“Cady Cad ¿Qué crees? ¡Hoy perdí la virginidad con Josh Bury!”
Frente a mi está la escena más grotesca que he visto en mi vida, una horrenda película NOPOR carente de sentido e historia, solo hay mete y saca, punto. No es que sea mojigata o la madre teresa pero madre mía, esto no me calienta ni medio pelo.
“Ay, Cady Cad no sabes de lo que te pierdes”
No, definitivamente no sé qué tiene de atractivo una tipa infiel montándole los cuernos al marido con el tipo más feo en turno que le hace chantaje.
No podía ver XXX de personas reales porque hasta verles el p**** es demasiado para mis ojos. Así que puse una animación japonesa y me arrepiento horrores. ¿Cómo puedo eliminar eso que acabo de ver de mi memoria?
—Piensa en el dinero extra, piensa en el dinero extra…
Veo un poco más y no puedo aguantarme más.
Tal vez si me leo una de esas novelas atrevidas de las autoras top que mi editor se plancha...
“Cuando los lobos se calientan” de Goldess Endypit
Leo unas pocas páginas y no siento absolutamente nada, aunque admito que la historia es interesante.
Incluso veo XXX entre mujeres sin éxito alguno, no niego que me atraen los hombres, prefiero la vista de un hombre con pectorales anchos y aceite haciendo brillar su six pack que ver a dos mujeres montándose juntas. Pero del torso. De la cintura para abajo me causa pavor.
¡Estoy J#DID4!
Entonces decido recurrir a la única persona que me puede entender en estos momentos…
[CAD-ENCE@AUTOR: Buenas noches, dijiste que puedo contar contigo para lo que necesite y que puedo hablarte como si fueras mi propio diario solo que con la posibilidad de aconsejarme. Ahora he llegado a la parte más difícil... No sé cómo escribir las escenas de sexo]
Al ver que no me responde me muerdo el pulgar y mi ansiedad me obliga a continuar escribiendo mi dilema
[Traté de resolverlo viendo p*rno pero por más videos que vi ninguno me hizo sentir algo, solo pensé en que era asqueroso meterse el miembro a la boca]
Vamos… Contesta…
[Por favor… es muy importante para mí porque no puedo terminar la novela sin esas escenas]
Justo cuando creo que es mejor borrar el comentario, 2238 me responde. Y no me esperaba algo así.
[Si los videos no son suficiente referencia… ¿Quieres intentar practicarlo con alguien real?]
¿Alguien real? ¿Hacer eso con una persona de carne y hueso?
¡¿Cómo diantres voy a hacer eso?! No conozco muchos hombres y tampoco puedo ir a un bar a ligarme a un extraño ¿o sí?
[Pensándolo bien es una pésima idea, ignora que lo sugerí. En su lugar, creo que sé que puedes hacer]
¿Y qué es?
[Ya sabes… Cad. El arte de amarse a sí mismo]
¡¿Que me toque?!
[La mano de uno mismo es lo más efectivo que hay]
Ah… pero si yo nunca me he mas….mas…
[¿Acaso nunca has hecho “eso” con tu propio cuerpo?]
¡Así es, nunca me he mast….Eso!
[¿Quieres que te enseñe?]
Si le respondo a eso estaré abriendo la caja de pandora hacia quien sabe que destino, es mi amiga pero somos mujeres para empezar y luego estamos en un chat de una aplicación sana.
[¿Quieres que te muestre el camino del auto placer?]
Oh por dios… ¿No es eso un tema un poco…subido de tono? Además es algo íntimo… No, esto no es correcto.
[Para nada, la discreción es mi especialidad. Imagina que soy tu editor, tu protagonista o lo que desees. Yo solo seré tu guía]
…Cielos… ¿Qué hago? Sé que no está bien pero necesito acabar esta historia y recibir la paga además me prometió ese libidinoso un extra por ponerle escenas candentes.
[¿Lista?]
De acuerdo, guíame hacia lo que tengo que hacer.
[Bien, necesitarás para prepararte una vestimenta adecuada. ¿Qué llevas puesto?]
¿Acaso eso importa? “Una camisa larga y unos pants azul marino”
[Hmmm… No será suficiente para un buen estímulo. ¿Todavía guardas por ahí la misma ropa que llevabas cuando actuaron la escena de Candace y Ery?]
La iba a quemar por lo sucedido esa vez pero no lo hice porque apenas y tengo ropa, solo no la he usado porque está contaminada por “él”
[Póntela y no te pongas sostén. Solo déjate las bragas puestas]
¿Por qué suena como si fuera un depredador que me quiere comer entera?
¡No esto está mal, debo parar esta locura!
Obedezco las ordenes de 2238 quien pasó de ser una mujer a un depredador, aunque quiero decirle que lo cancele todo me estoy desvistiendo y poniendo la ropa tal como indica.
Cuando mi piel siente la tela del pijama que fue testigo de un acto extraño en mi departamento siento un cosquilleo en mi pecho y mi entrepierna.
[Bien, dime… ¿Qué sientes ahora?]
¿Por qué preguntas eso?
[Descríbelo todo, querida. Cada sensación escríbela sin reservarte algo para ti]
Se siente extraño.
[¿En qué estás pensando?]
En cómo me empujó contra la puerta y metió su mano por debajo de mi camisa pero eso me lo voy a guardar hasta la tumba
“En que esto está mal” escribo a duras penas.
[Parece que no estás siendo sincera]
¡De acuerdo, pienso en ese día! Pero solo un poquito… nada más un poquito y solo porque tú lo mencionas.
[De acuerdo, dejaré que te liberes poco a poco ahora debes seguir todo lo que te diga. Paso por paso, ¿entiendes?]
