Amar a alguien es... Se define en todas aquellas primeras veces con esa persona. El olor de su piel a primera y última hora del día. Besar sus labios por primera vez y sentir lo suave y torpe que pueden llegar a ser. El color de sus ojos y el rubor intenso de sus mejillas al susurrar a su oído. Esa primera sensación de tocarlo, de sentir su calidez. Y quizá al final, si se trata de entregar todo poco a poco, día a día, sonrisa a sonrisa.
Leer más[TANNER WAY]Un par de ojos verdes me observaron.Una vez.Otra vez.Y una vez más.Era un chico.Cabello rubio oscuro, un poco o demasiado largo.Mejillas rosadas.Labios delgados.Una nariz recta.Sabía quién era, sin embargo, jamás había hablado con él. Nunca lo había visto asistir a clases normales dentro de la preparatoria.Owen Haner, ese es su nombre.Estudiaba clases avanzadas desde el primer día dentro del instituto, quizá era uno de los únicos estudiantes que lo hacía cada año.El año pasado había ganado un concurso de novela; escribiendo una novela realmente buena.Hacía un a
Miré a Sam por lo que pareció demasiado tiempo; después simplemente me dejé caer en la banca más cercana mientras presionaba con fuerza la taza de café a medio beber, el líquido caliente se derramó por mis manos, pero solo pude sentir la cálida sensación que dejó mientras caía al suelo.Sam se sentó a mi lado, su silencio se hizo más pesado a medida que los minutos pasaban. Mi cuerpo temblaba pero ya no era por el aire frío que comenzaba a colarse por entre las capas de ropa que llevaba puesta, sino porque tenía miedo de verdad. Probablemente Sam lo tomara bien y me dijera que era un completo estúpido una vez más o simplemente comenzaría a odiarme y sinceramente aun no estana preparado para ser rechazado, no por él, no por mis padres… Por nadie.—¿Sam? — podía sentir el nud
Abracé con fuerza mi cuerpo mientras las lágrimas seguían cayendo de mis mejillas, ¿qué diablos se suponía que debía hacer ahora? Observe una vez más mi rostro golpeado en el espejo del baño, los golpes no significaban nada comparado a lo que mis padres dirían cuando se enteraran del por qué Joseph y yo habíamos discutido.Abrí el botiquín y saque un par de píldoras para calmar el dolor que recorría mi cuerpo en pequeñas oleadas, tome dos sin agua y salí del baño, mi madre estaba sentada en el borde de mi cama, no alzó la mirada cuando me quedé de pie observándola.—Tu padre trató de explicarme lo que pasó — susurró, su mirada verde ahora sí se encontró con la mía, sus ojos estaban enrojecidos pero no había ninguna lágrima en su rostro. 
—¿Qué fue lo que sucedió, Owen? — la voz de Mackenzie me hizo voltear a verla, estaba sentada de manera rígida mientras su mirada repasaba mi rostro, yo dejé a un lado el té que me había llevado y suspiré, mis ojos volvieron a mirar la puerta donde esperaba ver ya a mi padre.—Creí que no ibas a hablarme en mucho tiempo — murmuré, la escuché moverse incómoda en el asiento a mi lado, tocó con suavidad mi mano y yo la aparté rápidamente, lo menos que deseaba era que empezara a hacer aquello de nuevo.—Owen…—¿Qué es lo que quieres, Mack?—Yo…—Mira, en serio, no estoy de humor para tratar de adivinar qué es lo que necesitas o quieres de mí. Me he pasado el fin de semana tratando de comunicarme contigo y Joseph, sin embargo, ninguno de los dos hizo alg
Llegamos a la tienda de conveniencia donde anteriormente había visto entrar al grupo de chicos con los que iba, ahora el lugar estaba vacío salvo por nosotros dos y la chica castaña de la caja registradora. Vi a Tanner caminar dentro mientras yo me quedaba de pie en la entrada como un idiota, la chica le dio una mirada a él y luego a mí, después volvió la vista hacia la revista de moda que estaba leyendo. — ¿Té helado o café? — preguntó Tanner cuando volvió a mi lado, sostenía dos bebidas en las manos.— Tomaré el té, gracias.— De nada — me dio una de las pajitas y yo la tome con una mano temblorosa, Tanner me miró, mis mejillas se sonrojaron de inmediato.¿En serio? Caminamos hasta una de las bancas de picnic cercanas a la tienda y nos sentamos en silencio de nuevo; no es que tuviera mucho que decirle a Tanner o que preguntar. Realmente su compañía era cálida, pero me atormentaba un poco aun no podía dejar de pensar en que él estaba enamorado de Mack al ig
Desperté cuando la luz del sol cayó directamente sobre mi rostro, restregué una mano contra mi rostro y gruñí cuando mi cuerpo protestó al moverme, me sentía tan cansado.Pasé una mano por las cobijas y entonces lo noté, la calidez de un cuerpo contra la palma de mi mano, cerré los ojos y traté de recordar, ¿Qué diablos había hecho la noche anterior? ¿Dónde diablos se supone que estaba?Miré a la izquierda y vi a Cole aún dormido.Lancé un suspiro, de todas las personas que había pensado encontrar esa mañana a mi lado jamás pensé que sería realmente Cole quien estaría ahí, realmente aquello apestaba.Tomé mi ropa y me vestí en silencio, aún con el dolor sordo avanzando por todo mi cuerpo, Cole me llamó.—¿Te vas? — volteé a verlo y me puse la camisa azul que la noche anterior había llevado y el par de pantalones negros, asentí en su dirección. Lo vi ponerse de pie aun desnudo y admiré lo hermoso que era; lo mucho que ahora dolía recordar que no lo tenía
Nos conocíamos desde siempre.No recuerdo un día sin que ella estuviera ahí o algún día sin que Joseph estuviera a mi lado.Sabía que Mackenzie estaba enamorada de mí desde que entramos a la escuela secundaria, y también sabía que Joseph la amaba a ella desde que estábamos en primaria.Y estúpidamente creí que ella se cansaría y me dejaría tranquilo, al final solo podíamos ser amigos y nada más, pero jamás habíamos hablado al respecto. También imagine que con el tiempo y mientras crecíamos Joseph le diría que estaba enamorado de ella y me dejaría, sin embargo, aun seguíamos viéndonos, besándonos o teniendo sexo en su casa, y ahora, ahora Mackenzie hacia algo como eso.Había caminado en silencio a casa desde ese momento.Con un Joseph molesto que había preferido irse antes
“¿Es tu novio?”Esas tres palabras golpearon mi rostro una y otra vez.Sus ojos azules ya no eran cálidos.Sus ojos azules eran fríos.Demasiado fríos.Él…¿Qué diablos sabía él?—¡Oh por dios Owen! es una broma – su risa levanto ecos en mi mente, quería vomitar, quería llorar, quería alejarme de él. Sus ojos seguían siendo tan fríos.Es… es mi hermano – murmuré, mi voz era apenas un susurro, él inclinó un poco el rostro para escucharme — es mi hermano — repetí.— ¿En serio? No se parecen – dijo, mientras miraba a mi hermano que aun sonreía escuchando a la chica.— Supongo – mis manos temblaron, el vaso de té helado cayó de lado, Tanner me observo con detenimiento.
"Estúpido Tanner""Estúpido Joseph""Estúpido Owen, estúpido"Esa fue la nota que escribí cuando volví a casa.No ayudaba en nada, sin embargo, me calmó un poco. La observé un largo momento antes de arrugarla y tirarla al suelo de madera de mi habitación.Mi segunda nota fue un poco más triste.▪︎¿Me gustaría cambiar?¿Me gustaría ser diferente, ser normal? ¿Me gustaría tener a alguien a quien amara y que amara de nuevo?▪︎La tercera fue solo su nombre…"Joseph"Escribí un par más.Luego simplemente me quedé observándola en silencio.Era absurdo.Era demasiado absurdo que me sintiera de esa manera, cansado, triste, ansioso.No quería complicar las cosas con Joseph, pero de