David la miró con intensidad, sintiendo que su corazón latía con fuerza.
—Tus deseos son órdenes, mi Luna —respondió con una voz grave, debido a su propio deseo.
La conexión entre ellos era palpable, y cada palabra que pronunciaban parecía cargada de deseo y promesas. David que ya estaba duro, por la excitación que le provocó "negociar" con Amira de esa manera, y el hecho de que ella estuviera sentada sobre él, sólo tuvo que quitarse su short con cuidado para que Amira no se callera, tampoco quería que se bajara de encima de él.
Su polla dura, revotó con el gesto y Amira que literalmente sólo tenía puesto un pequeño camisón de seda y encaje con tirantes finos, se sentó sobre ella engulléndola totalmente, comenzó a mover sus caderas de forma rítmica, David le quitó el camisón quedando ambos desnudos en plena sala a la luz del sol. Haciendo de ese espacio algo intimo sólo para ellos, donde el mundo exterior desaparecía.
Amira besaba a Davis con pasión cada movimiento acentuaba su placer, con las manos apoyadas en los hombros de él, lo cabalgaba como amazonas, mientras David marcaba el ritmo con sus manos en sus nalgas, ella se acercó más a David, y este mordió uno de sus senos, Amira gimió de placer, arqueando su espalda, -Siii, hash, si Titi, más,-dijo en su delirio- David la sostuvo poniendo una mano en su espalda, con la otras acariciaba uno de sus ceno, mientras besaba y mordía su cuello- me vuelves loco bandida, te juro que te voy a follar hasta que te llene ese coño tuyo de leche, todos van saber que eres mía, aunque no te haya marcado, sólo por mi olor en ti, eres mía Amira Gutiérrez, oíste mía!-
David se paró y acostó Amira en el sofá subió las piernas de ella sobre sus hombros se enterró completamente, provocando en su hembra una oleada de placer que la hizo grita -Ah! Titi, que rico, así dame así, fóllame David, así, no pares- él la envestía con fiereza, y mordía una de sus piernas, disfrutando al máximo del placer de hacerla gritar mientras le hacia el amor, -si mi Luna grita, que todos sepan que eres mía, si mami sí, te amo mi Luna- Amira ya estaba a punto de su orgasmo y David, lo sabía por la intensidad con la que comenzaron sus paredes internas apretarlo, -Mírame Amira, quiero que me veas cuando te vengas, quiero que sepas que soy yo el que te hizo venirte de esa manera, mírame! Hash, ¡sí! -Ambos quedaron temblorosos y sudados sobre el sofá-te amo Amira Stone. ¿Lo sabes? ¿Verdad?
Amira asintió con la respiración agitada, pero disfrutando lo que él acababa de decir, se repetía para sí misma, “Te amo Amira Stone”, supo que estaban a punto de cruzar una nueva frontera en su relación. Así que era el momento perfecto para dejarse llevar por la intensidad de sus sentimientos.
- ¿Amira Stone? -Preguntó ella, escuchar a David llamarla así, le llenó el corazón de alegría y emoción. Se sentía orgullosa de su conexión con él, y esa sensación de pertenencia le daba un nuevo sentido a su vida. -Me gusta-, respondió, mientras lo miraba con complicidad. -Creo que me queda bien, ¿no crees? -
-Si, ya lo creo. Pero querida para mí, eres la “Sra. Stone”, desde que te provoqué el desmayo en la casa de Román y Vanessa. No fue tu cansancio lo que te hiso desfallecer, fue mi magia, la usé, para que no notaras que, debido a mis celos y mi ira, por ver a todos mirando el culo y la espalda desnuda de mi mujer, desplegué mi aura de Alfa, asiendo que todos bajaran su cabeza literalmente ante ti.
Amira lo miró con una mezcla de sorpresa y curiosidad. La intensidad en los ojos de David confirmaba la verdad en sus palabras.
—¿Tu magia? —preguntó, procesando lo que acababa de escuchar. El pensamiento de que su mera presencia pudiera alterar todo a su alrededor la dejó sin aliento—. Así que no era solo mi imaginación... sentí algo diferente en el aire, pero no sabía que eras tú.
David asintió, sus ojos brillando con un destello posesivo.
—No pude evitarlo, Ami. Ver a todos mirando el cuerpo de mi Luna despertó algo en mí. Mi alfa no tolera que nadie más te vea de esa manera. —Su voz se volvió más grave, cargada de emociones—. Desplegué mi aura sin pensarlo, mi poder los obligó a bajar la cabeza en señal de respeto... hacia ti.
Amira sintió una oleada de emociones. Por un lado, la ira y los celos de David eran palpables, pero por otro, había una profunda admiración y orgullo en su mirada. Sabía que esto no solo era una reacción instintiva, sino una muestra del inmenso amor y protección que él sentía por ella.
—David... no tienes que preocuparte por eso. —dijo suavemente, tomando su mano—. Sé que soy tu Luna, y eso es lo único que importa. Nadie más puede tocarme, porque yo te pertenezco, al igual que tú a mí.
David sonrió, pero sus ojos seguían brillando con esa intensidad característica.
—Lo sé, mi amor. Pero mi alfa... Zeus... no puede evitar querer marcar su territorio. —susurró, acercándose a besar su cuello con una suavidad que contrastaba con la fuerza de sus palabras—. Eres mía, y no permitiré que nadie olvide eso.
-Además mi reacción fue porque no sabía si después de lo que pasó esa tarde, me ibas a captar. Pero bueno, ya está todo resuelto. -dijo con una sonrisa de satisfacción. -Tú, mi Luna, sigue bella y provocativa que eso me gusta, que yo marco el territorio a tu lado.
Amira lo miró con ternura, comprendiendo las profundas emociones que David había estado guardando. Sus palabras la hicieron sonreír, sintiéndose completamente aceptada y deseada.
—David... —murmuró ella, acariciando su mejilla con suavidad—. No tienes que preocuparte. Yo te acepté, desde el momento en que decidí invitarte a mi casa.
David la observó con esa mezcla de deseo y devoción que tanto la desarmaba.
—Me alegra escuchar eso —respondió con una sonrisa satisfecha—. Porque no tienes idea de lo mucho que me gusta verte así, bella y provocativa. —Se inclinó hacia ella, su voz volviéndose más ronca—. No cambiaría eso por nada, Ami. Yo me encargo de marcar nuestro territorio... sólo mantente así de irresistible. Ta amo Sra. Stone.
Amira rió suavemente, sintiendo la seguridad que sus palabras le transmitían.
Luego de que Amira recuperara la cordura nuevamente algo en su cabeza hizo clic David, le había hablado en perfecto español cada vez que habían hecho el amor, y sin acento.-Titi, anoche me hablaste en perfecto español y ahora cuando me hiciste el amor otra vez. ¿Cómo así?David sonrió con picardía al escuchar la pregunta de Amira. Sabía que eventualmente tendría que explicar ese detalle, pero había disfrutado de mantener el misterio.—Bueno, mi Luna, creo que no puedo ocultarlo más. —dijo mientras le acariciaba suavemente el rostro—. Viajé bastante por América Latina en los últimos 50 años, y siempre me atrajo el español. Es un idioma tan apasionado... Y si me preguntas, creo que me preparé sin saberlo para conocerte.Amira arqueó una ceja, sorprendida y a la vez intrigada.&
Amira:—Hola, Ronny, buenos días —saludé con una sonrisa mientras entraba a la oficina.Ronny, levantando una ceja y con un tono lleno de ironía, me respondió:—Mira quién apareció, la señorita desaparecida, que no contesta el teléfono ni se digna a venir por aquí.me rió suavemente, ya estoy acostumbrada al humor sarcástico de mi amigo.—Sí, Ronny, yo también te quiero y me preocupo por ti —respondí en el mismo tono, acercándome a él—. Pero ya estoy aquí, ¿verdad? Así que cuéntame, ¿cómo va todo por aquí sin mí?Ronny me miró con una mezcla de reproche fingido y diversión, dejando escapar un suspiro exagerado.-Mejor dime ¿Cómo fue tu fin de semana con el grandulón del Sr. Stone, que dicho sea
David Stone: -Mi querido Beta, ¿cómo estás hoy? Espero que hayas tenido un buen fin de semana con Vanessa. Te anuncio que Luna Dorada ya tiene Luna. Y, además, esta noche se firma el contrato con LA FIRMA, así que prepárate: después de eso, estamos oficialmente de vacaciones.–Muy bien, amigo, ya era hora. Estoy seguro que la Sta. Amira Gutiérrez será una gran Luna, –dijo Román, con una sonrisa sincera, feliz por mí.–Ya lo creo, mi amigo. Ella es increíble. La Diosa me ha premiado esta vez, –respondí, con un entusiasmo que Román no veía en mi desde hacía años.La conexión entre David y Amira era mucho más que un simple vínculo; era un destino m
