Evey en la soledad de su habitación tuvo tiempo de cavilar sobre muchas cosas en esa ocasión. Entre ellas, las más importantes fue lo que había sucedido con Lindrin y, luego, las profundas palabras expresadas por su prima. Estaba sentada en la cama, abrazando sus rodillas mientras sopesaba aún aquellas palabras. Rouse había hablado de una falta de confianza y Evey se preguntó a qué punto era ella tan trasparente para que alguien como Rouse pudiera darse cuenta de ello. Quizás por eso es que las chicas les gustaba molestarla, ya que la veían como una presa fácil por su falta de confianza. Y,sin embargo, no había nada que pudiera hacer ella para remediarlo. Evey agradecía la intención de Rouse y su preocupación por ella, pero lo cierto es que por mucho que tuviera razón y hubiera una falta de confianza, era difícil tratar con ello. En ocasiones era difícil trabajar en la percepción de uno, como persona, si en todas partes lo que se conseguían eran críticas y recha
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