Treinta y cinco.2

El silencio es tenso, doloroso. No quiero alzar la cabeza por temor a ver miradas juzgándome. No quiero pasar de nuevo por las sospechas sin sentido. Hace dos minutos sospechaste de Pavel. Lo sé, a veces es inevitable, pero ya decidí que, por muchas sospechas, estos tres chicos son los de más confianza.

―Quedamos que no más sospechas ―anuncia nuestro conductor―, así que mi cabeza está formulando mil teorías, pero no haré caso. Pero joder ¡no más secretos!

Alzo el meñique en señal de pacto. Es infantil, lo sé, pero no sé qué más hacer.

―Si no es Ventura, entonces con Tristán ―mierda, que no quiero―. No tienes que cogértelo, pero si son compañeros de medicina, debes aprovecharlo.

Pavel tiene un punto, al ser compañera de Tristán, podría acercarme a él para espiar y descubrir qué mierda tienen que ver con todo esto, pero Tristán me da miedo. Es fácil enfrentarlo cuando estamos rodeados de gente, pero el estar sola con él me causa escalofríos. Si me quisiera hacer daño, ya lo habría hecho
Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App

Capítulos relacionados

Último capítulo

Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App