81

Varios días pasaron, y no teníamos noticias de Eirik. La incertidumbre me consumía como un veneno que lentamente se filtraba por todo mi cuerpo. Graham, a pesar de ser excepcional en lo que hacía, no podía deshacer en tan poco tiempo lo que había tomado meses planificar. Estábamos contra el reloj, atrapados en una carrera desesperada donde cada segundo contaba. Necesitábamos más ayuda.

Salí de la habitación, dejando a mis pequeños sumidos en un sueño profundo, ajenos a toda la mierda en la que habían sido involucrados. Necesitaba aire, un respiro que aliviara el nudo en mi garganta y el dolor que me taladraba el corazón. Sabía que, hasta que él no estuviera de vuelta, la tranquilidad seguiría siendo un jodido sueño para mí.

Caminé un poco; a esta hora, todos estaban ya dormidos, y los que aún seguían despiertos vigilaban que nada malo sucediera.

—Tiana—. La voz que había anhelado escuchar se deslizó en el aire como un susurro, y mi corazón empezó a latir con fuerza.

Me giré con el cor
Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App

Capítulos relacionados

Último capítulo

Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App