Adriana Harper es la heredera de una de las familias más poderosas del país, inteligente, hermosa y amorosa. Ella creyó que tenía el matrimonio perfecto, la vida perfecta, sin embargo, al enterarse que todo a su alrededor era una farsa, toda su vida se destruye. Ella debe empezar desde cero, y todo lo que la caracterizaba, simplemente muere dando paso a una mujer que solo quiere una cosa… venganza. Austin Baker es un empresario exitoso, arrogante, inteligente y sumamente apuesto. Él necesita tener un hijo y hará hasta lo imposible para conseguirlo. Él no cree en el amor, ni en las mujeres. Y lo único que le importa es su dinero. Un trato entre ellos dos desatará un completo caos en sus vidas y en la de los demás. Solo hay una condición: no enamorarse. ¿Qué sucederá cuando los sentimientos se mezclen entre ellos? ¿Podrán dejar el pasado atrás?
Leer másLos integrantes de la junta se ubicaron cada uno en su puesto, Adriana se sentó en la silla de presidencia los demás únicamente la miraban como si fuera un delito estar allí.Austin se puso a su lado, mostrando su compañía y apoyo. Mike llegó y cuando los vio sonrió, hizo como si no le importara y su hizo frente a Austin. —Bueno quiero darle la bienvenida oficial a Adriana, quiero que no hablemos sobre el tema independientemente lo que haya sucedido la forma en la que ella apareció, les pido respeto —él menciona— es un tema personal que debemos de resolver ella y yo, nadie más —Mike asevera mirando a Austin— por el momento vamos a empezar con lo que tenemos pendiente y luego de eso…—Antes de que continuemos quiero mencionar algo —Austin se puso de pie tomando la mano de ella dándole una sonrisa falsa—. Adriana tendrá los mismos derechos que yo en la empresa, mis acciones son tanto mío como de ella. —La sonrisa de Mike se borró de inmediato.—Eso no lo pueden hacer —Mike dice y se p
Los comentarios en los pasillos de la empresa no se detenían, Mike pasó de largo completamente ofuscado. Muy temprano había recibido la noticia de que Adriana había sido liberada, la satisfacción que había sentido cuando escuchó que estaba herida se había borrado instantáneamente. Él lanzó todo lo que tenía en su escritorio, legalmente todo le pertenecía, no tenía porque preocuparse, pero era seguro que ella podía armarse de artimañas y hacer que él comenzara a perder todo.—Mierda —él gritó ofuscado. —Señor —dice su secretaria completamente asustada viendo el desorden que su jefe había hecho. —¿Qué pasó? —Le informo que la junta que programó es en media hora ya todo está listo —él la miro como si quisiera hacerla pedazos. —¿Crees que estoy para juntas? —Señor, pero es la junta que hacemos una vez el trimestre, usted no me ha pedido cancelarla y ya todos los informes están listos para ver los resultados de las ventas. —Está bien, iré a la junta, pero nadie puede entrar. No me i
Las mujeres sonríen al ver que lograron su objetivo, uno los guardas les dice que salgan. Todo tiene que parecer una pelea clandestina.Adriana pone una de sus manos sobre el hombro dándose cuenta que no es una gran cantidad de sangre la que está saliendo. Observando como ellas salen y notando que esto solo fue una advertencia. Ella camina hasta la reja en donde sigue aquel hombre allí custodiándola. Él la mira mostrando una total indiferencia. —Necesito que me hagan una curación sobre esto, no soy tonta y sé que les pagaron para que lo hicieran. Por su bien, espero que me saque de aquí.—Aquí no puede venir a exigir, los delincuentes no tienen ese derecho. —Puede ser, pero también le puedo asegurar que si no hace lo que le pido el próximo que va a recibir una puñalada será usted. ¿En verdad cree que soy tan poca cosa y no tengo contactos? —ella dice con su voz agitada. —¿Y pretende asustarme con lo que acaba de decir? no se equivoque, aquí solo hago mi trabajo y sus amenazas la
Austin se pone de pie y observa con repudio a Mike. Mike respira con rapidez, la rabia había subido rápidamente por su cabeza. Había confiado en Austin, no solo en la empresa, si no en el transporte de la mercancía. —¿Qué te sucede? —Austin escupe en el suelo y le habla con seriedad—. ¿Por qué me golpeas? —¿Acaso no lo sabes? No puedo creerlo, te metiste en un gran problema conmigo… claro ya entiendo todo, te aliaste conmigo únicamente para entregarle todo el puto dinero a ella o me equivoco. —Si es lo que quieres creer, créelo, no me importa y te voy a dar un consejo Mike… No me vuelvas a golpear ,no tienes idea que puede suceder la próxima vez que lo hagas. —¿Me estás amenazando? —Mike se acerca a él.—No, no es una amenaza, es una advertencia, a mí no me vuelves a tocar de este modo. No te equivoques porque aquí donde me ves tengo más poder que tú, no solo estoy asociado contigo y tengo un gran poder con mis acciones, sino que también estoy casado con la dueña de la empresa —A
