Capítulo Veintiséis:La invasión de Run-dai

Cada legión iba sobre los "barcos voladores":que son mas o menos las forma a las que se les puede asociar. Cada legión poseía al menos tres de estos. Cada grupo se dirigió a las zonas asignadas para proteger y también donde se desarrollarían los combates. Todos los de rango alto fueron al frente junto a los capitanes, vice capitanes y tenientes. El general permanecía al lado del rey junto a los comandantes en Armenar.

—¿Por qué se quedo con nosotros?—, preguntó Achecar al ver que Astar permanecio en el transporte, cuando Aldo y Carla se marcharon junto al resto de reclutas, salvo ellos once.

—Por que los diez que quedaron en el barco son los más débiles, me gusta su progreso, pero no voy a ponerlos a prueba en una guerra sin cuartel.

—¡No nos subestime!—grito Fred—hemos mejorado lo suficiente para luchar en este momento, ¡aquí y ahora!

—Eso lo se—contestó Astar—por eso es que no pelearan. La magia de extracción no es cosa de niños.

—Magia de...—grito Fred al tiempo que el resto de presentes se mostraban nerviosos salvo Achecar que se mostro confundido.

—¿Qué es eso?—fue la pregunta de Achecar.

—Consiste en introducir una jeringa o aguja en el punto central del cuerpo, de ahí es de donde sale el nombre. Tan pronto eso ocurre se almacena en un frasco y aquel que se sienta con la suficiente fuerza para soportarlo, lo bebe y obtiene la magia; cabe mencionar que la magia, mas no la escencia de las personas que es lo que hace única a la misma y por ende sacarle el mejor provecho.

—Sabe capitán—dijo Achecar al momento de desembainar su katan—, tras oir tal bajeza, me dieron ganas de pelear, así que.

—Bueno, ve.

Al oir esto, Achecar dio un gran salto y se marcho del lugar hasta llegar al campo de batalla aunque de manera individual.

—¿Por qué lo deja ir? Y no ha nosotros—grito Fred.

—Por eso, por que se trata de él—agregó Astar con suma tranquilidad y volviendo a sentarse.

Al enteder esto, Fred cerro el puño y solo se sentó en el suelo aceptando eso. Achecar tras repetir sus saltos un par de veces más, se presentó en el centro de los invasores que estaban por el lugar dejando un pequeño cráter, y al verlo los reclutas de Run-dai se pusieron en guardia y con cierta sorpresa de que aterrizara de esa manera.

—Vamos a ver—empezó Achecar—, quien de ustedes ha sido obligado a participar en está guerra para que se retire de manera pacifica a su casa.

—¡De que hablas insolente!—, grito uno de los presentes—¡venimos a luchar por la gloria de nuestra patria! Y a recuperar lo que nos quitaron—dijo uno de los soldados al tiempo que el resto gritaban eufóricos.

—Respuesta incorrecta.

Tan pronto dijo eso, se abalanzó a la vez que todos los reclutas empezaron a atacarlo creando circulos que manifestaban los conjuros, la variedad de los presentes era tal que no se podría decir a ciencia cierta cuantas variedades de magias había, solo que atacaban usando pinchos de hielo, acero. Algunos usaban tipos de magias abstractas, como aquel que lo hizo retroceder solo con las palmas y otro aprovecho para abrir un portal y tratarlo de partir por la mitad con este. Sin embargo, Achecar se safo y para evitar más complicaciones, optó por activar un hechizo masivo siendo este Ton siete; con el que empezó a absorver la magia de los presentes logrando diezmar la zona donde atacaba, al tiempo que cada legión y persona libraba su propia batalla.

Cada legión se encontraba en su respectiva zona de la frontera, siendo un total de diez batallas cada una de diferente inensidad y resultados inesperados.

La batalla de los bosques de Frindal.

Este enfrentamiento se desato en las regiones norte;con una cordillera de una extensión de diez kilómetros, que servía de frontera natural por el paso de Canfir por donde atacarian los de Run-dai y el bosque de Manufer mas allá del Monte Tante que servía de referencia para dirigirse a Sanbir. Hablando de los montes la cordillera contaba con tres picos subsecuentes, con alturas distintas siendo el Monte Ringo el más alto con tres kilometros de altura, seguido del Monte Vidran como dos mil ochosientos metros y por último el Monte Tante. Debido a esto era una región de grandes recursos y turismo. La ciudad más cercana e importante era Debarir:compuesta principalmente por leñadores y comerciantes. La legión de Silvar fue la encargada de esta parte.

La defensa del río Esgunce

Un río caudaloso en aquella zona, cuyó inicio era más allá de Sanbir, y comenzaba en un lejano país conocido como Garradan, una nación con personas sin magia, pero un avance tecnológico basatante grande. Siendo una de las fuentes principales de agua de la ciudad, a unos dos kilómetros se hizo una desviación para crear un lago natural con el que podía distribuir agua para las regiones aledañas. La legión de Salvidar fue la encargada de esta parte.

El avance de las planicies de Sanfir

Una región grande para pastoreo, la poblacion más cercana se encargaba del ganado y era una de las más ricas de la región, cumpuesta principalmente por ranchos y pequeños pueblos que servián de hogar para los trabajadores, como también existían unos muros que colindaban con las tierras de denmanios y dongos. Debido a esto su protección se hizo muy importante, teniendo a tres legiones importantes y con los capitanes más letales en el frente, siendo la de Cantaras, Flordarin y Rendarin.

La región central de la frontera era un corredor de comerciantes a Run-dai, por lo que también fue fortificada por cinco legiones, debido a que sería un camino directo a Armenar. Esta parte estaba custodiada por las legiones de In-tardec, Rintar, Tenvarin, Kalendar, y Galvidan

Las regiones sureñas no corrían tanto peligro debido a ser zonas con cordilleras menores y deshabitas la mayor parte;esto también se debía a que durante el periodo de independencia de estas zonas de Run-dai mucha gente se fue, y cuando se anexaron, solo unos cuantos volvieron. Lislan era una de las pocas ciudades grandes de la zona y tambien la más cercana ya que se encontraba a unos trece kilometros de la frontera, y Breñas a uno veinte kilometros, fuera de eso, solo había pequeños pueblos a cargo de la mineria y ganado. Estas regiones se dividian en tres regiones muy extensas, pero debido a su difícil acceso no se considero enviar más legiones o a dividir las misma para apoyar.

La región sureña cerca del gran corredor fue custodiada por Casaldas. Está era una región poco accesible, debido a ser zonas casi virgenes y con unas cuantas canteras abandonadas.

La región subsecuente corre a cargo de Sanber. La cual era un pequeño bosque con unos cuantos montes de no más de ochenta metros de altura, con una vida silvestre casi intacta y con unos pequeños prados que servian de frontera natural.

La region central de las regiones sureñas, corre a cargo de Ñinrar. Una zona similar a la anterior, pero con unos cuantos poblados que debido a tener acceso a un río que nace de un árbol y una zona agricola excelente, están algo aislados. Son la única gente que volvio a sus tierras después de la guerra, y se les conocía como los Din, una especie de subcultura nacida de Ajedraz y Run-dai cuando el comercio era libre y no existía una frontera establecida, hasta la llamada Guerra Drungar ocurrida hace unos sesenta años.

La región Frijal era conocida por los cafetales y una planta similar. Esta región quedo a cargo de Jardar. Los habitantes vivían en pequeña fincas y no solían ser violentos, a pesar de lo que muchos creían era una de las zonas más ricas.

La región playera quedo a cargo de Zen-tac. Una ciudad hotelera y con unos cuantos lugares turísticos de la nación, siendo el blanco más fácil, debido a su salida al mar, y al no tener una base cercana.

Valerona había descrito los tipos de enemigos que enfrentarían a los capitanes hace unos días antes;debido a sus cualidades, los llamaron Qin, Cun, Tri y Du, para estar preparados y así luchar sin ser tomados por sorpresa. Ella junto a Valerian veían desde el castillo junto al rey.

—Tus predicciones han sido correctas Val—dijo el rey Bartolomé, un hombre ansiano pero con la fuerza de un joven.

—Eso espero—contesto Valerona—, pero aún con esto no me siento comoda.

—Pero estás lo suficiente, como para no considerarnos necesarios—preguntó Valerian.

—Según mis visiones, los capitanes presentes están distribuidos en las regiones de la mejor manera. No creo que sea necesario que participemos ninguno de lo cinco.

—Según tus cálculos, aunque es claro que Astar no se toma nada a la ligera.

En ese momento se vio como un agujero negro sobresalía a la lejanía, para este punto las batallas habían empezado casi al mismo tiempo.

Aldo y Carla se separaron con sus respectivos grupos para enfrentar a los denominados Qin: quienes gracias a la magia de extración habían logrado obtener cinco magias diferentes, quienes eran el equivalente a capitanes de Ajedraz y habían enviado a cinco por cada capitán.

Los siguientes eran los Cun:quienes equivalian a los vicecapitanes eran cinco por cada uno.

Los siguientes eran los Tri:quienes equivalian a los tenientes siendo cinco por cada uno y el resto del ejercito solo eran Du de dos magias.

—Bien Carla, te encargaras de los Cun y de algunos de los Tri.

—¡No voy a aceptar eso! Sera mejor que ambos nos encarguemos de los Qin y dejemos el resto a los reclutas.

—¡No! No podemos dejar a Fribal y el resto a cargo de esto.

—Entonces dejame luchar contra ellos.

—No, estan al nivel de capitanes, aún te falta mucho.

