Capítulo 29
María estaba confundida.

Después de todo, ella ya estaba casada...

—¿Por qué me miras así, María? Aunque estés casada, tienes derecho a divertirte. El abuelo ha notado que has estado desanimada estos días, ¿no sería bueno que te relajaras un poco? — la convenció Fernando con un tono paternal.

Ante tanta insistencia, María no pudo negarse y entró resignada al vestidor.

Era un equipo profesional de maquillaje, de los que trabajan con celebridades.

Aunque... ¿por qué todos los looks eran de cisne blanco?

Las reglas del juego de Fernando eran sencillas: era como un baile de máscaras donde nadie podría reconocerse, solo los ojos quedarían visibles.

Todos los invitados conversarían entre sí y después bailarían.

Al final, si alguna pareja congeniaba, podrían intercambiar contactos.

Después del maquillaje, María apenas podía reconocerse.

Todas las chicas lucían idénticas, ¿cómo podría ser divertido este juego?

María, algo resignada, se sentó en la parte trasera del salón, comiendo fruta distra
Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo