Tuya para siempre

Tuya para siempreES

Romántica
Janeth Aguilar (janetha2004)  Completo
goodnovel16goodnovel
10
2 Reseñas
74Capítulos
4.7Kleídos
Leer
Añadido
Resumen
Índice

La felicidad y el amor se convirtieron en el tesoro más importante y valioso que Paúl Nicholson y Priscilla Davis, habían encontrado juntos. Se amaban como jamás imaginaron, podrían hacerlo y se juraron amor eterno, incluso, más allá sus propias vidas. Solo que, destino se interpondría y les jugaría una mala pasada, para obligarlos a romper la promesa que día su boda se hicieron frente al altar. Sin embargo, y a pesar la terrible tragedia que acabó con todos los planes que habían trazado, sabían que ni siquiera la muerte podría hacerles olvidar juramento que un día se hicieron, ni con gran amor que estaban seguros perduraría y prevalecería; aun después de que sus vidas terminaran. Estarán dispuestos a luchar contra destino que un día los separó, para reencontrarse de nuevo y volverse a amar… más allá de sus vidas. Solo que destino tenía algo más previsto para ellos… Anthony McGregor. Un hombre adinerado, imposible, insoportable y el más detestable de todos; aparecerá para complicar sus propósitos. Una mujer que lo ha perdido todo. Un hombre que no estará dispuesto a perderla por segunda vez y que hará todo lo posible para recuperarla. Otro, cuyo único objetivo es él mismo y su amor propio. Dos hombres convertidos en uno solo, el amor por una misma mujer y una lucha sin treguas en la que solo uno de ellos… será el vencedor. Identificador 2210252494214 Fecha de registro 2022 © Todos los Derechos Reservados

Leer más

Último capítulo

También te gustarán

Novelas relacionadas

Nuevas novelas de lanzamiento

Libros interesantes del mismo período

Comentarios Deje su reseña en la aplicación
user avatar
Luna Morena
Empezando la lectura de este libro y me encanta el comienzo, se que será una historia interesante
2023-03-11 08:18:00
5
default avatar
Janeth Aguilar (janetha2004)
Bienvenidas¡¡
2023-03-08 22:21:29
5
74 chapters
Prólogo
Paúl, toma mi mano y la lleva a su boca para besarla. Estamos emocionados y muy felices, porque nuestra hija está a punto de nacer. Las contracciones se presentaron repentinamente, anunciando que la hora del nacimiento de nuestra pequeña y amada princesa, está cerca.―Te amo, cielo, me has hecho el hombre más feliz de este planeta.Susurra sobre el dorso de mi mano. Mi garganta se cierra por la emoción, así que asiento en respuesta mientras realizo mis ejercicios de respiración.―Yo también te amo, cariño ―respondo unos segundos después, porque no puedo quedarme con lo que necesito decirle en este día tan importante―. No me arrepiento de haber tomado la decisión de quedarme contigo. Volvería a hacerlo las veces que sean necesarias. Esto es lo que quiero. Soy tuya para siempre.Sonríe en respuesta. Baja nuestras manos, pero las mantiene entrelazadas.―¿Crees que tu familia algún día me acepte?Mi familia nunca lo aceptará. Mi marido le arrebató de las manos la única garantía que tenían
Leer más
Capítulo 1 Borrón y cuenta nueva
Nuestra vida era maravillosa. Habíamos luchado con mucho esfuerzo para convertir todos nuestros sueños e ilusiones en la más hermosa de las realidades.Me había casado con el hombre más perfecto del planeta. Era hermoso, cariñoso, me amaba por sobre todas las cosas y lo mejor de todo, es que, estaba segura de que nuestro amor perduraría para el resto de nuestras vidas e, incluso, mucho más allá. Estábamos hechos el uno para el otro. —El color es maravilloso —le digo a Paúl, mientras observo emocionada el rosa delicado que hay en las paredes de la que será la habitación de nuestra pequeña princesa—, estoy impaciente por ver cómo quedará todo, una vez que la decoremos. Me extiende una hermosa sonrisa que resplandece más que el sol durante un día de verano.—No puede haber una princesa sin su castillo —me dice emocionado, mientras deja su rodillo en la bandeja de pintura y se acerca a mí para rodearme con sus brazos—, te prometo que algún día te daré tu propio palacio, porque estoy dec
Leer más
Capítulo 2 La última vez
Dos semanas despuésHe notado a Priscilla muy intranquila durante estos últimos días. He estado muy preocupado por ella, porque después de lo que sucedió entre nosotros hace dos semanas, la he visto más pensativa y nerviosa de lo acostumbrado. Soy un completo idiota por haber mencionado algo como eso. Sé que fue parte de la promesa que le hice el día de nuestra boda, no obstante, nunca pensé que ella se lo tomaría tan a pecho. Si pudiera retroceder el tiempo, juro que lo haría tan solo para cerrar mi puta boca y evitar que mi hermosa esposa se preocupe por ello.Cierro la puerta de la habitación de nuestra pequeña princesa una vez que coloco en su cunita los ositos de peluche que he comprado para ella. Priscilla aún no los ha visto, quiero que sea una sorpresa para ella, un intento por remediar de alguna forma la metida de pata que cometí en aquel momento.Camino con sigilo en medio de la noche hasta mi recámara para evitar despertarla. Me siento a su lado y la observo dormir durante
Leer más
Capítulo 3 Esto es lo que soy
—¿Bebiendo a esta hora de la mañana?La voz de Wilson, me sorprende en el momento justo en que abre la puerta de mi oficina y entra sin haberse anunciado antes.—Hace muchos años que nadie me dice lo que tengo que hacer Wilson, a estas alturas deberías saberlo mejor que nadie ―le indico con fastidio―. Soy mi propio dueño, hago y digo lo que quiero cuando se me da la real gana ―me levanto de la silla, camino hasta el bar y me sirvo un nuevo trago―. Esa es la ventaja de ser el maldito amo del mundo ―giro mi cara y sonrío con arrogancia―, tener dinero es como poseer la llave maestra que abre todas las puertas del mundo y que, para otros, permanecen totalmente cerradas.Suelta un bufido antes de sentarse en el sillón.—Y esa es la principal razón por la que nadie te soporta, Anthony —su comentario me molesta, de haber sido otro, lo habría enterrado vivo bajo tierra, sin embargo, tratándose de mi mejor y único amigo, lo dejo pasar―, si no cambias esa molesta actitud y dejas tu soberbia, pe
Leer más
Capítulo 4 La niña
Estaciono y bajo de mi auto. Al entrar a la casa me sorprendo cuando observo a la Nana bajar por las escaleras apresurada y con gestos angustiados en su cara. Es algo poco común en ella, a menos que…―¿Qué sucede, Nana? ―pregunto en el acto.Su mirada es precavida. Hay cierta inquietud en ella, que no pasa desapercibida ante mis ojos. Lo que significa que este desafortunado día de mierda aún guarda sorpresas para mí.―Será mejor que entremos, hijo… ―me indica preocupada, sin embargo, noto cierta emoción en el tono de su voz―, hay algo que debo mostrarte. Necesito que estés preparado mentalmente para esto.Entrecierro los ojos y la miro intrigado. Doy un respiro profundo. Este jodido día aún no termina. Me paso las manos por el rostro con hastío y fastidio. Los problemas están empecinados en martirizarme la vida el día de hoy.―Muy bien, Nana ―le digo resignado―, guíame y muéstrame ese asunto que te tiene tan impactada.La sigo de cerca. No sé por qué, pero tengo un mal presentimiento.