¿Por qué siento que esta experiencia me va a marcar para siempre?
[¿Recuerdas cómo fue? Imita su forma de tocarte con tus manos]
No lo recuerdo todo pero… creo que su mano… su mano…
Si lo recuerdo, recuerdo cada sensación, cada momento que desee que fuera más lejos…
[Ahora haremos lo que debió hacerte, vamos a terminarlo como lo hubiera hecho esa persona en la que piensas]
No… No quiero pensar en él, prefiero imaginarme a alguien más.
[Fue el único con el que has experimentado algo así, ¿cierto?]
Si… Solo con él.
[Entonces para que sea real yo tomaré su papel o el que tú quieras]
Su voz en mi mente ya no es una mujer llamada 2238, es un hombre detrás de la pantalla…
[Levanta la camisa y acaricia tu vientre]
Listo.
[Bien, ahora masajea tu pecho]
La tela contra mis pezones sin protección hace que el estímulo sea intenso.
[Ahora amasa tus pechos por arriba de la ropa, luego con la yema de tus dedos, leve… muy leve encuentra la forma de las puntas redondas]
Hago lo que me dice y siento explosiones en mi interior. ¿Esto es lo que me haría él?
[Bien, sé que ahora debes estarlo disfrutando. Ahora haz lo mismo pero debajo de la ropa, siente tu desnudez]
Ah… No puedo…
[Apenas estoy comenzando, todavía falta mucho por conocer y probar en tu cuerpo]
Basta por favor…
“Señorita Beckham”
[Ahora lame uno de tus dedos y con la saliva lubrica esas puntas traviesas]
Hmmm…
“Dime Alfa”
[Ahora toca más abajo…]
No… Él no lo haría así… Su mano era más firme, más decidida…
Así…así era como me tomó esa vez. No me tocó más abajo aunque deseaba que lo hiciera.
[Ahora quítate el pantalón de tu pijama, deja descubiertas tus piernas]
Por más que haga esto no puedo sustituir con mis manos la verdadera sensación.
[Ahora describe el color de tus bragas]
¡YA BASTA!
No, gracias por tratar de ayudarme pero no. Esto no fue una buena idea, disculpa… sé que tus intensiones son buenas pero me da vergüenza hacer estas cosas con un extraño en internet. Incluso si eres mujer hay límites que no se deben cruzar.
Avergonzada me salgo de sesión y me envuelvo en la pequeña cobija sobre mi colchón, alejada del lugar donde hice cochinadas.
***
Buscando inspiración por otro lado. Me asomo por fuera del mentado Gym a ver si me encuentro con una de las autoras fogosas que tienen experiencia dentro y fuera de los libros. Espero como si fuera acosador de pared con las gafas de sol que una vez tuve que usar como asistente forzada de mi jefe.
En cuanto las veo salir del Gym las sigo hasta una cafetería que está cruzando la calle. Las tres autoras se sientan y discretamente elijo un asiento cerca. En cuanto me arme de valor voy a acercarme y preguntar con la mano en el corazón sobre el S3X0 en sus novelas y si solo se imaginan a mi jefe encuerado para esas escenas o andan con varios… No, esa no debe ser la pregunta, concéntrate.
—Ah, como extraño a ese Eardwulf.
¿Están hablando del pervertido ese? ¡Vaya suerte!
—Le escribo y no responde, ¿Tú sabrás que le pasó?
—Ay yo estaba con él en el hotel más lujoso que puedan imaginar y…
¡¿Y qué?! ¡¿Qué?! ¡¡Comparte el chisme!!
—Creo entender a qué te refieres, a mí me hizo lo mismo.
—Pues yo estuve a punto de montármelo en el gimnasio hace dos domingos pero no se pudo, les digo que ella ya se lo ganó.
—Qué triste, Eardwulf nos va a tener en abstinencia… —escucho que suspira— pero bueno, lo mejor de esta vida tiene fecha de expiración chicas y vaya que voy a extrañar esos 24cm de placer.
VEINTI….CUATRO…. ¡¿CENTIMETROS?!
—Pero veámoslo por el lado bueno chicas, a pesar de ser tan buen semental que no para de montarte hasta que te hace llegar a un tercer orgasmo seguido, sabemos que no es de nadie. Así que nadie pierde.
TRES…
¡¿POR DIOS QUE CLASE DE ANIMAL ES ESE TIPO?!
—Ah, que buenos tiempos aquellos en que me ponía en cuatro y me ensartaba toda la…
¡YA NO QUIERO ESCUCHAR MÁS!
Dios, sabía que era un degenerado y que se había metido con las escritoras de novelas cochambrosas, pero era mi deducción, no necesitaba escuchar a pelo y seña todo lo que les hizo a esas mujeres… ¡Quizá hasta se montó su club sándwich de tres en tres y después un submarino con todas!
¡EREN EARDWULF, SUCIO DEGENERADO!
Después de abandonar el lugar y correr como si me llevara el diablo no paro hasta que veo el autobús y este me deja cerca de mi departamento.
Subo las escaleras tan rápido como puedo.
—Señorita Beckham
—Ahora no.
La casera me ve como si fuera aterradora y la paso de largo. Una vez llego a la puerta de mi departamento y cierro tomo la almohada lista para pegarle unos buenos golpes.
Posiciono la almohada y me preparo para darle un puñetazo, juro que eso deseo sin embargo en su lugar arrincono la almohada a la puerta y la beso.
No, no es porque él me guste o me atraiga, es porque desde anoche he estado envuelta en una sensación caliente. No me gusta, es la desesperación por poder representar una escena candente sin fallar.
