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Eren es el alfa de una manada llamada Luna de Plata. Pero no solo lleva ese título, también es el hijo del rey de los lobos. Un poderoso alfa albino quien con sabiduría le impone una fuerte prueba a su hijo para convertirlo en el mejor rey para todas las manadas. Eren, quien muy pronto terminaría su prueba para convertirse en el nuevo rey la culmina encontrando a su luna Valentina. Una joven humana quien tiene un terrible accidente de regreso a su casa, esta joven termina siendo rescatada de la muerte por Eren en el cruel bosque. Por desgracia para ella pierde la memoria por completo sin posibilidad de regresar a su hogar, algo que frustra a Eren ya que él decide rechazar a su mate por la sencilla razón de ser una humana. Ya que el joven alfa perdió a su madre por la misma razón, pensaba que los humanos eran muy frágiles. Pero los lazos del destino le tienen otra historia preparada a este lobo ya que la inocencia y vulnerabilidad de Valentina lo envuelve por completo terminando por atraparlo. Pero no todo es felicidad para estos chicos que descubren el amor, un poderoso enemigo ahonda en los dominios de Eren… un enemigo que solo ansia hacerse más fuerte y para conseguirlo solo necesita quitar del camino a este poderoso alfa quien le da batalla en el campo, así que Lucían se ve obligado atacar a su talón de Aquiles… Valentina. Continuación de Mi Mate es una Humana.
Leer másÚltimo capítulo
46. Nacimiento de un villano
Lucían despertó de su letargo sueño, un buen merecido descanso era lo que necesitaba desde hace mucho tiempo. Desde que tuvo que vigilar a Sofía casi que no tomaba siestas tan largas, pero ese día se había terminado su respiro. El aroma de la albina estaba cambiando eso quería decir que su hijo estaba por nacer. Se puso en pie estirando su cuerpo ya más maduro que antes. —Es hora de conocerte Daren, tu nueva vida comenzara desde hoy. Salió de la cueva volviéndose un lobo, estiro sus patas un poco entumecidas ya que tenía algunos meses que no se convertía. Olfateo el aire percibiendo la esencia de Sofía, corrió hacia ella ya que el olor del cachorro estaba muy presente… al cabo de unos minutos Lucían llego hasta la cabaña de divisando a Sofía acompañada de una anciana. La estuvo viendo muy seguido en los últimos meses, al parecer era la partera de la manada de lobos albinos. El lobo no haría nada hasta ver que su cachorro naciera, de momento la anciana ayudarí
45. Ella era para él
Lucían había recorrido muchos kilómetros para buscar un lugar apropiado donde quedarse sin ser molestado por nadie, y lo encontró. Era una cueva difícil de localizar por un humano o lobo, lo mejor de todo era que tenía cerca cierta manada que era muy importante para él… el hombre ingreso en el interior de la cueva notando húmedas, moho y filtraciones de agua. Era perfecto para convertir el lugar en su nuevo hogar.Sus chicos le seguían los pasos adaptándose al espacio, en el fondo de esta cueva noto unas rocas en forma de asiento. Sonrió porque era ideal para él, al sentarse en ella supo que ese era su casa.—Aquí viviremos chicos, este será nuestro nuevo hogar aquí nadie nos molestara.Pensó que debía ser paciente para obtener más poder, y eso solo lo lograría en cuanto tuviera un hijo. Desafortunadamente hab&ia
44. Poder obtenido
Seis meses después…Valentina despedía a la pequeña Sofía quien había tomado la decisión de unirse a la manada de lobos albinos, ella estaba segura que sea una loba blanca así que prefirió irse desde pequeña para pasar su madurez en esas tierras. Tan solo era una cachorra pero era bastante madura, y después de la muerte de sus padres la joven se había vuelto algo callada y reservada.—¿Estas segura que quieres irte? —Eren le pregunta por si cambiaba de opinión—Aquí serás una princesa cachorra.—Gracias alfa, pero prefiero irme.—Está bien, sabes que siempre tendrás un lugar aquí en el castillo —El lobo revuelve el cabello de la cachorra.—Sofi, ¿Por qué no te quedas? —Le pide la castaña bañada en llanto.&m
43. ¿Se acabo?
Lucían sonríe abiertamente ante la amenaza de Eren. Todo estaba a su favor, por un lado la información suministrada por ese viejo albino le fue de utilidad, acababa de descubrir otro increíble secreto sobre su vida pasada, tener descendientes le daba más poder.—Terminemos con esto—Les dice a ambos lobos —Solo te quiero a ti —Señala a Bardas, Eren observa a su padre quien no parecía sorprendido—No lo hagas más difícil Bardas.—Padre hasta a un lado.Eren se postro frente a Lucían imponiendo su presencia, le gruñía al hombre que tenía sujeta a su luna dejando sus sucias manos sobre ella. Cosa que lo cabreaba más de lo que ya estaba.—Si no te haces a un lado, morderé la nuca de tu amada y ya sabes lo que pasa cuando dos alfas hacen eso. Ella morirá, jamás resistir&aac
42. En manos de Lucian
Después de que Eren saliera disparado de la habitación la castaña se quedó pensativa, en eso recuerda a Sofía… como se le había olvidado la pequeña cachorra, sabía lo que había prometido pero la vida de la niña era importante para ella. Además que le había prometido a su madre que la cuidaría, rápidamente se puso en pie buscando ropa que ponerse.La joven salió de la recamara corriendo hasta la habitación de la cachorra para encontrarla vacía, su corazón comenzó a latir con fuerza preguntándose donde podría estar metida esa chiquilla traviesa. Regreso sobre sus pasos para buscarla por el resto del castillo… pero no estaba por ningún lado, su desesperación fue en aumento. De pronto ve a unas de las muchachas de servicio correr de inmediato la llamo.—¿Has vi
41. Marcada
Lucían rondaba los terrenos de Eren a una distancia prudente ya que todo el castillo apestaba a alfas, al parecer los muy idiotas habían dejado sus manadas protegidas con los betas. Era la ocasión perfecta para sus chicos, de ese modo sacaría a quien deseaba sacar de allí… así que ordeno a sus muchachos de atacar a las manada luna de plata, la manada de hierro y la manada Luna azul que eran los que poseían alfas fuertes. La manada de lobos albinos no los tocaría, ninguno de ellos sufrirían daños.—Vayan ahora —Les ordena a sus lobos los cuales salen corriendo. Él se quedaría a esperar pacientemente a por su principal presa…[…]Deon y sus hombres hacían guardia en la manada, todos atentos a cualquier atentado. Los lobos paseaban de un lado a otro cuando de la nada aparece una jauría de
40. Pelea de alfas
—Alfa, entiendo su punto pero creo que sería una decisión bastante precipitada. Como sabe hay muchas parejas unidas y establecidas con lobos de otras razas. Sería un gran problema si impongo mi voluntad para separarlos.—No estoy diciendo que separe a las parejas, pero al menos los que aún no han encontrado a su compañero. Esto incluye a los hijos de estos lobos.—Muy bien, realizare una reunión con todos los alfas para plantear el asunto ¿le parece bien?—Sí, estoy conforme con eso. No hay nada más que desee que todos mis hijos vuelvan a casa.—Comprendo.El alfa bien sabía que los lobos blancos eran muy unas personas frías para con otros lobos de color bueno algunos lobos llevaban esas características ya que Lili era el vivo ejemplo de que no era así, más bien Eren se extr
39. Toda una reina
El alfa tomo a su luna sentándosela a horcajadas mientras introducía sus manos por debajo del suéter que llevaba puesto para luego besar sus labios. Mentalmente les ordeno a todos los lobos que la seguían que se alejaran, aunque aquello era innecesario ya que con su potente aroma nadie se acercaría a la posa.—Me siento muy celoso —Susurra mientras la besaba con fuerza —No quiero a ese lobo cerca de ti, no quiero a ninguno cerca.—Solo me interesas tu Eren —Ella jadea cuando sus senos son coronados.—Eres mía y de nadie más, así no lleves mi marca tu eres mía —La toma del mentón para que lo mirase.La vuelve a besar mientras aflojaba sus pantalones, en cuestión de segundos ella no tenía nada en la parte de abajo y con mucho desespero Eren deslizo el cuerpo de su luna por su p3ne muy ere
38. Un momento para ellos
Al final un grupo de hombres llevaron al pobre hombre para que descansara y se alimentara ya que insistía en seguir su camino en busca de su esposa.—Deon, debes decirle la verdad a ese hombre. Su esposa no está viva, y menos en estas tierras infestadas de lobos salvajes.—No podemos estar seguro de eso, si el desea seguir buscándola nada más podemos hacer. Sería inútil intentar convencerlo de que no siga.—Podría morir mientras la busca.El lobo suspira con pesar, si era posible que muriera mientras la buscaba pero hacerle entender que su esposa estaba muerta era un caso perdido. Lo lobos eran muy testarudos. —Es un riesgo que él sabe que corre… es un lobo adulto sabrá que hacer. Y dejando eso a un lado, ya no es necesario que salgan a cazar, con la comida que Eren envió es suficiente para estar tra
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