Han pasado más de 500 años y ella no parece. Dylan Black es el próximo en la línea de Alphas, pero para poder tomar el puesto él a decidido buscar a su pareja eterna. Dayana White una simple humana, buscando unas vacaciones tranquilas en un lugar tranquilo, sin saberlo encuentra a su alma gemela. ¿Las cosas serán así de fáciles? o ¿Dayana aceptara su nueva vida con un hombre lobo como pareja? Todo es cuestion de tiempo.
Leer más(Dylan Black)Nos encontrábamos cenando en el departamento de los gemelos. Debo admitir que este lugar me a gustado desde que llegué, ellos lo hacen sentir como un verdadero hogar, junto como siento la mansión. Me di cuenta de algo, ellos no suelen hablar mientras comen, es extraño no hacerlo, ya que yo estoy acostumbrado a hacerlo, bueno también es porque es el único tiempo que tenía de convivencia con mis padres. Antes de irme a buscar a mi Mate, claro esta.—Oye humano — después de lo que paso en la oficina de Dayana, la voz de Devraj se hizo presente. —Si dime — bueno al menos ya estoy hablando con alguien. —¿Crees que nuestra Mate esta noche quiera estar con nosotros? — esa pregunta no la espetaba y casi me ahogo con la comida que tenia en la boca, Devraj debe estar loco, como me pregunta tal cosa, cuando ya se a dejado claro que no la tomaremos aún, hasta la noche de bodas. —¿Cómo quieres que te explique ese punto? Ya se ha dicho que no pasara nada entre nosotros hasta la
(Dayana White) Jake se encontraba de brazos cruzados, mientras que mi lobo me abrazaba por la espalda, rodeando mi cintura con sus fuertes brazos. —Se me hace de mal gusto, ver como se besan enfrente de mi — bueno, a nadie le interesaba su opinión. —No es por ser grosero, pero, si te molesta, te pido amablemente qué te retires, debo hablar algunas cosas con mi prometida — acomodo su barbilla en mi hombro — a solas. Jake lo miro, rodo los ojos y salió del lugar. No es secreto que ese chico me fuera difícil de tratar, no lo toleraba mucho, me caía mal. Antes era más insoportable, todo el día persiguiendome, qué lo sentía más como acoso qué como otra cosa. Cuando por fin salió, Dylan cerro la puerta y le puso seguro. No entendía porque lo había hecho, tal vez para hacer enojar más al molesto chico. —No me agrada y a Devraj, tampoco le cae bien — solto mi cintura para sentarse en mi silla. —Bueno mis chicos, no estén molestos, debemos agradecer qué después de hoy, no lo
(Dylan Black) Nos encontrabamos en el avion, Velkan ya no le molestaba que yo fuera con ellos. Incluso puedo decir que nos habiamos vuelto, buenos amigos. Me alegraba que mi madre le diera esa platica, sabia que Dayana estaba presa de los nervios, pero ahora estaba mas calmada y comodamente dormida. Me tenia mas trinquilo venir aqui con ella, aunque no se si puedamos pasar tiempo juntos cuando este avion aterrice. Hasta donde me informo Dayana, al otro dia debian asistir a su pequeña empresa de turismo y tenia que dejar todo listo para su retiro. Me no gustaba mucho la idea de separar a Dayana de su trabajo, no quiero que deje botado algo que ella ama. Me siento un hombre egoísta al separarla de su hermano y de lo que ama, pero soy tan egoísta qué sólo la quiero conmigo. (...) Unas horas después nos encontrábamos en el departamento de los gemelos, era pequeño, pero se podía sentir el amor en este lugar. Era un lugar muy bonito. –¿Quieren cenar algo antes de dormir? – esc
En cuanto mi gemelo se quedo dormido, yo sali sin hacer tanto ruido de la habitacion.Lo ultimo que queria era perturbar su sueño, aunque dudo mucho que si quiera escuche algo.Podria estarse derrumbando la casa, que él ni se daria por enterado, todo gracias a los analgesicos que le hicieron tomar o ¿Se los inyectaron? la verdad es que no recuerdo.Aun asi, cerre con cuidado la puerta y comece a caminar por el pasillo, estoy segura que Dylan escucho todo lo que hablamos con Velkan.Me preocupa que él se encuentre mal o que este molesto por lo que alla escuchado.Llegue hasta sala, pensando que lo podría encontrar en ese lugar no estaba. Tal vez salió o se encuentre con su padre. Así que decidí regresar a mi habitación, me habían dado una pastilla para el dolor, me había relajado mucho y sentía el cuerpo pesado. Cuando llegue a la puerta, entre como si nada y casi me daba un paro cardíaco. Dylan estaba sentado en la ventana, viendo hacia el bosque. -Dylan me has asustado - me colo
(Dayana White) Respire profundo para aclarar mis ideas. –Velkan, antes de responder tus dudas aclarar todo, debo hacer una pregunta. –Bien, suéltala – mi hermano tenía una expresión rara en la cara, está preocupado, pero siento que lo que quiere hacer es salir corriendo de aquí. –Exactamente ¿Que escuchaste o viste? – mi hermano lo pensó. –Bueno dos chicos me golpearon, uno de ellos me cargo como si yo fuera un simple muñeco, yo no me podía mover y apenas me sujetaban, fue extraño todo y luego lo de las voces, llámame loco pero parecían distorsionadas, incluso la de Dylan – parecía perdido en su mente mientras pensaba. Maldición por un momento pensé que no recordaría mucho, pero por la cuestión de las voces, ya me comenzaba a preocupar, debía pensar en algo rápido. – ¿Fue todo? ¿Fue todo lo que paso? – insistí, intentando formular algo en mi mente. – ¿Por qué? ¿Tenía que ver otra cosa? – mi gemelo no es tonto y eso está muy claro, sabe que lago estaba mal, pero como ya lo he d
(Dayana White) No podía creer lo que había escuchado. Dylan estaba frente a mí, arrodillado, sosteniendo una pequeña caja con un anillo en ella y me acababa de hacer una gran pregunta. Esto debe ser un sueño, no creo que realmente este pasando. Aún estaba sorprendida, cubriendo mi boca con una de mis manos, mientras que con la otra me daba un pequeño pellizco. Si me dolió, esto es real. Dylan me veía muy esperanzado, tenía un gran brillo en sus ojos y también se notaba algo nervioso. Este chico realmente quería que me diera un infarto. –Yo.... – era todo lo que salió de mi boca, quería decir más. –Su lo supuse, es muy pronto y muy en el fondo sabía que no me aceptarías, soy prácticamente un extraño en tu vida, olvida lo que acabo de decir. Muy tristemente comenzó a quitar la caja con el anillo frente a mí, pero lo detuve. – ¿Estás loco? Jamás voy a olvidar el día que me propusiste matrimonio ¡Claro que acepto! El chico pelinegro frente a mí se quedó sin habla, trat
(Dylan Black) Por la tranquilidad del lugar me había quedado dormido. Me levante con gran pereza del suelo y decidí ir al pueblo, quería beber un trago y se bien que en la mansión no podría hacerlo. Primero mi madre comenzaría con un gran sermón y en estos momentos no estoy para eso, Segundo sería lo mismo que el primero pero ahora con mi padre, aunque mi padre me podría hacer compañía, pero después mamá lo haría dormir en el sofá, mejor no. Y en tercer lugar, allí estaría Dayana y solo me haría recordar lo miserable que será mi vida sin ella. Así que mejor iré al bar del pueblo, quisiera invitar a Matteo, pero sería capaz de avisarle a mi madre, así que también queda descartado. Bueno me queda irme solo. Camine a paso lento, me encontraba desanimado y en mi cabeza como en la cabeza de Devraj, había muchas cosas. ¿Por qué Dayana nos tenía que dejar? En su cuerpo como en sus labios, se podía sentir el gran deseo que tenía por mí y ese sentimiento es mutuo, la deseaba demasiado.
(Dayana White) Después de pasar una gran vergüenza al lado de mi hermano en el comedor, pude notar que Dylan había decidido desaparecer. No fue de todo malo, por que pude conocer a su padre Dimitri y pude notar que era un gran líder, cada 5 minutos venían a verlo, no lo dejaban comer a gusto. Pero él se levantaba de la mesa con una sonrisa en la cara, con ese gusto podía ver que es un gran líder, tal vez Dylan planea ser igual que él. Cuando por fin término de comer, se levantó de la mesa se despidió amablemente de nosotros y le dejo un beso a su esposa, realmente son muy cariñosos. – ¿Quieren hacer algo después de comer? – la voz de Dasha se hizo presente en el comedor. –La verdad no estoy segura ¿Quieres conocer el pueblo Velkan? – le pregunte a mi hermano, quien devoraba la comida del plato, si es un tragón. –Donde ustedes quieran ir, me apunto – me contesto con la boca llena. –Pero cierra la boca, es de mala educación hablar con la boca llena – y parece que pedí ver su boca
(Dylan Black) Los besos cada vez subían más de tono y no podía aliviar esta gran necesidad de hacerla mía. Sabía que estaba mal, todo estaba mal en este momento, pero se sentía correcto, al menos eso sentía yo. Me deje caer lentamente al sofá junto a la cama de nuestra habitación, con Dayana sobre mis piernas, su solo aroma me volvía cada vez más loco. –Debemos parar – no podía creer que eso saliera de mi boca. – ¿Qué? – escuche contra mis labios. –Debemos parar – me aleje un poco para ver los labios enrojecidos de Dayana – si continuamos, no voy a poder controlar mi instinto – nuestras respiraciones eran un caos total, pero el latido de nuestros corazones palpitaban en perfecta sincronía, como uno solo. – ¿A qué te refieres? – pregunto ella con hilo de voz. –Me refiero a que, si seguimos con esto no controlare mi lado lobo, que saldrá para reclamarte como suya y te dejara una linda marca en tu cuello – con mi dedo índice recorrí la zona que deseaba con ansias morder – y no qui