Veinticuatro centímetros… ¿De ese tamaño era esa cosa dura y caliente entre mis piernas? ¿De verdad te hace tocar el cielo tres veces sin descanso?
¿Cuánto es 24 cm? ¿Se mide igual que en una regla? De ser así debe ser enorme y monstruoso… No… Yo jamás…
— ¡SEÑOR EARDWULF GUARDE ESA COSA!
Pienso en lo que son 24 cm y me hago bolita en mi cama debatiendo si es posible que algo de ese tamaño quepa ahí abajo.
***
En mi habitación, quien sabe cómo y quién sabe cuándo, un cuerpo masculino me aplasta contra la cama.
Sus manos son grandes y me acarician por todo el cuerpo, su mirada es intensa y llena de deseo, son los ojos que no puedo olvidar de esa tarde. Esos ojos penetrantes que me desvisten en su imaginación lento, muy lento…
Sus ojos son como zafiros de un azul oscuro, un mar agitado que me quiere tragar completa. “Beckham” me dice y yo le suplico que me llame por mi nombre. Cuando al fin accede a llamarme “Cadence” acaricia mi muslo y nos besamos apasionadamente. Lo abrazo con fuerza y le suplico que siga, lame mis pezones los succiona con su boca. Lo vi una vez en una de esas películas para adultos, no sentí nada pero con esa persona todo es nuevo y asombroso.
Me quita la última prenda exterior y luego me saca las bragas con increíble habilidad. Se nota que es un experto porque tiene buena práctica, me duele el corazón cuando lo pienso, así que desecho esa idea de mi cabeza y le suplico que me haga suya.
Luego acerca su cara a mi cuello y dice en mi oído.
“Cadence, se mi amante”
***
De inmediato abro mis ojos, veo que no estoy en mi colchón sino en el sillón abrazando la almohada que huele como una brisa marina,
El coraje no se me quita aunque golpeo diez veces la almohada. ¿Por qué soñé con él? Por si fuera poco ni siquiera en mis sueños es bueno conmigo, por más que le pido que me dé más me hace esperar…
Veo con horror la humedad entre mis piernas, que tragedia, acabo de tener uno de esos sueños candentes con nadie más que mi jefe.
—Si mínimo hubiera sido con el mentado Alfa…
¡No, solo lo estoy usando como referencia! ¡No tengo ningún deseo de ser otra más de su lista como esas mujeres adictas a sus…!
—Veinticuatro…
Trago saliva y me quedo pensativa buscando una regla. En efecto esos son 24 cm… Parece demasiado grande, no creo que pueda caber ahí abajo.
Si lo bajo a 22cm, aunque sigue siendo grande, no suena tan monstruoso. Apunto en la ficha de personaje de Ery un nuevo detalle “Le mide 22cm”
Veo la regla y avergonzada me tapo la cara.
—Es incluso más grande que el del esposo de Sarah.
¡No, no voy a seguir pensando en eso! ¡Debo ir a un lugar, a donde sea pero lejos de mi departamento que solo me trae recuerdos a mi salvaje imaginación recién despierta!
Dije eso, sin embargo fui a un peor lugar.
“Silivia Gym”
Otra vez regresé a ese santuario de lobos en brama.
¿Habrán venido esas escritoras de novelas ardientes e impúdicas? Debería armarme de valor y pedirle a una de ellas consejos para escribir esas escenas…
—Oh, conejita. ¿Qué haces aquí? ¿Buscas a Wolf?
Al parecer todos lo llaman Wolf, bueno prefiero que le digan de apodos a escuchar cómo lo llama por su nombre como si fuera cercana.
Tampoco es que me importe, es solo que su nombre me irrita.
—Claro que sí, nunca olvido un lindo rostro cuando lo veo… Ji, ji. Wolf no ha venido al gimnasio desde hace unos días.
—No buscaba a “ese” individuo.
—Oh, ¿no? ¿Entonces qué buscas, conejita?
¿Por qué me llama conejita? Eso no es lo importante, tengo su atención debería aprovechar para ir al grano.
—Este… como escritora quisiera pedirle consejo a alguna de ustedes.
—Oh, claro. ¿Quieres ir a un lugar más tranquilo para conversar?
—Si… de preferencia.
—Ah, eres tan adorable. Vamos, te invito a comer.
Me guía al café donde las perseguí la vez pasada. Cuando veo los precios del menú trago saliva, todo es carísimo.
—Pide el que quieras, conejita. Yo invito.
—Oh, no es necesario… Ni siquiera sé su nombre.
—Ja ja, dónde dejé mis modales ¿verdad? Soy Martha Chandler, mi seudónimo es Goldess Endypit
—Oh, eres la que escribió “Cuando los lobos se calientan”
—Así es. ¿Ya la leíste?
—Una parte… Fue de referencia.
—Entiendo ¿Estás escribiendo una historia de lobos?
—Algo así… —trago saliva lista para ir directo al grano— Se…xo… necesito ayuda con las escenas se….nsuales.
El silencio que me sigue es incómodo. Martha me mira tapándose la boca, ya sé que fui demasiado con esa pregunta.
— ¡JA, JA, JA! ¡De verdad eres adorable!
— ¿Eh?
—Señorita pijama de conejitos, desde esa vez en el gimnasio me quedé con ganas de conocerte mejor.
Pijama de… ¡Por eso me dice conejita!
Siento cómo mi rostro se ruboriza por completo, dios, tal vez si oculto la cabeza detrás de la carta no se fije en eso.
El mesero se acerca y pregunta que vamos a ordenar, elijo un té porque es lo más barato, también porque milagrosamente tienen uno con flor de camelia.
Ella ordena un café y una ciabatta con jamón de pavo. En cuanto acaba de anotar todo se retira dejándonos a solas.
