Capítulo treinta y tres:Los más debiles.

Desde la comodidad del "barco volador", Astar estaba en una silla tomando un botella de un fuerte licor producido por Salandar:denomido como Frizber;que en lengua ajedriana significaría "la que te arrodilla" pues tiene un 50% de alcohol.

—¡Qué buena esta esta bebida!—grito Astar tras sorber el líquido.

—No entiendo por que está muy tranquilo—dijo Fred conteniendo su enojo—a sabiendas de lo que esta pasando en el frente. Y sobre todo el hecho de que usted puede derrotar a un gran número sin sudar.

—No me amargues la vida, ni lo hagas tú, tal vez haya muertos, pero confio en que ellos se las arreglen con está avanzada. Y no creo que sea necesario que me involucre.

—¿No le preocupa que mueran nuestros compañeros?

—Veras que no moriran, no creo que les guste.

En ese momento una alfombra descendio tomando una forma de pajaro, mostrandole algo que lo hizo incorporarse y calentar sus musculos.

—Cuida está parte muchacho, vengo enseguida.

—¿Qué? ¡Espere capitán que sucede!

Astar no contesto, simplemente salió volando a toda velocidad con su alfombra diciéndose »Valerona lo sabía«. Recordando el momento en que se alistaban y ella se acerco a él con un rostro de preocupación.

—¿Qué sucede hermosa?

—No es tiempo para halagos.

—A decir verdad, una cualidad como esa debe ser siempre mencionada.

—Pues gracias, eso significa que tampoco se puede fiar de ti.

—Eres fría, no le quites la alegría a la vida, si tienes un problema con esto dímelo y tomaré mis precauciones.

—Esa mirada dice la verdad, bueno confiare, he estado compartiendo una de mis teorias antes de que vayan a la pelea, pero no la están tomando muy encuenta. Incluso el rey.

—Y, ¿sobre que es?

—Que esta invansión no es lo que parece, en mi bola de cristal vi que el nivel de la gran mayoria no era muy alto, pero tambien note su confianza en los de alto rango. Deben tramar algo, ellos son muy sobervios para escuchar, consideran que las extenciones que abarquen serán más que suficente y que nadie pasara, como si fueran villanos de novela de fantasía que no estudiaron estrategias belicas.

—Bueno, no te preocupes entonces. Si algo es sospechoso los detendré con mis propias manos.

—Claro, pero los capitanes estarán en el frente.

—Yo confío en mis hombres, además tienen sed de gloria y yo de un buen licor.

Valerona no sabía que pensar, pero al notar su andar y seguridad, supo que la persona correcta para este asunto, era él.

Volviendo al presente Astar vio como entre las zonas más inaseccibles se movían entre los árboles casi de manera imperceptible un grupo de cinco hombres que habían atravesado las lineas enemigas, iban con capucha que parecía cambiar de colores para camuflajearse en el entorno. Astar aterrizo enfrente de ellos haciendo una entrada muy dramatica, al levantar polvo y dandose aires de ser un hombre amenzante y rudo aunque eso constrastaba con sus ropas coloridas.

—¿A donde van señores? Si eso se puede saber—dijo con cierta soberbia.

—Sabiamos que aparecerias cuando no te vimos en el frente, capitán Astar—dijo uno de los enmascarados llamado Tin-banser.

—Es curioso encontrarnos con el capitán que consideramos el menos inteligente—agregó Ren-de-Frazber.

—Diría que eso me molesta—contesto Astar arqueando una ceja—pero es cierto y a las verdades no les hago el feo.

En ese momento el grupo lo ataco con todo tipo de magia, pero él se defendió con sus manteles repeliendo y usando magias opuestas. Su magia la obtuvo por su fascinación por la costura, por la cuál fue motivo de mofas al no ser considerado útil o siquiera necesaria en los combates, pero él encontro la forma de hacerla útil, pues resulta que al acomadar ciertas figuras y realizar un hechizo sobre los mismos, estos pueden replicar diferentes tipos de magias, el problema es que debía prepararlos previamente y debido a lo complicado de su elaboración, sus manteles eran limitados.

—Vaya, los informes son ciertos, Astar el costurero no es lo que parece.

—Ahora notan que han cometido un error.

—No, consideramos enviar a más a lo largo de la frontera, pero no teníamos suficientes hombres, además el metodo empleado para potenciarnos es experimental.

—¿A que te refieres?

—No soy un villano de novela ilustrada para decirte, pero—en ese momento Ben-sur-dener se retiro la capucha mostrando como las magias lo invadian y parecian fluir por su cuerpo.

—No eres parecido a los otros Qin.

—A los que llamas de tal forma poseen cinco magias mediante el sistema tradicional, pero nosotros poseemos seis magias mediante el metodo experimental.

—Bueno, bastara con matarlos y fin de este asunto.

—Si claro, dije que eramos pocos, no te dije cuantos.

En ese momento Astar vio como un enfrentamiento ocurrio a sus espaldas en el lugar donde estaban Fred y el resto. Astar miro a sus enemigo y se habalanzo con todo su poder creando una gran explosión que tambien podía verse desde el otro combate aunque no le prestaron atención.

Antes de eso, Fred se encontraba impaciente hasta que sintió como alguien lo tiraba de su ropa.

—¿Qué sucede Anais?

—¡Debemos movernos ahora o nos mataran!—dijo Anais con una mirada fija en el bosque y llena de terror.

—¿Quienes?—pregunto Astar preocupado.

—¡Ya vamonos!—termino por gritar Anais asustada.

Dentre los árboles bajaron cinco hombres encapuchados.

—Que raro, pense ver un barco de esos por aquí—dijo uno llamado Ben-riu.

—No lo vi volar, deben estar cerca—agrego Gat-der.

Y estaba cerca, pues Amelia había logrado hacer invisible el "barco volador".

—No sabía que podías hacer eso—dijo Fred con cierta admiración.

—Es por que no me había visto en la necesidad de hacerlo hasta ahora—contesto Amelia mostrándose cansada y apretando los dientes.

En ese momento el campo de magia que los hacía invisibles se despejó, y los magos rundianos atacaron de golpe destruyendo el barco por completo. Aunque se lograron salvar gracias a Gina y su escudo.

—Maldita sea, cuando dijo que nos encargaramos no pense que lo dijera tan a la ligera—dijo Fred.

—¡Deberiamos huir!—dijo Anais aterrada.

—No podemos hacer eso A...

—¡Estos no son como los otros!—grito Anais al tiempo que se escondía detrás de él—siento como su magia esta desbocada y parece acomodarse como si hubieran extraido el alma de sus antiguos portadores.

—Pero no podremos huir—agregó Fred.

—Mira nomas estos son los que dejan atrás, realmente siento lastima—dijo uno de los rundianos.

—¿Qué hacemos Rin-yark?

—Dejalos, nuestro objetivo es llegar a Armenar y desafiar a los mejores, no perdamos tiempo con estos débiles.

Estás palabras hicieron que Fred se sintiera menospreciado, aunque para Anais, Amelia, y Jesica fue un alivio. El resto simplemente cerro sus puños de coraje por el desprecio y se dividieron para enfrentar a sus enemigos tras intercambiar miradas.

Anais y Regina formaron un equipo aunque a regañadientes y fueron contra de Ben-riu, un enfrentamiento que empezó con las chicas refugiándose en el bosque y escapando de los lastigos de agua que amenzaban con cortarlas, además de que este ataque se complemetaba con su magia de deslizamiento con el que llegaba a ellas casi de forma instantánea, de no ser por que Anais le obstruia el paso manipulando ramas.

Por su parte Gerald y Gina se enfrentaban en contra de Gat-der: quien los ataco con una magia que generó en el aire un fuerte taladro de acero, que además, expulsaba una especie de corriente oscilatoria que envolvía a sus enemigos en una especie de turbina que trituraba todo a su paso. Gina repelió el ataque, al tiempo que Gerald lanzo un ataque por detrás, pero este fue detenido por un par de brazos extra, repeliendo el ataque con una magia de aceite, que lo hizo resbalar apesar de no estar en un lugar liso, Gerald no podía con la vergüenza, pero siguió luchando aunque Gat-der al ver como se desenvolvian decidió simplemente jugar con ellos.

