Maia Sánchez, una joven de 23 años de una belleza serena, llevaba dos años casada con Ronaldo, un hombre que parecía no valorarla ni darle nada. A pesar de ello, ella lo amaba con todo su ser y hacía lo imposible por verlo feliz. Creía que él no tenía dinero, así que trabajaba incansablemente para pagar la renta y cubrir todas las necesidades del hogar, incluidas las de él. Cada día, después de largas jornadas de trabajo, regresaba a casa con la esperanza de que Ronaldo la recibiera con amor, pero en lugar de eso, solo encontraba indiferencia.A pesar de la frialdad de su esposo, Maia anhelaba con todas sus fuerzas ser madre. Había intentado de todo para concebir un hijo con Ronaldo, pero los meses pasaban y la ilusión se desvanecía con cada prueba de embarazo negativa. Sin embargo, ese día, una llamada de su mejor amiga y ginecóloga, Daiana, le devolvió la esperanza.📲—Amiga, dime que tienes buenas noticias para mí —casi suplicó Maia al contestar el celular, con los dedos tembloroso
Leer más