—Bien, pero para el torneo de naciones te juro que te vencere.

En ese momento Achecar los sobrepaso volando, al tiempo que ignoro a los que estaban debajo y cayó adentro del ejercito enemigo. Aldo al ver esto, se aproximó junto a sus hombres y con ayuda de estos logro atraer a los cinco Qin que correspondían a Astar para luchar contra estos, activando su reflejo. Aldo era el más delgado de los guardianes, sin embargo su magia de reflejo era uno de gran poder y habilidad siendo la de convertise en humo, una magia con la que era capaz de darle pelea a Astar.

—Un mago de humo, no recuerdo que hubiera un capitán con tales cualidades—dijo uno de los rundianos que correspondía al nombre de Ke-salav;con una apariencia brusca, usaban un atuendo típico de su país natal que consistía en un pantalon holgado y una especie de camisa larga que parecía ser una falda, así como usar unas hombreras y una especie de turbante.

—Eso es por que no soy un capitán, sino un vicecapitan—contestó Aldo amenazante.

—Y te crees que puedes enfrentarnos.

—Claro que puedo, y te lo demostraré.

—Ah, niño es lamentable tener que matarte. Lo que es una pena, ya que tuvimos bastantes años comerciando—contestó Ke-salav.

—Eso es triste no crees—contesto Aldo—pueden retirarse si quieren y evitar derramamiento de sangre.

—Me haces reir, ¿crees poder vencernos?

En ese momento el agujero negro se hizo presente.

—Pues si el puede hacerlo, no veo porque yo no.

Tan pronto dijo eso, Aldo se lanzó en su contra creando una gran nube, envolviendo a los cinco en la nube. Sin embargo, uno de estos llamado Shin-valev hizo un enorme tornado dispersando la nube. En ese momento otro de nombre Vin-forcalo lo localizó y uso su magia para lanzar un bloque de hilo y Shen-velk hizo que su brazo se hiciera de hierro para acertar un puñetazo, Aldo lo esquivo haciéndose humo y trato de asfixiarlo, sin embargo Ke-salav atacó de frente con magia de viento, y por último Rin-bur. Ataco desde arriba para poder clavarle unas estacas, que logro esquivar volviéndose humo.

—Eres difícil de matar—dijo sonriente Ke-salav.

—Lo mismo digo de ustedes.

—Crees ganar en esto a juzgar por no pedir ayuda.

—No tengo que explicar nada.

En ese momento Aldo se desvaneció gritando un conjuro llamado "composición". En ese momento el humo cambio de color y empezó a ocasionarle daño a los presentes, que enfurecieron y empezaron a atacar con todo a Aldo. Este al no ser un hombre fuerte, debido a su condición, esquivo cada ataque constantemente, a su vez que atacaba con su magia, que en cierta forma era débil. Aldo era un plebeyo que deseaba poder desvanecerse para ser alguien muy sigiloso, algo que logro tras obtener su reflejo, era considerado un orgullo de su familia pues a fin de cuentas, siendo un plebeyo llego a ser vicecapitan, su magia consistía en hacer y hacerse humo, cambiar las propiedades tóxicas y así dañar sus adversarios, sin embargo no poseía habilidades defensivas salvo su evaporación, ni de fortaleza, por lo que usaba su escudo y espada para dar estocadas finales o golpes letales, lo que ocasionaba que su conjuro de desvanecimiento era problemático.

El enfrentamiento puso contra las cuerdas a Aldo que fue acorralado por todos. Aldo tuvo que usar su fuerza sin volverse humo, por lo que soporto la enorme lluvia de ataques solo con su escudo, sin embargo sabía que eso podría pasar, pues de las orillas cincuenta reclutas de alto nivel aparecieron y los atacarón con tantos ataques sincronizados que al final no se percataron del humo de Aldo que llego a sus pulmones.

—¡¿Cómo es que nos acorralaste!?—grito Ke-salav estando mal herido.

—Bueno, eso es gracias a Delia—dijo Aldo al momento de tocarle la cabeza a la misma;quien era una chica joven de veinicinco años, cabellos rojos un cuerpo pequeño pero de hermosa figura con un rostro tierno y ojos rasgados. —Es alguien que usa una magia de distracción, tal cuál su nombre indica, mientras los adversarios se concentren en un solo punto, se olvidan de todo.

—No era mejor que ella estuviera en el frente—dijo Ke-salav cayendo de rodillas.

—Puede ser, pero magos Du como el resto no son tanto problema, ya que ustedes estan diseñados para vencer capitanes. Pero como puedes ver casi todos nuestros enfrentamientos han terminado casi al mismo tiempo, y sobre todo sin muchas perdidas o daños colaterales. En ese momento una gran explosión ocurrio por la región donde quedaban el grupo de Achecar y otra a unos cinco kilómetros.

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