—Señor Sanlúcar, —su asistente titubeo, —Usted no puede solicitar una cita en el registro civil Apenas escuchó aquella negativa, dejó los documentos que revisaba y alzó la vista, su verdes iris destellaron con irritabilidad esperando que su asistente explicara; ¿Por qué razón, alguien le negaría una cita en el registro civil para su boda con la mujer que él había escogido? Toda orden era cumplida por el hombre más poderoso de Chicago. Ella, Maggie, coloco en la mesa un acta de matrimonio, la cual Vicenzo no observó. Él requería respuestas no quería documentos. Su asistente era algo torpe y no encontraba las palabras exactas para darle la noticia, trago saliva y sintió las piernas temblarle como si ella fuera la culpable o la ineficiente. —Es… es, que usted ya está… casado Señor … Vicenzo se dejó caer pesadamente sobre el respaldo de su cómoda silla giratoria, tomó el papel en sus manos, observó con detalle la firma, analizó cada línea y cada punto, si, efectivamente en sus manos había un acta de matrimonio que él no recordaba haber firmado, o que él no lo había hecho, esbozó una sonrisa, le encantaría recordar el rostro de su esposa… Helen —Búsquenla, Deseo conocer a la señora Sanlúcar
Leer másLoraine pido que pusiera música de verdad así que se salió con la suya. La fiesta se animó bastante, Amery bailo toda la tarde con ella mientras que Drago se quedó observando a su esposa sentad en una mesa solo, me provocaba pena, pero por algún motivo él estaba completamente renuente a dar su brazo a torcer con la mujer que amaba.La noche cubrió nuestro hogar, los invitados se habían marchado ya, solo quedamos Vicenzo y yo. Mi padre dormía en la habitación de Peter, ese pequeño guerrero no descansaba nunca, tenía una energía inagotable, cuando la noche nos cubría ese pequeño caía rendido. Era tan hermoso verlo dormir, lo lleve a su cuna, cerré la ventana para que el frio no le provocara un resfriado. Observe abajo, la vigilancia, más hombres que custodiaban la casa de Vicenzo.—vamos papá ve a descansar— con lentitud se levantó del sofá, pedí que le prepararan la habitación de huéspedes, esa noche dormiría y era muy probable que eso sucediera muy seguido.Al menos las mucamas ya m
Matías y Loraine seguían analizando el reloj, detrás de ella estaba Drago observándola de arriba abajo. Ambos me observaron y aseguraron que no habia peligro.Tome el reloj para observarlo, la maquinaria suiza y bronces españoles. Observe la esfera en porcelana de buen calidad a simple vista, mostraba una escena campestre en el centro detrás de las manecillas, la numeración era de estilo romana, debajo un péndulo de varilla con lenteja regulable. En el frente cristal con adornos arabescos y amorcillos en color dorado, eran como guías de flores. En la parte superior de la madera sostenía una pequeña escultura en bronce de un ángel tocando instrumento de cuerdaVicenzo me abrazo, me tomo de la barbilla y levanto mi rostro para que lo mirara los ojos.—Al fin todo acabo. —él estaba confiado en eso. y me trasmita es confianza.Recordaba la actitud de Stefano, no daba la pinta de ser realmente un hombre malo. Ni siquiera pudo dispararme cuando tuvo la oportunidad.—Eso creo.—Tomemos un t
Envuelto solo en papel blanco y un espantoso moño rojo, ese extraño paquete puso tenso a todos.Le pedí a mi padre que llevara a Peter a dar un paseo, al menos que se alejaría un par de cuadras, por la seguridad de ambos, Amery le acompañaría, esto parecía ser un ataque para volver a arrebatarme a Peter. Él me pido que fuera con ellos, mi corazón estaba dividido, necesitaba estar con Peter asegurarme yo misma que el estaría bien, pero Vicenzo no deseaba apartarse de ese maldito obsequio. Y necesitaba saber que el estuviera bien.—Vamos papá yo estaré bien, necesito que protejas a Peter —le insistía en que debía marcharse, esperábamos en que esto no provocaría una explosión muy grande.—Helen no debes arriesgarte, ni Vicenzo. Peter necesita a ambos, deberían llamar a equipos capacitados…—No sucederá nada, pero necesito que Peter este lejos… ¿debemos despedir a los invitados?—Lo mejor es no alármalos… —Sugirió Amery, —primero descubramos la complejidad de la bomba.—Yo mismo lo hare
La pequeña fiesta seria en casa de Vicenzo, era amplia sobre todo el jardín de atrás, todos los invitados eran amigos de los socios de él, mi personalidad era distinta, antisocial, tuve solo una amiga y se mudó al extranjero saliendo de la universidad.Me sentia extraña en este lugar rodeada de gente que no conocía. Todos nos saludaban y felicitaban, las esposas de los socios comentaban que hermoso era mi vestido, y así fue como poco a poco empecé a integrarme a mi propia fiesta.—Muchas felicidades a la novia, —escuche la voz de una mujer conocida detrás de míMe gire confundida tal vez mis deseos me empujaban a esperar una buena sorpresa, al ver a la hermosa detective afroamericana salte de alegría y lance un grito. —¡Loraine!, —salte para abrazarla, a un lado suyo con una caja de regalo, enorme estaba Amery. Alce los brazos y lo atrape con ellos.—Muchas felicidades Helen te deseo lo mejor —él se inclinó me abrazo con una sola mano y froto con cariño mi espalda. —Te vez radiante,
