Paul miró con asombro al juez, estaba a punto de decirle algo pero Elizabeth le tocó el brazo para tranquilizarlo.
El la miró con pánico pero ella asintió con la cabeza .
Mientras que Cristina estaba sorprendida por la sentencia, está miró a Benoit que tenía una sonrisa de triunfo.
- Bien !!... acabo de un mes ustedes deben estar casados...-ordenó el juez.
Todos los asistentes comenzaron a retirarse mientras murmuraban por lo acontecido.
Dan se sentía impotente por la decisión del juez.
- Lo siento mucho Paul... debí hacer algo más...- le dijo a Paul con impotencia.
- Es mejor así, porque cuando Cristina esté casada con Paul ella tendrá que ser leal a su esposo y puede ser una gran ayuda para saber cuales son las intenciones de Benoit Miroslav...- dijo susurrando Elizabeth.
El doctor Poe asintió con la cabeza como aprobando lo que ella decía.
Benoit se acercó a ellos con cinismo.
- Siento mucho lo sucedido, pero la justicia ha decidido...- dijo tratando de sonar consternado.
Elizabeth lo miro con desprecio, sus ojos eran como dos llamas de fuego, pero mantuvo la calma.
- Señor Miroslav... realmente jugo bien sus cartas...- dijo con sarcasmo Elizabeth.
Este le dió una sonrisa irónica.
Benoit dejo el lugar junto a Cristina, en el carruje ella estaba angustiada por lo sucedido.
- Dime Cristina... cómo quieres que sea su boda?.. - preguntó Benoit.
Cristina lo miró confundida.
- Mi boda?...- preguntó confusión.
- Bueno... te casaras con Paul Philips!! No es cualquier hombre!!... dime como quieres que sea? Te regalaré la boda de tus sueños, como agradecimiento!!...- dijo con alegría Benoit.
- Yo... no sé... señor, no creo que el señor Philips quiera una boda pomposa ... - dijo tristemente la muchacha.
- Jaja... no te preocupes... yo me encargo... ahora debes ir a la modista para que te confecione tu vestido y tu ajuar ... - decía emocionado Benoit, el sacarse encima a Paul le dejaba el camino libre hacia Elizabeth.
Al llegar a su mansión, Alfred lo esperaba en la sala con cara de preocupación.
- Que ocurre Alfred?... porqué esa cara?...- preguntó molesto.
Alfred se acercó a él y le susurro.
- Es la señorita Amelia...- dijo preocupado.
Benoit suspiro con impotencia, estaba contento por ganar esta partida y ahora debía lidiar con Amelia.
- Vamos!!...- Ordenó Benoit , mientras los dos hombres subían a la habitación donde se encontraba Amelia.
Cristina los quedó mirando con curiosidad.
- Que estarán ocultando... o a quien?...- se preguntó con interés.
Al llegar a la habitación, vió a Amelia tendía con los ojos cerrados, parecía que se encontraba en un sueño profundo.
- Que ocurre con Amelia?...- preguntó Benoit con molestia.
- No ha despertado... son dos días que ha estado inconsciente ...- dijo con preocupación Alfred.
Benoit se acercó a la cama y comenzó a observar el bello rostro de Amelia, apesar que no tenía la belleza de sus primas , había algo en ella especial.
- Sería una pena que no despertará... pero bueno por lo menos esta viva ... sigue cuidándola, tengo que arreglar el desastre que tu sobrina provocó, dejó ir a Caroline y al miserable de Gregory... debo buscarla antes que arruine mis planes... Ah!! ayuda a tu sobrina con lo de su vestido de novia...- ordenó Benoit.
- Como usted ordené... señor...- dijo Alfred mientras miraba fijamente a Benoit.
Cuando se fue , Alfred suspiro profundamente.
- Ya se fue señorita Amelia, puede abrí los ojos...- dijo Alfred sonriendo.
Amelia se incorporó y también suspiro.
- Porque me está ayudando Alfred?... si su señor se da cuenta lo que esta haciendo por mi, es capaz de matarlo ...- preguntó con preocupación Amelia.
- No se preocupe por mí... lo importante es que él no la acosara y podrá estar segura... mientras busco la forma de que vuelva con su familia...- dijo decidido Alfred.
- Escuché que Caroline estaba aquí? Eso es verdad?...preguntó con interés Amelia.
Alfred la miró y comenzó a contarle algunas cosas omitiendo la verdadera razón de su condición de Benoit y de él.
Amelia lo escucho atentamente, tenía muchas preguntas pero no quiso preguntarle en ese momento.
- Benoit Miroslav es realmente un sádico...- pensó Amelia.
Mientras tanto en la mansión Real, Elizabeth le había pedido al doctor Poe venir con ella.
- Doctor Poe... le pedí venir porque quería mostrarle algo..- dijo misteriosa Elizabeth.
- Estoy a sus ordenes... que ocurre?... preguntó el doctor Poe intrigado.
En eso la empleada que había estado con Benoit, entró a la sal.
- Mi lady... me mando a llamar?...- preguntó la mujer.
- Si Gladys... por favor Acércate... y quítate por un momento el pañuelo de tu cuello... - pidió Elizabeth.
La empleada obedeció a Elizabeth y se quitó el pañuelo dejando al descubierto las marcas de la mordida que el vampiro le hizo.
El doctor Poe se acercó y comenzó a revisar la mordida.
- Doctor Poe... no le parece extraño que las mismas marcas aparecieron en el cuello de Caroline y Paul? Ahora Gladys tiene una de ellas... acaso estamos siendo invadidos por un animal o insectos que dejan ese tipo de mordida?...- preguntó angustiada Elizabeth.
El doctor Poe no sabía que responder a esa pregunta? Solo miró a Elizabeth con atención.
- Señorita Elizabeth... todavía estamos investigando este asunto, para nosotros es importante llegar al meollo de este enigma... por eso le pido paciencia por favor, ahora me deja hacer unas preguntas a su empleada?... preguntó el doctor Poe.
Elizabeth asintió con la cabeza.
El doctor Poe miró a la chica con atención.
- Señorita... usted recuerda como se hizo esa herida en el cuello?...- preguntó con interés el doctor Poe.
La chica negó con la cabeza.
- No doctor... no recuerdo nada... solo que pasé mala noche, teniendo sueños extraños...- dijo la empleada confundida.
- Que sueños extraños?...- preguntó interesado el doctor Poe.
La muchacha se coloco colorada por la vergüenza que le producía el sueño que supuestamente tuvo.
- Bueno... no lo recuerdo mucho , solo que había un hombre, pero no recuerdo más...- mintió Gladys.
El doctor Poe la observó detenidamente, sabía que estaba mintiendo, pero no insistió.
- Esta bien... pero si recuerda algo importante de su sueño le pido hacérmelo saber...- le pidió el doctor Poe.
- Si señor...lo haré...
- Que está pasando doctor? ... a que se debe tanto misterio?... tiene que ver con lo que mi bisabuelo estaba investigando?...- preguntó confundida Elizabeth. El doctor Poe la miró con curiosidad. - Que estaba investigando el Conde Real?...- preguntó con interés el doctor. - Bueno... algo sobre seres inmortales ... vampiros...- dijo Elizabeth tranquilamente. El doctor Poe se puso nervioso. - Y que estaba investigando específicamente?...- preguntó el doctor Poe. - La verdad no entendí mucho, pero Dan me explico un poco de que se trata y lo que más me llamó la atención es que para poder vivir necesita sangre humana, eso es cierto?...- preguntó confundida Elizabeth. El doctor se rascó la cabeza, no sabía cómo salir del tema, para él todavía no era el momento de revelar la verdadera identidad de Benoit Miroslav. - Cómo le dije ... pronto recibirá todas las respuestas a sus preguntas... no único que le pido que se mantenga alejada lo más posible de Benoit Miroslav... él es
La anciana dejó caer unos platos que llevaba en sus manos, sus ojos de asombro deslumbraba pánico. - Miroslav?... usted dice que su apellido es Miroslav?... pero ellos desaparecieron con la revolución?...- preguntó angustiada la mujer. Emilio observó el nerviosismo de su abuela. - Ocurre algo, abuela?...- preguntó preocupado el joven. - No...no... lo que pasa que no escuchaba ese apellido desde hace mucho tiempo...- dijo pensativa la anciana. - Bueno, lo que sé es que él es hijo de Benjamin Miroslav, lo tuvo en Italia, y a vuelto a buscar lo suyo, y entre eso vengarse de mi familia, porque según él, mi familia tuvo algo que ver con la muerte de su esposa e hija...- dijo nerviosa Caroline. La mujer abría más los ojos de asombro. - Ben... tuvo otro hijo?... preguntó sin querer la mujer. Emilio se acercó a ella con curiosidad. - Abuela... tú los conoces?...- preguntó intrigado Emilio. - La verdad... yo trabajaba en la mansión Miroslav, cuando era joven , cuando sucedi
La noche estaba iluminaba por una luna llena, el aire refrescaba , Caroline salió a buscar a Emilio, este no había llegado a cenar y eso preocupó a la mujer. Emilio se encontraba sentado en un tronco mirando la laguna que quedaba cerca de su casa. Su expresión era de tristeza y frustración, se había enamorado a primera vista de Caroline, aunque sabía que ella no correspondía a esos sentimientos. Sintió unos pasos atrás de él, se dio vuelta y vio a Caroline acercándose, su hermosa figura y su cabellera rojiza la hacía ver una diosa griega. Los ojos de Emilio se iluminaron al verla. - Caroline...- susurró para si. La muchacha se acercó con una sonrisa amable. - Estabas aquí?... estábamos preocupadas por tí, no fuiste a cenar... lamento mucho ponerte en esta situación...- dijo Caroline lamentándose. Emilio se levantó y se acercó a ella, el muchacho era alto y musculoso, Caroline le llegaba a los hombros. Por un momento la muchacha se sintió nerviosa por la presencia del hom
Benoit Miroslav estuvo buscando a Caroline toda la noche, sentía mucha frustración por no atraparla. - No estás? ... no es posible que no te encuentre?... Acaso ese muchacho te está escondiendo?...- pensó Benoit. Salió rápido al campo para volver a ver a Emilio, los campesinos ya estaban trabajando, observó a la gente y no lo vió por ningún lado. Se acercó a un hombre mayor para averiguar dónde vivía Emilio. - Señor... ando en busca de un joven, Emilio Jackson... pero no lo encuentro?... usted sabe si vino a trabajar hoy?...- preguntó amablemente Benoit. El anciano lo miró con curiosidad. - Porque anda buscando a Emilio?... él pidió permiso para ausentarse hoy...- dijo el hombre inquieto. - Oh!! .. que pena... quería agradecerle por una información que me dió ayer... usted sabe donde vive?...- preguntó mientras sacaba unas monedas de plata. El anciano abrió los ojos de avaricia, trago salivar y miró con entusiasmo a Benoit. - Patrón!!... yo puedo decirle donde vive si
Al llegar a la mansión Miroslav, Benoit llevó a Caroline a la habitación donde se encontraba Amelia. Caroline se asusto al verla tendida en la cama , que se acercó a ella preocupada. - Que le has hecho?!!... porqué esta así?...- preguntó molesta Caroline. Benoit le sonrió con ironía. - La tonta de tu prima se cayó por la ventana y se lastimó la cabeza, pero no te preocupes, ella está bien... cierto Amelia?...- preguntó con burla. Caroline lo miró confundida. - Bueno... Las dejaré a solas para que conversen... y Amelia no te cansas de estar dormida?...- volvió a burlarse. Benoit salió de la habitación con una sonrisa misteriosa. Amelia abrió sus ojos y miró a Caroline, se levantó de la cama y las dos primas se abrazaron. - Prima!! Estás bien?...- preguntó preocupada Caroline. - Uf!! Si estoy bien... solo que me estado haciendo la desmayada para que Benoit no me toque, pero es más astuto de lo que pensé...- se lamento Amelia. Amelia le sonrió con ternura a su prima mi
Amelia comenzó a dar vueltas en su cabeza lo que su prima le contó sobre Benoit Miroslav. Por alguna extraña razón se había olvidado que él mismo le había confirmado que él era un vampiro, se sentó en la cama con la boca abierta y los ojos de espanto. - Tienes razón Caroline... Benoit Miroslav es un vampiro...- dijo preocupada. Caroline frunció el seño de confusión. - A que te refieres? Cómo lo sabes?...- preguntó con interés. Amelia la miró con pánico y se tomó las manos con nerviosismo. - La noche que me secuestró , el mismo me lo dijó, sus ojos se pusieron rojo como el fuego, era cómo mirar dos llamas y unos colmillos aparecieron en su boca...- decía Amelia con terror. Caroline la miró con asombro. - Entonces estamos en mano de un monstruo... Amelia estamos realmente en peligro... tenemos que pensar muy bien cómo actuar con él...cualquier movimiento en falso nos puede llevar a la muerte...- se lamento Caroline. En la mansión Real Elizabeth se dió cuenta que Benoit Mi
Silvia y Carlota llegaron a la mansión, Silvia subió a buscar a Caroline pero no la encontró, se puso a buscar por todos lados y no la halló, Elizabeth salió de la biblioteca y vio a su madre inquieta. - Que ocurre mamá?... porqué estás tan agitada?..- preguntó con curiosidad Elizabeth. Silvia la miró esperanzada. - Caroline... la has visto?...- preguntó ansiosa. Elizabeth frunció el seño de confusión. Caroline?... no... porqué preguntas por ella? Acaso sabes donde está?...- preguntó con interés. La cara de Silvia comenzó a ponerse sombría y sus ojos se llenaron de lágrimas. - Alguien me dijo que Caroline estaba aquí... pero parece que solo fue una confusión...- dijo con tristeza Silvia. Elizabeth se acercó a su madre y la abrazo con ternura. - No te preocupes mamá... siento que pronto estaremos junto a Caroline y Amelia.. te lo prometo... ahora dime donde fuiste con la tía Carlota tan temprano?...- preguntó con interés Elizabeth. Silvia se puso un poco nerviosa. -
Elizabeth salió de la mansión Miroslav y se subió a su carruaje en dirección a la comisaría. Dan junto al doctor Poe y Santos la esperaban ansiosos . Elizabeth entró a la oficina de Dan y vio a los tres hombres mirarandola expectante. - Buenos días señores... Benoit Miroslav mordió el anzuelo...- dijo sonriente Elizabeth. Los tres hombres suspiraron de alivio. - Entonces no se dió cuenta de la falsificación?...- preguntó ansioso Dan. - No... de hecho quedó muy confundido, miraba sin cesar el documento, solo pidió quedarse con él...- dijo tranquila Elizabeth. - Menos mal que Santos pudo imitar a la perfección las firmas de su tío Gregory y de Benjamín Miroslav...- dijo satisfecho el doctor Poe. Elizabeth asintió con la cabeza. - Y ahora cual es el siguiente paso?...- preguntó con interés Elizabeth. - Bueno ahora que mordió el anzuelo, Benoit se centrará en probar que su " padre" fue víctima de una e****a por su amigo Gregory Real... y esa distracción nos dará chance p