—No te escondas, conejita. Yo no muerdo… a veces.
—….
—Eres como un tierno conejito en medio de los depredadores. Anda, ve más alto y gruñe como un buen lobo, querida.
—….
—Pero me estoy yendo por las ramas. Dijiste que querías consultar algo de escritor a escritor.
—Ya dije que… escenas…
—Ups, disculpa es que soy traviesa y me gusta molestar a las conejitas inocentes. De acuerdo, de acuerdo, sé más específica. No te voy a juzgar.
El mesero llega con mi té y su café, los acomoda en la mesa.
Añado tres cucharadas de azúcar, no es miel pero prefiero acabar con esto pronto. Estoy demasiado avergonzada. Sorbo el té y Martha dice sin tapujos:
— ¿Quieres saber si le mide 24 cm?
—PFFFT—Escupo el té.
— ¿Crees que no te vimos, conejita? Mis ojos son incapaces de ignorar alguien cuando me interesa.
—….perdón por espiar su conver…
— ¡JA, JA, JA! No te disculpes, sé que querías algo, solo quería provocarte un poco.
¿Entonces todo lo que dijeron fue exagerado?
—Pero créeme, nada de lo que dijimos fue exagerado.
—PFFT—de nuevo escupo.
—Ese hombre tiene muchas flores en el jardín, pero ninguna es de su aprecio, su néctar le ayuda a apaciguar su propia sed. Incluso si toma todo el néctar no se satisface. Es lo mismo que sucede con un lobo y su pareja destinada…
Dejo el té y escucho algo que sé puede servirme en mi historia.
—Solo una pareja destinada puede satisfacer la lujuria desenfrenada de un lobo. Nadie más—sorbe de su café—él para nosotras es igual, necesitamos liberar nuestro néctar y estamos en una situación conveniente.
—…
—Pero eso no es lo que querías saber ¿cierto?
— ¿Cómo puedo…?
— ¿Quieres saber cómo escribir una novela erótica sin experiencia?
Me mira a los ojos y siento como si pudiera leer mi mente.
—El erotismo no solo se trata de escribir palabras sucias y sexo, Conejita. El erotismo es alma, pasión y entrega, un autor debe entregarse al lector en cuerpo, alma y corazón. Escribimos fantasías y a la vez realidades, la realidad de los deseos profundos, entre más ardientes y frescos mayor será el impacto.
—Entonces... Si no lo hago con alguien físico no puedo escribirlo.
—Claro que puedes, porque tu interior erótico está despertando. Lo veo en tus ojos, lo escucho en tus latidos y puedo ver las preguntas en tu rostro.
—No entiendo... —Digo tratando de evadir su mirada.
—Claro que lo entiendes, no te niegues a esa entrega, déjate llevar. En tu mente nadie juzga, puedes hacer lo que quieras porque tus deseos sabrán guiarte.
Una fuerza extraña me obliga a voltear a verla y sus ojos verdes me brindan una extraña paz.
—Gracias...
—No es nada, querida. Ojalá pudiera hacer más por ti, conejita.
—No, con eso me es más que suficiente.
Martha me toma de las manos como si fuera muy cercana a mí y aunque eso debería hacerme sentir incómoda no siento ninguna alerta en mi interior.
—Pequeña conejita, vas a florecer en un campo lleno de flores. Debes ser fuerte.
¿Por qué todos parecen obsesionados con hablar de flores, campos y néctar?
Recuerdo un poco las palabras de Edward y ahora con estas me siento más confundida que nunca ¿Qué quieren decir con eso? ¿Es una especie de metáfora sobre algo que ignoro?
Antes de poder preguntar a qué se refiere con eso una voz conocida me interrumpe.
— ¡Martha! ¡Te has adelantado y ni siquiera me...! —Se calla y me mira sentada en la mesa— ¡Hola, Honey bun!
—Te dice así por la pijama de Honey bun que llevabas el otro día — me dice murmurando mientras abraza a Frida de una manera que no yo hago con Sarah.
Frida saluda de beso muy cerca de los labios a Martha y se sienta con nosotras.
— ¿Entonces has dejado de espiar y quieres unirte a la plática?
—...
—Soy bastante perceptiva, cariño.
—Ah...
—Si quieres saber cómo lo hace Eardwulf, es una fiera. Le gusta hacerlo por detrás y...
— ¡Ah, creo que se me hace tarde! Gracias por... La gráfica... Digo la muy detallada... Ah... Recreativa conversación.
Dejo el billete para lo que consumí y me voy corriendo antes de que Frida, quien se ve que es la más atrevida entre las dos, me diga hasta cuántas posiciones pueden hacer con ese animal en una sola noche.
Cuando tomo el autobús de regreso voy anotando muchas cosas en mi libreta mientras suspiro al descubrir que esto me va a costar mucho.
No tenía idea de lo complicado que es escribir una novela erótica... Siempre pensé que una novela de este tipo vende únicamente por el morbo, no todo el esfuerzo y pasión detrás de un autor.
—Pasión y entrega total... —Digo como un susurro mientras acurruco la cabeza en la ventana y veo pasar los edificios, adentrada en mis propios pensamientos.
Al llegar al departamento entro y siento latir el corazón en mi pecho, como si fuera poseída por un momento acaricio la puerta, el lugar donde aprendí por primera vez lo que es el deseo bajo la piel de mi protagonista.