Roberto y Jesica se enfrentaron a Rin-yark, con quien no sabían que hacer, pues este atacaba a diestra y siniestra sin siquiera darles un descanso, en especial por que Roberto tenía que cargar a Jesica que estaba aterrada y desorientada, pues su magia no sería de mucha ayuda y Roberto podía defenderse pero no ella.

Torreón y Amelia se hicieron invisibles para escapar de Ha-brinfer, aunque cada vez que este trataba de escapar lo atacaban de vez en cuando, haciendolo enojar constantemete.

Y Fred contra Ribulca-carmi quien era una chica que a juzgar por su tamaño y porte le parecio ser la más fuerte, siendo el único combate real en todo este rato. Lanzándose ataques continuos y tratando de destruirse mutuamente

—Veo que eres el único con intenciones de pelear.

—¿Me estas adulando?

—Es lo menos que se puede hacer, ya que no aceptaron retirarse.

—¡Tan inutiles nos crees!

—Que no lo ves, eres el único que esta peleando.

Fred se refugio en uno de los árboles y contemplo como sus amigos simplemente se escondían y esquivaban ataques, sin poder hacer más. Además notaba el terror en sus ojos junto a la desesperación, como la burla en el rostro de sus enemigos.

—Lo vez.

—Maldición—grito Fred al tiempo que golpeo el tronco del árbol—no creí que esto pasara, no sabía en que estaba pensando. Me deje llevar por mi deseo de superación. Desde que era pequeño, tenía el sueño de ser alguien fuerte, admirado, ser reconocido por mi país y la gente, pero no soy tan fuerte, no somos tan fuertes, tanto esfuerzo para nada.

—Te haz esforzado todo este tiempo para...

—¡Sí!—contesto enojado Fred—, acaso crees que todos en Ajedraz somos Nobles glorificados con la magia como ustedes creen, tambien nos partimos el lomo, pero no es suficiente por lo que veo. No se ni por que te digo esto, a fin de cuentas somos enemigos que no tenemos nada en común, así que basta y continuemos.

Fred ataco con una mirada llena de desesperación, una mirada que penetro en la mente de Ribulca-carmi y los recuerdos inundaron su mente.

Al igual que Fred ella tenía un sueño, ser alguien fuerte y respetada, pero al ser una plebeya no podía lograr tal cosa, al menos no tan fácil como otros. Sus padres no apoyaron la idea de que se uniera a la armada, debido a que solo aceptaban hombres para las batallas, mientras que a las mujeres se les asignaba otros cargos, aunque no estaba prohibido que lucharan, si querían hacerlo debían demostrarlo en batalla, que en ocasiones terminaban en lesiones graves para las chicas y la muerte.

Ella no lo acepto y apesar de todas las críticas como de las burlas pudo demostrar su enorme fuerza y tenacidad al lograr derrotar a su rival dejando sorprendidos a todos quienes le aplaudieron, no era la primera, pero si una de las pocas. Su perseverancía sería recompensada para formar parte de los sujetos de pruebas para la fase experimental de la magia de extracción;cuando se entero corrio a decirle a su madre, pero esta no la recibio como esperaba.

—¡Estas feliz por que seras su marioneta!—le dijo su madre tan pronto escucho a su hija.

—Pero madre, es un gran honor además yo...

—Acaso sabes lo que conlleva la magia de extracción.

—Sí, pero es un mal necesario, además luchare con honor y agrade...

—Largate, no aceptare una imbécil que usa la magia de inocentes para su beneficio, en especial para ayudar a unos ambiciosos que buscan enemigos en quienes ya no lo son. El objetivo de los héroes es traer paz y mentenerla, pero cuando ya se vive en paz, ¿por qué provocar un conflicto?

En un principio no entendió esas palabras, pero ahora si y se dio cuenta de su error.

—Hay que parar esto.

—¿Qué?

—Lo que oyes.

—No me quieras engañar.

—¿En que me beneficiaria hacer eso? Puedo derrotarte con facilidad y ya viste la diferencia entre tus compañeros y los mios.

