Catherine Riley es la mujer pirata más fiera los mares del norte. Le ha costado ganarse el título de reina del mar, pero lo ha logrado con creces, y es que para ella el problema nunca ha sido ser la más temeraria entre piratas. Pero en cuestiones del corazón Catherine no sabe nada. Cuando conoce a Arden Tydes en un intento de coqueteo barato, jamás pensó que aquel pirata podría ser capaz de robarle algo más que su barco. Sin embargo, Arden también roba con facilidad el corazón rebelde de Catherine. ¿El problema? Un nuevo comodoro está dispuesto a sacar a todos los piratas de sus costas. Incluyendo a la llamada Reina del mar. El comodoro Andrew Sallow no se anda con juegos, pero los ardientes ojos verdes de Catherine, su cabello rojo y esas curvas no lo dejan pensar con claridad. Catherine lo odia con todas sus fuerzas, hasta que Andrew parece empezar a despertar cosas en ella que nunca creyó ser capaz de sentir. ¿Podrá Catherine decidirse entre su audaz pirata o el incorruptible comodoro? Hay pasiones que te pueden hundir, y eso ella lo sabe muy bien.
Leer más06 de diciembre de 1742Siete meses han pasado desde todo aquello. Nasea seguía prosperando como un gran reino. Ya habían construido todo un castillo y reconstruido la civilización. Durante las excavaciones, hallaron restos de lo que alguna vez fue hace mil años.Andrew no ha vuelto desde que partió aquella noche, sigue realizando la tarea para la que se había ofrecido voluntariamente. Muchos piratas sobrevivientes de las islas fueron; gracias a él; a buscar refugio en Nasea.Esa noche del seis de diciembre hay una tormenta. Los relámpagos y truenos retumban por todo el mar y el reino, apagando los gritos de dolor de Catherine Riley.La pelirroja se encuentra en su cama en el palacio, de piernas abiertas, el sudor le recorre por la frente, convencida de que va a morir en cualquier momento.—¡Es un bebé! —avisa la mujer a su lado, su dama de confianza.Lin Shi también la acompaña esa noche.—¿Un bebé? Pero ¿cómo es posible? —se pregunta Lin.—¡¿Qué?! —exclama la pelirroja, pero no pued
31 de mayo de 1742Al principio, el rey Julius parecía escéptico a escuchar la historia, pues la magia es algo que los reinos continentales olvidaron hace mucho, desde la época de Nasea, cuando Burchard todavía era un príncipe y no un pirata.La caída de aquel reino había provocado un cambio en todo el mundo. Los dioses nunca más volvieron a interactuar directamente con los humanos, y, por ende, con el paso del tiempo, la gente había olvidado que alguna vez existió la magia real. Solo pequeños retazos de aquellas artes antiguas se habían conservado. Bien sea por rumores, como con Xuan Xinyue, o de pergaminos e información recolectada antiguamente, y bien conservada en las islas piratas.De resto, solo quedaban más que mitos y leyendas, cosas que ya la gente actual era incapaz de dar crédito sin quedar como unos completos locos.Por eso el rey la mira con una ceja enarcada mientras ella le cuenta toda la historia de Burchard, el tesoro, la bruja, la maldición y los dioses.—Comprendo q
31 de mayo de 1742Hacia el interior de Regoria, de camino a Vascaji, las cosas estaban mucho más calmadas. Por suerte el Tsunami no había afectado más allá de las costas del reino, a pesar de eso, el desastre que había provocado, sin duda ha afectado a todo el continente.Sin su principal puerto en funcionamiento, Regoria está oficialmente incomunicado con el resto del mundo. Lo único que le queda es la comunicación vía aérea mediante los halcones.Catherine y sus hombres aprovechan esto para entrar a la ciudad del Rey sin que nadie los sospeche. En la madrugada de aquella misma noche en la que decidieron emprender esa locura robaron una carroza y se fueron ahí escondidos mientras Jacob y Andrew los llevaban.Llegan bien temprano, la mañana del treinta y uno de mayo, eludiendo a los guardias que patrullan las calles. El lugar está hecho un caos debido a toda la gente que vivía en las costas y huyó despavorida del terremoto y del Tsunami.Vascaji también se vio afectada por el temblor
29 de mayo de 1742Los cinco piratas salen de la mente de Xuan tal como entraron, el humo poco a poco se va disipando hasta que ya no queda nada. La bruja se queda de pie y los mira en silencio, esperando una reacción de su parte.Catherine todavía no ha salido del shock que significó la muerte de Arden para ella, y ahora, tener esta nueva información solo la ha confundido más. ¿Qué se supone que debe hacer? Burchard les había contado su versión de la historia, la perspectiva desde su punto de vista, pero había omitido los huecos que terminaban de darle sentido a las acciones de Xuan Xinyue.Por supuesto que no había sido perfecta, de hecho, se equivocó mucho más de lo que admitirá, pero algunas cosas no fueron del todo su culpa. Moone había engañado al príncipe, y a todos. Manipuló a los humanos como quiso, a pesar de que Burchard asegurara una y otra vez que ella lo amaba de verdad, es algo que nunca sabrán con certeza.—Esto no cambia nada —dice al fin Lin Shi.Catherine voltea a m
12 de diciembre del 742 A.P.El primer recuerdo de la bruja los transporta a aquel día de diciembre a unas cuantas horas antes de zarpar, y antes de la caída del reinado de Alistair Ville IV…Para Xinyue, haber visto al amor de su vida casarse con otra se siente como una astilla clavada en el corazón. A cada latido que da, duele y corta un poco más, pero sin terminar de acabar con la miseria de su pena. Ella habría jurado que Burchard la amaba, o al menos que sentía algo por ella, pero es claro que sus sentimientos son solo unidireccionales.Desde aquel día del matrimonio lo evita por todos los medios. No quiere verlo porque hacerlo significaría avivar la llama del dolor en su interior, mucho menos quiere toparse con la nueva princesa del reino.Eden se veía demasiado perfecta para su gusto. Tan hermosa por fuera como por dentro, o eso aparenta, al menos.Sin embargo, ese día Xinyue decide que es momento de verlo por un motivo de fuerza mayor. Los clanes han organizado un golpe de est
28 de mayo de 1742Una despedida es todo lo que puede obtener. ¿Se atreverá a ser egoísta por última vez, a pesar de que le causaría dolor a Arden? Él nunca le perdonaría que lo dejara irse sin decir adiós, no le importaría el sufrimiento por el que tuviese que pasar si eso le da unos minutos más con ella.—Muy bien, hazlo —acepta Catherine.—Primero muéstrame el dragón de oro —exige Xuan.Catherine saca la pieza de su ropa y se lo enseña. Xuan parece tentada a agarrarlo, pero se contiene debido a la promesa.Andrew, Lin y los otros dos solo se quedan presenciando la escena en silencio.—Primero él, luego esto —dice volviendo a esconderlo entre su ropa.—Es un trato, Riley.Xuan levanta los brazos y los envuelve en el humo negro que sale de ella. Catherine se acerca a él y le toma la mano, entrelaza los dedos del pirata con los suyos y lo abraza con fuerza. Cuando abre los ojos, ya no están en el mismo lugar.Una playa tranquila y soleada es su nuevo escenario. El mar de aguas turques
28 de mayo de 1742Los estragos de que Nasea resurgiera al mundo habían afectado mucho más de lo que Catherine pudo sospechar. Esa noche llegan a Queen Bay con todo listo para atacarlos de ser necesario.—¡Alisten los cañones y las armas! Y que alguien me traiga bien atado a Koch y a Isaac —ordena.Andrew se queda de pie a su lado mientras avanzan hacia la bahía, pero ninguno está preparado para lo que les espera adelante.Todo el borde costero de Queen Bay está completamente destrozado. Parece que un gran tsunami arrasó hasta con el último puerto y casa de la ciudad.—No puede ser —murmura Andrew.—¿Esto lo causamos nosotros? —pregunta Catherine, aunque sabe bien la respuesta.El terremoto que provocó el resurgimiento de la isla no solo se había sentido en esta. Parece que su emergida causó un tsunami de proporciones bíblicas. Si Queen Bay está así, lo más seguro es que el resto de costas de los reinos continentales estén igual. La capitana no quiere ni imaginarse lo que habrá sido d
21 de mayo de 1742 Catherine no ha podido conciliar el sueño en toda la noche, pues pasó al lado de Arden velando su estado de salud. El médico de Ragnar había logrado estabilizarlo por muy poco, y con ayuda de Flint, Arden a penas y podía mantenerse respirando. Están por lo menos a una semana de llegar a las costas de Queen Bay, y ninguno puede darle la certeza de que logrará sobrevivir hasta allá.La tripulación trabaja a todo lo que da para poder llegar a tiempo, las velas se mantienen abiertas y la extensión que Sparrow copió del fantasma del pacífico también va a todo lo que da para acelerar el viaje.Como no puede dormir, no le queda más que quedarse en el timón y mantener el curso, así de alguna forma siente que está siendo útil e impulsando el barco más rápido; a pesar de que eso sea solo una mera ilusión.El barco de Sparrow se siente extraño. Luego de tanto tiempo navegando con el fantasma, tomar otro es casi como una traición. Ahora que todo se ha ca
20 de mayo de 1742La vida de Arden pende de un hilo, Flint no cree que le quede mucho tiempo de vida. La angustia de que pueda morir llena los pensamientos de Catherine de ideas demasiado locas, incluso para ella.Portgas sugiere que la pieza del tesoro causante de todo eso podría ser la solución. Se pone de pie y toma al pequeño dragón, no sabe cómo eso podría ayudarlo.—Ya ha perdido demasiada sangre, no creo que resista mucho más —informa Flint.Una idea cruza por su mente, una idea arriesgada y estúpida, pero es la única alternativa.—Tienes razón Cooke, pero no seremos nosotros quienes lo hagamos, aunque quisiéramos no sabemos nada de magia. Xuan Xinyue sí.—¿Estás demente? —cuestiona Lin Shi. Ya había recuperado la conciencia, ayudada por el médico del barco de Ragnar. Ambos se acercan alrededor del pirata herido—. Ya logramos deshacernos de ella, no vamos a llevarle esta cosa, ya viste lo poderosa que es incluso siendo solo una proyección, si se libera, no sabemos qué pueda pa