Me acomodo de espaldas contra la puerta y lo veo ahí frente a mí... Sus manos me acorralan y nuevamente ese día vuelve a mí como si pudiera rebobinarse. Solo que esta vez no me dice esas crueles palabras, solo me besa y con unas caricias gentiles como si no quisiera romperme me comienza a desvestir…
Toco mi pecho como me enseñó 2238, incluso meto mi mano debajo de mi ropa y sigo cada paso. Esta vez meto mi mano y acaricio sobre mis bragas, están húmedas ya no sé si desde la mañana con ese sueño erótico o acaba de volver a desbordarse.
No gimo, porque incluso si es en mis pensamientos soy tímida y no quiero que sepa lo mucho que me gusta lo que me hace.
Está vez llegamos hasta el final en mi imaginación, siento calor y mis piernas tiemblan.
—Aun así no es suficiente…
Más, más… necesito mucho más.
El calor que se ha iniciado como una pequeña fogata no se apaga, por el contrario arde en llamas creciendo cada vez más. Me sofoca, me desespera, necesito apagar mi sed.
Veo la hora, aún es temprano tal vez no me responda pero quiero escribirlo antes de que pierda esta adrenalina.
[Acabo de hacer el amor frente a la puerta, sin embargo tengo tanto calor y no se detiene, ¿Qué debo hacer?]
De inmediato recibo su respuesta
[¿Con quién?]
Sin esperar a que responda continúa escribiendo uno tras otro sus mensajes
[Te dije que era una mala idea, si tanto quieres experiencia puedo dártela, no busques a nadie más]
¿Por qué siento que me mal entendió?
[¿Al menos supo hacer placentera tu primera vez?]
Si, lo hizo.
[¿Es alguien nuevo? ¿Fuiste y lo levantaste en un bar?]
¿Qué? No... Fue aquí, justo conmigo misma con el fantasma del único recuerdo mínimamente erótico que tengo.
[Casi me asustas, Cad. No te entregues a cualquiera para satisfacer la curiosidad, debes entregarte porque lo deseas con aquella persona que más deseas]
Ahora es 2238 quien no puede parar de escribir y ni siquiera me deja responder.
[Alguien que te aprecie, que te desee, que sepa el tesoro que hay entre tus piernas porque estás entregándole lo más valioso para ti, en cuerpo, alma y corazón]
[No te conformes con cualquier lobo, elige al más poderoso, al más fino, aquel que pueda protegerte y entregarte todo lo que tiene]
[Que sepa los lugares que te harán explotar de deseo y placer, gemir como una diosa]
[O mejor aún, no elijas un lobo. Porque los lobos son insaciables, elige a un hombre]
[Un hombre maravilloso que te enseñe a amar]
Esas palabras… me suenan absurdamente familiares como si me las hubiera dicho alguien antes.
[Si yo fuera ese hombre afortunado, te tomaría entre mis brazos y suavemente te dejaría sobre la suave cama entre mis sabanas de algodón egipcio y seda.
Te besaría primero con un leve roce en los labios luego iría profundizando el acto metiendo mi lengua y recorriendo toda tu boca, desde el paladar hasta tu lengua que exploraré como si fueran nuestros cuerpos haciendo el amor.
Luego tomaré con mis manos tu nuca y ahogaré mi lengua hasta el fondo, hasta que no puedas respirar y dejándote casi sin aliento te miraré a los ojos bajaré mi mano, tocaré tu hombro con la palma y sin soltarme bajaré por tu brazo. Luego bajaré por tu espalda, con la otra mano te agarraré del pecho, seguiré besándote y masajearé tu pecho luego bajaré hasta tu vientre acariciaré en círculos hasta que gimas de placer, bajaré mi mano por el costado llegando a tu muslo…]
Luego los mensajes masivos se convierten en una historia erótica que me envuelve, ya no estoy frente al computador, 2238 ya no es mi mejor amiga sino un hombre cuyo rostro no puedo ver. Lleva una máscara como el Demonio que me alejó de Sarah.
Estamos en una habitación extraña que entremezcla un departamento muy lujoso y ese hotel extraño con un palo de cañería en medio y luces giratorias.
[No tocaré aquel lugar hasta que te haya explotado cada rincón de tu hermoso cuerpo]
¿Por qué no? Hazlo por favor… Quiero responder pero me contengo.
[Una vez en tu muslo, acariciaré tus piernas dejaré de besarte, bajaré por tu cuello (el que voy a devorar también) con mi mano volveré a acariciar tu vientre. Una vez tu mirada me suplique por más besaré tu pecho, debajo de este, tu obligó, el vientre, tus piernas, tus muslos, y luego...
Te besaré por encima de la ropa interior bajando poco a poco hasta llegar a la parte de en medio, lameré lentamente por arriba de tu ropa interior hasta dejarlo húmedo con mi lengua.
Luego penetraré tu núcleo sin quitar la ropa, solo para que comiences a sentir como te calientas y me deseas.
Cuando estés lo suficientemente húmeda y tu ropa interior esté empapada, con tu voz jadeante me pedirás que te dé más y te lo daré.
Te quitaré la ropa interior con tus bragas en mi mano voy a oler tus jugos de amor y lamerlos. Mientras tu mirada atenta se llena de deseo acariciaré tu entrada y en círculos con el pulgar iré encontrando tu botón rosado y pequeño, le daré toda mi atención hasta que se ponga hinchado y me verás masturbarme. Voy a envolver tus bragas en mi miembro duro por ti listo para entrar pero aún no te lo daré]
Madre mía… lo peor es que puedo sentirlo, imaginarlo y verlo ahí haciéndome todo eso. Por favor, dámelo.
[No, aún no estás lista]
Ah… es como si se adentrara en mis pensamientos ni siquiera tengo que responderle. Sabe que lo deseo tanto…
[Hasta que con tu núcleo empapado me dirás que lo necesitas]
Si, lo necesito. No sé quién eres si ese demonio, mi jefe, 2238 o quien sea que haya detrás en esa fantasía tan vívida.
