Capítulo 47- Eren Eardwulf en Escena Parte 4-1

~Embriagado de Amor Parte 1~

— ¿Qué quieren decir? ¿Por qué no se ha hecho la maldita entrega? No te vas de ahí hasta que esté en sus manos ¿Captas?

Nuevamente cuelgo el teléfono.

¿Por qué no hay gente eficiente en este mundo? ¿Acaso es tan difícil hacer una maldita entrega?

Abro el primer cajón buscando la tarjeta de la pastelería para reclamar su falta de profesionalismo y pésima atención al consumidor cuando vuelvo a encontrarme con el infame libro de sublimado azul.

El nombre de su autora, Cadence Beckham me hace hervir la sangre y a la vez me trae calma, me altera, me trae paz, tantas reacciones contradictorias se agolpan en mi interior, después mi respiración se sofoca y me lleva de la mano con su dedicatoria de nuevo hacia el pasado.

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Hace aproximadamente siete meses.

—Eren vives tanto en la oficina que a veces me pregunto para que tienes un departamento y toda una habitación en mi mansión si nunca pasas la noche en ninguno de ellos. Deberías descansar, salir o hacer algo fuera de tus labores editoriales.

—Por supuesto que salgo, cuando me acuesto con mujeres...

— ¡No quiero escuchar las cochinadas que haces fuera de matrimonio, Eren!

¿Entonces para que me lo pregunta?

—Escucha, abu. Si quiero ser un buen sucesor debo mostrar buenos números ¿No es así? Si me dedico a la edición hasta que sea perfecta eso nos traerá más ganancias y menos escritores flojos que no entregan sus capítulos a tiempo.

— ¿Alguna vez les has preguntado la razón de ese atraso?

—Si se les paga por escribir no tiene que importarme sus vidas o lo que hagan, solo deben cumplir.

—Es justo por eso que no te he dado más responsabilidades que ser editor ¡Te falta empatía y ser más humano, menos lobo, más un ser pensante y menos animal!

— ¿Has visto mis números, abu? Todas las obras que he tocado con mis manos bajo mi estricta supervisión son Best sellers.

—Bah, son puras historias de tu gusto y te acuestas con todas las autoras. Cómo no van a ser la gran vida para ti.

—Te equivocas.

— ¿Me vas a negar que no te acuestas con ellas?

— ¿Para qué miento si es la verdad? Lo que digo es que no son todas, no he probado a la escritora rarita de las novelas de suspenso.

— ¡Que no te acuestes con UNA no es motivo de orgullo!

—Claro que sí, de hecho, si me acostara con ella le estaría haciendo un favor...

Mi abuelo me golpea con la carpeta que lleva en las manos justo en el hombro.

— ¡Te prohíbo que sigas haciendo tus cochinadas con nuestras valiosas adiciones creativas de la empresa! ¡Es una editorial por amor de dios, no un bar de strippers para ligar todo lo que se mueva!

—De acuerdo, prometo que no me acostaré más con ellas.

—Más te vale.

— ¿Qué hago con la rarita que no tiene buenas ventas?

—Averigua lo que le sucede, guíala por un mejor camino y si no mejora, no se extenderá su contrato.

—De acuerdo, redactaré la carta de despido.

— ¿No me escuchas? Dije que la guíes por el camino, no que te des por vencido sin intentarlo primero.

—Es un caso perdido, señor Ermenwulf. Ventas bajas, mala actitud siempre mirando al suelo como si le debiera algo, historias lúgubres nada divertidas y por si fuera poco se niega a cambiar su estilo. ¿Sabes la condición que nos hizo cuando firmó los papeles del contrato de exclusividad?

— ¿Cuál fue la condición?

—Nada de historias de amor y más que nunca, queda vetado para ella escribir historias con lobos.

—Suena a qué más que una chica problemática es un desafío que no quieres tomar porque te sacaría de tu zona de confort.

—Escucha, anciano. Esa mujer se niega a cambiar, sin importar cuánto se hunda ni cuánto lo necesite, es algo a lo que nunca se va a doblegar.

— ¿Y ya le preguntaste por qué tanta renuencia a eso?

— ¿Para qué? Si le hago preguntas solo tiembla como un conejo asustado, mira al suelo buscando protección y se agarra de un pedazo de su vestido con fuerza como si quisiera guardarse mil comentarios. Alguien con tan pocas agallas no es adecuada para nuestra editorial.

—Veo que la tienes muy bien estudiada, espero que no te acuestes con ella también.

— ¿Quién se va a acostar con una así de simplona? Abu, ya sabes que soy de gusto refinado...

—Ojos azules o verdes, cabello largo, rubias o pelirrojas con mirada traviesa, una cintura de avispa, pechos grandes y un prominente trasero.

Mi abuelo se sabe de memoria mis gustos.

—Entonces teniendo tan buenas carnes en el menú ¿Por qué voy a ir tras la ensalada?

—Una ensalada ligera con buenos ingredientes puede ser tan extraordinaria como un filete, la señorita Beckham no será como tus modelos de aparador, sin embargo es bonita.

Me levanto de mi asiento y me dirijo a la puerta. Es mi señal de que quiero estar solo y nada me hará cambiar de opinión. 

—Para nada. Pero gracias por el consejo, entonces tengo mucho que hacer adiós, Ermenwulf.

—Detesto que me llames así. Por dios, ya han pasado al menos 4 años desde ese desliz de la pobre Beckham en la universidad.

—Tres años, cuatro meses, ocho días y tres horas.

—Con lo mucho que le dedicas a contar sus errores me sorprende que no la hayas puesto en tu mira—suspira—Escucha la voz de un anciano que es sabio por la experiencia y no por ser un abuelo, el día en que tengas empatía podrás descubrir un diamante en bruto aunque lo hayas creído una gema de fantasía.

Me detengo mientras le abro la puerta. 

—Pues cuando ese día llegue le daré un ramo de flores y mi eterna devoción.

Digo reverenciando y actuando con la mano al pecho. Ese día nunca va a llegar.

—Mejor fírmalo en un papel o grábalo porque te vas a morder la lengua.

Mi abuelo cierra la puerta y regreso a mi rostro serio de siempre. Solo con mi abuelo me comporto de esa forma porque estamos en confianza, además mi abuelo puede ver a través de mí como un libro, ser viejo debe darle poderes aterradores y mente de adivino. Sin embargo está vez se equivoca. Regreso a mi asiento y veo las hojas con los números de lo que he logrado mientras golpeteo con los dedos el escritorio.

—Empatía, ¡bah! de la empatía no se come y nadie te paga por tenerla.

TOC TOC

Esa forma de tocar suave como si no quisiera ser escuchada solo le pertenece a una persona.

—Pasa.

Digo simulando mi fastidio.

—Con permiso, Señor Eardwulf.

Ahí está, ropa aburrida, cabello lacio sin volumen, ojos de color ultra común y un cuerpo bajito como para pensar en ponerla en un llavero. Si no fuera que esa ropa se la elegí yo también sería mal vestida.

Su cuerpo tiembla y su rostro se ve pálido.

Espero que no sea lo que estoy creyendo

Si vuelve a vomitar en mi oficina esta vez no lo voy a tolerar. Le cobraré todos los gastos de limpieza o la haré limpiar el suelo hasta que quede impecable.

—Llegas tarde.

—Disculpe, tuve que pasar por la universidad y...

— ¿De verdad? Creí que la gran Cad-Ence abandonó sus estudios porque se siente la gran cosa por un ensayo que ganó hace cuatro años.

—Tuve que ir para... Unos pendientes.

— ¿De verdad? ¿Y qué historia nueva nos vas a presentar?

—Ah, es una historia de suspenso en una cabaña, hay seis u ocho personas dentro la protagonista se entera que uno de ellos es un asesino serial y debe descubrir quién es antes de que sea la próxima víctima.

—Ya veo.

¡Que aburrido! ¡Ya van tres años en que solo escribe basura!

—Bien, muéstrame los manuscritos y podemos sugerir algunos cambios para que quede presentable.

—Esta vez quisiera pedirle que no cambie nada por favor, juro que la idea es muy buena y que pondré todo mi empeño.

Bien, la pequeña ya comenzó a mostrar algo de carácter.

—De acuerdo, solo muéstrame la ficha de personajes y quedará aprobado.

— ¿De verdad?

—Hasta que no vea a los personajes no puedo asegurarlo, Pero...

— ¡Si, aquí están!

Esta vez parece estar muy segura de que trae algo mejor, le daré crédito por eso.

Veo los personajes y no parecen malos solo regulares. No le veo potencial a esto, es demasiado… Pretencioso. No encaja para nada con el tipo de historias que tenemos en la aplicación.

En lugar de mirar hacia el suelo, la escritora de novelas de cuarta me mira directamente esperando conmover mi corazón de editor.

No, no lo va a lograr.

—De acuerdo, Pero solo se publicará por la plataforma en línea. Si tiene suficientes ventas podemos considerar un contrato diferente...

¡Es justo lo contrario de lo que quise decir!

—Muchas gracias, prometo que no los defraudaré... Ah, y...

— ¿Sí, señorita Beckham?

— ¿Puedo pedir un adelanto?

¡Sí que es descarada!

— ¿Tiene idea de todo lo que nos debe, señorita Beckham? Prácticamente para cada fracaso comercial le hemos dado adelantos y no se ha recuperado esos gastos.

Ni firmando un contrato gratuito de por vida nos podría pagar todos los daños.

—Entiendo. Disculpe por molestar.

—Beckham, quiero que me entregues el primer capítulo en una semana. Si lo haces consideraré ese adelanto.

Veamos qué tan segura estás de tu historia mediocre.

***

Mi cafetera se descompuso así que no me queda otra que ir a la cocina de empleados y servirme un café regular barato. Mientras me sirvo el café escucho a todos chismorrear, cuando sea el dueño de la empresa lo primero que voy a prohibir es que los empleados hablen en los pasillos y pierdan el tiempo en la sala de refrigerios.

— ¿Entonces van a tirarlo?

—Son archivos viejos y un libro de Cad-Ence que se firmó por ella misma para un give away, pobrecilla, nadie aplicó para ese concurso.

—Es una lástima, lo entregó con una sonrisa entusiasta y hasta dejó un mensaje muy bonito...

—Yo puedo hacerme cargo de esa basura, señoritas—Digo con una sonrisa comercial.

En el basurero tiro archivos viejos que pasé por la trituradora, un libro delgado como de bolsillo es lo último que me falta por tirar.

Recuerdo cuando elegí esa portada genérica, tampoco es que la escritora supiera elegir de todos modos.

Me preparo para encestar y...

"Pobrecilla nadie aplicó para ese concurso"

El recuerdo de sus voces chismosas me interrumpe por un momento, me detengo un momento y vuelvo a preparar mi brazo musculoso bien trabajado en el gimnasio para terminar con este fastidioso tema.

Así es la vida, niña.

Si no comes de lo que te sirven te mueres de hambre.

"Es una lástima, lo entregó con una sonrisa entusiasta y hasta dejó un mensaje muy bonito..."

Nuevamente me detengo por un recuerdo inoportuno.

¿Qué mensaje bonito puede escribir alguien tan lúgubre como ella?

La curiosidad me gana por un momento y leo su supuesto mensaje desperdiciado.

"Para aquella persona que creyó en mí, entre estas páginas te llevas mi corazón, gracias por tu apoyo"

No, sí que es un mensaje muy bonito.

Observo el bote de basura y me quedo pensativo si debo desechar el libro, al menos puedo devolverlo a la señorita Beckham. Aunque tendré que ser crudo y explicarle que nadie recibió su libro porque nadie cree en ella.

De verdad es una pena. Si ve esto solo sabrá que debe desistir de ser escritora. Si mi abuelo se entera de mi falta de "empatía" seguro le dejará la empresa a alguien que crea más humano como mi hermano Edward.

Bien, lo conservaré. Lo guardaré bien oculto y nadie sabrá que lo tengo.

Bien, será mi secreto.

Tómalo como una pizca de compasión por ti, niña.

Justo antes de dejarlo en el cajón pienso que también es un desperdicio que, un libro al que le ha puesto tanto empeño y cada fibra de su ser para dedicar un mensaje así, se quede sin ser leído.

Para cuando termina la jornada laboral sigo leyendo. Aunque es pequeño y corto no quiero soltarlo, no tenía idea de que tuviera a una escritora con tanto potencial en esta empresa.

Si, son historias para complacer a su propia autora, si, les falta por pulir detalles sin embargo son historias genuinas, juveniles, frescas como una brisa de mar, en momentos tormentosos y llenos de reflexiones que te dejan helado.

En algunas historias veo un pequeño esbozo romántico, muy pequeño, casi imperceptible. No por nada ganó un premio literario por su primera historia corta.

Después de eso me dirijo al archivo de la editorial y encuentro los registros de libros publicados. Son exactamente 16 libros los que ha escrito.

No recordaba que fueran tantos.

16 libros completos en menos de cuatro años.

No es tan mediocre como parece.

Abro la aplicación y encuentro su perfil con todas sus novelas.

