Mis queridas lectoras, una gran disculpa, perdón, tuve una emergencia. Tuve que salir lejos de mi casa de imprevisto, no se preocupen todo está bien, pero la cuestión es, que no traje mi computadora conmigo, ya que no tenía contemplado estar muchos días lejos de mi casa, orita estoy publicando desde mi celular y créanme, es muy difícil para mi, así que me disculpo si encuentran falta de ortografía o palabras mal escritas, el auto corrector de mi celular aveces me hace malas jugadas. No se preocupen les compensaré mi falta de actualización, solo no se desesperen. Los quiere mucho Dinary. Pdt: Gracias por entender, los estaré leyendo en comentarios.
(Dayana White) Respire profundo para aclarar mis ideas. –Velkan, antes de responder tus dudas aclarar todo, debo hacer una pregunta. –Bien, suéltala – mi hermano tenía una expresión rara en la cara, está preocupado, pero siento que lo que quiere hacer es salir corriendo de aquí. –Exactamente ¿Que escuchaste o viste? – mi hermano lo pensó. –Bueno dos chicos me golpearon, uno de ellos me cargo como si yo fuera un simple muñeco, yo no me podía mover y apenas me sujetaban, fue extraño todo y luego lo de las voces, llámame loco pero parecían distorsionadas, incluso la de Dylan – parecía perdido en su mente mientras pensaba. Maldición por un momento pensé que no recordaría mucho, pero por la cuestión de las voces, ya me comenzaba a preocupar, debía pensar en algo rápido. – ¿Fue todo? ¿Fue todo lo que paso? – insistí, intentando formular algo en mi mente. – ¿Por qué? ¿Tenía que ver otra cosa? – mi gemelo no es tonto y eso está muy claro, sabe que lago estaba mal, pero como ya lo he d
En cuanto mi gemelo se quedo dormido, yo sali sin hacer tanto ruido de la habitacion.Lo ultimo que queria era perturbar su sueño, aunque dudo mucho que si quiera escuche algo.Podria estarse derrumbando la casa, que él ni se daria por enterado, todo gracias a los analgesicos que le hicieron tomar o ¿Se los inyectaron? la verdad es que no recuerdo.Aun asi, cerre con cuidado la puerta y comece a caminar por el pasillo, estoy segura que Dylan escucho todo lo que hablamos con Velkan.Me preocupa que él se encuentre mal o que este molesto por lo que alla escuchado.Llegue hasta sala, pensando que lo podría encontrar en ese lugar no estaba. Tal vez salió o se encuentre con su padre. Así que decidí regresar a mi habitación, me habían dado una pastilla para el dolor, me había relajado mucho y sentía el cuerpo pesado. Cuando llegue a la puerta, entre como si nada y casi me daba un paro cardíaco. Dylan estaba sentado en la ventana, viendo hacia el bosque. -Dylan me has asustado - me colo
(Dylan Black) Nos encontrabamos en el avion, Velkan ya no le molestaba que yo fuera con ellos. Incluso puedo decir que nos habiamos vuelto, buenos amigos. Me alegraba que mi madre le diera esa platica, sabia que Dayana estaba presa de los nervios, pero ahora estaba mas calmada y comodamente dormida. Me tenia mas trinquilo venir aqui con ella, aunque no se si puedamos pasar tiempo juntos cuando este avion aterrice. Hasta donde me informo Dayana, al otro dia debian asistir a su pequeña empresa de turismo y tenia que dejar todo listo para su retiro. Me no gustaba mucho la idea de separar a Dayana de su trabajo, no quiero que deje botado algo que ella ama. Me siento un hombre egoísta al separarla de su hermano y de lo que ama, pero soy tan egoísta qué sólo la quiero conmigo. (...) Unas horas después nos encontrábamos en el departamento de los gemelos, era pequeño, pero se podía sentir el amor en este lugar. Era un lugar muy bonito. –¿Quieren cenar algo antes de dormir? – esc
(Dayana White) Jake se encontraba de brazos cruzados, mientras que mi lobo me abrazaba por la espalda, rodeando mi cintura con sus fuertes brazos. —Se me hace de mal gusto, ver como se besan enfrente de mi — bueno, a nadie le interesaba su opinión. —No es por ser grosero, pero, si te molesta, te pido amablemente qué te retires, debo hablar algunas cosas con mi prometida — acomodo su barbilla en mi hombro — a solas. Jake lo miro, rodo los ojos y salió del lugar. No es secreto que ese chico me fuera difícil de tratar, no lo toleraba mucho, me caía mal. Antes era más insoportable, todo el día persiguiendome, qué lo sentía más como acoso qué como otra cosa. Cuando por fin salió, Dylan cerro la puerta y le puso seguro. No entendía porque lo había hecho, tal vez para hacer enojar más al molesto chico. —No me agrada y a Devraj, tampoco le cae bien — solto mi cintura para sentarse en mi silla. —Bueno mis chicos, no estén molestos, debemos agradecer qué después de hoy, no lo
