* Historia completa* Nicolás: El hombre perfecto, al cual todos quieren y desean a su alrededor con tan sólo veintitrés años. Desde que tiene diez años de edad ha sido novio del pequeño Jedward. Va a la misma Universidad a la cual su pequeño novio va, sólo por orden de él. Jedward: Sólo tiene dieciocho años recién cumplidos, le encanta estar así con su chico, desde que tiene uso de razón han estado juntos en las buenas y en las malas. Aunque, el mayor se comporte "Un poco posesivo" con él, por un lado sabe que sólo lo hace para protegerlo de los demás. La posesividad, es una enfermedad un tanto inusual en las personas. Se cataloga posesividad o posesivo a alguien que quiere tener sólo para él. Eso es algo de lo que le está pasando al pequeño Jedward, su querido novio o prometido es bastante posesivo y bastante agresivo. Desde que Nicolás lo reclamó como suyo hace trece años, desde ese día las cosas se volvieron un caos total. Hay un pequeño secreto detalle que Jedward le oculta a su querido prometido: Él es igual que su padre Harry, puede tener hijos sabiendo que es un hombre.
Leer másMirando varias veces el peluche que tenía en sus manos, sonrió como un idiota enamorado por quinta vez en menos de media hora. Tenía una cita con Nicolás. Si, la primera cita como una pareja normal de casados. Estaba feliz, esa semana había sido la mejor de todas porque Nicolás se había comportado de la forma más hermosa de todas con él.Lo primero que hizo fue regalarle ese peluche morado con blanco el mismo día que salía del hospital, después de eso le regaló flores y muchas cosas más. Un tirón a su pantalón le hizo volver a la realidad, desvío la mirada hacia donde estaba su hijo Nedward mirándolo con curiosidad y también miraba al oso de peluche.Dejó el peluche aún lado y luego tomó a su hijo en bra
Liam y Dalton entraron por la ventana de la casa después de haber disparado. Justamente cuando el cuerpo de Nicolás cayó en el piso. De inmediato Liam tomó a su nieto en brazos y Dalton se percató del tiro que Liam le había dado a Marcus en la nunca había sido certero para acabar con su vida.—Vamos, Nicolás, no te atrevas a cerrar los ojos —le ordenó Liam, tomando su mano.—Gracias por venir, Liam... Se lo agradezco —murmuró, entrecortado.—Te llevaremos al hospital ¿Está bien? Pero tienes que decir que fue un robo que quisieron hacerte. Dalton limpiará la casa para borrar tus huellas y las de mi nieto y solo dejará las de Marcus —informó.
— ¡Todo es tu culpa, Nicolás! ¡Nunca debiste de aparecer en mi vida y mucho menos en las de mis hijos! ¡Ahora mi hijo está con ese loco por tu culpa! — gritó, una vez más Jedward llorando a mares una vez más.Liam solo negó con la cabeza viendo los videos de seguridad del jardín y esperando que su amigo y hermano Dalton haga un milagro. Harry trataba de que su hijo se tranquilizara porque estaba asustando a los demás con sus gritos. Noah y Nathan tomaron a sus sobrinos en brazos al igual que a sus hermanos para llevarlos hacia las habitaciones.— Tranquilízate, cariño, no lograrás hacer nada gritándole a Nicolás de su forma —dijo Harry, compresivo.— ¡Él
Mirando por la ventana de su antigua habitación, observó a sus tres hijos jugar con sus hermanos pequeños de cinco años como si nada estuviera pasando. E incluso Nedward estaba jugando con mucha inocencia y se estaba divirtiendo algo que pocas veces hacía.Se lamentaba el que Nicolás haya regresado después de tantos años de estar huyendo de él. Sus hijos no tenían la culpa de lo que su padre le había hecho a esa niña hace tantos años.Su vida parecía una montaña rusa, en un momento estaba arriba en el otro estaba abajo esperando que cualquier cosa pasara. Sus lágrimas no tardaron en salir en el mismo instante en el que la puerta fue abierta mostrando a Nicolás, no se dio la vuelta porque estaba más que seguro de que lo golpearía c
Aun podía sentir su cuerpo tenso, después de haber escuchado esas palabras de sus hijos. No podía ser Marcus, él estaba muerto y además esa persona no se parecía a él. Cuando conoció a Marcus este tenía diez años, si la misma edad que su esposo, pero eso no tiene ciencia alguna si supuestamente su cuerpo estaba enterrado en Inglaterra y no en Estados Unidos.Estaban en un avión hacia Londres como le había prometido a su padre hace unos días, estaba de lo más asustado después de lo que sus hijos les habían dicho. Después de la entrevista Nicolás se había mudado con ellos y a muy a su pesar compartían la misma cama.Con toda la tensión de su cuerpo había olvidado qué les diría a sus pad
Después de la sesión de fotos fueron guiados a los vestidores. Luego fueron llevados hacia un estudio donde había varias personas conversando entre ellos e hicieron silencio desde que entraron con los niños.— Siéntense en el sofá color negro con los niños —le indicó el productor.Tomando las manos de Ian y Joseph los ayudó a subir al escenario y los acomodó en sus piernas. Nicolás hizo lo mismo con Nedward, haciéndole cosquillas.— Creo que ya saben lo que hablaremos aquí ¿cierto? —preguntó, el entrevistador y ellos asintieron—. Okey, esto será más fácil de lo que pensé.— Eso esp
—Volvió, papá, Nicolás regresó.— ¿Qué? ¿Cómo? ¿Cuándo? ¿Por qué? ¿Dónde? —la voz preocupada de Harry se hizo presente del otro lado de la línea.—Regresó, me imagino que por su propio pie, ayer lo vi, dice que es para recuperar el tiempo que había perdido lejos de mí, porque me ama y en Miami.—Debes de salir de allí lo antes posible, no puedes quedarte más tiempo en Estados Unidos.—Ya intenté todo eso, papá, pero es imposible hacerlo. Tiene la casa vigilada las veinticuatro horas del día, hasta que me siguen en el trabajo. Me voy a volver loco si esta situaci&oac
Sus lágrimas no tardaron en salir de sus ojos por lo que estaba escuchando de su hijo. Estaba más que seguro de que alguien allá arriba lo estaba odiando. Ver a Ian mirando a su dos padres con ojos enormes le hacía sentir falta. Trataba de olvidarse de su esposo todos los días al estar en el trabajo y justo ese día lo tiene frente a él con su hijo a unos cientos metros de ellos.— ¡Nedward, Joseph! ¡Papá llegó! —sólo terminó de decir esas palabras y sus dos hijos estaban a su lado.Y en segundos los tres estaban corriendo hacia Nicolás con sonrisas enormes abrazándolo por las piernas. La expresión que tenía Nicolás en su rostro era épica. No entendía nada de lo que estaba ocurriendo, buscó los o
Dejó de sentir todo a su alrededor al ver a Nicolás parado con una sonrisa que no podía definir si era de felicidad o de pura maldad.Lo único que sentía era terror de estar con él en una misma habitación sin saber que decir o hablar. Su cuerpo reaccionó cuando la puerta fue cerrada de un portazo y su vista de inmediato fue hacia la cerradura de esta.—No... No... —intentó alejarse, pero su cuerpo chocó con el escritorio de caoba que estaba a sus espaldas.—Hola, mi amor. Tantos años sin verte ¿Y así es como me recibes? Eres un muy mal esposo —colocó ambas manos a cada lado de su cuerpo.—No puedes ser tú...