Emilio llegó a la mansión Miroslav pensativo, tenía que procesar todo lo que Caroline le había contado, aunque sentía que ella le estaba escondiendo algo importante.
Vio a los empleados desconcertados y murmurando por los rincones, se acercó a uno de ellos para saber que estaba pasando.
- Que ocurre? Porque todos están asustados?...- preguntó el muchacho con curiosidad.
- Alfred... - dijo con miedo el hombre.
- Alfred?... le pasó algo malo?...- preguntó con interés Emilio.
- Ha tenido una fuerte pelea con el señor... fueron al bosque y todavía no han vuelto...- dijo angustiado el hombre...Emilio quedó sorprendido por la noticia, siempre supo que Alfred era el cómplice de Benoit y su mano derecha.
-.Acaso es por la desaparición de Caroline?... lo habrá culpado?...- pensó Emilio cuando vio aparecer a Benoit con el rostro furioso.
Su aspecto era terrorífico que hizo temblar al joven.
Benoit miró con indiferencia a Emilio.
- Señor... se encuentra bien?...- preguntó con tono de preocupación.
Benoit se dejó derrumbar en un sillón.
- Emilio... en ese estante hay un Merlot, sirveme una copa...- le ordenó Benoit.
Emilio obedeció y le entregó la copa de vino, Benoit la bebió de un solo sorbo y le pasó la copa a Emilio.
- Sirveme otra...- dijo pensativo Benoit.
Emilio volvió a servir otra copa.
-Has visto a Alfred?...- preguntó con curiosidad.
Emilio negó con la cabeza.
- No señor... vengo recién llegando...- dijo confundido Emilio .
- Alfred se fue... me ha traicionado ... de todas las personas que conozco nunca pensé que el me traicionara , hemos estados juntos por muchos años, el sabe mis secretos más oscuros... y yo conozco los suyos... por eso duele la traicion de un amigo...- dijo con tristeza Benoit.
Emilio solo se limitó a observarlo .
- Puedes irte Emilio ... mañana nos vemos...- dijo mientras se levantaba y se dirigía a sus aposentos.
Emilio lo vio subir cabizbajo, nunca pensó ver al gran Benoit Miroslav derrotado.
Emilio fue a buscar su caballo para regresar a casa, cuando vio en las caballerizas alguien escondido , se acercó lentamente para ver de quién se trataba, abrió los ojos al darse cuenta que era Alfred.
- Alfred!? ... que hace aquí?...preguntó con asombro Emilio.
Alfred salió de su escondite y miró fijamente al joven.
- Tuve una pelea con el señor... estoy esperando que se calme para poder hablar más tranquilo los dos, son muchos años juntos... aunque no estoy de acuerdo con sus métodos... hemos sido compañeros por muchos años...- dijo resignado Alfred.
Emilio miró con curiosidad a Alfred.
- Bueno... parece que a él también le afecto la pelea, porque no se queda en mi casa mientras las aguas se calman?..- preguntó Emilio amablemente.
Alfred miró con cautela a Emilio.
- No quiero molestar... pero tristemente no tengo donde quedarme...- dijo avergonzado Alfred.
- Esta dicho entonces.. se quedará en mi humilde hogar, mientras arregla las cosas con el señor...- dijo Emilio dándole la mano para que se subiera al caballo.
Al atardecer llegaron a la humilde casa de Emilio, el humo de la chimenea sobresalía por el techo de la cabaña.
Alfred caminó lentamente hasta llegar al umbral de la vivienda.
- Abuela!!... donde estás?.. tenemos un invitado...- dijo tranquilo Emilio.
La abuela salió de la cocina cuando vio al hombre para en la puerta, su corazón se aceleró al ver a ese hombre, sus ojos de anciana no podía creer a quien veía, se tuvo que frotar sus ojos, para ella fue ver a un fantasma.
Alfred se acercó donde la mujer y también se sorprendió al ver a Ana, la madre de la esposa de Benoit Miroslav, Johana Jackson.
- Abuela... él es Alfred... el mayordomo de los Miroslav, se quedará unos días con nosotros hasta que resuelva algunos asuntos ...- dijo inocentemente Emilio.
- Es un placer ... Señora... Le pido mil disculpas si mi presencia le incomoda...- dijo Alfred mirando fijamente a la mujer.
Ana no le salían las palabras, era como si el pasado tocará su puerta .
La anciana miró a su nieto y lo llevo a un lado de la habitación.
- Emilio ... Porque traes gente desconocida a nuestro hogar?... Desde que esa muchacha llegó a tu vida, has cambiado mucho...- murmuró su abuela.
Emilio solo la miró y le tocó el hombro.
- Tranquila abuelita... Alfred es un buen hombre no hay nada de que temer...- dijo tranquilo Emilio.
Alfred miraba la humilde vivienda, tenía muchas preguntas, su mente estaba hecha un lío.
Emilio lo invito a sentarse mientras Ana le servía la cena con desconfianza.
La cena estuvo en silencio, ninguno de los tres decía palabras, después de la cena, Emilio lo llevo a la habitación donde estuvo antes Caroline.
- Emilio... Puedo hacerte una pregunta?...- dijo con curiosidad Alfred.
Emilio asintió con la cabeza.
- Cuál es su pregunta?...- dijo con curiosidad Emilio.
- Dónde están tus padres? Porque vives con tu abuela?...- preguntó Intrigado Alfred.
Emilio abrió los ojos por el interés de Alfred.
- Bueno, no habló mucho sobre ese tema, según mi abuela mi padre murió antes que yo naciera, de hecho él no sabía que mi madre estaba embarazada de mí...y... Mi madre murió cuando nací...- dijo resignado Emilio.
- Entiendo... Disculpa mi curiosidad... Y como se llamaba tu madre?...- preguntó con interés Alfred.
- Jhoana... Jhoana Jackson...
Johana Jackson era la hija menor de la familia Jackson, una joven muy mimada por ser la única mujer de seis hermanos, a pesar que era muy consentida , era una mujer muy centrada, amable y delicada, su familia de la aristocracia francesa , tenía muchas conexiones sobre todo con la familia Real donde sus mejores amigas eran Catherine Real, madre de Amelia, las dos eran muy unidas y confidentes. Cuando sus padres por negocios la hicieron casar con el menor de los Miroslav, Benjamin, la reputación de él no era muy buena, era un mujeriego y con un temperamento muy volátil. Johana al enterarse que tendría que casarse con él, le vino una angustia, no quería compartir su vida con alguien que no la respetaría. - No sé qué hacer amiga!!... mis padres están decididos en este matrimonio por conveniencia, Benjamin Miroslav es un hombre muy arrogante!! ... no lo soportó!!...- se lamento Johana a su amiga Catherine. - Pero has tenido la oportunidad de conocerlo?... lo has visto?...- preguntó
Durante dos años de matrimonio entre Johana y Benjamin , todo fue de maravilloso, hasta que nació su hija Catalina, el embarazo y parto debilitaron mucho el cuerpo frágil de Johana, por lo que la intimidad en ambos se volvió escasa, esta situación podía de mal humor a Benjamin y comenzó a cambiar su actitud hacia Johana, ya no era tan amable y amoroso con ella, aun que con su pequeña era un padre amoroso. Esta situación comenzó alejarlo más de Johana ; provocando que volviera a sus antiguos vicios, su amistad con Gregory Real que era un vividor lo llevó nuevamente a los brazos de su antigua amante; Julia. - Cariño... que feliz soy de volver a tenerte en mis brazos...- decía salamera la mujer. - Claro... tú sabes lo que me gusta...querida...- decía con lujuria Benjamin. - Y tu esposa?... acaso ya no te atiende?...-.dijo con malicia Julia. Benjamin la miró con enojo. - Cuando estemos juntos...no quiero que menciones a mi esposa... o si no buscaré a otra , estamos?...- dijo en
Vladimir lo miró con una mirada siniestra, bajo su sombrero de copa para despedirse. - Lo estaré esperando.... señor Miroslav...- dijo mientras desaparecía en la oscuridad. Benjamin quedó confundido por lo que él extraño le insinuó. Llego a su mansión y sus padres lo estaban esperando molestos y preocupados. - Donde estabas?... es hora de llegar de un esposo con una hija pequeña? ... acaso no sabes que estamos en peligro?...- le reclamo su padre. Benjamin se dejó caer en el diván y observó a sus padres con indiferencia. - Porque tanta preocupación? .... estamos en la última ciudad de Francia, no creo que Napoleón venga por estos lados...- dijo burlándose. Su padre se acercó y lo señaló con furia. - Si a tu familia le ocurre alguna desgracia... pesará en tu sucia conciencia... ya recibimos la información que los soldados de Napoleón estarán por llegar, y todos lo que son realista y no renuncian a sus convicciones... será asesinado...- dijo seriamente el hombre. Benjamin s
Johana fue llevada a un escondite mientras todo se calmará y volviera a la normalidad. - Que lastima que tus suegros resultarán muertos...- dijo con tristeza Catherine. Johana suspiro profundamente y miró a su amiga. - Fue un efecto colateral, se suponía que no estarían en casa... se sabe algo de Benjamin?...- preguntó con interés Johana. - Lo vieron alejarse con Alfred y un hombre extraño, se veía consternado...- dijo Silvia nerviosa. - Un hombre extraño?... mmm pensé que volvería con su amante...- dijo pensativa Johana. - A pesar de su comportamiento lascivo, él tiene sentimientos por tí...- dijo cariñosamente Catherine. - Un amor violento... eso lo que siente por mí... pronto se olvidará de nosotras...- dijo lamentándose Johana. Vladimir llevó a los dos hombres a una casona abandonada, el lugar tenía aspecto tétrico. Al entrar era como si el tiempo se hubiera detenido,los muebles viejos con ventanas sucias, hacia que el lugar se viera más lúgubre. - Que lugar es est
Alfred quedo pensativo toda la noche, había descubierto que Emilio Jackson era hijo de Benoit Miroslav, su mente trataba de recordar algún detalle que hiciera descubrir lo que realmente pasó esa noche. - Entonces.. la señora Johana no murió esa vez?...- se preguntó alarmado. - Si eso fuera así... hemos sido engañados todos estos años... pero porque ella simuló su muerte?...- seguía intrigado Alfred. A la mañana siguiente Emilio se preparaba para volver a la mansión Miroslav y comenzar su trabajo. Alfred que estaba afuera de la cabaña esperando a Emilio. - Alfred!.. que hace aquí afuera... está fría la mañana..- dijo preocupado Emilio. Alfred lo miró como si fuera la primera vez que lo viera, ahora que sabía que era el hijo de Benoit, tenía un conflicto interno de si contar o no a su jefe lo que estaba pasando. - Eres un joven muy amable y considerado... pero creo que es mejor que vuelva a la mansión, tratare de conversar con el señor Miroslav... y si no me quiere recibir.
Elizabeth se encontraba mirando por la ventana de su mansión, su mirada era fría e indiferente, su corazón estaba lleno de rencor, resentimiento y amargura. Ya todo le daba lo mismo, solo tenía un objetivo en este momento y era vengarse de Benoit Miroslav... - Todos mis sueños han sido aplastados por este infame... mis sueños sean trasformado en pesadillas... y seré yo quien te haga vivir una pesadilla Benjamin o Benoit...- murmuró entre dientes. Silvia su madre entró a su habitación con preocupación. - Hija... estoy muy preocupada por tí, estas tomando un camino sin retorno... porqué no te vas con tu hermana y prima a Italia?... no tienes que sacraficarte...- dijo angustiada Silvia. Elizabeth suspiro de resignación, miró a su madre fijamente. - No importa donde me esconda... él me encontrará... es hora de darle de su propia medicina a ese hombre...- dijo decidida Elizabeth. - .Hija!!... soy tu madre y tengo todo el derecho de impedir esta locura, no permitiré que arruines
Las personas del lugar quedaron con la boca abierta, muchos de ellos aplaudieron y los demás quedaron atónitos. - Esto es realmente increíble!! ... Un Real junto con Miroslav, es algo de fin de mundo!!...- exclamaban los asistentes. - No hay que ser tan severos...el amor puede arreglar todo...- decían otros. Benoit Miroslav miró con satisfacción a Elizabeth, sus planes de conquistarla había dado resultado, su ego se llenó de orgullo, mientras que Elizabeth también estaba satisfecha por poder engañar al vampiro. - Tan listo no eres... Benoit Miroslav...- pensó irónicamente Elizabeth. Benoit le beso su mano y coloco el anillo en su dedo, el color del topacio hacia resaltar su delicada mano. - Miré!!... el anillo le ha quedado a la perfección... es como si fuera hecho exclusivamente para usted... este anillo es una reliquia de mi familia...- dijo admirado Benoit. Elizabeth le sonrió y miró su mano, realmente el anillo era muy hermoso. - Es realmente precioso y delicado...-
Vladimir le sonrió con ironía a Benoit, se levantó la silla y caminó donde él, Vladimir también cambió sus ojos a unos feroces, tomó por la solapa a Benoit, provocando que Benoit le mostrará los colmillos, eran como dos fieras apunto de atacar. - Benoit... me debes algo... y vengo a cobrar esa deuda...- dijo furioso Vladimir. - No te debo nada!!... hicimos todo lo que nos pediste... dime que te debo ?...- preguntó con furia Benoit. Vladimir lo soltó y se comenzó a reír a carcajada. - Jajaja!!... es verdad... hicieron todo los que les pedí...hasta más.. pero me dejaron abandonado en Napoles... y ese cazador de vampiro casi me atrapa... tuve que esconderme todo este tiempo antes de venir a Francia...- dijo enojado el vampiro. - No te dejamos solo... te habíamos advertido que ese hombre andaba tras nuestros pasos y que nosotros nos iríamos... te ofrecimos venir con nosotros, pero tú... fuiste tras de ella...- dijo misterioso Benoit. Vladimir lo miró con curiosidad y volvió ac