Isabela Walker es una mujer fuerte y determinada que ha crecido en la finca "EL NOCEDAL”situada en las afueras de la gran ciudad de Kansas. Su vida gira en torno al cuidado del ganado, los caballos y las cosechas. Tras la muerte de su padre, Isabela se encuentra al borde de la quiebra, luchando por mantener a flote la herencia familiar y pagar las deudas que amenazan con arrebatárselo todo. Un día, recibe la visita inesperada de John Sider, un hombre ambicioso y astuto con una visión clara: convertir la Finca "EL NOCEDAL" en un lujoso barrio residencial para la high society. John, con un apetito voraz por los negocios y un historial de éxito en la construcción, está decidido a adquirir esas tierras a toda costa. Su oferta, aunque generosa, pone a prueba la lealtad de Isa a sus raíces y su determinación de preservar el legado de su familia. Isabela y John pronto se encuentran en un tenso enfrentamiento, donde las líneas entre el interés personal y el honor familiar se difuminan. Sin embargo, a medida que John pasa más tiempo en el rancho, comienza a ver la belleza y el valor de la vida rural, así como la pasión y el coraje de Isabela. Lo que empieza como una transacción comercial se transforma en una lucha interna para él, quien se debate entre sus ambiciones y un creciente respeto, e incluso afecto, por esa mujer y su modo de vida. Mientras tanto, Isabel descubre secretos de su padre y del rancho que podrían cambiarlo todo. Viejas disputas familiares, contratos escondidos y alianzas inesperadas salen a la luz, revelando que el futuro del rancho "EL NOCEDAL" no solo está en juego por la llegada del Sr. Sider, sino también por el pasado que aún tiene cuentas pendientes.
Leer másCapítulo 013AMISTADIsa se estaba divirtiendo, el ambiente era bueno y las personas tan cálidas como siempre. Bob estaba atendiendo un puesto de comida junto a otros voluntarios del ayuntamiento y hasta había podido saludar a la mamá de Emma cuando la vió mirando un puesto de hilados y tejidos. Sabía que todos los años se realizaba un evento así y de joven también había participado con su padre en el puesto de la iglesia, pero con tantas cosas se había olvidado y estaba agradecida de que Marck insistiera. -Ten .-Una jarra de cerveza llegó a su mano. Marck bebía de otro y los chocó como si brindara. -Gracias ¿Quieres tomar asiento? -Miró un poco el ambiente tan abarrotado, pero no había lugares libres. El centro del lugar estaba siendo usado como pista de baile y muchas personas se chocaban por lo que no era opción. -No veo donde, mejor vamos por allá. -Propuso y una mano tomó su cintura para guiarla a su lado… Isa se sorprendió, pero dado que estaba tan lleno si se apartaba tal v
BIENVENIDAS IDEAS¿Cómo podía hacer dinero de manera rápida y sin que demandara mucho tiempo? no podía descuidar el tiempo en la Finca, pero necesitaba un ingreso más en sus cuentas o no podría seguir haciendo magia con los números. Las inversiones estaban fuera de las posibilidades, no contaba con ahorros para tal cosa… tal vez un préstamo del banco la sacara del apuro, pero no estaba segura de poder obtenerlo. Su camioneta no valdría mucho como para venderla y además la necesitaba para ir y volver del pueblo con cargamentos. Bebió café, miró por la ventana como el sol asomaba otra vez por el horizonte. Hoy debía comenzar con el marcado del ganado, los muchachos ya estaban en los corrales preparando el fuego y reuniendo los animales. Pasó por los establos por la yerra (Palo de marcado ganadero para la identificación del propietario del animal) y se aseguró de que su yegua se pusiera de pie. Aún no había escuchado respecto a los resultados de la muestra, pero tampoco quería apresura
VENENODurante toda la mañana Isa sólo se quedó junto a Hernán, ayudando en lo que podía, calmando a su animal cuando tuvo que colocarle suero por vía intravenosa. Sus ojos estaban rojos de tanto frotarse el rostro con el dorso de la camisa, pero de a poco fue recuperando el temple con la ayuda del médico. - Pudo haber consumido algún crecimiento de Centaura. es una planta tóxica para los caballos tiene una flor rosada o lila, suelen comerlas cuando están en pequeños prados sin mucho pastizal.-Explicó el hombre quitándose los guantes al terminar. -No, no. -Su cabeza también negó efusiva. -Roci come solo el heno del establo y tal vez pastea cuando salimos, pero nunca la vi comer una flor. -El veterinario se quedó pensativo, suspiró un poco cansado y rascó su cabeza. -Bueno, Isa estos son signos de intoxicación, si estás segura que no fue algo que comió ella misma debemos hacer una prueba a sus heces. - Isa se mostró confundida.- Tomaré una muestra para descartar al cien por ciento
DESGRACIANada más regresar de su viaje, Isabela fue golpeada por su realidad, la realidad donde las cuentas no llegan, los empleados piden su sueldo y las situaciones inesperadas no le dan respiro. Lo peor era que la situación inesperada estuviera frente a ella tomando un café con tranquilidad. Su hermano había llegado cuando ella no estaba y por palabras de Emma se presentó como el otro jefe de la hacienda. -Parece que las cosas mejoraron por aquí, ya no parece un maldito descampado. -Isa mordió su lengua. “No gracias a tí” fue lo que mejor se guardó. Los ojos de Gabriel parecían los de un notario público a punto de valorar un buen terreno. Todo en su hogar parecía estar a punto de salir a la venta en aquellos ojos. -Entonces ¿Viajaste a la ciudad por la oferta? - Isa sólo respondía de forma vaga, pero si quería sacárselo de encima debía ser clara. -Me reuní con el empresario… ¿Qué te trae al Nocedal? nunca antes habías regresado desde que te marchaste, no hasta que papá fallec
PASIONESEl cuerpo tan trabajado y sudado bajo el sol parecía brillar, Los brazos que subían y bajaban con fuerza era todo un espectáculo para los ojos de Emma. El nuevo empleado estaba cortando con solo un hacha un gran árbol seco que había estado allí desde que una gran tormenta lo había hecho caer. No molestaba al paso por lo que Isa no le había dado prioridad. Se le ocurrió ofrecerle un poco de agua fresca por lo que regresó a la casa y buscó cubo de hielo y llenó el vaso con agua, peinó su cabello y se calzó, cuando estaba por salir con el vaso en la mano se dió cuenta de lo que había hecho y se volvió a despeinar. No estaba para intentar seducir a nadie… sólo era un acto de amabilidad. -Eso se ve muy agotador. -Dijo al acercarse. Sonrió y le extendió el vaso, los hielos sonaron al momento y el hombre sonrió clavando el hacha en la madera y limpió rápido sus manos en el pantalón. -Muchas gracias Señorita. -Emma está bien. -Le quitó importancia.-Emma, aunque mataría por una c
MIS PROBLEMAS -Parece que te das el lujo de contratar a más personas cuando tienes una gran deuda. -John sonrió altanero y comió otro trozo de pastel que Emma le había ofrecido. Isa suspiró sin ganas de atender a los ataques del hombre. -Sr. Sider ¿Qué hace aquí? -Llevó las manos a cada lado de su cadera y lo increpó. el hombre no se inmutó, parecía gozar de verla enojada. -Me llegó una carta en tu nombre, creí que querías verme. -Los ojos de Isa buscaron a su amiga y esta negó con la cabeza sin entender a qué se refería. -Gracias querida. -John le extendió el plato con su porción a medio comer. -Estaba delicioso. -Emma tuvo que recibirlo y entendió que estaba tratando de echar de la sala, por lo que cogió el plato y se marchó. - Tú amiga no se ha presentado ¿Cómo se llama?- Miró a la espalda de Emma tan serio que la pobre lo sintió. -Eso… -Que descuidada… -Emma interrumpió a su amiga y se giró con una gran sonrisa…y una gran falsedad que John notó. -Soy Emma Clern. Disculpe que
UN TRATO JUSTOIsa se encontraba desbordada con tantas personas en la Finca, por un lado el viejo Tom descansaba en la sala después de haberse lastimado el pie trabajando. John Sider no parecía tener apuro por informar sobre los motivos de su visita sorpresa y ahora el sujeto que buscaba trabajo había llegado. Los había hecho pasar al interior de la casa como cordialidad, pero estaba algo inquieta de dejar a su amiga con John, no quería que el lado reportera de su amiga emergiera creando una situación tensa cuando ya lo estaba demasiado. -Tome asiento por favor. -Indicó con su mano la silla frente a su escritorio y cerró la puerta de despacho. -Es una hermosa estancia, y muy extensa por lo que pude ver de camino. -Es cierto, estamos trabajando para darle las mejoras de a poco ahora que.. -No vió necesario dar cuenta de la situación siendo que sólo estaría de paso por el lugar.. -Seré clara desde el inicio, no estaba en búsqueda de un jornalero, pero uno de mis hombres acaba de su
VISITA INESPERADAJohn releyó las hojas llenas de datos de Isabel Walker. Habrá que elogiar a su secretario, en su búsqueda había adjuntado hasta las notas con las que había cerrado los estudios primarios y secundarios. 23 años, 1.74 cm, sus datos médicos no eran fáciles de conseguir en el apuro, por lo que continuó. Universidad incompleta, dos carreras abandonadas. Eso le había hecho negar con la cabeza desaprobando.Padres divorciados, la madre vivía en el estado de Florida, una linda casa en la costa con su actual pareja, un hermano quince años mayor que ella, un adulto basante incompetente, pensó John al notar el trabajo de vendedor por catalogo. Divorciado con un gran monto por la pensión de sus dos hijos. Sin dudas un tipo que necesitaba dinero, pensó John teniendo en cuenta al hermano, Gabriel Walker. La información económica de La Finca ya era de su conocimiento, además que en el último año el había movido algunos hilos detrás de bambalinaspara empeorar la situación de del v
UN EXTRAÑO EN EL PUEBLO -¡Tienes hasta mediodía, quiero toda la información de esa mujer! -Golpeó la mesa enfurecido con los papeles sobre el escritorio.-Sí señor. -Su secretario salió apresurado y cerró la oficina.-Conque tienes un abogado de tal renombre a tu lado. -Miró el logo del bufete de abogados. Goldbladtt & Asociates. Y debajo de este la firma de Jacob Stell. Un abogado con quien él y su empresa ya habían tenido problemas. El tipo era bueno en lo que hacía y ahora estaba representando a esa mujer. -¿Cómo carajos pasó esto? -Golpeteo sus dedos en el escritorio pensando en la situación. Este proyecto era una gran inversión personal para un proyecto personal que nada tenía que ver con sus empresas familiares. Su idea de crear un lujoso barrio privado para las grandes familias millonarias del medio. Con el gran río de Misuri cruzando por los campos de aquella mujer era fundamental adquirir ese rancho ganadero para extender su proyecto. Se puso de pie acercándose a la gra