Epílogo.
★Ruth.

El día en que desperté, no recordaba absolutamente nada de lo vivido con Leonel en el cuerpo de Amelia. Solo podía recordar el infierno que Marcus me hizo pasar. Pero al ser besada por Leonel, sentí que la venda de mis ojos se desvanecía. El cálido contacto de sus labios me trajo a la memoria los paseos bajo la luna y las risas.

Comencé a recordar con ese beso todo lo que me unía a mi amado Leonel, desde las tardes de café en el parque hasta las conversaciones profundas bajo las estrellas.

—Lamento haberte hecho esperar, amor —mencioné, sintiendo su mano fuerte en la mía.

Hasta la fecha no lo he soltado.

Amelia y yo, irónicamente, nos volvimos amigas. Ella cambió mucho y se casó con el hermano de Leonel. Mi cuñado abandonó el mando de las empresas Riviera, dándole el poder absoluto a Leonel.

Amelia ahora con su corazón generoso, abrió un centro de beneficencia para niños y ancianos en el corazón de la ciudad; ahora, todos la conocen como la mujer que transforma vidas
Capítulos gratis disponibles en la App >
capítulo anteriorcapítulo siguiente

Capítulos relacionados

Último capítulo