Emilio se tomaba la cabeza, no podía entender como su abuela y su madre les hicieron sufrir durante tantos años.
- Como es posible... que teniendo un padre nosotros no lo conocimos? ... no privaron de muchas cosas abuela... y no hablo de dinero... nos humillaron por ser huérfanos, la gente fue cruel con nosotros.... hasta hace poco la gente nos menospreciada , tuve que sacar mi personalidad desde pequeño para que nadie se burlara de nosotros... y lo irónico de todo esto... es que el mismo Benoit Miroslav... nuestro hermano... me ha dado un nombre que todos respetan...- dijo con lamentación Emilio.
Su abuela lloraba de arrepentimiento.
- Lo sé hijo... lo siento tanto... si pudiera volver el tiempo atrás... no hubiera permitido que su madre hiciera lo que hizo...- dijo angustiada Ana.
Catalina estaba llorando en una esquina, se sentía engañada , miró la casa por todos lados.
- Con razón... sentía algo familiar en esta casa, mi memoria de niña recordaba esas escaleras donde alguien me alzaba en sus brazos... supongo que era mi padre...- dijo entre sollozos la joven.
Emilio se secó sus lágrimas, miró a su abuela y hermana.
- Ya vengo...- dijo decidido Emilio.
Ana lo miró desconcertada tenía las sospechas de donde iría su nieto.
En la mansión Miroslav, Benoit se paseaba por la sala nervioso, Alfred que lo acompañaba lo miró inquieto.
- Señor... cuál es el siguiente paso?...- preguntó con curiosidad el mayordomo.
- Estoy pensando como acercarme a mis hijos... después de eso entregaras una carta a Elizabeth y nos iremos por un mes... ese fue el trato que hice con Henry...- dijo pensativo Benoit.
Estaban en eso cuando se escuchó un golpe débil en la puerta de la mansión, Alfred miró a Benoit mientras abría la puerta.
Era Emilio, traía una cara de desconcierto, Alfred al verlo se asusto.
- Que ocurre muchacho?... te ves pálido?...- preguntó preocupado Alfred.
- Esta ... el señor Miroslav?...- preguntó nervioso el muchacho.
Alfred lo dejo entrar , el joven comenzó a mirar la mansión Miroslav diferente a como la veía ante, vio a Benoit parado en la sala mirándolo confundido, aunque sabía porque estaba ahí, nunca pensó que Emilio lo buscará.
Benoit se acercó a su hijo nervioso y le puso una mano en los hombros.
- Que ocurre Emilio...- dijo con tono paternal.
Emilio se le llenaron los ojos de lágrimas y en un impulso abrazo a su padre.
Benoit quedo sorprendido por la actitud de Emilio, pero al final igual lo abrazo con fuerza, Benoit trato de controlar sus emociones, para que el muchacho no sospechara nada.
Emilio lo soltó lentamente mientras lo miraba.
- Señor... he descubierto una verdad que lo atañe a usted, a mi hermana y sobretodo a mi...- dijo nervioso Emilio.
Benoit lo invito a sentarse , mientras le indicaba a Alfred traer un vaso de agua.
- Toma asiento Emilio... quiero que estés tranquilo... yo escucharé lo que tengas que decir atentamente...- dijo el vampiro amable.
Emilio de un sorbo tomo toda el agua, después de beber , volvió a mirar a Benoit.
- Señor... es sobre mi madre ... y... su padre...- dijo angustiado el muchacho.
- Te escucho...- dijo su padre tranquilo.
- Hemos descubierto con mi hermana... que mi madre Johana Jackson... fue la esposa de su padre...Benjamin Miroslav...- dijo preocupado Emilio.
Benoit abrió los ojos de sorpresa, fingiendo que no sabía nada de lo que él le decía.
- Queee?... de que estas hablando muchacho?... cómo que tu madre estuvo casada con mi padre?... es absurdo lo que dices !!...- exclamó Benoit.
- Es verdad Señor... mi abuela nos acaba de confesar la verdad... además aquí tengo pruebas de que lo que dijo es cierto...- dijo nervioso mostrandole un certificado de matrimonio y las cartas de Johana.
Benoit tomó los papeles y disimulando molestia los leyó.
- Pero... Johana Jackson... no había muerto junto a su hija?...- preguntó intrigado Benoit.
Emilio suspiro profundamente antes de proseguir.
- Fue una farsa Señor... mi madre se dejó influenciar... y cometió esta atrocidad...- se lamento Emilio.
Benoit disimulando estar sorprendido, caminó por la sala tratando de pensar.
- Lo que me estas contando es algo inverosímil, necesito pensar que hacer... por favor vuelve a tu casa y te prometo que iré por ustedes...- dijo Benoit mientras le indicaba la salida a Emilio.
Emilio con el corazón destrozado se marchó del lugar.
Cuando estuvieron solos con Alfred, Benoit suspiro profundamente de alivio.
- Bien... ahora las cosas serán más fáciles... Alfred necesito que busques al notario, dile que lo espero a las ochos de la noche en mi casa del centro... es hora de resolver este asunto...- dijo Benoit feliz.
En la tarde en la casa de Emilio las cosas estaban tensas con Ana, sus nietos la ignoraron por todo el día.
- Por favor muchachos... no me traten así... se que cometí un error... pero yo los amos con todo el corazón...- se lamentaba la anciana.
- Abuela... necesitamos nuestro espacio... tenemos mucho que procesar...- dijo Catalina molesta.
El timbre la casa sonó y la joven fue abrir la puerta. Era un hombre bajito con lentes que llevaba muchos papeles en una maleta de cuero.
- Señor... en que lo puedo ayudar?...- preguntó con curiosidad Catalina.
- Buenas noches señorita... mi nombre es Jonathan Pierre, soy abogado y notario de la familia Miroslav,el señor Miroslav me ha pedido que venga ...- dijo amable el hombre.
- Oh!!... claro... por favor pase y tome asiento, señor Pierre...- dijo preocupada Catalina.
El hombre entró a la casa y se sentó a esperar a Benoit, después de unos minutos, el timbre volvió a tocar, esta vez fue Emilio abrir la puerta.
Benoit se encontraba junto a Alfred en el umbral de la casa.
- Señor... está aquí?...- preguntó sorprendido el muchacho.
- Dije que vendría o no ?...- dijo sonriente Benoit.
Los dos hombres entraron a la casa, Benoit miró a Catalina que tenía un parecido extraordinario con su madre, ella también lo miró fijamente, era cómo si lo conociera toda la vida.
- Señor Miroslav... traje los papeles que pidió...- dijo el notario con solemnidad.
- Bien... bueno... después de analizar todo lo que mencionaste en mi casa , averiguar por mi cuenta, he llegado a la conclusión que ustedes son los verdaderos Miroslav, por esa razón esta aquí el abogado y notario, para dejar escrito que ustedes son Miroslav y que también merecen una parte cada uno de la fortuna de Benjamin Miroslav, desde ahora en adelante... ustedes dos pasarán a llevar el apellido Miroslav y serán junto conmigo los herederos de la fortuna de Benjamin Miroslav...