[Besando tu muslo iré acercando tus piernas y envolveré mi cuello con ellas. Oleré tu delicioso lugar secreto empapado por tus jugos de deseo y desesperación por tenerme dentro, te daré una recompensa. Con mi lengua lameré desde arriba hasta llegar al centro y lentamente con movimientos precisos y rápidos te lameré completa primero pasando mi lengua una vez luego dos veces y después no me despegaré de ti. Succionaré entre cada espacio hasta que tú voz, tu respiración y gemidos sean uno solo.
Cuando creas que no puedes sentir más placer enterraré un dedo y te seguiré lamiendo]
Mmm… eso suena increíblemente maravilloso…
Debe ser por el calor de hace un momento o quizá sus palabras atrevidas que me invaden el pensamiento, lo cierto es que me dejo llevar atraída a “Él” como insecto hacia la luz, sé que algo no es correcto ahí pero eso en este momento no me importa… Solo quiero dejarme llevar.
Me quito toda la ropa y solo me dejo las bragas puestas para imitar los movimientos que me acaba de describir hasta que la humedad es tanta que quedan empapadas. Me imagino su miembro de… 24 cm porque es el número que ronda en mi mente, es enorme y duro, se restriega mi ropa interior como advirtiendo que eso es lo que me va a hacer ahí dentro. No puedo más y guio mi dedo hacia mi centro.
Sigo en mi mente todo lo que sucede y ya no leo lo que me va a hacer, me lo está haciendo y es de lo más glorioso.
Su dedo entra en mi núcleo y mi interior lo aprieta jalándolo más adentro. Su voz, grave y a la vez suave me susurra en el oído que me relaje, como aún estoy alterada por la invasión de su dedo en mi lugar privado me besa en los labios y aunque sabe extraño porque acababa le lamerme en mi lugar secreto el cosquilleo me lleva a tomarle del miembro, me lo impide. Su dedo se adentra más y ahogo un grito.
Nos besamos, su boca me calla los gemidos y me lame los labios. Luego separa su cabeza y me mira como un depredador listo para adentrarse en mi carne.
“¿Lista?”
Asiento tímidamente, el hombre enmascarado ríe y me planta otro beso suave y delicado. En algún momento me había metido dos dedos, antes de poder decirle algo ya me ha ensartado el tercero.
Gimo, mi voz resuena por la habitación.
Me toma por la cadera y….
2238 ha dejado de escribir.
¡¿Qué?! ¿Y luego qué?
Desesperada respondo a su conversación obscena quiero saber lo que me hará.
[Aunque deseo hacértelo suave y lento porque es tu primera vez no me contengo, esa posición no es suficiente para mí ardiente deseo]
¿Cómo sabe que soy…virgen?
[Es bastante obvio para mí, lobita]
Ah… ¿Por qué me llama así? Primero me dicen conejita en la tarde y ahora esta persona me dice “lobita”
[¿No querías está clase de experiencia para tu historia? Imagina que soy el protagonista que te está haciendo eso, el deseo carnal de un lobo es intenso y apasionado]
Ah… si imagino eso será la careta de mi jefe la que me haga todo eso.
[¿Entonces no quieres saber lo que sigue?]
No… si quiero, pero no con él.
“Señorita Beckham”
Ah… Eardwulf… Señor Eardwulf…
Con mi mano temblorosa y sin dejar de tocarme con la otra, escribo ahogando las descargas eléctricas que recorren mi cuerpo con cada golpe de tecla… Ahora yo soy quien continúa la historia.
Mientras gimo veo su duro, poderoso e imponente miembro erecto. Su máscara cae, el demonio ahora tiene el rostro de ese ser indeseable que se convierte de alguien cálido y tierno a un completo salvaje. Y eso me encanta. Ya no quiero más delicadeza quiero que me monte como el semental que es. Muerde sus labios y me pierdo en ese azul intenso que me envuelve entre sus brazos mientras mi interior exclama que lo desea como el primero. Es mi primer hombre.
2238 continúa la narración y yo solo puedo secundarlo a ratos porque mis manos hacen de las suyas para hacer más real esa imaginación.
Él, que debe ser el alfa no mi jefe pero por alguna razón en lugar de tener 20 tiene 30 años bien cumplidos, acaricia mis piernas y me devora con la mirada mientras me voltea y me pone en cuatro como le gusta hacerlo, aunque es salvaje y sucio tiene la decencia de preguntarme si le permito penetrarme.
“Si, mételo… por favor”
Pero no me complace como quiero, en su lugar quiere que le suplique con más fervor, me besa el trasero y me lame, me da una palmada y me dice
[Necesitas llamarme tu papi si quieres que continúe]
¿Qué?
[Hazlo, Cadence. Te haré sentir como nunca cuando te entregues a mí]
No, debo… esto es una orden de lo más fetichista y extraña…
“Pa...pi…”
[En cuanto me llamas con tu dulce y sensual voz te tomo por ambos glúteos y me hundo en ti. Quería ser gentil por ser tu primera vez, sin embargo es mi castigo porque te has tardado en seguir mis órdenes. Con una sola estocada te penetro hasta la raíz y siento tu interior apretado y caliente]
Ah… sucio, degenerado… Pervertido… Eso seguro sería doloroso y aun así me estoy desbordando.
[¿Quieres que te enseñe lo que es el placer? ¿Lo deseas?]
¿Esto todavía no es placer? ¿Puede sentirse aún mejor que esto?
[Entonces te haré gemir de placer, Cad. Te haré una mujer esta noche]
El vaivén de su pelvis me vuelve loca, su voz también me dice que lo está disfrutando y que no quiere salir de mi interior.