(Dylan Black)Nos encontrábamos cenando en el departamento de los gemelos. Debo admitir que este lugar me a gustado desde que llegué, ellos lo hacen sentir como un verdadero hogar, junto como siento la mansión. Me di cuenta de algo, ellos no suelen hablar mientras comen, es extraño no hacerlo, ya que yo estoy acostumbrado a hacerlo, bueno también es porque es el único tiempo que tenía de convivencia con mis padres. Antes de irme a buscar a mi Mate, claro esta.—Oye humano — después de lo que paso en la oficina de Dayana, la voz de Devraj se hizo presente. —Si dime — bueno al menos ya estoy hablando con alguien. —¿Crees que nuestra Mate esta noche quiera estar con nosotros? — esa pregunta no la espetaba y casi me ahogo con la comida que tenia en la boca, Devraj debe estar loco, como me pregunta tal cosa, cuando ya se a dejado claro que no la tomaremos aún, hasta la noche de bodas. —¿Cómo quieres que te explique ese punto? Ya se ha dicho que no pasara nada entre nosotros hasta la
(Dylan Black) El día antes a mi cumpleaños iba genial y por genial me refiero a horrible. Mi madre ha hecho que la acompañe al pueblo por su “Vestido de mañana”, que fastidio. No entiendo porque insistió tanto en hacer esa estúpida fiesta, solo de pensar que mi vida será arruinada después de eso, quisiera salir corriendo. Pero no, vengo con mi madre en su lujoso auto de lo más aburrido viendo por la ventana del auto. Veo las pequeñas casas, los pobladores, todo rodeado de árboles y el agradable aroma a tierra mojada. Cuando apenas era un cachorro pensaba que ese aroma lo tendría mi Mate, pero dicha Mate no ha aparecido. Y ser el siguiente en la línea de Alphas, no me ayuda mucho. –Bien llegamos, tú decide ¿Entrar conmigo o aburrirte dentro del auto? – la dulce voz de mi madre soltó al estacionar el auto frente a la tienda de vestidos. Me agache un poco para poder ver el lugar desde su ventanilla, se veía aburrido, incluso la chica para frente al aparador se veía aburrida, tal
(Dayana White) Nunca antes había está obsesionada por algo, bueno si el trabajo lo tomo como algo que me gusta hacer bien y a la primera, no es obsesión. Los libros que había comprado en esa pequeña librería eran más que geniales, no podía creer todas las leyendas que giran al rededor de la luna. A cada palabra que leía, cada palabra me tenía atrapada. Cuando vi la hora en mi celular, ya casi eras las nueve de la mañana y note que mi celular casi moría, así que lo puse a cargar. Me había quedado despierta toda la noche. Me di un baño rápido y salí del hotel donde me encontraba hospedada, la idea de Velkan en venir a este lugar fue la mejor que ha tenido en toda su vida, claro y la de poner un negocio juntos. Lo amaba, pero a veces me ponía los nervios de punta. Llegue hasta una pequeña cafetería, desde que llegue aqui, este lugar me ha gustado para comer algo. Pedí un café muy cargado y salí del lugar, disfrutando de cada sorbo y de las maravillosas vistas. Este lugar parecía
(Dayana White) Con un carajo, estos chicos son muy extraños. Trate de tranquilizarme, tal vez si no digo nada sobre lo que acabo de ver, me pueda ir tranquila. –Mucho gusto Matteo, Dayana – creo que no fue mi mejor presentación. – ¿Qué haces aquí? – soltó Dylan. – ¿Acaso no me escuchaste? – Matteo paso su atención a Dylan – nunca me escuchas, tu madre me dijo que te buscara y que te llevara arrastras de ser posible, a recoger tu traje para esta noche. –Iré después, en este momento me encuentro ocupado – perfecto mi escape perfecto. –Si lo dices por mí, no hay problema, es obvio que estas muy ocupado y creo que es mejor si me voy. – ¿Tu no iras a la fiesta de esta noche? – pregunto Matteo. –Aún no he podido invitarla – respondió un Dylan muy molesto. – ¿Y qué esperas? Si quieres lo hago yo – Matteo paso su atención a mí – Dayana ¿Te gustaría ir…. – ¿Te gustaría ir a una fiesta esta noche? – interrumpió el pelinegro. Maldición, yo que ya me quería ir. Quiero decir que no, pe