Capítulo 40
El asunto del cementerio quedó resuelto. Además, Fernando también contactó a un maestro numerológico para elegir el día y la hora adecuados para el entierro.

El día elegido, el clima estaba despejado, con una brisa suave. Vicente y Martina acompañaron a Luciana al cementerio, y cuando llegaron, Fernando ya estaba ahí, esperándolos. Luciana se detuvo un momento, sorprendida, y luego desvió la mirada. Martina frunció el ceño y le lanzó una mirada fulminante a Vicente.

—¿Qué hace él aquí?

—¿Y yo qué sé? —Vicente, con toda la cara dura del mundo, se hizo el desentendido.

—Luciana —dijo Fernando sin inmutarse, a pesar de la frialdad con la que lo habían recibido—. Vine a despedir a tu madre. Si no me hubiera enterado, tal vez no estaría aquí, pero ahora que lo sé, no podría vivir en paz si no vengo.

Martina no perdió tiempo en responderle con sarcasmo.

—¿Tú, Fernando? ¿Y desde cuándo tienes conciencia?

—Marti —intervino Luciana, sujetando a Martina del brazo y negando con la cabeza. Martina
Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo