EL CEO QUIERE MIS TIERRAS: ¡NO VOY A VENDER!
EL CEO QUIERE MIS TIERRAS: ¡NO VOY A VENDER!
Por: MakiverTrouble
Capítulo 01

MALAS NOTICIAS

¿Qué había pasado? Esa mañana el sol había salido por el este como siempre ¿Porque las cosas habían tomado este camino? 

-¿Entiendes lo que dice allí? -El hombre frente a ella suspiró como si estuviera tratando con una ignorante y comenzó a mirar por toda la habitación con una mueca de desagrado, como si el lugar no fuera lo suficiente lujoso para su presencia. 

Isabela se mordió el interior de la mejilla callando todo insulto y mostrándose civilizada, como su padre le decía de pequeña “sólo los animales muerden, Isa” releyó el papel en sus manos con el sudor frío recorriendo su espalda.

-Esto debe estar mal, mi padre nunca pondría en venta las tierras…hemos pasado las más grandes desgracias y jamás dió el brazo a torcer con las dificultades. -Isa miró los papeles como loca esperando encontrar algo que le hiciera saber que eran falsos. 

-El señor Walker tuvo una negociación previa en la que Construction SA le hizo una primera inversión. -El abogado de aquel arrogante hombre sacó de su maletín otro montón de hojas que le extendió. 

-Cómo podrá ver, el Sr. Walker.. su padre recibió el dinero como buena fé para los negocios que se harían en el futuro, en especial las hectáreas que SIDER CONSTRUCTION S.A le reclama por medio del primer documento que le entregamos. 

-Con una m****a a su reclamo. -Susurró sin poder disimular ni un minuto más el enojo.

-¿Disculpa? -Aquel hombre que se había mantenido altanero todo el tiempo la miró con sorpresa y se puso de pie molesto. 

-¡¡Cómo escuchó!! MI PADRE JAMÁS VENDERÍA LA FINCA. VERÉ ESTO CON ABOGADO. -Amenazó tomando todos los papeles de la mesa, los llevaría a un bufete de abogados para que desmintieran a estos embusteros ladrones. 

-Estas tierras me pertenecerán pronto. -Sus ojos se habían clavado en ella con tanta frialdad que Isa logró con mucho esfuerzo sostenerla y plantarse en la batalla. 

-Eso esta por verse. -Dijo retadora y esa actitud tan confiada suya provocó la ira en el Sr.Sider.

-SÓLO FIRMA Y RÍNDETE CON ESTE MUGROSO.. -Calló sus palabras de inmediato cuando Isabela lo apuntó con la carpeta como si estuviera a punto de tirarla por su cabeza. -Tienes una gran deuda con mi empresa, piensa bien lo que haces. -Advirtió y se acomodó su cabello saliendo sin esperar que ella respondiera. El abogado por su parte se acomodó las gafas que se caían por el puente de su nariz y recogió con apuro su maletín poniéndose de pie. 

-Nos retiramos ahora Srita Isabel. -Él sí intentó ser educado, pensó en el consuelo.

-Es Isabela. -Se quejó en un tono bajo cuando salieron de su habitación. La angustia estaba en todo su pecho presionando con fuerza. A esas alturas este era el problema menos pensado y que menos necesitaba. 

Tras la muerte de su padre meses atrás, Isabela había tomado la administración de la hacienda ocupándose de todo, en el proceso descubrió que no era tan próspera y beneficiosa como ella creía. Su padre había pasado por malos momentos los últimos años, ventas de ganado que apenas cubrían los costes de su crianza, compra de semillas a precios exorbitados, muchas cuentas que pagar y poca oportunidad de generar dinero. 

Desde que Isa había cogido el mando muchas cosas cambiaron, muchos de sus trabajadores no estaban de acuerdo con su forma de trabajo y fueron renunciando .

"Mejor así, un sueldo menos que pagar" le había dicho a su madre cuando le llamó preocupada, pero después de muchas complicaciones había encontrado una luz en el difícil camino, las cosas habían comenzado a ponerse en su sitio, pero ahora… ahora tenía a un tipo estirado tocando a su puerta con un papel que pretendía arrebatarle todo su arduo trabajo, el de su familia por tantos años. 

-No puede estar pasando. -Se frotó la frente derrotada y se acercó a la ventana, corrió la cortina solo un poco para espiar a esos tipos afuera sin que la notaran. Aquel hombre arrogante, John Sider parecía estar echando pestes a su abogado, el pobre hombre sólo asentía disculpándose, pero eso no lo calmaba mucho… el chofer le abrió la puerta trasera del coche que esperaba por él y en ese momento el empresario miró con furia en su dirección. Isa soltó la cortina y se escondió cuando aquellos ojos parecieron notar su presencia detrás del cristal. Escuchó el ruido del motor en marcha alejándose y se relajó un poco más tranquila, vaya sorpresa se había llevado cuando uno de sus trabajadores había salido en su búsqueda por que un apuesto hombre había llegado. 

-John Sider... Maldito. -Isabela no podía hacer otra cosa que maldecirle ¿Cómo continuaría los trabajos de la tarde con todo ese problema en la cabeza?

No debía perder el tiempo por lo que cogió el teléfono fijo de la cocina y marcó con apuro el número de la persona que podría recomendarle un abogado, después del tercer tono la voz chillona de su amiga la saludó enérgica y de buen humor. 

-¡¡EMMA!! -Se dejó sonar lo más infantil ya que se trataba de su amiga y comenzó a refunfuñar sin darle contexto. -¿Qué voy hacer? ¿A quien caraj*os voy a contratar? 

-Detente ahí y deja de llorar como perra. -Su amiga era de poca paciencia. -Ahora, explica que pasó ¿A quién quieres contratar? 

-¡¡UN EMPRESARIO QUIERE MIS TIERRAS!!

Capítulos gratis disponibles en la App >
capítulo anteriorcapítulo siguiente

Capítulos relacionados

Último capítulo