CXVI Hola, Rafael

—Canela —avisó la recepcionista, con una amable sonrisa.

Lucy entró primero a la consulta veterinaria, Rafael la saludó de un beso en la mejilla y se quedó mirando a Canela hasta que vio a Libi. Una sonrisa nerviosa apareció en su rostro, gratamente sorprendido por la repentina visita.

—Ya decía yo que a esta señorita la conocía, espero que no esté enferma. ¿Cómo estás, Libi?

—Bien, las dos estamos bien. Canela vino por su vacuna.

A Libi él la saludó de mano, manteniendo una prudente distancia que Lucy notó de inmediato. Él respetaba su espacio personal y era cauteloso. Un hombre observador y atento.

—Vamos a revisarla para ver que todo esté en orden —empezó a palparle el vientre—. ¿Ustedes son hermanas? Se parecen mucho.

Libi y Lucy rieron. No podían ser más diferentes, una era rubia y alocada y la otra una pelirroja apagada al borde del suicidio, como el día y la noche.

—¿En qué nos parecemos? —le preguntó Lucy.

Si se le ocurría decir que las dos eran guapas, Canela se quedaría s
Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo