84. Un ángel a su lado

El chófer de Gerardo, como lo pidió, maneja sin decir una palabra y en una distancia considerable al carro sospechoso.

Gerardo no ha quitado la mirada de encima, receloso, desconfiado y malhumorado por haber visto a Matías llorando.

La extrañeza de no haber visto a su nana fue motivo para no bajarse del coche desde el otro lado de la calle. Soledad en un carro policial y el extraño comportamiento que tuvo con el hombre en traje negro fue pruebas para dudar. Y el extraño comportamiento del hombre teniendo en brazos a Matías creó un impulso extraño en él.

Algo malo está ocurriendo. ¿A dónde carajos llevan a ese pequeño?

—Señor, ¿Quiere que estacione una cuadra más atrás? Entró a un garaje.

Gerardo observa el reloj en su muñeca. Ha estado solo por estos días ya que Víctor sigue en México. Fernando debe ya haber llegado a Nueva York. La herida, apenas sanando, sigue siendo una molestia. Pero cualquier incomodidad se marchó por completo desde que puso los ojos en Matías: un ardor de rabi
Continue lendo no Buenovela
Digitalize o código para baixar o App

Capítulos relacionados

Último capítulo

Digitalize o código para ler no App