El precio es demasiado barato para todo el potencial desperdiciado que tiene en esa aplicación.

"estimados lectores, esta es mi primer historia en la aplicación, espero que puedan seguirme hasta el final."

No hay casi ningún comentario salvo por uno que reconozco por su nombre de usuario.

Edw2238

Hice aquel perfil sencillo con imagen genérica, los nombres elegidos al azar ED por Editor y W por Wolf, porque me encantan los lobos. Y los números 2238 por el número de mi departamento, uno que luché hasta conseguirlo con esos números exactos.  Que importa si no lo habito comúnmente, ese es mi número destinado. Con este perfil comento las novelas de mis escritoras para entusiasmarlas a seguir escribiendo. Cuando no tienen seguidores es mejor darles esperanza para que no se depriman, si se deprimen no querrán abrir sus piernas.

Que hablando de eso, el mensaje de Frida en ropa interior con imagen en WhatsNow está increíble.

Perdón, abuelo. Dije que no volveré a acostarme con alguna escritora de la editorial. Prometo que será la última vez.

Pero no puedo distraerme con... Mis otros deseos. Debo enfocarme en hacer mejorar a esta chica que por alguna razón no ha logrado despegar.

Si descubro la razón mi abuelo podrá considerar darme un mejor cargo.

En cada novela de esa autora llamada Cad-Ence he dejado un mensaje para que no se vea tan lastimero que no tenga seguidores. Incluso me hice otros perfiles para simular audiencia. Cuatro perfiles, cuatro vistas.

Nunca le he dado la importancia a sus historias porque son completamente opuestas a lo que vendemos en la aplicación web y en las novelas impresas. Amor, licanos, fantasía, pasión, novelas eróticas con las que uso la excusa de hacerlas más realistas para follarme a las escritoras a mi cargo...

¡Concéntrate, Eren. Esto es serio!

Sin embargo nunca he escrito en serio mis mensajes de aliento.

Esta vez uso mi dinero y compro todas las novelas a la vez, veamos por qué no escribes novelas de amor. Seguro es porque alguien le rompió el corazón o algo así, típico.

Después de un momento de lectura mis manos pican por escribir cientos de comentarios. Pero no lo haré, si lo hago dejaré que esa escritora sea pretenciosa y se duerma sobre sus laureles al creerse que tiene un seguidor de sus historias. Un jodido seguidor, lo más mediocre.

Sus historias tienen un alma que me cautiva entre cada capítulo, como si la misma Cadence Beckham me llevara jalándome por la mano.  Historias llenas de traición, odio, tristeza, desesperanza, locura.

La evolución de cada novela es sorprendente sin embargo, hay algo que me inquieta. Cada novela es más sombría que la anterior.

Si las primeras son una brisa de mar fresca a la juventud, estas se han vuelto la representación literaria de una persona sofocada por la vida adulta. Temas crudos y violencia familiar, ahora recuerdo a la Cadence que llegó por primera vez a mi oficina y luego la Cadence de ahora.

Su mirada se ha vuelto menos brillante y su actitud más complaciente, mirando al suelo como si fuera a castigarla.

¿Qué fue lo que pasó en estos años?

No, la pregunta debería ser... ¿Que hice en todo este tiempo?

Frida, Martha, Becky, Goldie...

Pienso en todas las autoras en las que he puesto mi atención.

Soy un desgraciado.

Hasta ahora no había leído ninguna de sus historias aunque me hago llamar su editor.

"¿Alguna vez le has preguntado la razón?"

"Averigua lo que sucede"

—Guíala, llévala por un nuevo camino...

Y si luego de eso no mejora, despídela.

No quiero despedir a alguien que tiene potencial.

***

Después de eso le entregué un adelanto pequeño a Beckham y le di un plazo para entregar cada capítulo.

Cuidé cada detalle incluso me esforcé en conseguirle una portada decente y llamativa.

Le sugerí cambiar el título "Los asesinatos en la cabaña" por algo más llamativo, esta vez no había errores.

Si historia tenía potencial, incluso a mí me había gustado.

Sin pedirle permiso a mi abuelo destiné un presupuesto a darle publicidad en las redes sociales.

Era imposible fallar.

Incluso el gran final aún sin publicar era perfecto.

Cuando los resultados de ventas de las novelas llegaron a mis manos le mostré todo al equipo de marketing excepto los resultados de Cadence.

¿Por qué? Estoy seguro que su novela fue bastante buena, ¿Entonces por qué no tiene ningún éxito?

Ni siquiera un lector aparte de mí.

Observo los resultados de las mejores novelas, obviamente son las que yo he tocado. Las que he guiado una por una y pulido hasta el mínimo detalle.

El capítulo final está cerca de salir y aún no hay ningún progreso en sus ventas.

—¿Por qué? Estuvo en mis manos y está vez supervisé los detalles, la he guiado para que fuera un éxito. ¿No fue suficiente?

Llamo a Cadence y la hago venir a mi oficina. Está vez seré menos tolerante haré que me diga exactamente por qué su mirada es sombría y que le impide escribir algo con más potencial de ventas.

Veo de nuevo las gráficas y los resultados, todos tienen algo en común.

Sexo, cambia formas, licanos, lobos, magia, fantasía y amor... Sexo.

Un autor que no puede escribir algo diferente y que no puede sentir amor, es imposible que llegue a los corazones de sus lectores.

Cad-Ence te haré salir de tu zona de confort, puliré esa habilidad tuya y convertiré a esa gema en un diamante.

Después de ver los terribles resultados de las ventas por "Misterio mortal en la choza" me dirijo en mi Bentley llamado Ben a desquitar mi indignación a un bar comercial con un par de bebidas. No suelo venir a estos antros de mala muerte, de no ser porque tenía una motivación para hacerlo.

—¡Esta noche voy a tener acción!

Veo la fotografía atrevida que me envió Frida quien por fin tuvo tiempo para discutir sobre una de las escenas de cama en su novela.

[Disculpa, tengo un pendiente que olvidé resolver. ¿Nos podemos ver mejor mañana?]

La escritora que me iba a ver aquí para acostarme con ella (por última vez) me dejó plantado.

Le escribo un mensaje a Martha y me envía una fotografía obscena donde se la está pasando a lo grande con Frida.

Olvidé que le ponen más las mujeres.

Supongo que esta noche será de jugar al solitario.

Bah, mujeres tengo de sobra entre mis contactos, seguro hay una lista para llegar y solo enterrarla.

Nadie responde mis llamadas.

¿Qué Martha se ha acaparado a todas en una orgía?

Bien, toca solitario hoy pero si vine a tomar no me iré sin un trago.

Me acerco a la barra y una voz me interrumpe.

—Un…

— ¡Otra!

En la barra encuentro una figura con la espalda descubierta y un vestido negro ajustado, en la parte de la espalda lleva atado un listón como corsé que finaliza en un hermoso moño invitando a abrirlo y ver su contenido.

No es la más bonita del bar, no parece tener una cintura bien formada como reloj de arena aunque pasa. Su cuello se ve delicioso, tiene un olor que se me hace agua a la boca, es un perfecto bocadillo. Solo debo acercarme para ver si no es menor de edad y puedo llevármela a un hotel.

—Un whisky en las rocas.

— ¡Otra!

Su voz me suena absurdamente familiar.

—Señorita dudo mucho que pueda siquiera quedarse de pie, ya es suficiente.

—Mi amiga paga, puede cargarle todas las que quiera.

—Sírvale otro trago a la dama.

Digo con aire galante, veo sus piernas, son bastante bonitas, no está tan intoxicada como para no consentir en caso de que logre convencerla de acompañarme y su olor a frutos rojos del bosque en el champú es embriagador.

—Muchash grashiash ecshtraño—La mujer me mira y todo a mi alrededor se queda helado— ¿Por qué te parechesh al eshtúpido de mi jefe?

En ese momento siento como si me hubieran dado una patada en la entrepierna.

¡Cadence Beckham!

¿Qué hace bebiendo como desquiciada en este lugar?

—Se requiere de grandes agallas para llamar a tu jefe estúpido.

— ¿Ah, entoncesh shi erash tú...? Nah... Hic... No lo creooo, ese no andaría en un bar de eshtosh.

Su voz suena graciosa y suele soltar uno que otro hipo entre oraciones.

— ¿Y cómo puedes asegurar eso?

—Porque esh un mamón.

Maika Maese

Dicen que los borrachos y los niños son los más honestos, Cady hasta las chanclas es brutalmente honesta. Por fin se revela desde el punto de vista del "Editor M4m0n" como fue aquella noche de abril en que pasada de copas, la que lo cambió todo. En realidad han pasado casi 8 meses desde entonces.. Nos acercamos al final de temporada y este es el ultimo punto de vista de Eren Eardwulf en lo que resta del primer acto. Faltan aproximadamente 10 capítulos.

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