Fred apretó los dientes de rabia, pero al ver que realmente tenían desventaja, no había por que dudar de sus palabras. No pregunto más, simplemente confio en su intuición y se dejo llevar.

Los dos hicieron una estrategia. Ribulca-carmi uso su magia de mezcla uniendo las otras magias que tenía siendo magia de polvora y fuego con la que hizo una bomba para distraer a sus compañeros, al mismo tiempo que Fred reunía a sus amigos que estaban sorprendidos al igual que sus enemigos por tal acción.

—¿Qué esta pasado contigo Ribulca? ¿Por qué nos atacas?—grito Ha-brinfer

—Por que estoy viendo la verdad. Esto no es lo que quería—contesto Ribulca-carmi al tiempo que lanzaba ataques explosivos.

—Y que esperabas—contesto Rin-yark— la grandeza se gana aplastando y sometiendo a los débiles, no haciéndote amigos de estos.

—No es así, tenemos muchas cosas en común y sobre todo. ¡Ya estabamos en paz!

—¡Niña estúpida!—grito Rin-yark junto a sus compañeros que hicieron un ataque en conjunto tan masivo que Ribulca trato de parlo, pero no lo logro y antes de resignarse, un campo de fuerza creado por Gina la salvo.

—¡Hagan algo! ¡No podre resistir por mucho tiempo!

—Bien niña—dijo Ribulca-carmi, quien se volteo con el grupo y agregó—necesito que me den parte de su magia para lanzarlas en conjunto.

—¿Como quieres que te demos magia así como así?—dijo Regina.

—¡No hay tiempo de discutir!—grito Ribulca-carmi.

—No te preocupes Regina—empezo Fred— no es mala en el fondo, solo esta confundida, además no somos una amenaza para que finja una traición.

—Bien, demosle nuestra magia, aunque ¿que harás?

—Después lo explicare, ¡ahora aléjate niña!—dijo Ribulca-carmi dirigiéndose a Gina quien se alejo al tiempo que Ribulca-carmi, lanzo un ataque que al mezclar las magias dio como resultado una combinación de varios efectos al mismo tiempo.

Pues la magia de aburrimiento se combinó con el cristal que se hizo invisible, al tiempo que se hicieron resistentes y debido al impulso de la embestida estos se clavaron en sus adversarios que al sentirlos trataron de retirarlos, pero estos se estiraban al intentarlo. Además de que la magia de aburrimiento les ocasionaba sueño y perdían fuerza.

—¡Maldición nos confiamos de más!—se decía Rin-yark.

—¡Esa fue la unión de nuestra magia!—dijo Regina al ver el resultado.

—Sí, pero no he incluido las mías.

En ese momento, ella empezó a unir sus magias dando un gran poder destructivo que terminó por lanzar, acertando a los cuatro que estaba de frente debilitados haciendo una gran explosión que fue la que Astar pudo ver a la distancia.

—¡Los mataste!—dijo Gina sorprendida.

—Tal vez alguno muera, pero dudo que lo hagan con el poder que lanze, al menos no causaran problemas.

—Esto es parte de tu plan—agregó Regina.

—¡¿Qué dices?!—pregunto sorprendida Ribulca-carmi—apesar de lo que he hecho.

—Bueno es raro.

—Ya Regina, no somos tan importantes para que nos engañen, de hecho debemos agradecerle, sino ahora estariamos muertos—concluyó Fred con la cabeza gacha y apretando el puño de frustración.

Regina al verlo dejo de insistir.

—Y, ¿que piensas hacer?—preguntó Gina.

—Supongo que dejare que me arresten, no tengo ganas de volver a una tierra que probablemente me maten o castiguen. Además me siento tan avergonzada que...

En ese momento, un diamante le atravesó el pecho haciendo que callera de rodillas ante esto Gina la cubrió con un campo de energia que empezo a cerrar la herida salvandola de morir, y ante esto, el grupo vio con terror y asombro como el cuerpo del rundiano se reconstruía y dejaba ver que sus compañeros estaban muy mal heridos por la explosión.

—¡No te salvaras de esta!, ¡maldita traidora!—dijo Rin-yark con una mirada terrorífica y cargada de odio—y ustedes, ¡preparence para morir!

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