La anciana dejó caer unos platos que llevaba en sus manos, sus ojos de asombro deslumbraba pánico. 

- Miroslav?... usted  dice que su apellido es Miroslav?... pero ellos desaparecieron con la revolución?...- preguntó angustiada la mujer. 

Emilio observó el nerviosismo de su abuela. 

- Ocurre algo, abuela?...- preguntó preocupado el joven. 

- No...no... lo que pasa que no escuchaba ese apellido desde hace mucho tiempo...- dijo pensativa la anciana. 

- Bueno, lo que sé es que él es hijo de Benjamin Miroslav, lo tuvo en Italia, y a vuelto a buscar lo suyo, y  entre eso vengarse de mi familia, porque según él, mi familia tuvo algo que ver con la muerte de su esposa e hija...- dijo nerviosa Caroline. 

La mujer abría más los ojos de asombro. 

- Ben... tuvo otro hijo?... preguntó sin querer la mujer.

Emilio se acercó a ella con curiosidad. 

- Abuela... tú los conoces?...- preguntó intrigado Emilio. 

- La verdad... yo trabajaba en la mansión Miroslav, cuando era joven , cuando sucedió la tragedia, nunca pensé que Benjamin Miroslav volviera a casarse y mucho menos que tuviera otro hijo...- dijo pensativa la anciana. 

Caroline miró a Emilio, sintió que la mujer ocultaba algo.

- Señorita Caroline... creo que es tiempo que regrese a su hogar... los Miroslav son personas peligrosas y temo por la seguridad de mi nieto...- dijo preocupada la mujer. 

Emilio abrió los ojos de asombro y se acercó a su abuela. 

- Abuela!!... no!!! ... Caroline todavía no se encuentra en condiciones? No la podemos dejar abandonada !!... - reclamo Emilio. 

Caroline le hizo seña para que no dijera nada más. 

- Emilio... tu abuelita tiene razón...el estar aquí solo los pongo en riesgo... yo sé los alcance de Benoit, no quiero que él les haga daño...- dijo preocupada Caroline. 

Emilio quedó paralizado por lo que dijo Caroline, no quería dejarla ir , se sentía impotente por no saber que hacer.

- Mañana temprano, me puedes llevar a casa?...- preguntó con tristeza Caroline.

Apesar que era una casa humilde se sintió cómoda como nunca, además que comenzo a sentir un cariño por Emilio por protegerla. 

Emilio solo la miró y salió de la casa frustrado. 

- Emilio!!!... a donde vas?...- preguntó preocupada Caroline. 

- Dejelo señorita... es mejor así, para ambos, es lo mejor...- decía la mujer mientras limpiaba los platos rotos. 

En la mansión Real se respiraba un aire de confusión y tristeza. 

- Pero Elizabeth!!... cómo es eso que rompes tu compromiso con Paul?... él te ha estado esperando desde mucho tiempo...pero que locura es esta? ... estamos desesperadas por la desaparición de las muchachas y ahora tú vienes con esto?... que está sucediendo que todo está tan sombrío?...- dijo angustiada la madre de Elizabeth.  

 Elizabeth le dió un abrazo a su madre y le explicó lo que estaba pasando con Paul y Cristina., los ojos de la mujer se llenaron de lágrimas. 

- Que pesadilla!!!... Oh, pobre hija mía...- dijo lamentándose su madre.

- Tranquila madre... pronto todo se resolverá... por favor no te angusties ...- dijo dándole un abrazo a su madre que no paraba de llorar. 

- Hija... iré a ver a la tía Carlota, desde que desapareció Amelia no a querido salir de su habitación. 

Elizabeth asintió con la cabeza y su madre subió a ver Carlota. 

La tia Carlota se encontraba tendía en su cama, su aspecto era lamentable, extrañaba demasiado a su sobrina. 

Vio entrar a Silvia con una expresión sería. 

- Carlota... ya es hora que dejes de lamentarte y actuar...- dijo misteriosa Silvia. 

La mujer la miró confundida. 

- De que hablas Silvia?...- preguntó intrigada Carlota. 

- Esta familia tiene muchos secretos... y eso nos tiene en esta situación lamentable. 

Carlota se enderezó y miró a Silvia con reproche. 

- De que estas hablando... Silvia?... te recuerdo que hicimos un juramento en la tumba de tu hermana...- dijo seriamente Carlota. 

- Claro que lo sé... pero creo que ese secreto nos ha llevado a lo que estamos viviendo...- le respondió Silvia decidida.

- Estas loca!!!... no podemos revelar este secreto!!... está en juego muchas vidas... que ocurrirá si Benoit Miroslav se entera que toda su vida a crecido con una mentira?... se vendrá con todo contra nosotros...- dijo enojada Carlota. 

- Es la única forma de salvar a las muchachas... tu sabes perfectamente que ellas están con él... y tengo miedo que venga por Elizabeth, de hecho ya  saco del juego a Paul...- dijo preocupada Silvia. 

Carlota se levantó y comenzó a caminar por toda la habitación, suspiro profundamente. 

Se volvió a mirar a su prima .

- Si vamos a revelar este secreto primero es hablar con ella... y si ella está de acuerdo... lo haremos...- dijo serio Carlota. 

- Bien... estoy de acuerdo contigo... enviaré a un empleado que la busque...- dijo Silvia mientra se retiraba de la habitación. 

Carlota suspiro profundamente, fue a la ventana para tomar aire cuando observó una sombra en el jardín. 

- A quien estará buscando ahora?... a Elizabeth?... se preguntó Carlota. 

Benoit Miroslav se encontraba en el jardín cuando observó la silueta de  Carlota que lo estaba mirando intensamente. 

- Carlota Real... cómo me había olvidado de ti... mujer intrigante... pero pronto recibirás tu merecido...- dijo Benoit irónico.

El vampiro volvió a revisar la mansión en busca de Caroline, tampoco encontró a Elizabeth, por lo que decidió volver a ver a la empleada, se escabullo entre las habitaciones de los empleados y espero a la muchacha. 

Esta entró cansada y preocupada por no saber nada de su novio, Benoit estaba escondido mientras miraba a la mujer desnudarse. 

Los ojos de Benoit se volvieron rojos y sin previo aviso se lanzó sobre ella, la mujer trató de safarse y gritar, pero Benoit le tapo la boca, la chica era más fuerte que cualquiera mujer que él conociera, se defendió con uñas y dientes, mordió a Benoit en la mano.

- Déjame!!! ... Auxilio!!! Que alguien me ayude!!... - grito la  mujer con fuerza. 

Benoit se sonrió. 

- Vaya, vaya ... realmente eres un fierecilla... - dijo Benoit saliendo del cuarto y dejando a la mujer asustada. 

Los gritos de la muchacha alertaron a los otros empleados que la fueron a ver.

- Gladys!!! Que ocurre? ... porqué estás gritando?...- preguntaron los empleados. 

- Un hombre estaba en mi habitación y quiso abusar de mí...- dijo angustiada la mujer. 

Todos se miraron confundidos. 

- Muchachos!!... revisen el perímetro... el hombre debe todavía estar aquí...- Ordenó Igor el mayordomo. 

Los hombres asintieron con la cabeza y salieron a buscar al atacante.

- Tranquila... ven vamos a mi cuarto...- le sugirió otra empleada. 

Gladys temblaba de miedo. 

- Gladys.... sabes quien fue?...- preguntó Igor. 

- No señor... todo estaba muy oscuro, además me atacó por detrás y no pude ver quien era...- dijo angustiada la mujer. 

- Entiendo... ahora ve a descansar... mañana avisaremos a la señorita Elizabeth...- dijo angustiado Igor. 

La muchacha asintió con la cabeza y se marchó. 

Benoit se encontraba escondido y observó toda la escena, sonrió con burla.

- Pobre muchacha... no sabes lo que te espera...