[¿Quién te está c*giendo, lobita? ¿De quién es este miembro venudo, muy viril que te está reclamando?]
Si no le respondo no me seguirá guiando por el sendero de la pasión…
“Tuyo, es tuyo… papi”
[Ahora llámame Alfa y dime cómo está tu c***]
Sus palabras son cada vez más sucias…
[Alfa… estoy muy húmeda]
Contesto a duras penas.
[Creo que no te estoy haciendo sentir tan bien, no me respondes como deberías]
Sé que me está diciendo que va a parar si no respondo lo que quiere.
[¡No, Alfa! ¡No me dejes, dame duro y mételo hasta el fondo!]
Estoy segura, ese salvaje sucio y descarado si me diría esas palabras con lo obsesionado que está con los lobos seguro querrá hacerse el rol de un Alfa y montarse sobre mí como un animal.
Es desagradable porque me avergüenza que sea él quien está en mis fantasías y me llena de sensaciones contradictorias, me gusta, te odio, me gusta, lo odio…
Luego lo siento, una descarga sin igual. Sé que estoy en mi límite.
“Ya no puedo más… por favor…”
[Bien hecho, preciosa, libérate sobre mi p**** córrete para mi]
Me voltea y saca su miembro, vuelve a enterrarlo en mi centro y me sacude con más fuerza.
“¿Lista?”
“Si… tú también…”
“Voy a eyacular dentro ¿puedo?”
“Hmmm…”
¡Si, si, hazlo ya, házmelo por favor, Alfa!
Los dos nos corremos y estoy segura que fue una sensación mutua.
Respiro agitado, mi pecho sube y baja mientras mis latidos van disminuyendo su ritmo y luego de saborear los vestigios de ese encuentro, la Cadence de siempre vuelve a tomar el control de mi cuerpo. Veo horrorizada todo lo que acabo de escribir en esa pantalla.
No hay forma de eliminarlo porque son muchos mensajes y ya los ha leído todos.
— ¿Qué c#%jo acabo de hacer?
Recuerdo como lo llamé alfa y mi cara entera se siente como si ardiera. ¡Qué horror! ¡¡Le dije que se corriera dentro!! ¡Y me lo imaginé a ÉL…!
-----
Para mejor experiencia recomiendo leer los capitulos en la web ya que así puede apreciarse las negritas y cursiva en la narrativa. ¿Qué les apreció el capítulo? Esta vez Cady se nos calentó bastante, sin embargo se enfrió nada más terminó. El próximo capítulo comienza el conteo hacia su trágico final... O más bien el inicio de una vida como nunca antes la ha tenido. Si hay amor a esta serie prometo hacer una maratón hasta el capitulo 14. ¡Sus comentarios son bien apreciados!
— ¿Y qué más recuerdas?—Sigue siendo como niebla en mi cabeza…—Bien, avísame si tienes algún progreso con ello.Aunque hace tiempo ya no estudio en la universidad, la cual tuve que dejar a medias… Suelo venir aquí a sesiones de terapia con el padre de Sarah, El Dr. Bingley quien es mi terapeuta.Se supone que debo venir una vez por semana sin embargo debido a que he estado ocupada y, también… porque me siento resentida con Sarah por olvidarse de contactarse aunque sea una vez, he dejado de hacerlo regularmente y solo he venido porque el padre de Sarah me ha llamado para recordarme que es importante continuar con la terapia.—Señor Bingley, ¿Ustedes tampoco han recibido noticias de Sarah?— ¿Perdón?—Sé que estamos en sesión de terapia y hablar de forma personal interfiere como mi terapeuta…—Sabes que puedes hablar con nosotros con naturalidad cuando quieras, Cady.—….—Sarah nos escribe una vez a la semana cuando mucho, pero está bien y nos envía fotos regularmente.¡¿Qué?!—Mira, a
— ¡Y enviado!Me estiro todo el cuerpo como si hubiera salido de un profundo sueño y miro con orgullo la flecha de enviado por WhatsNow.En el correo adjunté mi carta de renuncia y en la app escribí una “emotiva” despedida.Finalmente puedo cerrar todo ciclo.Si aquí no aprecian mis historias en alguna otra editorial lo harán, estoy segura.Solo debo encontrar una con mi enfoque y que sepa de buen gusto.Acomodo mis cosas en cajas. Tan pronto reciba mi renuncia tal vez no le vaya a caer en gracia.Debería pedirle al señor Bingley que me de refugio unos días…No, debo hacerlo sola.Mientras veo algunas de las cajas ya hechas (no que tenga mucho de todas formas) me debato si echar dentro esa almohada terapéutica, de todos modos ya es muy vieja.No le queda mucho al frasco de prueba que he usado tantas veces.La almohada que he golpeado hasta el cansancio está blanda y se ha hecho más liviana, debería tirarla.Sin embargo no me conviene quedarme en el departamento. Saldré a buscar empleo
¡Hijos de mi P#$% padre!Historia compatible mis calzones.¡Estoy en la peor mi3rda que existe!¡Imposible, imposible! ¡No puede estarme pasando esto! ¡Estoy en mi novela!Miro el reflejo de la protagonista en el lago y lo golpeo con fuerza.— ¡Estoy soñando, está debe ser una de esas pesadillas que se ven demasiado realistas! ¡No puedo ser la protagonista! ¡No!Grito un "NO" tan fuerte que los pájaros salen volando de los árboles como en toda historia cliché.—¡¡NO, NO, NO, NO, NOOOO!!Esto no puede estarme pasando...Buscando despertar a como dé lugar de este mal sueño me zambullo en el lago hasta que la sensación de ahogo es tan real que tomo otra bocanada de aire y vuelvo a zambullirme.¡Qué horror!Antes de volver a atentar con mi vida para despertar de esta horrible pesadilla, algo me controla el cuerpo y me obliga a salir del agua.Salgo a la orilla o esa fuerza me hace llegar hasta allá, por instinto comienzo a inhalar y exhalar como endemoniada mientras una voz extraña me habl