La semana fue un desastre, correr de un lado al otro, entre prueba de vestido, decidir la decoración de la iglesia, escoger salón, elegir el menú, elegir el vestido adecuado para este día tan especial y único, escoger a las madrinas, preparar las invitación, los pendientes no acababan, y todo sin descuidar un solo minuto a mi pequeño y hermoso Peter.Vicenzo anuncio en el periódico nuestro futuro enlace matrimonial. La lluvia de felicitaciones llegaba con obsequios y tarjetas con emotivos mensajes. Apenas pude sobrevivir para llegar a este día, un poco cansada, un poco ojerosa, pero muy ilusionada todo valía la pena y en cada decisión estaba mis deseos de hace este día inolvidable para ambos.El espejo frente a mi casi podía hablar, y lo único que me decía era que lucía como un estropajo malgastado. Con maquillaje y brillo intente cubrir las enormes ojeras y dale un poco de color a mis mejillas, habitualmente no usaba maquillaje, pero el diablo ameritaba.Recogí mi cabello en una gor
Vicenzo me sorprendió esta mañana antes de salir para el trabajo invitándome a cenar, me pidió que me pusiera algo lindo y estuviera lista, las reservaciones eran a la siete de la noche, en un exclusivo restaurante de ciudad. Como era su costumbre me obsequio un vestido para la ocasión.No podía negar que Vicenzo tenía un exquisito gusto para escoger los vestidos.—Luces preciosa —su ojos me observaban con un encanto, me hacía sentir que yo era la mujer más hermosa para él.Me extendió la mano para que bajara la escalera, y mientras bajaba escalón tras escalón, Vicenzo no dejo de mirarme, ni parpadeo una sola vez. Tome su mano y un escalofrió corrió por mi brazo hasta mi hombro, como si fuera la primera vez que saliera con él.—Eres muy hermosa Helen. —me tomo con un brazo de la cintura llevándome a él, acercó su rostro a mi oído y sentí su aliento cálido sobre mi mejilla, sus labios depositan un beso, mi corazón palpito con ese delicado acto —me provoca… quitarte ese vestido Helen.
Las noticias llegaron, Vinicio pasaría más de treinta cinco años en prisión, Aurora veinte años, pero tendría que recibir atención psiquiátrica para resolver sus traumas. Alexandra fe liberada un par de días después, supe por Amery que le siguieron los pasos para dar con su hermano Stefano pero no sería tan tonta de llevarlos hacia él. Vicenzo le hizo una última visita en la cárcel a su hermano, pero nunca converso conmigo sobre lo que hablaron ese día, y yo no quise interrogarlo, a pesar de ser solo una víctima sentia que algo de todo eso fue culpa mía. Mi padre pudo demostrar que fue una víctima de Vinicio, salió impune y gracias a la ayudad de Vicenzo logro recuperar la estabilidad de nuestro pequeño banco. Me prometió que en cuanto Peter crezca un poco más, podre empezar a trabajar con él para conocer su funcionamiento. Después de todo es lo único que él tiene para heredarme. El cumpleaños de Peter estaba cerca, era el primer año que celebraría una fiesta, con pastel, regalos,
Camine de un lado al otro en la habitación, no podía estar ni un minuto en paz con Peter en mis brazos, ¿Por qué? debía estar angustiada de nuevo. Me acerque a la cama y tome a Peter.Lo cubrí de beso. Era mío, solo mío,—Cálmate Helen, él no puede quitarte a Peter —lo decía con tanta seguridad, pero el era padre de Peter, habia una orden para realizar una prueba de ADN.Era un cretino, aun recordaba sus palabras“Por mi pueden pudrirse” .—Es que no lo conoces, es un tramposo, un mentiroso, y su esposa Samanta está detrás de todo esto, ella le pidió que buscara una mujer para embarazarla, después le quitaría al niño, me escogió a mí. —no podía pensar, volver a vivir el infierno de los brazos vacíos, imaginarme de nuevamente sin él.Vinicio será despiadado, me impediría verlo, lo pondría en mi contra. Hará todo para arrebatarlo de mi lado. Estaba viendo el escenario mas oscuro de todos.Me provoca tanta desesperación imaginar de lo que era capaz de hacer, la primera idea que cruza por
Apenas lograba calmarse, cuando intentaba contar lo que habia sucedido, el llanto se apoderaba de ella. Aurora me hacía sentir mucha compasión. No debería, mis sentimientos hacia ella debían ser odio y desprecio. —El me llevo a esa clínica con engaños, cuando desperté mi hijo ya no estaba, el ordeno todo para que hicieran creer que mi hijo había muerto dentro de mi vientre, él lo mato, me lo arrebato.—Los estudios revelaron que su producto…—No es un producto, era mi hijo,—reclamo llena de colera — estaba creciendo dentro de mi sano y fuerte, yo era simplemente una sirvienta, mayor que el por unos años eso era cierto, por eso el solo jugo conmigo, me prometió que le contaría a su padre y que defendería este amor, eso fue una mentira, fingió estar feliz todo el tiempo, apoyarme y me regalo ropa para su primer hijo, juguetes, una cuna,—era inexpresiva, pero doliente, miraba al frente fijamente, como si reviviera el momento.Yo no era indiferente a todo ese dolor que sentia, la rabia,