35

Daniel salió de la estancia en la que se encontraba su padre para ir a la habitación en la que Valdius agonizaba y se dio de bruces con Ibrahim que llevaba un plato con una especie de papilla. Daniel miró el plato mientras Ibrahim se lo ponía bajo las narices.

—Al viejo cada vez le cuesta más comer.

Daniel tendió una mano y le quitó el plato.

—Yo se lo daré, quiero verle antes de volver a La Colonia.

Ibrahim pareció aliviado y se largó sin protestar. Daniel se preguntaba si sentiría algo hacia Valdius. A fin de cuentas, todos aquellos hombres que ejercían de soldados para Ezequiel eran también hijos de Valdius.

Daniel cogió una de las linternas que había sobre una roca a la entrada del pasillo que llevaba a la habitación de su abuelo. Era la única zona de la cueva que mantenían en absoluta oscuridad porque parec&

Sigue leyendo en Buenovela
Escanea el código para descargar la APP

Capítulos relacionados

Último capítulo

Escanea el código para leer en la APP