Bien, repasemos el plan.Durante la noche de luna llena, justamente el día del festival de la cosecha, Candace Var Sansa descubre quien es su llamada pareja destinada o compañero.Si ya he podido conocer a Chiara es porque la protagonista cumplió 19 años, por lógica pura hoy debe ser esa noche, así que no me queda mucho tiempo para prepararme mentalmente.No tengo idea de la hora pero es posible deducirlo un poco por la posición del sol y las sombras. Incluso si solo tuviera unos cuantos minutos sé que puedo pensar en una solución.—Chiara, voy a hacer algo poco ortodoxo por tanto necesito que no interfieras.‘¿Qué harás?’—Ya lo verás al llegar el anochecer.Sin embargo poco antes de acabar de anochecer, la música y voces cerca de bosque dictan que el festival ya ha comenzado.La protagonista no tiene casi prendas que vestir, pero tiene un vestido que consideraba para encontrar a su pareja. Parte del precepto es el rechazo sin embargo no dice nada sobre si se debe llevar la misma ves
En cuanto salgo de la habitación y escucho la puerta cerrarse, mi sonrisa confiada se borra. Saco una llave y pongo el seguro para evitar que esa hembra escape. Una vez me he asegurado de que está acorralada no puedo evitar desplomarme como si mis piernas se hubieran debilitado.La mejilla me arde y mi interior quema como si le hubieran prendido fuego.¿En qué momento se volvió tan osada?Siento aún el calor en mis labios, fue breve sin embargo todo mi ser se estremeció como nunca me habría imaginado que sucedería.“Te desprecio”Dijo “Te desprecio” sin ningún titubeo, sin mirar bajo al suelo y sin rastro alguno de inocencia o amor, ella de verdad siente odio por mí. La bofetada que me pegó no esperaba que fuera tan dura, a pesar de que si lo sentí no me afecta más que su rechazo.¿Qué no soy el Alfa? ¿No soy el más poderoso?Soy el más apuesto de la manada, cualquier loba mataría por tener este vínculo conmigo y ella me desprecia. Cuando la besé me sentí en el cielo y cuando me golpe
¡Mierda, mierda, mierda!Golpeo el suelo hasta que mis manos duelen.No tenía idea de que el protagonista pudiera tener una variable también, con las palabras que he dicho, más que humillarlo he despertado su instinto posesivo. Esto es mucho peor de lo que creí, su deseo enfermizo por mí es aterrador, la forma en que me vio nombrando lo que me hará en la noche de bodas, todo... ¡Ese no es mi protagonista!Mi protagonista lo he moldeado desde una persona totalmente opuesta a su personalidad abierta y atrevida.Alguien que no expresa un carajo en su rostro y que nunca...Que nunca me ve como un depredador a su presa.No, sé que no es así.Solo que no pude verlo a simple vista o no quise notarlo, cuando decidí tomar su molde era solo porque me parecía la definición perfecta de alguien fastidioso.Sin embargo nunca analicé por completo sus actos cuidadosamente. Eren Eardwulf, es un depravado que se ha acostado con distintas mujeres y todavía tuvo el descaro de meter en su cama a escritora
La luna llena brilla intensa, como el misticismo mismo que conlleva el ritual más sagrado y más esperado entre los lobos de la manada de Silivia Crescent Lake. Se llama así la manada pues se ubica cerca de un lago que parece reflejar a la luna creciente brillante como la plata sin importar la fase lunar que se encuentre en el firmamento del oscuro cielo. No importa si es de día o de noche, una luna cresciente se asomará en el cuerpo de agua.Se dice que entre sus claras aguas se puede escuchar los aullidos de los lobos antepasados y los cantos armoniosos de sus almas gemelas que ha unido la Diosa de la Luna y creado perfectamente para cada uno. En su cumpleaños número 19, finalmente, una loba de cabellos largos y cálidos como el fuego se aproxima a la celebración anual de la cosecha vestida con sus mejores ropas.Preparada y anticipada con emoción para descubrir la identidad de su pareja destinada, aquel que fue hecho solo para ella y ella para él, su otra parte del alma que complem
—Voy a escribir esa novela de licántropos que quiere.Cada palabra me quema en la garganta por el orgullo, o tal vez sea la bendita cerveza, no lo sé… quizá sea una mezcla de ambas.—Vaya, creí que habías dicho que tu decisión es firme.— ¿Lo toma o lo deja?—Debería ser yo quien diga eso, señorita Beckham.—….—De acuerdo, lo tomo.Su voz suena tan confiada que siento como si me fuera a dar una úlcera gástrica.—Bien, pero tengo una condición.— ¿Cuál condición?—….Aunque tengo algo de alcohol en mis venas aún siento vergüenza por lo que voy a decir.—…Adelanto.— ¿Eh?— ¿Me pueden adelantar algo de la paga por este nuevo libro?—Los libros se pagan cuando el primer capítulo esté listo, no hay excepciones.—Por favor, en realidad necesito pagar unas cosas para… eh… material de investigación, ya sabe referencias y esas cosas.—Soy mayor que tú por lo menos cinco años, no me chupo el dedo.—….Entonces supongo que es un no.Cuando escucho su suspiro sordo por el teléfono cierro los oj