Los hombres se acercaron a Adriana y sin esperar que ella pudiera resistirse, simplemente empezaron a esposarla, desde su puesto Mike sonreía. Recibir una invitación para la boda de su esposa «porque seguían casados» para él, no había sido tan malo después de todo. Tener contactos en la policía para salirse siempre con la suya era incluso la mejor parte, Adriana iba a recibir su merecido por hacerlo quedar en ridículo de una buena vez. —¿Detenida? —Austin se acercó—. Esto es ilegal, no puede tenerla de este modo, ¿bajo qué concepto la va a detener? —El oficial lo miró y bufó. —Adriana Harper está detenida por fingir su muerte, tiene derecho a guardar silencio y tiene derecho a conseguir un abogado.Ella tensa todo su cuerpo, no pensó en algo así. —No te preocupes Adriana esto debe ser un malentendido —dijo Austin— buscaré la manera de solucionarlo, ten paciencia. Confía en mí. Esas palabras… confianza, ella ya no sabía que era eso. Pero ¿qué podía hacer más? Ella asintió con su
Austin y Adriana, caminaron por el pasillo decorado con pétalos de flores, tenían una sonrisa de par en par a decir verdad, para Austin esto no era un gran problema todo esto, en realidad disfrutaba hacer sufrir a Mike. Adriana pasó de largo justo cuando llegó enfrente de Mike, le dio una mirada, una que hizo que él se transformara por completo al ver a su socio allí en el altar con su esposa. Mike apretó las manos cerrandolas con fuerza, ¿cómo se atrevía a burlarse de esa manera de él?Austin miró a su padre quien estaba plenamente sorprendido al ver como su hijo se iba a casar tan pronto con ella precisamente, él no entendía mucho y a pesar de la sorpresa estaba complacido de que su hijo por fin iba a formar su vida como un hombre responsable.Ambos se ubicaron en el altar, Adriana pasó saliva, de nuevo frente al altar con un hombre. De nuevo frente al altar con un hombre que no conocía. El juez se ubicó al frente, era un juez contratado por ella, todo estaba perfectamente diseña
Austin miraba el mensaje de ella, había adelantado la boda para la mañana, es claro que Adriana tiene afán por conseguir las cosas, por sacar a Mike del camino. Su vida prácticamente había cambiado por una mujer que acaba de conocer, aunque podría facilitarle las cosas para también cumplir sus objetivos.Lo único cierto es que su vida no sería la misma a partir de mañana. Austin fue hasta la habitación en donde tenía todas las fotos, tomó una de ella, de su madre… Todo por ella y Mike iba a pagarlo. Entre tanto, Adriana terminaba de enviar los correos en donde invitaba a una gran cantidad de personas. Adriana cierra la computadora, mira sus manos recordándose a sí misma que no debe detenerse contra él. Adriana abrió los ojos,luego de que su noche había sido tormentosa, quizá un poco más que las últimas noches de los anteriores dos años, quizá por volver a verlo hizo que todos sus pesadillas volvieran más latentes. Al bajar por las escaleras las personas a su alrededor ya estaba
Austin llegó al lugar que Mike le indicó, tenía bastante curiosidad por saber qué era lo que él quería. Mike no podía enterarse de nada de sus verdaderas intenciones, mucho menos Adriana, pero cada oportunidad que viera él la iba a aprovechar. Mike se sentó y pidió un trago. Austin sonrió internamente, Mike se sentía orillado, y cuando las personas estaban al borde del colapso eran capaces de firmar un pacto con el mismo diablo si era necesario. Austin lo analizó ¿cómo las personas podían caer ante alguien como él? que a simple vista se veía que solo buscaba su propio beneficio y no le importaba engañar a los demás. —¿Para que me citaste? no recuerdo que tengamos algo pendiente por tratar. —Necesito que como socio mayoritario en estos momentos firmes algo para evitar que Adriana vuelva a trabajar a la empresa. —Austin cruzó sus piernas y lo miró con una gran sonrisa —Ella es tu esposa. Creí que estabas feliz con la sorpresa de tenerla junto a ti de nuevo, cuando la viste de nuevo
Doménico en ese momento de nuevo sube su revólver y se lo pone la cabeza a él. Mike sonríe, nada le queda grande en la vida, no va a perder la reputación que ha ganado, no va a perder contra la mujer que fue suya una y otra vez.—No sabes como te odio Adriana, eres tan poca cosa, siempre lo has sido, lo único que tenías de valor era el dinero ahora ya no vamos a ver quién mata a quién. Porque no respondo Mike la suelta… le da una última mirada de advertencia. En verdad crees que esta vez tendré piedad de ti Adriana… si no me importó hacerte daño cuando te amaba, mucho menos ahora que solo siento desprecio por tiElla mantuvo su mirada fija en él. Sus palabras eran hirientes. Mike salió de allí bastante frustrado, el hecho de que no le han permitido entrar acompañado lo ponía en una gran desventaja, lo suficiente como para darse cuenta que ella estaba más fuerte. —Señora ¿se encuentra bien? —Doménico pregunta, ve las marcas de los dedos en el cuello de ella— luego baja la cabeza y s