Leer más
Capítulo 5 Fuera de control
A la mañana siguiente Fuertes golpes en la puerta me hacen abrir los ojos en medio de un intenso dolor de cabeza que me está matando. ¿Qué carajos hago en mi oficina? Ni siquiera recuerdo lo que sucedió el día anterior. La luz del sol impacta sobre mis córneas adoloridas. ―¡Por el amor de Dios! ¿Pueden esperar un momento? Vocifero furioso, lo que provoca que mis sienes palpiten como las entrañas de un volcán a punto de erupción. Me levanto del mueble. Observo el vaso y la botella que están tirados en el piso. ¿Qué rayos hice anoche? No logro recordar nada de lo que pasó durante las últimas veinticuatro horas. Los recojo de la alfombra y los coloco sobre la mesa. La cabeza me pulsa de manera incesante provocándome un dolor desesperante. Me dirijo a la entrada y abro la puerta, antes de que los golpes hagan que mi cabeza se parta en dos mitades. Encuentro a la Nana parada frente a mí con la mirada llena de preocupación. Es entonces cuando lo recuerdo todo. ―Tenemos que hablar, Anthon
Leer más
Capítulo 6 El atentado
¿Qué se ha creído esa zorr@? Ahora mismo voy a poner a esa desquiciada en su lugar y a acabar de una vez por todas con este absurdo e incómodo problema. ¿Qué pretende al aparecerse en mi empresa? Entro al estacionamiento subterráneo y aparco en mi plaza privada. Subo al elevador, harto y hasta la coronilla de que todo el mundo intente joderme la vida. Una vez que bajo de él, camino apresurado hasta mi oficina y con la clara intención de que esa mujer desaparezca para siempre de mi vida. Madit@ la hora en que vine a poner mis ojos en ella. No voy a consentir que venga a armar escándalos en mi empresa o que crea que puede intervenir en mi vida cada vez que a ella se le dé la regalada gana. Abro la puerta y la veo saltar sobre mí mientras llora inconsolable. Arranco sus brazos de mi cuello y la aparto de un empujón. La observo furibundo. Está desmejorada y descuidada. No queda rastro de la hermosa mujer con la que solía pasar el rato. Ha perdido peso. Hay bolsas y ojeras muy oscuras en
Leer más
Capítulo 7 Metamorfosis
―¡Nena, despierta! ―intento hacerla reaccionar por todos los medios―, tienes que salir inmediatamente de aquí, antes de que sea demasiado tarde. El agua comienza a cubrirnos y desespero cuando la veo inconsciente. Intento ayudarla, pero mis piernas están atrapadas entre los fierros y evitan que pueda moverme de mi asiento. No obstante, no voy a permitir que nada me detenga. Voy a salvar a mi familia a como dé lugar. Empleo todo mi esfuerzo para alcanzar la guantera y sacar una navaja que guardo dentro de ella. Se me dificulta abrir la gaveta, sin embargo, puedo lograrlo y me hago con ella. ―Vamos, cariño ―insisto determinado―, necesito que tú y mi princesa salgan de aquí. Las necesito vivas. Corto el cinturón de seguridad que está trabado, en el preciso instante en que el auto vuelve a deslizarse y cae en el lago. Los minutos son aterradores. La rapidez con la que comenzamos a sumergirnos es impresionante y no da espacio para pensar en nada más. Sin embargo, lo tengo muy claro, mi v
Leer más
Capítulo 8 una vida sin ellos
Despierto agitada después de haber tenido una terrible pesadilla. Clavo los ojos en el techo y comienzo a llorar con desconsuelo. Mi marido, mi hija… no seré capaz de vivir sin ellos. Los extraño con toda mi alma. Estoy devastada. Sigo negada a aceptar que ellos se han ido, que los he perdido para siempre. Por mucho que mi madre intente hacerme entrar en razón, no logro o simplemente no quiero entenderlo. Siento que me han arrancado el corazón del pecho y que mi alma quedó enterrada en lo profundo de aquel lago. No he parado de llorar desde que desperté en el hospital y supe que los había perdido. Mi vida no tiene ningún sentido si no los tengo junto a mí. ―Por favor, Paúl, llévame con ustedes ―ruego entre sollozos―. Ya no quiero permanecer en este mundo. No soporto el terrible dolor que llevo dentro de mi pecho. Tengo que hacer algo al respecto, porque no quiero seguir sufriendo de esta manera. Unas cuantas noches atrás atenté contra mi vida, producto de la gran desolación que me e
Leer más
Capítulo 9 Aflicción
Otra terrible e inquietante pesadilla me despierta de manera súbita. No he podido concebir el sueño luego de la terrible tragedia que sacudió y destruyó toda mi vida. Dormida o despierta, lo revivo todo. El sol brilla inclemente y sus rayos atraviesan a través de las cristalinas ventanas de la habitación en la que me encuentro e impactan directamente sobre mis frágiles retinas. Me tapo los ojos para evitar que la intensidad de la luz los lastime, pero una vez que me adapto a la claridad, soy consciente de que no me encuentro en mi habitación, ni tampoco en la casa de mi madre. ¿Dónde estoy? ¿Cómo llegué a este lugar? Me incorporo rápidamente y me bajo de la cama. Aclaro la vista y giro mi cuerpo con lentitud para observar todo a mi alrededor. El corazón palpita debajo de mi pecho a una velocidad vertiginosa. La habitación es hermosa y cada objeto que hay en ella me dice claramente que, en esta casa, el problema nunca ha sido la falta de dinero. Doy algunos pasos y siento que me hun
Leer más