Señor controlador
Señor controlador
Por: Danna Torres
Capítulo 1

—Nena, ¿qué haces allí? Esa habitación está ocupada, ven vamos —dijo la encargada del lugar —¿tienes alguna duda que yo pueda resolver?

—No, ninguna, Marcia. Todo está bien hasta el momento. Lo siento, no sabía que la habitación estaba ocupada. ¡Espera! Si tengo una pregunta después de todo, es que acabo de ver al jefe con una mujer, imagino que debe ser su novia. ¿Por qué él querría escoger una de nosotras como su acompañante si tiene novia? ¿Qué es lo que eso significa?

—Nena está con esa chica porque seguramente ella lo buscó, la mayoría de las chicas no se resisten a él, lo de la acompañante es algo personal, como un capricho de él —explicó Marcia—. Se escoge una chica a la cual hace su acompañante exclusiva, eso significa que debe estar con él únicamente, aunque su única labor sea mantenerlos satisfecho sexualmente, esta chica recibe muchos beneficios, también tiene ciertas condiciones por así decirlo.

—Pensé que era algo necesario, pero entiendo que solo es placer para él ¡Marcia! ¿Quieres decirme algunas de las condiciones? No tiene que ser todas, quiero saber las que sean como las más importantes o porque no mencionar los beneficios.

—Por supuesto nena. Como beneficios tienen muchos, ganan mucho más, son tratadas mejor que el resto y tienen el privilegio de hacer ciertas cosas que otras no tendrán. Como condiciones es que aunque se te permita bailar no podrás mientras seas su acompañante coquetear y menos intentar estar con otro hombre que no sea él, tienen prohibido salir sin él o su chófer, entre otras cosas que no serán opciones sino obligaciones.

—No me digas. Lo que hace el dinero, qué lujos y gustos puedes darte. Mira hasta compras a la gente necesitada como yo. Oye Marcia y ser su acompañante es opcional, es decir, si él me escoge, ¿puedo decir que no?

—No es algo opcional. Nena y no es el quién las escoge, por lo general siempre se escoge a la chica antes de que ingresen aquí, él nunca ha tenido problemas porque conozco sus gustos y hasta el momento no se ha quejado de ninguna.

—¡Vaya! ¿Así que han sido muchas chicas? Dime por favor que eres tú quien las escoge y que no me escogerías a mí.

—No han sido muchas, de hecho tú serías la tercera.

—¿Me has escogido a mí? No por favor, no quiero ser yo, ¿por favor puedes escoger otra? Mis compañeras estarían encantadas de ser la elegida, por favor Marcia, por favor.

—Lo siento, pero ya no puedo elegir a otra, la elegida eres tú y lo siento, pensé que te gustaría, a todas les gusta, todas se vuelven locas por Hades, pensé que estarías feliz.

—Marcia, pero como voy a estar feliz con lo que he escuchado y visto de este tipo, no quiero ser yo, me rehusó, quiero trabajar como las demás. Puedo pagar todo lo que pagaste extra por mí. No me importa, pero no quiero ser yo. Te pido por favor que consideres escoger otra chica.

—Nena la siento, pero ya la decisión está tomada. Él ya sabe que serás tú, ya sabe de tu condición y ninguna de las otras chicas sería una opción ante ti. ¡Lo siento! Ahora debo irme, recuerda no husmear en las habitaciones, no lo temes en serio, es una broma, lindo resto de día.

—¡Espera! Tengo muchas preguntas, si voy a hacer esto al menos dime algunas cosas, necesito saber más de esto por favor.

—Nena, ahora no tengo el tiempo que esto requiere, pero no es gran cosa, te veré pronto.

«¿Ahora que voy a hacer? No quiero ser yo quien sea la acompañante de ese arrogante Debería escapar, pero hay demasiada vigilancia, caminaré un poco más para estudiar el lugar y saber cómo puedo escapar de aquí, prefiero eso a ser la acompañante de ese tipo, Marcia ha dicho que es obligatorio porque tiene que ser así, mis compañeras se mueren por ser elegidas, porque me han elegido a mí, no he mostrado interés por él»pensé mientras caminaba desconcertada.

Después de caminar un poco y no encontrar muchas opciones de escape, decidí volver. Era tarde y las chicas no estaban, me pregunté dónde estarían, alguien de la limpieza me dijo que estaban en el salón mayor, como no se sabía lo que era, pregunté a lo que la señora me explicó y mostró como llegar. Fui al lugar, pero no estaban allí. Estaban cenando, decidí unirme tras la explicación de lo que se suponía un profesor de baile.

Había muchas chicas, éramos más de las que pude haber imaginado, no había espacio en el grupo con el que había llegado.

Busque un lugar donde hacerme. La cena se veía realmente apetitosa, olía delicioso y tenía hambre, en el lugar donde me senté estaba el plato listo y la cena servida.

Me di cuenta de que a solo unas 2 chicas estaba la que hacía unas horas atrás había visto en la habitación con el jefe, estaba presumiendo de ello, le decía a las chicas quienes le hacían muchas preguntas lo bueno y rudo que era en la cama. Escuche decir que él le hacía honor a su nombre, era un Dios. Por lo menos en la cama, decían ellas bien emocionadas.

Había cumplido muchas de sus fantasías, que deseaba volver a tenerlo y esperaría cualquier oportunidad para ello. El resto de chicas que escuchaban deseaban lo mismo, una de ellas mencionó que sería muy afortunada la chica que eligieran.

Decían que era una lástima que solo fuera dentro de las nuevas, hasta decían que ninguna de nosotras las nuevas estaban a la altura, comentaron de todo.

Hasta escuché un poco de la anterior acompañante y de que la habían echado por haber incumplido la regla de oro, no estar con otro que no fuera el jefe.

Hablaban de cómo había sido castigada muchas veces por él, me preguntaba que tipo de castigo podía haber sufrido, pero decidí seguir escuchando, durante toda la cena las chicas parecían no tener de que hablar más que del jefe. Del DIOS HADES.

Era como lo estaban llamando. Eran unas tontas, como era posible que se sintieran así por alguien tan arrogante, no podía entender, tampoco me interesaba.

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