cuando eso sucediera. Una noche salí de la UVI, para andar un poco por la planta, cuando de pronto me encontré de fr
Me desperte al dia siguiente por la luz que entraba por la ventana, me levanté de la cama entre en el cuarto de baño para ducharme, volviendo a mi dormitorio y vestirme, después entre en la cocina para hacerme una taza de café y comerme unos deliciosos bollitos que habían, acercandome luego al salon— Hola ¿os pillo despiertas? — escuche la voz de mi amiga Sandra, que en ese mismo momento entraba en casa— Tu que pasa, no sabes que cuando se tiene una noche de bodas, se levanta una tarde y echa un polvo con su estrenado marido – le dije riendome— Ya me ha dejado tu amiga echo polvo, tranquila — me dijo David, sentandose a mi lado en el sofa, riéndonos las dos amigas de el— ¿A qué hora sale vuestro avión? – pregunte— Dentro de cuatro horas Y mi sobri ¿estará durmiendo? — me pregunto mi amiga— Creo que si, después de acostarnos anoche tan tarde, no querrás que madrugue como tu — le dije— Estás muy gruñona esta mañana Sofía, ¿es porque Mario se marchó antes de hora? — me pregunto—
Ya vestida y con ayuda de mis amigas, nos marchamos de aquella habitación hacia la zona de los ascensores, subiendo a uno y bajando hasta la entrada del hospital, viendo enfrente de nosotras a Mario, apoyado en su coche, mientras me miraba sonriendo— Hola cariño, vámonos a casa con nuestra hija — ,me dijo abriendo la puerta de su coche ayudandome a entrar en elUna vez que llegamos a la casa, nada más entrar por la puerta, me fui al salon donde estaba Claudia con mi pequeña en sus brazos, me senté en el sofá para coger a mi niña, pero tenía todavía bastante dolor en el costado, poniendome Claudia a mi hija encima de mis piernas, La abrace sin poder retener las lágrimas que me caían por mis mejillas, abrazandome Claudia— Ya pasó mi niña, estas en casa y con tu hija en brazos — me dijo Claudia— Vale ya de llorar, ahora a recuperarte y asi me podre casar — dijo Sandra— ¿Pero aún no te has casado? —- pregunte— No, tu eres mi madrina y sin ti no hay boda, David ya lo sabia, asi que po