Me marche del despacho de mi jefe, acercandome a donde estaban los ascensores para bajar al parking, ya que mi amiga Sandra me estaba esperando en su coche, salió del ascensor, acercandome a donde estaba mi amiga, viendo que estaba hablando con ella Mario.— Hola ¿nos vamos ya? — le pregunté a mi amiga— Chica que rápido ha sido esta vez, — me dijo con sarcasmo Sandra—Sofia por favor, me gustaría que aceptaras cenar conmigo esta noche, si tu quieres claro — me dijo Mario— Lo siento de verdad Mario, pero no puedo, mañana nos vemos, adios — le dije— Sofía no me conformo, necesito hablar contigo, si no puedes cenar conmigo, vamos a tomar una copa ahora — me dijo, cogiendo mi brazo con su mano— No Mario, y por favor, nunca más te acerques a mí mientras esté trabajando por favor — le dije subiendo al coche de mi amiga Sandra.Sandra arrancó su coche, marchandonos del parking del hotel con dirección a mi casa— ¿Qué quería de ti, ese baboso de John? — preguntó mi amiga— Hacer un trato
Cuando baje del ascensor, me acerque hasta el cuarto de la limpieza donde nos cambiábamos de ropa, viendo todavía dentro a mis compañeras de trabajo acercándose mi amiga Sandra a mi que cogiendo mi brazo con su mano, me llevó con ella fuera del cuarto.— El italiano ese, está loco por ti, ¿has pensado ya lo que te dije ayer? deja las dichosas pastillas, tiratelo y dile luego que estas embarazada — me dijo— Creo que el no dormir bien, te ha trastocado un poco Sandra — le dije riendo— Tu si que estas trastocada, por dejarte manosear por ese cerdo Sofía — me dijo mi amigaMe solté del agarre de mi amiga, entrando otra vez en aquel cuarto para ponerme el uniforme de limpiadora, una vez que ya estaba vestida, cogi mi carro marchandome al pasillo para coger el ascensor que me llevaba a la planta. Una vez que ya estaba en planta, abri la puerta de la primera habitación para limpiarla, cuando escuche a mi jefe detrás de mí— Hola Sofia ¿te has pensado ya la respuesta? las facturas se amonto
Me fui de aquella habitación a la parte donde estaban los ascensores, subí a uno bajando a la planta donde estaba el cuarto de la limpieza, deje el carro, me quite el uniforme poniendo seguidamente mi ropa, cogí mi bolso marchandome de aquel cuarto hacia los ascensores para bajar al parking, donde John mi jefe ya me estaba esperando, acercandome a su coche, me di cuenta de que Mario estaba sentado en su automóvil, me acerque al coche de mi jefe, abriendo el la puerta para que yo me sentara, sentandose él en el asiento del conductor, marchandonos del parking del hotel, hacia la casa donde vivía mi jefe.— Quítate las bragas, me gusta tocar sin estorbos — me dijo— ¿No puedes esperar a que lleguemos a tu casa? — le pregunté— Nadie te va a ver, el garage de mi coche, lleva directamente a mi apartamento y ahora haz lo que te he dicho, quiero oler la esencia de lo que esta noche va a ser mio — me dijoUna vez que me quité las bragas, Jhon me las quitó de la mano, llevándolas con su mano a
A la mañana siguiente, me desperté gracias al despertador ya que me lo tuve que preparar porque sabía que me quedaría dormida por el cansancio que tenía, por pasar unas noches al lado de la cama de mi hermana para controlar la fiebre que de pronto tenía y que sin saber porque, apareció de la nada. Me marché al cuarto de baño, me duche, volviendo al dormitorio secando mi cuerpo con la toalla que cogi del cuarto de baño, me vestí en mi dormitorio, acercandome después hasta la cocina para preparar el desayuno para mi hermana y para mi, cuando poniéndome el café en la taza escuche el timbre de mi casa, dejé la taza que tenía en la mano, encima de la mesa para irme a la entrada de la casa y abrir la puerta, viendo a mi vecina Claudia al otro lado.de la puerta— Buenos días preciosa ¿cómo ha pasado la noche Julie? — preguntó— Bien, pero tiene unas décima de fiebre, asi no creo que le puedan dar la quimio hoy, llamaré desde el hotel y con lo que me digan, te llamo y vendré a recogerla en un
Cuando abri los ojos, me di cuenta de que había un señor que llevaba una bata blanca puesta auscultando mi pecho con un estetoscopio, viendo enfrente de la cama donde yo estaba a Mario mirándonos los dos a los ojos— ¿Cómo estás Sofia? les has dado un buen susto a tus compañeras de trabajo — me dijo el médico— ¿Qué me ha pasado doctor? — pregunte— Tienes una buena gripe encima Sofia, asi que a partir de hoy en casa unos dias, con antibioticos y dentro de una semana te quiero ver por mi consulta — me dijo el doctor— No puedo, tengo que trabajar y además no puedo permitirme pagar la consulta de un médico — le dije sin acordarme del dinero que mis compañeras me dieron— No te preocupes por eso, ya esta todo pagado, ahora lo que quiero es que te cures y sigas mis instrucciones, ya te puedes vestir y marcharte a casa — me dijo el médico— Gracias doctor, lo haré — le dijeMe levanté de aquella cama con la ayuda de Mario, entre en el cuarto de baño para poder vestirme, marchandonos del
Una hora después de marcharse Mario, escrache la puerta de mi casa y hablar a mi hermana con Claudia, me levanté de la cama y como pude llegue hasta el salón ya que la fiebre me estaba subiendo mucho. Cuando por fin llegué al salón, vi a las dos mujeres sentadas en el sofá del salón.— ¿Qué hacéis aquí? ¿se ha suspendido la quimio? —- pregunte— Le han dado cita para otro día, el doctor la ha examinado y me ha dicho que esta muy debil para que aguante la quimio hoy — me dijo ClaudiaClaudia estuvo todo el día cuidandonos a mi hermana y a mí, nos hizo caldo y algo suave de segundo plato, cuando se iba a marchar de mi casa se aseguró antes de que las dos estábamos bien y que mi hermana ya estaba durmiendo. Yo me quedé un rato más en el salón con un vaso de leche bien caliente para tomar las medicaciones que me mando el medico, cuando de pronto escuche tocar el timbre de mi casa, aunque me extrañe que alguien viniera ya que era tarde, me levanté del sofá donde estaba tumbada acercandome
Después de desayunar, nos sentamos mi hermana Julie y yo en el sofá del salón, Mario acababa de marcharse, ya que según nos dijo tenía que hacer algunos recados. Estaba quedándome dormida cuando escuche la melodía de mi movil, me levanté del sofá para ir a mi dormitorio que era donde tenia mi telefono, entre en el dormitorio sentandome en la cama, cogi el móvil mirando que era mi amiga Sandra la que me llamaba— Hola Sandra, ¿cómo vais tú y las demás chicas sin mi? ¿Me echas de menos? — le pregunté— Todo está bien pero dime ¿cómo te encuentras tú?, te echo mucho de menos — me dijo— Estoy mejor, yo tambien te echo de menos y tengo ganas de volver al trabajo, en casa no se que hacer y me aburro muchisimo — le dije— Sofía, ¿ya has pensado en lo que te dije? — me dijo mi amiga— Sandra no voy a quedarme embaraza, olvida esa idea — le respondí— Piensa en que podrías salvar la vida de tu hermana — me contestó— Anda dime ¿que tal las chicas? — le dije— Creo que le quedan pocos días al
Cuando acudí a la cita que la enfermera me dio para recoger los resultados de mis análisis fui sola, ya que si había algo malo no quería que nadie lo supiera, pues ya tenía bastante con la enfermedad de mi hermana. Entre en la clínica muy nerviosa, me acerque a la enfermera que estaba en recepción dándole todos mis datos,— Por favor buenos dias, me llamo Sofia y tengo cita con el doctor — le dije— Si está citada como me comenta, por favor espere en la sala, ahora mismo la atiende el doctor — me dijo la enfermeraMe senté en una de las sillas que habían libres muy nerviosa, hojee algunas de las revistas que había encima de la mesita que tenía enfrente, pero no lei nada, mis nervios me estaban matando— Sofia, por favor sígueme — me dijo la enfermera acercándose a donde yo estabaLa seguí por el pasillo que llevaba hasta la consulta del médico, abriendo la enfermera la puerta para que yo entrara, viendo al médico sentado en su sillón detrás de su mesa.— Hola Sofía, por favor siéntate