David Stone:-Tal como me imaginé, la cara de Román Smith es un poema. Me miró con cara de pocos amigos, claramente no esperaba una contrapropuesta así. Pero yo mantuve mi cara de póker, dándole la oportunidad de enfrentarse a la fiera de mi mujer. –Sonreí por dentro, disfrutando del momento. Me encanta cómo suena eso, "MI MUJER".Volviendo a la realidad de la sala de juntas, la escena era perfecta. Amira estaba sentada en su butaca, con los brazos abiertos, sus piernas elegantemente cruzadas y una ceja alzada en una clara señal de desafío. En sus labios se dibujaba una sonrisa de suficiencia que no dejaba lugar a dudas: estaba en control.Román, siempre seguro de sí mismo, se encontraba frente a algo diferente. La mirada de Amira era un reto silencioso, pero poderoso. Decía sin p
El ambiente se transformó en uno más relajado, lleno de risas y bromas. Los empleados que trabajaban en la logística comenzaron a preparar la cena, mientras todos se preparaban para una noche de celebración. Amira se levantó con una energía contagiosa y dio las instrucciones con una sonrisa llena de entusiasmo:–Chicos, hoy nos vamos a un concierto exclusivo con música cubana, –anunció, haciendo que todos se volvieran hacia ella con curiosidad. –Así que, por favor, se cambian: shorts y top sexy para nosotras, jeans y camisetas cómodas, para ustedes, porque hoy vamos a sudar bastante bailando. –Su voz reflejaba pura emoción, y los rostros a su alrededor empezaron a animarse con la perspectiva de una noche fuera de lo común.David arqueó una ceja, claramente intrigado por la idea, mientras Román y Van
Como era de esperar, pronto estallaron los rumores sensacionalistas, y los tabloides del corazón se llenaron de titulares sobre la presencia del magnate David Stone en Miami, quien disfrutaba de unas vacaciones acompañado de la talentosa empresaria Amira Gutiérrez. Las especulaciones sobre su relación y su vida privada comenzaron a circular a gran velocidad, convirtiéndose rápidamente en el tema de tendencia en las r***s s******s y en los medios de comunicación.Los tabloides no escatimaron en detalles, con fotos robadas de la pareja disfrutando de la noche en el concierto y sus momentos de complicidad en la piscina. Las historias variaban desde las más románticas hasta las más escandalosas, insinuando todo tipo de tramas, desde un romance apasionado hasta posibles compromisos."¿Está David Stone a punto de sentar cabeza con la hermosa Amira Gutiérrez?" preguntaban algunos titulares, mientras otros afirmaban: "La fiera de Miami ha atrapado al poderoso Alfa". Los comentarios y análisis
Naja permanecía en silencio, pero Zaira sentía su resistencia. Era como si su loba interior estuviera librando una batalla interna. -No es sólo cuestión de estabilidad o de comodidad, Zaira. Quiero algo más... algo que Joshua y Joaquín no pueden ofrecerme. Es ese fuego, ese poder innegable que siento que me pertenece. -Zaira suspiró, sabía que Naja anhelaba algo más allá de lo que tenían frente a ellas, pero también sabía que perseguir algo inalcanzable podía llevarlas a la ruina. Decidió suavizar su tono, intentando llegar al corazón de su loba.—Naja, a veces lo que anhelamos no es lo que necesitamos. Joshua nos ama, y Joaquín nos haría felices. Tal vez no tengan el poder que deseas, pero hay otras cosas que valen más.Naja rugió con fuerza dentro de Zaira, dejando claro que no había espacio para más discusiones. -No, Zaira. Desde ahora, te exijo que te olvides de esos dos. Para nosotras, solo hay un objetivo: David Stone… y matar a esa humana. - La intensidad en su voz era innegab
Naja sonrió, satisfecha con la respuesta. Sabía que Zaira era una pieza clave, y que, si jugaba bien, pronto la historia cambiaría a su favor. El juego acababa de comenzar, y los próximos movimientos serían cruciales.Zaira, sabía que lo que se avecinaba no sería nada fácil, sobre todo para ella. Desde que tenía memoria, siempre había sido diferente al resto de la manada, mientras los otros cachorros sentían la conexión natural con su espíritu de lobo, ella nunca experimentó ese lazo primario. La manada susurraba sobre su falta de espíritu, algo que, para su padre, Aston, era un golpe directo a su orgullo. Aston, el Beta de una de las manadas más influyentes, no podía permitir que su única hija naciera sin una loba.Desesperado por mantener su reputación intachable y por asegurarse de que su linaje fuera tan fuerte como siempre, recurrió a la magia oscura. Una bruja poderosa, conocida por su capacidad de manipular los espíritus, le ofreció una solución. A cambio de una inmensa suma de