Los hermanos se quedaron mirando sorprendido por la actitud de.su supuesto hermano. - Pero... está seguro de lo que está haciendo?...-.preguntó confundido Emilio. Benoit les sonrió con ternura a los dos. - Claro que sí... es una forma de devolver el mal que le han hecho a los dos... de ahora en adelante no serán más unos campesinos que se ganan la vida en los viñedos, si no que serán los dueños absoluto... ahora por favor firmen los documentos para que él abogado pueda ingresar la petición de rectificación al tribunal...- dijo Benoit mientras les mostraba los documentos. Mientras los hermanos firmaban los papeles, llegaron corriendo los pequeños de Catalina, miraron con atención a Benoit, este les sonrió con amor, los niños también le sonrieron, Catalina al ver la mirada insistente de sus hijos, se acercó a ellos . - Niños... vengan!!... les presento a su tío... Benoit Miroslav... saluden por favor...- les pidió Catalina. Los pequeños se acercaron a Benoit y le extendieron su
Había trascurrido dos meses y Benoit no llegaba, Caroline y Amelia tuvieron que posponer sus bodas para darle tiempo a Benoit de llegar, Elizabeth se había convertido en una mujer triste y apática, solo salía a trabajar y llegaba muy de noche, lo hacía para no encontrarse con su familia. - Ya no podemos posponer más las bodas... tendré que hablar con Elizabeth , me siento angustiada al verla tan demacrada...- dijo Caroline. - No es necesario que esperen más... es sus vidas... casense mañana si quieren...- dijo molesta Elizabeth bajando las escaleras. - Hermana... por favor no nos mal interpretes ... solo que... - Por favor Caroline... estás ansiosa por casarte con Emilio ... por mi no se detengan ... en serio no se preocupen por mi... yo estaré bien...- dijo simulando una sonrisa. - En serio?... no quiero que te sientas desplazada prima...- dijo con cariño Amelia. - Por favor chicas!!... no sean condescendiente conmigo... ahora me voy... hagan los arreglos necesarios para qu
Benoit la vio irse , suspiro profundamente y caminó al muelle donde lo esperaba Henry. - Este fin de semana se casan las primas... Cuando le dirás la verdad a Elizabeth?....es una crueldad mantenerla en el limbo...- dijo molesto Henry. - Lo haré!! Solo estoy buscando el momento adecuado.- dijo distraído Benoit. - Te doy solo hasta este domingo, si no ... Benoit Miroslav... Comenzaré con la cacería...- dijo indiferente Henry mientras se marchaba. Benoit quedó quieto mirando el mar . - No quiero romperle el corazón a Elizabeth... No se lo merece pero tendré que hacerlo...- dijo con tristeza Benoit. Mientras tanto en la mansión Real , Silvia había preparado una cena para los novios. Ella con la tía Carlota estaban entretenidas con la cena. - Por fin !! ... Estás niñas se nos casan!!... Hemos esperado una eternidad...- dijo divertida Carlota. - Si... Por fin se casan... Lo único que a empañado está celebración en mi pobre niña... Elizabeth... Si Benoit la deja plantada quedara ma
Los días pasaron y Elizabeth se comporto como siempre, tratando de engañar a todos, Henry la observaba para notar un cambio en ella , pero la vio como siempre, demacrada, salía temprano de casa y llegaba tarde cuando todos ya estaban dormidos. El día antes del matrimonio Elizabeth llegó más temprano y fue a la habitación de Henry, él abrió la puerta y se sorprendió al verla. - Elizabeth?!... que ocurre?...- preguntó con curiosidad Henry. - Necesito hablar contigo... tienes tiempo?... te espero en la biblioteca...- dijo sin emoción la chica. Henry bajo las escaleras confundido, desde aquella vez que ella lo golpeó no le había dirigido la palabra. Elizabeth lo espero sentada en su escritorio, al verla Henry sintió que algo andaba mal. - Aquí estoy...- dijo tranquilo Henry. Elizabeth lo miró de arriba abajo, se levantó de la silla y camino donde él. - Hoy me visitó Benoit...- dijo sin más la muchacha. Henry abrio los ojos de sorpresa. - Y que te dijo?... preguntó con int
- Y usted señor Benoit Miroslav... acepta a la señorita Elizabeth Real como su esposa y promete amarla....hasta que la muerte los separé ?...-preguntó el juez. Benoit miró a Elizabeth con devoción. -.Acepto...hasta la eternidad...- dijo Benoit emocionado. - Bien... con el poder que me confiere la ley... los declaró marido y mujer... puede besar a la novia...- dijo con una sonrisa el juez. Benoit gentilmente descubrió el velo de Elizabeth y la dió un dulce beso que fue correspondido. Alfred junto al testigo firmaron el acta de matrimonio, después de eso el juez se fue dejando solos a Elizabeth y Benoit. El vampiro la llevó al salón mientras Alfred ponía un vals , los novios comenzaron a bailar al sonido de la música, Elizabeth sentía que volaba en los brazos de su esposo. En la mansión Real esperaban a los novios con una orquesta sinfónica, que al llegar los novios comenzaron a tocar igualmente valses. Los cuatros comenzaron a bailar en el salón mientras los invitados apl
En la fiesta de bodas de Caroline y Amelia todo estaba llendo de maravillas, solo Henry que estaba con una sensación extraña. Después de escabullirse de las jóvenes fue en busca del doctor Poe y Santos que estaban disfrutando la fiesta con sus respectivas familias, vieron acercarse a Henry con cara de preocupación. - Doctor... Santos... podemos hablar un momento?...- preguntó ansioso el joven. Los dos hombres se disculparon de sus familiares y siguieron a Henry. - Que ocurre?... porqué tienes ese semblante de preocupación Henry?...- preguntó el doctor Poe. -No he visto a Elizabeth... y es extraño que no esté aquí con su hermana y prima... su madre me dice que no esta en condiciones de disfrutar ninguna fiesta... pero no sé... siento que algo anda mal...-. dijo pensativo Henry. Los dos hombres se miraron sorprendidos. - Y que quieres hacer?...- preguntó Santos intrigado. - Quiero cerciorarme si es cierto que Elizabeth esta en su cuarto... por eso quiero que estén alerta
Dan llegó de prisa junto a Caroline y Amelia, veían como el fuego era incontrolable, los oficiales policiales alejaban a los curiosos, Dan se acercó a Henry que lo encontró desesperado. - Que ha ocurrido aquí!!?... porqué están aquí ustedes?...- preguntó inquieto Dan. - Benoit tenía a Elizabeth...- dijo el doctor Poe. - Tenía?... a que se refiere doctor?..- preguntó confuso Dan. - Benoit dijo que se casó esta noche con Elizabeth, nosotros entramos para detener sus intenciones, pudimos controlarlo pero algo salió mal... Benoit lanzó una antorcha y esta prendió fuego a las cortinas y el infierno se desató... lamentablemente no pudimos salvar a Elizabeth...- explicó el doctor Poe. Dan abrió los ojos de espanto. - Elizabeth... Elizabeth estaba ahí?...- preguntó alarmado Dan. Caroline y Amelia escucharon los que los hombres hablaban, sus semblante cambio de la sorpresa a la de terror. - Noooo!! Mi hermana!! Nooo!!... es un error! Mi hermana está en la mansión Real!!... - gritó c
- Amo!!... Espero que su viaje estuviera a su altura y que no tuviera ningún percance... Todo está listo en su mansión... Señor...- dijo un hombre de mediana edad. Eran las onces de la noche cuando un barco aparcó el muelle en la ciudad de San Juan de la Luz. Un hombre vestido de negro, alto, tez pálida, ojos rojizos , a simple vista parecía un hombre de unos treinta años, su pelo negro ondulado caía en sus hombros ,su elegancia sobrepasaba a cualquier otro hombre del muelle.- Ha pasado mucho tiempo desde que estuve en está ciudad... realmente está cambiada ...- dijo con voz lugubre. Sin decir nada más se subió al carruaje...Al mismo tiempo que se marchaba el carruaje otro venía llegando, unos policías se bajaban de el.- Señor!! ... El capitán del barco nos mandó a llamar ... Oficial Santos- dijo un oficial nervioso. Un hombre de mediana edad se bajó del carruaje , llevaba unos anteojos , su cara estaba cubierta de una barba tupida, era un hombre muy perspicaz, estaba apunto d