Por más perverso que pueda sonar, la raptaron para ser la esposa del hombre más poderoso de toda India. Entre cien mujeres ¿tenía que elegirla a ella? La única capaz de desfilarlo hasta la mismísima muerte si era necesario.¿Como podria surgir el amor en medio de una guerra constante? Hasta que punto podrá llegar Mia para huir de aquella condena.
Leer másEl juicio estaba cerca y existían evidencias suficientes contra Esteban respecto a lavado de dinero. Habian comprobantes de pago del avión privado en el que se trasladaron las epaosas del zamir, lo que descartada lo que Esteban decía o lo obligaba a inventarse otra versión sobre aquello. Solo faltaba el comprobante de propiedad de la vivienda en que estén a había tenido a Mia, pues en sus argumentos señalaba qué habían ido a atacarlo a su propiedad, sin embargo esa viviendo no era una propiedad de Esteban, sino que era un lugar abandonado de hace varios años. Lo tenían, la realidad era que lo tenían, solo faltaba un día para el juicio y el panorama para el Zamir era bastante alentador.Durante la tarde, Elías tendría ese último documento, ya había realizado una exhaustiva investigación y efectivamente la casa no pertenecía a Esteban y tenía como probarlo. Lo unico que no se esperaba, era ingresar a su auto y ser apuntado con un arma j
Zamir tenía resignación en la mirada y un dolor profundo de pensar que Mia podría estar muerta sabiendo detalles de aquel trágico accidente, esa era la única respuesta que hallaba ante su ausencia. Observar como le ponían las esposas, el uniforme naranja y lo preparaban para ser trasladado a una prisión de alta seguridad era sin duda, una escena desgarradora, después qué se efectuará el juicio, iria camino a aquel lugar donde al parecer, no saldría por muchos años. No había nadie quien pudiese ayudarle y todo parecía estar en su contra, lo que se hizo más real al estar frente al tribunal y ver al abogado de Esteban solicitar 20 años de cárcel. Todo parecía un trámite sabido y aceptado, todos sabían que lo hallarian culpable, por lo que no era de extrañarse que su abogado no estuviese presente y quisiera ahorrarse el daño a su imagen frente a una derrota tan evidente. - Bueno, sr Zamir, la evidenci
Dos días después Mia ya no resistía aquel nivel de angustia, su rostro estaba en todos los noticieros y en redes sociales, en dos días ya era un contenido viral. "Mujer cómplice del secuestro y desaparición de mujeres es buscada por las autoridades" era uno de los titulares, con una imagen que evidentemente habían tomado de sus redes sociales, donde Mia aparecía con bastantes años menos y una cerveza en la mano. - ¿en serio? ¡Maldición! ¡Maldito Esteban!- Bufó- y de todas mis fotos eligieron esa, mujer borracha y secuestradora, bien hecho Mia ¿querías fama? - murmuraba y caminaba en círculo. - Mia, Mia, ¡MIA! ¡ESCUCHA! - dijo Franco mostrándole un noticiero en vivo, donde aparecía el rostro del Zamir y todo el equipo y se confimaba que estaban tras las rejas - Por eso, por eso el no llegó - dijo con sus ojos humedecidos. - Caballeros, señoras, solicito no divulgar información falsa, la mujer es buscada como testigo, sin la existencia de evidencias tangibles de lo que se le acu
Alguien interrumpió un sueño profundo, uno de esos sueños felices, tranquilos, llenos de recuerdos. La claridad en las imágenes y los hermosos colores intensos resaltaban por doquier y daban paz y tranquilidad. El césped verde, al parecer recién cortado y la pequeña Mía corriendo descalza, sintiendo la humedad en sus pequeños pies. - Mi amor ¡a comer! - gritaba la madre de Mia desde dentro de una pequeña casa de madera. - Ya voy mamá - respondía ella, sintiendo el aroma suave de una lanzaña recién horneada, se le hizo agua la boca pero la felicidad absoluta la sintió cuando al fin tomó el tenedor, viendo como se esparcia el queso para luego.. . - MIA, DESPIERTA, MALDICIÓN! REACCIONA!! - Sentía que le apretaba el pecho una y otra vez. No quería despertar, pero la insistencia era molesta, cada vez dejaba de divisar ese lugar, se desvanecia, poco a poco se alejaba de su madre, su comida..El aroma.. - ¡¡Basta!! - Grito Mia de pronto tratando de sentarse, mientras sintió que se
En cosa de minutos, el Zamir y el equipo que había contratado estaban tras las rejas, incluido bily, quien se mostraba furioso, después de traicionar a todo su equipo creyó que recibiria mayor apoyo de Esteban, pero este no quería cabos sueltos, asique declaró que todos esos hombres liderados por un estranjero, habían entrado a su propiedad y lo habían agredido. - Sr Zamir, los cargos de invasión de propiedad privada y homicidio frustrado son muy graves en este pais, su única oportunidad es declararse culpa... - ¡No me venga con esas patrañas! Conozco mis derechos y no hablare hasta que mi abogado este presente - protestó. - Cómo quiera Sr Zamir, pero de esta, no lo saca nadie, tenemos evidencia suficiente para mantenerlo recluido - sentenció, y al Zamir se le apretó el estómago, sin duda su posición era de desventaja y verdaderamente no tenía como probar lo sucedido, sin duda la conexión con Esteban para elegir esposas no era algo que d
De inmediato Leny estacionó el vehículo en un sector con abundante vegetación, se cubrió el rostro con un gorro negro en el que solo se podían ver sus ojos y se dirigió lentamente al lugar donde estaban los dos hombres que custodiaban la entrada y los alrededores. Atrapó a uno con su brazo, quitándole la respiración hasta lograr su desmayo, para luego arrastrarlo del lugar y mantenerlo oculto.Luego envistió al otro desde frente evitando que utilizará su arma y utilizando su propio peso a favor, hasta lograr noquearlo y hacer lo mismo que con el primero.- Equipo, entrada despejada, no son hombres entrenados, pero no hay que confiarse, nos sabemos cuantos más haya dentro de la casa - informó - Max, novedades - preguntó. - Aquí Max, el sector está despejado, dentro de la casa hay cuatro hombres, uno de ellos parece ser el jefe, esta con ropa de diseñador y un reloj en su..- ¡Esteban! - añadió Zamir - ese maldito esta con Mia - se apresu
Al llegar a la calle, ya de noche, Mia tomó al Zamir de la camisa y lo empujó varios pasos lejos del lugar. Luego lo miró a la cara unos segundos y levantó una ceja. - Tu y yo necesitamos aclarar un par de cosas, ¿como conoces a Esteban, por que sigues buscándome.. Que es lo que quieres de mi?... dudo mucho que me hayas seguido tanto solo por un revolcón! - lo increpó - Te amo, dime que eso lo explica todo... - ¡Pues no! No lo explica, me echaste de tu mansión, pensando en que hice un plan con tu padre contra ti.. No entiendo porque carajos estas aquí si piensas eso de mi - le apartó la mirada para que no la viera soltar ni una sola lagrima. - No es mi padre y se que no fuiste parte de eso.. Solo necesite un poco de tiempo para pensarlo, fui un estúpido ¿bien? no te aportes de mi.. Por favor.. ¡Ven conmigo! - No - respondió sin siquiera pensarlo - este es mi hogar, no seré nunca más prisionera de nadie Zamir - Lo vió entristecerce. - Esta bien, podemos vivir aquí - respond
Al día siguiente, Mia estaba preparada para su primer día laboral, había elegido su ropa cuidadosamente, ni tan sensual ni tan aburrida. Llevaba el pelo recogido y unos pequeños aretes que resaltaban de lo gris de su vestuario. Ingresó al lugar y se dispuso a aprender y anotar todo lo que necesitaba para desempeñar su labor de la mejor manera. Debía chequear el ingreso de nueva mercadería, la que consistia de electrodomésticos de alta gama, cada uno con un código que ella debía verificar y realizar un inventario semanal, además de ello, debía asegurarse que el producto llegara completo, sin fallas estéticas. Si primer día correspondía inventario, asique aprendió lo más complejo al inicio y eso le ayudo bastante para los días siguientes, comprendió el proceso, el recorrido de los productos, los programas en los que se registraban las ventas y el papeleo de ingreso de productos al sistema. Antes de dar por finalizada su primera semana, ingresó por última vez a la bodega, debía deja
Atardeció y el frio comenzó a reinar en la Ciudad, Mia se aseguró de entrar suficiente leña para las fría noche y comenzó la vigilancia desde su habitación, espectante, ilusionada y con un diálogo aprenido y ensayado para cuando viera asomarse al Zamir, estaba lista para ese encuentro. Pero las horas pasaron y nadie se asomaba por su ventana, la que daba a justamente hacia la calle y hacia el único acceso hacia la casa. El sueño la invadió y rápidamente se durmió. La noche siguiente sucedio lo mismo y se repitió de la misma forma la subsiguiente. No había rastro del Zamir y esa sensación que la afigia era desagradable, era de tristeza, tristeza de pensar que el Zamir realmente se haya ido y ubiese decidido dejarla en paz. Esa sensación que Mia definía como un estado estúpido, la mantenía desanimada, no lograba reponerse y cada día Esteban se hacía más presente en su vida. Llegaba a casa temprano a desayunar con ambas, hallaba buena opinión por pa