Alfred miró la habitación donde estaban cautivas Amelia y Caroline, comenzó a desordenar el lugar, sacó las sábanas de la cama y realizo una cuerda que colgó por la ventana, quebró el vidrio para disimular una escapada de las muchachas.
- Bien... ahora a esperar y que comience el espectáculo...- dijo pensativo Alfred.
A lo lejos pudo escuchar el carruje de Benoit acercarse, bajó las escaleras con la mirada confundida.
Benoit lo vió correr a su lado con nerviosismo.
- Que habrá pasado ahora?!!..- dijo molesto el vampiro.
- Señor!!!... a ocurrido un problema grave!!...- mintió Alfred.
- Que ocurre Alfred?!!... porqué la agitación?..- preguntó con curiosidad Benoit.
- Las señoritas Real...- dijo sin aliento.
- Que pasa con ellas?... preguntó molesto Benoit.
- Han escapado ...- dijo avergonzado Alfred.
Benoit abrió los ojos de furia que de un golpe derribó al mayordomo.
- Idiota!!... cómo que se escaparon dos mujeres tontas!!?... no pudieron escapar solas !! Alguien las ayudó- le gritó Benoit a Alfred.
Alfred solo se limitó a bajar la cabeza, Benoit lo tomó de la solapa y lo alzó en el aire.
- Me has defraudado... Alfred... esto no lo dejaré pasar...- dijo entre dientes Benoit.
Benoit lanzó al mayordomo por los aires que Alfred aterrizó entre los arbustos.
Los empleados estaban aterrados viendo la escena.
Benoit los miró con furia.
- Que están haciendo!!? No tienen trabajo?...- les reclamo Benoit.
Los empleados comenzaron a correr a sus puestos , no querían ser las siguientes víctimas de Benoit Miroslav.
Alfred se sacudió su ropa y se acercó a Benoit sin miedo.
- He decidido no servirle más!!... renunció a su tiranía...- dijo con firmeza Alfred.
Benoit lo miró con furia, los dos vampiros se miraron desafiantes.
- Queee?!!... acaso crees que es así de sencillo? Marcharte como si nada?... acaso no recuerdas el pacto?...- preguntó con ironía Benoit.
Alfred no se dejo intimar por Benoit Miroslav.
- Si tengo que pagar el precio... lo haré... pero ya no le serviré...señor...- dijo decidido.
Benoit lo miró con curiosidad.
- Que ocurre Alfred?...desde que supiste que Amelia es tu hija has cambiado... y no me extraña que tú las ayudarás a escapar...- dijo intrigado Benoit.
Alfred lo miró con seriedad.
- Yo no he hecho nada... pero si ellas me hubieran pedido ayuda... lo hubiera hecho... señor...- dijo con resolución Alfred.
Las expresiones de Benoit se volvieron sombrías.
- Entiendo... entonces quieres irte no?...- preguntó con tono siniestro Benoit.
- Si..- dijo sin miedo Alfred.
- No sé si recuerdas cual son las dos opciones que tienes de escapar de mí...primero es si yo te liberó de tus servicios...y... la segunda es pelear conmigo hasta que uno de los dos muera...- dijo con indiferencia Benoit.
- Entiendo perfectamente cuales son las dos alternativas...- dijo Alfred tranquilo.
- Como verás no puedo liberarte así como así Alfred...sabes mucho... entonces solo queda la otra opción...- dijo con tono diabólico.
- Lo comprendo muy bien... prefiero morir antes que seguir con está venganza que ha traído mucha sangre derramada...- le reclamo Alfred.
Benoit frunció el seño de molestia.
- Como te atreves a cuestionar mis métodos!!... que sabes tú!!!...ellos mataron a mi esposa e hija!! Acaso no lo entiendes? Esas personas destrozaron mi vida!!..- le gritó Benoit.
- Entiendo sus motivos pero no sus métodos...muchas personas inocentes han muerto acausa de su sed... de venganza..- dijo tranquilo Alfred.
Benoit le sonrió irónicamente.
- Somos vampiros!! ... para vivir necesitamos sangre!! Si a ti te gusta saciar tu sed con sangre de animal... no es mi problema... la sangre humana tiene la energía que necesito para tener el poder, y la fuerza que necesito...- le reclamo Benoit.
Alfred solo lo miró con tristeza.
- Entonces señor... que hará?...- preguntó Alfred con nerviosismo.
- En serio Alfred me quieres dejar? - preguntó incrédulo Benoit.
- No hay otra alternativa... estoy cansado de ver tanta sangre correr...- dijo decidido Alfred.
- Tengo una pregunta... que harías si te doy tu libertad?...- preguntó con curiosidad Benoit.
Alfred se le iluminaron sus ojos.
- Trataría de acercarme a mi hija... que ella sepa que yo soy su padre... y que me perdone por no haber luchado por el amor de su madre...pero usted no me dejará libre... verdad?...- preguntó con frustración Alfred.
Benoit lo miró de pies a cabeza.
- Vamos!! Al bosque... donde nadie nos vea !!..- ordenó Benoit.
Alfred siguió a Benoit hasta las entrañas del bosque, donde nadie los viera e interrumpiera.
Los dos vampiros se miraron desafiantes, los ojos de ambos se volvieron rojos como el fuego, sus colmillos aparecieron.
- Bien... es hora de acabar con tus sueños de padre protector...- dijo Benoit mientras corría donde Alfred.
El primer golpe lo recibió el mayordomo, Alfred se incorporó y corrió a toda velocidad para atacar a Benoit.
Este recibió un golpe en su estómago, Benoit lo agarro del cuello para contraatacar. Pero Alfred se safo de su agarré, el mayordomo salto a la copa de un árbol.
Benoit furioso dió un golpe al árbol, derribando de raíz el árbol. Alfred alcanzó a saltar a otro árbol.
- No seas cobarde Alfred!!...- le gritó Benoit.
Alfred salto y se puso al frente de Benoit.
- Aquí estoy ... señor..dijo Alfred mientras abría sus brazos.
Benoit con toda su fuerza se fue encima de Alfred, derribandolo al suelo.
Alfred en el suelo lo miró como si supiera que pronto ya no estaría ahí.
- Alfred... te doy la última oportunidad... te quedas conmigo ... o ... mueres?...- preguntó frustrado Benoit.
Alfred cogio un puñado de tierra y soplo contra Benoit, dejando al vampiro ciego por un instante.
Cuando Benoit recobró la vista, miró a su alrededor y no encontró a su mayordomo.
- Cobarde!!!... te arrancas como una rata asustada!!... donde estas ?...- preguntó furioso Benoit.
Pero no recibió ninguna respuesta, agudizó su oído para escuchar la respiración de Alfred, pero solo escuchó el ruido de los animales.
- Donde te fuiste?... pero te encontraré... y no tendré piedad contigo... te mataré... Alfred..
Emilio llegó a la mansión Miroslav pensativo, tenía que procesar todo lo que Caroline le había contado, aunque sentía que ella le estaba escondiendo algo importante. Vio a los empleados desconcertados y murmurando por los rincones, se acercó a uno de ellos para saber que estaba pasando. - Que ocurre? Porque todos están asustados?...- preguntó el muchacho con curiosidad. - Alfred... - dijo con miedo el hombre. - Alfred?... le pasó algo malo?...- preguntó con interés Emilio. - Ha tenido una fuerte pelea con el señor... fueron al bosque y todavía no han vuelto...- dijo angustiado el hombre...Emilio quedó sorprendido por la noticia, siempre supo que Alfred era el cómplice de Benoit y su mano derecha. -.Acaso es por la desaparición de Caroline?... lo habrá culpado?...- pensó Emilio cuando vio aparecer a Benoit con el rostro furioso. Su aspecto era terrorífico que hizo temblar al joven. Benoit miró con indiferencia a Emilio. - Señor... se encuentra bien?...- preguntó con
Johana Jackson era la hija menor de la familia Jackson, una joven muy mimada por ser la única mujer de seis hermanos, a pesar que era muy consentida , era una mujer muy centrada, amable y delicada, su familia de la aristocracia francesa , tenía muchas conexiones sobre todo con la familia Real donde sus mejores amigas eran Catherine Real, madre de Amelia, las dos eran muy unidas y confidentes. Cuando sus padres por negocios la hicieron casar con el menor de los Miroslav, Benjamin, la reputación de él no era muy buena, era un mujeriego y con un temperamento muy volátil. Johana al enterarse que tendría que casarse con él, le vino una angustia, no quería compartir su vida con alguien que no la respetaría. - No sé qué hacer amiga!!... mis padres están decididos en este matrimonio por conveniencia, Benjamin Miroslav es un hombre muy arrogante!! ... no lo soportó!!...- se lamento Johana a su amiga Catherine. - Pero has tenido la oportunidad de conocerlo?... lo has visto?...- preguntó
Durante dos años de matrimonio entre Johana y Benjamin , todo fue de maravilloso, hasta que nació su hija Catalina, el embarazo y parto debilitaron mucho el cuerpo frágil de Johana, por lo que la intimidad en ambos se volvió escasa, esta situación podía de mal humor a Benjamin y comenzó a cambiar su actitud hacia Johana, ya no era tan amable y amoroso con ella, aun que con su pequeña era un padre amoroso. Esta situación comenzó alejarlo más de Johana ; provocando que volviera a sus antiguos vicios, su amistad con Gregory Real que era un vividor lo llevó nuevamente a los brazos de su antigua amante; Julia. - Cariño... que feliz soy de volver a tenerte en mis brazos...- decía salamera la mujer. - Claro... tú sabes lo que me gusta...querida...- decía con lujuria Benjamin. - Y tu esposa?... acaso ya no te atiende?...-.dijo con malicia Julia. Benjamin la miró con enojo. - Cuando estemos juntos...no quiero que menciones a mi esposa... o si no buscaré a otra , estamos?...- dijo en
Vladimir lo miró con una mirada siniestra, bajo su sombrero de copa para despedirse. - Lo estaré esperando.... señor Miroslav...- dijo mientras desaparecía en la oscuridad. Benjamin quedó confundido por lo que él extraño le insinuó. Llego a su mansión y sus padres lo estaban esperando molestos y preocupados. - Donde estabas?... es hora de llegar de un esposo con una hija pequeña? ... acaso no sabes que estamos en peligro?...- le reclamo su padre. Benjamin se dejó caer en el diván y observó a sus padres con indiferencia. - Porque tanta preocupación? .... estamos en la última ciudad de Francia, no creo que Napoleón venga por estos lados...- dijo burlándose. Su padre se acercó y lo señaló con furia. - Si a tu familia le ocurre alguna desgracia... pesará en tu sucia conciencia... ya recibimos la información que los soldados de Napoleón estarán por llegar, y todos lo que son realista y no renuncian a sus convicciones... será asesinado...- dijo seriamente el hombre. Benjamin s
Johana fue llevada a un escondite mientras todo se calmará y volviera a la normalidad. - Que lastima que tus suegros resultarán muertos...- dijo con tristeza Catherine. Johana suspiro profundamente y miró a su amiga. - Fue un efecto colateral, se suponía que no estarían en casa... se sabe algo de Benjamin?...- preguntó con interés Johana. - Lo vieron alejarse con Alfred y un hombre extraño, se veía consternado...- dijo Silvia nerviosa. - Un hombre extraño?... mmm pensé que volvería con su amante...- dijo pensativa Johana. - A pesar de su comportamiento lascivo, él tiene sentimientos por tí...- dijo cariñosamente Catherine. - Un amor violento... eso lo que siente por mí... pronto se olvidará de nosotras...- dijo lamentándose Johana. Vladimir llevó a los dos hombres a una casona abandonada, el lugar tenía aspecto tétrico. Al entrar era como si el tiempo se hubiera detenido,los muebles viejos con ventanas sucias, hacia que el lugar se viera más lúgubre. - Que lugar es est
Alfred quedo pensativo toda la noche, había descubierto que Emilio Jackson era hijo de Benoit Miroslav, su mente trataba de recordar algún detalle que hiciera descubrir lo que realmente pasó esa noche. - Entonces.. la señora Johana no murió esa vez?...- se preguntó alarmado. - Si eso fuera así... hemos sido engañados todos estos años... pero porque ella simuló su muerte?...- seguía intrigado Alfred. A la mañana siguiente Emilio se preparaba para volver a la mansión Miroslav y comenzar su trabajo. Alfred que estaba afuera de la cabaña esperando a Emilio. - Alfred!.. que hace aquí afuera... está fría la mañana..- dijo preocupado Emilio. Alfred lo miró como si fuera la primera vez que lo viera, ahora que sabía que era el hijo de Benoit, tenía un conflicto interno de si contar o no a su jefe lo que estaba pasando. - Eres un joven muy amable y considerado... pero creo que es mejor que vuelva a la mansión, tratare de conversar con el señor Miroslav... y si no me quiere recibir.
Elizabeth se encontraba mirando por la ventana de su mansión, su mirada era fría e indiferente, su corazón estaba lleno de rencor, resentimiento y amargura. Ya todo le daba lo mismo, solo tenía un objetivo en este momento y era vengarse de Benoit Miroslav... - Todos mis sueños han sido aplastados por este infame... mis sueños sean trasformado en pesadillas... y seré yo quien te haga vivir una pesadilla Benjamin o Benoit...- murmuró entre dientes. Silvia su madre entró a su habitación con preocupación. - Hija... estoy muy preocupada por tí, estas tomando un camino sin retorno... porqué no te vas con tu hermana y prima a Italia?... no tienes que sacraficarte...- dijo angustiada Silvia. Elizabeth suspiro de resignación, miró a su madre fijamente. - No importa donde me esconda... él me encontrará... es hora de darle de su propia medicina a ese hombre...- dijo decidida Elizabeth. - .Hija!!... soy tu madre y tengo todo el derecho de impedir esta locura, no permitiré que arruines
Las personas del lugar quedaron con la boca abierta, muchos de ellos aplaudieron y los demás quedaron atónitos. - Esto es realmente increíble!! ... Un Real junto con Miroslav, es algo de fin de mundo!!...- exclamaban los asistentes. - No hay que ser tan severos...el amor puede arreglar todo...- decían otros. Benoit Miroslav miró con satisfacción a Elizabeth, sus planes de conquistarla había dado resultado, su ego se llenó de orgullo, mientras que Elizabeth también estaba satisfecha por poder engañar al vampiro. - Tan listo no eres... Benoit Miroslav...- pensó irónicamente Elizabeth. Benoit le beso su mano y coloco el anillo en su dedo, el color del topacio hacia resaltar su delicada mano. - Miré!!... el anillo le ha quedado a la perfección... es como si fuera hecho exclusivamente para usted... este anillo es una reliquia de mi familia...- dijo admirado Benoit. Elizabeth le sonrió y miró su mano, realmente el anillo era muy hermoso. - Es realmente precioso y delicado...-