Lucero, tras sacrificar su vida para salvar a su familia, amigos y el hombre que ama, vivirá una tormentosa pesadilla junto al ser que más daño le hizo en el pasado, su ex novio Ramiro, quien solo desea vengarse de ella y su familia. La luz regresará a su vida trayendo consigo a las personas que ama y harán lo que sea para salvarla, enfrentando en el proceso nuevos obstáculos que traerán oscuros secretos del pasado, descubriendo que Ramiro no será el único enemigo que deban enfrentar. ¿Será posible que esta vez Sharif y Lucero puedan estar juntos al final, o el mayor temor de él se hará realidad perdiendo nuevamente a la mujer que ama en sus brazos? Libro 1: Pasión Marroquí Libro 2: Pasión Catalana Registrada en SafeCreative Código de registro: 2304074002327 TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS © Prohibido cualquier forma de comercialización, distribución o plagio de esta obra.
Leer másLucero Todavía recuerdo cuando Ali me alentaba en mis momentos de tristeza diciéndome que un día encontraría a alguien que me haría muy feliz, me demostraría lo que era amar de verdad y formaría una hermosa familia con esa persona, y hoy, que celebramos el segundo año de vida de mi hijo, puedo decir que tenía razón. Estos años trajeron consigo muchos cambios buenos en nuestras vidas, así como también trajeron momentos difíciles siendo el fallecimiento del abuelo de Ali el golpe más duro para él, se hicieron muy cercanos, a tal punto que su relación no solo iba de abuelo – nieto, sino que José se convirtió en el padre que siempre quiso y necesitó Ali, dos roles, dos figuras que perdió de un solo golpe cuando lo llamaron una noche diciéndole que había fallecido por causas naturales cuando dormía, por suerte no sufrió, solo se apagó su cuerpo hasta que su corazón dejó de latir. Él estuvo con una fuerte depresión un buen tiempo, aunque en medio de todo recibió la noticia de que su abue
Por desgracia Abiud debió sacarme a rastras del lugar al darse cuenta de que no quería irme. Nos llevaron a una cabaña que estaba a unos quince minutos del lugar y nos indicaron las habitaciones en las que dormiríamos, así como también dejaron ropa para nosotros, no sé de dónde la sacaron, pero me encanta este servicio. —¿Te diste cuenta que las prendas son de Clyde B.? —Pareces un niño —él y su amargura, pero esta no se la paso. Gateé en la cama quedando sobre él quien no dudó en acomodar sus manos en mi cintura. —Estoy feliz y no quiero que lo arruines con esa actitud. —Bueno, quizás pueda cambiar con un poco de tu atención ya que estamos a solas. —¿Ah sí? —asintió. —¿Y qué atención desea mi suggar marroquí? Porque seguirás siéndolo y más te vale tratarme bien, sabes que soy muy exigente y de gustos finos —me besó robándome el aliento. —Me encanta verte feliz y conocer a tu abuelo fue una gran sorpresa. —La mejor, aunque sigo sin comprender cómo supo ella sobre la relación q
Alison —Disculpa, ¿de dónde nos conocemos? Tu voz me es familiar. Ella era una mujer muy hermosa, tenía un vestido de baño de una pieza color negro que moldeaban sus curvas, sus tatuajes resaltaban en tan blanca piel y tenía una mirada gélida que se intensificaba en tan profundos ojos negros, mismos que me recordaron un poco a Karhel y… —Eres la mujer de la llamada —sonrió con cierta travesura. —Te dije que nos veríamos pronto. —¡Ömmu! ¡Ömmu! —un niño de quizás tres años vino corriendo siendo cargado por ella y estos se abrazaron con mucho amor. —Disculpe… ¿Le dijo abuela en islandés? —preguntó Rasti confundido, aunque Abiud y yo no sabíamos qué nos había sorprendido más, que el niño hablara islandés o que Rasti conociera el idioma. —¿Cómo sabes qué idioma es? —preguntó Abiud. —En mis tiempos libres me gustaba ver programas de otros países y leer… No siempre estaba fumando, aunque… a veces hacía las tres cosas —respondió tímido haciendo reír a la mujer y el niño, quien estaba
Un mes después Ibiza, España Alison Música, alcohol, sol y playa, esa es la combinación perfecta para sanar un corazón roto, porque no es lo mismo pasar un despecho encerrado en una habitación fría y lúgubre a tener que hacerlo frente al mar de Ibiza donde la diversión no termina, y en mi caso, que tenía un corazón fracturado en mil pedazos por lo ocurrido hace más de un mes, era justo lo que necesitaba. Al menos reconozco que valió la pena todo lo que soporté, puesto que Luz y Sharif quisieron darme un capital para que empezara una nueva vida, así como también me hicieron socio de los negocios en los que ella estaba involucrada gracias a Omar. Sin duda, la reconciliación entre ellos sirvió de mucho al ser hoy día tan cercanos. Pero no usé todo mi dinero en este viaje, no, sino que después de ayudar a mi mamá con el trámite del divorcio, darle un par de golpes a mi padre (en defensa propia), decirle sus verdades y sacar sus cosas a la calle con el mayor gusto del mundo, me enfoqu
Lucero Al salir de la sala me quedé en un enorme pasillo esperando a Sharif, me sentí bastante inquieta por lo poco que hablé con Omar y lo que me contó de Ramiro me dejó con un sin sabor de boca, por tal motivo, hablé con uno de los guardias para que me permitieran hablar con él, al comienzo me lo negaron, pero bastó con hacer una poderosa llamada para conseguir lo que quería, así que aquí me encontraba en otra sala con los nervios de punta. —¿Qué haces aquí? —fueron las primeras palabras de Ramiro dejándome paralizada. No me atreví a levantar el rostro, pero de reojo veía cómo se acomodaba en la silla siendo a su vez esposado en la mesa, entonces lo vi, no era ni la sombra del hombre que había conocido, estaba muy golpeado y era evidente que su estancia en este lugar era peor de lo que nos contó Omar minutos atrás. —Te hice una pregunta ¿O solo viniste para ver lo que me han hecho y restregármelo en la cara? —no era déspota pese a la dureza de sus palabras, sino que más bien se
Sharif Lucero insistió en no querer dejar pasar más días para visitar a mi padre, así que habló con Karhel informándole que iríamos y este envió una camioneta junto a dos de sus hombres, en principio fue extraño, pero él nos explicó que el lugar no era una cárcel común y corriente, sino que era una exclusiva de alta seguridad que usaba para beneficio propio, palabras suficientes para no hacer otra pregunta puesto que era evidente que tenía que ver con su otra vida. —Estás más nervioso de lo que imaginé. —Lo siento, son tantas cosas que, supongo, en parte no quería venir, pero sé que lo necesito. —Es lo mejor —ella me regaló su bella sonrisa dándome tranquilidad. La puerta se abrió siendo mi padre quien ingresó a la sala junto a un guardia que le retiró las esposas y al salir este, se sentó frente a nosotros. —Me alegra saber que estás bien —dijo suavemente mirando a Luz. —Gracias, aunque al parecer no puedo decir lo mismo —comentó con tristeza al ver su labio partido y un ojo m
Lucero Han pasado algunas semanas desde que esta pesadilla por fin terminó, mi recuperación ha sido excelente y más por la atención que me dieron en el hospital gracias a Bayek, incluso he podido caminar sin dificultad o riesgo de aborto ya que me habían ordenado reposo absoluto, aunque Sharif y mi padre siguen molestando bastante diciendo que no debería sobre esforzarme. Ali, por otra parte, es quien más me apoya acompañándome a caminar y me motiva a concentrarme en otras cosas para no aburrirme, así que en este tiempo nos dedicamos a sacar todas las cosas de Rosario, hacer remodelaciones en la casa dándole otro ambiente y así mismo hicimos con la casa de Paz, puesto que ella comenzó los trámites del divorcio y gracias a un contacto de Sharif agilizaron el proceso, ahora solo falta que el abogado envíe los papeles para que ambas partes firmen y ella puede ser libre de ese tortuoso matrimonio en el que ha sido tan infeliz. No obstante, es imposible que no exista cierta sombra de tr
AlisonDesde que Luz perdió el conocimiento en esa bodega he pasado las peores horas, días de mi vida, aquel instante me paralizó por completo recordándome cuando la encontré tirada años atrás por la golpiza que le dio Ramiro y con ello el aborto, temía que lo próximo que me dijeran era que ella y/o el bebé habían muerto. No podía soportar la idea de perderla y Sharif mucho menos, pero ahora, dos días después de la noticia, Abiud me había convencido de venir al hotel para descansar un poco ya que solíamos venir a ducharnos y enseguida regresábamos al hospital.—Alison, llegamos —apenas pude levantar la vista divisando la habitación.—No me di cuenta en qué momento bajé del auto o subimos al ascensor…—Lo sé, pero igual para eso me tienes a mí, para evitar que te estrelles —su voz era suave, comprensiva. —Ven, vamos a ducharnos, lo necesitas.Me dejé llevar por él, a pesar de todo estaba más tranquilo y de vez en cuando me refugiaba en su pecho bajo la lluvia artificial. Regresamos a l
Días después Sharif Los primeros dos días fueron los peores para todos y de no ser porque Karhel tenía un helicóptero; no habríamos podido traerla al hospital a tiempo, los demás tuvimos algunas heridas; pero nada tan grave como ella, lo peor era que nadie nos daba información de su estado y cuando al fin salió el doctor tras muchas horas de espera, este nos dijo que Lucero tenía un diagnóstico reservado, Alison y yo enloquecimos, pero al intervenir Abiud (quien era el más centrado de todos), el doctor nos dijo que lo mejor era prepararnos para lo peor porque su cuerpo no parecía querer estabilizarse y tanto ella como el bebé estaban en riesgo de muerte. Obviamente este golpe fue fuerte para Alison, Adolfo y para mí, pero hoy, por fin podía estar más tranquilo al saber que Luz respondía al tratamiento, seguía en cuidados intensivos, pero al menos estaba fuera de peligro. —Sharif, llevaré a Alison al hotel, ¿vienes con nosotros? —dijo Abiud. —No, yo me quedaré con Adolfo en caso d